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Tejados y muros verdes, una tendencia en Colombia que mejora la calidad de vida
Uuna forma de mejorar la calidad de vida en las ciudades.
Cubrir tejados, muros, marquesinas y terrazas de vegetación es la última tendencia en Colombia y una forma de mejorar la calidad de vida en las ciudades, ya que permite capturar el dióxido de carbono y crear al tiempo espacios amables.
Una de las empresas que han apostado por este negocio sustentable es Groncol, que ya ha ocupado espacios en distintas alturas equivalentes a ocho estadios de fútbol, lo que permite capturar la contaminación producida por 3.200 vehículos.
Groncol, nacida hace cinco años en Bogotá y con un crecimiento anual del 70 %, quiere “revolucionar la forma como se vive en las ciudades”, afirmó en una entrevista. La idea es “transformar la experiencia de la ciudad y está demostrado que el verde produce una cantidad de beneficios sociales y ambientales”, agregó, al explicar que sus soluciones reducen el ruido y la contaminación a la vez que permiten el ahorro de energía.
La compañía comenzó en 2009 cuando el ingeniero civil y cofundador de Groncol, Mario España, identificó que no existía una empresa de construcción de infraestructuras verdes, una solución que hace algunos años se había popularizado en Estados Unidos y Europa.
Una mujer observa varias plantas que se exhiben en el marco de la apertura del Congreso Mundial de Azoteas y Muros Verdes 2010, México.
“Había una oportunidad en el mercado para generar estos espacios verdes en un momento en el que en Bogotá había un boom de construcción”, remarcó el cofundador. Al inicio el objetivo era “hacer más amigables los proyectos de construcción”, pero se ha logrado ir más allá “al mejorar la calidad de vida en las ciudades”, manifestó.
Los 60.000 metros cuadrados de superficie verde que ha construido Groncol han compensado el dióxido de carbono (CO2) emitido por más de 2.100 personas y una reducción del volumen de aguas negras equivalente a casi 9.000 duchas de tres minutos, según los responsables de la compañía.
El primer proyecto fueron los 3.200 metros cuadrados de cubierta de la torre Argos en Bogotá, para continuar con el muro verde más grande de Colombia, la fachada del hotel B3, en el norte de la capital, con 360 metros cuadrados y ocho pisos de alto.
Entre los proyectos actuales está la construcción de la cubierta verde más grande de Bogotá, de 4.500 metros cuadrados.
Asimismo, Groncol trabaja en la envolvente de 3.000 metros cuadrados de un edificio bogotano, que será la mayor superficie vertical verde de Latinoamérica, lo que para el arquitecto Nicolás Borda, cofundador de la firma y gerente de proyectos, es “un reto impresionante”.
Para Borda, si sólo se forrara de vegetación un 10 % de las 30.000 hectáreas de cubiertas disponibles en Bogotá, “se podría captar todo el material particulado generado por todos los vehículos de la ciudad”.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda al menos quince metros cuadrados de área verde por habitante en las ciudades, pero en Bogotá, una urbe de más de ocho millones de habitantes, cada persona cuenta con sólo cinco metros cuadrados.
Fuente: EFEverde.com
Fuente imagen: EFEverde.com
