RECICLAR
Si reciclamos una sola botella de plástico ahorramos energía como para mantener encendida una bombilla por 6 horas.
Ya sabemos que la contaminación es cada vez mayor y esto trae muchas consecuencias para nuestra vida. Es por ello que ahora veremos cómo conservar el ambiente para que sea sano y nos permita seguir viviendo en la Tierra.
EL TRATAMIENTO DE LA BASURA
La acumulación de basura no sólo genera un problema de espacio, sino que también favorece la propagación de enfermedades y el mal uso de los recursos naturales. Los diversos tratamientos a los que se pueden someter los residuos permiten evitar las consecuencias.
Para evitar descontrol en los basurales, se implementó en muchos países la clasificación de la basura en los hogares y espacios públicos. Seguramente observaste que en ciertos lugares existen contenedores de basura de diferente color. Esto permite que la gente sepa dónde colocar cada tipo de basura.
Tipos de residuos
Los residuos urbanos se clasifican en dos grupos: los materiales biodegradables y los que no lo son.
Materiales biodegradables: son de origen orgánico, como el papel, la tela y los restos de comida. Gracias a la acción de las bacterias y los hongos descomponedores, se reincorporan al ciclo de la materia.
Materiales no biodegradables: son aquellos restos que permanecen prácticamente intactos con el paso del tiempo. Por ejemplo: los metales, vidrios y plásticos.
¿POR QUÉ SE DEBEN CLASIFICAR LOS RESIDUOS?
Los residuos deben separarse para hacer más sencillo el proceso de reciclaje. Con los residuos orgánicos se puede hacer abono o composta para los jardines. Al reciclar o reutilizar se evita que se sigan talando árboles, sacando petróleo, y se ahorran recursos como agua y combustibles. Además, el adecuado tratamiento de cada tipo de residuo disminuye la contaminación del agua, el aire y el suelo.
La acumulación de la basura genera problemas de espacio, favorece el desarrollo de enfermedades y la sobreexplotación de los recursos.
El compostaje es un proceso de descomposición de la materia biodegradable que permite obtener "compost", un abono que hace más fértil la tierra y sirve para que las plantas crezcan más y mejor.
Reciclaje
El reciclaje es el proceso por el cual se transforman los materiales usados en recursos muy valiosos. Veamos cómo se reciclan los siguientes residuos:
Vidrio: el vidrio se puede reciclar de modo ilimitado. Para ello se clasifica por el color, que puede ser verde, ámbar o transparente.
Papel: para reciclar papel se usa mucha menos energía y agua que para producir nuevo.
Cartón: Por cada tonelada de cartón reciclado se ahorran 140 litros de petróleo y 50.000 litros de agua.
Plástico: Debido a que existen diferentes tipos de plásticos, para su reciclaje es fundamental separarlos por categoría. Existen dos grandes grupos: por un lado están los termolábiles, que tienen un proceso de reciclaje sencillo ya que se funden con calor y pueden ser reutilizados dándoles una nueva forma. Por otro lado están los termoestables, que son más difíciles de reciclar ya que su proceso de fundido es más complicado. Forman parte de estos plásticos los cauchos, siliconas y poliuretanos, entre otros.
Pilas y baterías: son tóxicas y por lo tanto, no deben ser tiradas a la basura, ni al agua, ni enterrarlas. Existen diferentes tratamientos en función al tipo de pila.
Reducir: se consigue consumiendo menos para evitar desperdicio y así desechar menor cantidad de residuos. De este modo estamos eliminando el origen de la contaminación antes de afrontar los efectos.
Por su parte, las empresas de fabricación pueden contribuir ocupando el mínimo de elementos y eligiendo recursos ecológicos.
Reciclar: para poder llevar a cabo un proceso de reciclado ordenado y óptimo, se deben separar aquellos elementos reciclables para ser enviados a la planta de reciclado específica. Con este procedimiento se previene que materiales potencialmente útiles sean enterrados o quemados reduciendo así la cantidad de basura.
Reutilizar: muchos materiales pueden ser reutilizados si se los somete a un proceso de limpieza. Hay que tener cuidado de no utilizar envases que hayan contenido elementos tóxicos como combustibles, insecticidas, etc.