FICHA

Tamaño: Falco peregrinus calidus: Los machos pesan entre 580 y 750 gramos y las hembras pesan entre 925 y 1300 gramos. Falco peregrinus tundrius: los machos pesan entre 500 y 700 gramos y las hembras pesan entre 800 y 1100 gramos.

Falco peregrinus calidus: se distinguen por el predominio del color blanco en el pecho con algunas motas. Falco peregrinus tundrius: se distinguen por tener una frente blanca y una corona oscura.

Nutrición: Por lo general se alimenta de otras aves como patos, gaviota o palomas. También conforman su dieta mamíferos como el murciélago, las liebres o los ratones, además de reptiles o insectos, en caso de no poseer otro tipo de presas.

Locomoción: Su anatomía aerodinámica les permite lograr una gran velocidad en vuelo, siendo considerados como las aves más rápidas al atacar en picado durante la caza. Habitualmente llega a velocidades que superan los 300 km/h. Esta velocidad tiene la finalidad de aturdir a su presa.

Reproducción: El macho realiza un vuelo de cotejo que consiste en diversas acrobacias aéreas, además de “ofrecerle” a la hembra una presa. Por lo general los nidos son ubicados en acantilados pero en lugares remotos como el Ártico eligen pendientes, rocas bajas y pequeños montículos. Por lo general, las hembras ponen entre 1 y 6 huevos, con un promedio de 4 huevos. El proceso de incubación dura entre 29 y 33 días, con el macho ayudando ocasionalmente durante el día pero nunca durante la noche. Las parejas crían sólo una vez al año.

Adaptación al entorno: Su vuelo veloz le permite cazar y aturdir con facilidad a sus presas. Para evitar que se dañen sus pulmones cuando supera con su vuelo los 300 km/h, cuenta con unos tubérculos óseos en las fosas nasales que redirigen las ondas de choque, facilitando su respiración cuando cambian las condiciones de la presión atmosférica.