FICHA

Tamaño: Entre 1,6 y 3 metros. Los machos suelen ser mucho más grandes que las hembras.

Peso: Entre 65 y 80 kg.

El leopardo pertenece a la categoría de los grandes felinos, y es el más pequeño de este grupo. Esta categoría también incluye al león, al tigre y al jaguar. El cuerpo de este animal es largo y fuerte, tienen patas cortas en comparación con otros felinos, pero lo compensan con velocidad y potencia. Pueden correr hasta 36 millas por hora durante cortos periodos de tiempo. Debido a su apariencia son, a menudo, confundidos con el guepardo o con los jaguares.

Nutrición: Son muy buenos cazadores y a menudo se encuentran al acecho, en las sombras, mientras esperan su oportunidad. Los leopardos pueden tomar presas hasta tres veces más grande que ellos, sin embargo, también consumen gran cantidad de pequeños animales, como roedores y reptiles. Los ciervos y antílopes constituyen un alto porcentaje de las muertes más grandes que realizan.

Hábitat: El leopardo es común en todos los bosques de alto arbolado, más o menos espesos; huye de las llanuras herbáceas, aunque a veces se lo encuentra en la estepa; en las regiones agrícolas se establece a menudo en los campos y en las plantaciones, o bien en los bosquecillos de arbustos. Vive asimismo a gusto en la montaña, donde las altas hierbas le ofrecen muy buenos escondites y la ocasión de cazar diversas y abundantes presas.

Distribución: Esta especie puede ser encontrada en el este y sur del continente asiático y africano, donde también en el África Subsahariana se alberga el mayor número de ejemplares. La India, Sri Lanka, Indochina, Malasia, Indonesia y China también tienen el privilegio de contar con estos hermosos felinos.

Reproducción: El apareamiento y la reproducción pueden ocurrir en cualquier época del año para el leopardo. Una vez que una hembra ha concebido, la cría llegará en unos 90 a 100 días más tarde. Las camadas de cachorros pueden ser de hasta cuatro por vez. Las madres encontrarán una cueva u otra área escondida donde puedan proteger a sus crías. La tasa de mortalidad para el leopardo es de aproximadamente el 50% y los que sobreviven se quedan con su madre de un año y medio a dos.