ISLANDIA
En su capital, Reykjavik, solo el 0.1% de la electricidad proviene de combustibles fósiles, mientras que el restante 99,9% proviene fundamentalmente de energía geotérmica.
¿Sabías qué?
Bogotá invirtió gran cantidad de dinero en un sistema de transporte público más eficiente, cientos de ciclovías y más de 1.200 espacios públicos verdes.
CANADÁ
Vancouver es la ciudad con mayor gestión sustentable de Canadá y planea convertirse en la ciudad de mayor desarrollo sustentable del mundo para 2020.
¿Sabías qué?
Las diez ciudades con mayor gestión sustentable son Colombia, Hamburgo, Estocolmo, Copenhague, Brasil, Portland, Vancouver, Malmoe, San Francisco y Reykjavik.
Uno de los mayores problemas al que se enfrentan los gobiernos actuales es la gestión de los recursos naturales cada vez más limitados por la misma humanidad. Es primordial que los diferentes países aúnen fuerzas para evitar que nuestro planeta se torne inhabitable.
Ante todo, cuando abordamos un tema complejo, debemos definir el concepto principal, en este caso ¿a qué llamamos un recurso natural? Éste es un bien originado en la naturaleza, aprovechable por el hombre pero que se da sin su intervención. Estos recursos son fundamentales para la humanidad ya que nos proveen de alimentos, energía y una serie de pautas indispensables para el sostenimiento de la vida.
Uno de los criterios que se pueden utilizar para diferenciarlos y clasificarlos es la velocidad con que se regeneran una vez utilizados.
CLASIFICACIÓN DE RECURSOS POR REGENERACIÓN
Recursos no renovables: La regeneración abarca largos períodos de tiempo, por lo tanto, el consumo implica su destrucción como es el caso de los yacimientos mineros, petróleo y gas natural. |
Recursos no renovables pero reciclables: El consumo del recurso implica su completa destrucción, pero es recuperable mediante un proceso industrial de reciclado. Por ejemplo minerales como el hierro, el aluminio y el cobre. |
Recursos renovables: Son los recursos naturales en los cuales la utilización ocasiona su destrucción, pero se produce su regeneración según un mecanismo de base biológica. Esto es válido solo si la tasa de extracción o explotación es menor a la tasa de regeneración natural del recurso. |
Recursos ambientales: Son aquellos en los que el consumo del recurso natural no implica su agotamiento o bien su velocidad de regeneración es muy rápida. Por ejemplo el agua, el suelo, el paisaje, el aire. |
La principal fuente de energía en el mundo es un recurso no renovable y altamente contaminante, el petróleo.
EL FUTURO EN PELIGRO
La humanidad está enfrentando un problema sin precedentes: la posibilidad de haber generado ella misma las condiciones terrestres que no permitan su supervivencia. Los gobiernos están cayendo en la cuenta, luego del trabajo de numerosas organizaciones ambientales, que la necesidad de gestionar los recursos que quedan de manera responsable es urgente.
A pesar de ello, los respectivos países se enfrentan a numerosas variables a considerar ya que no todos están en las mismas condiciones para encarar un programa en el que se privilegie únicamente el cuidado ambiental. La situación de las naciones varía entre la pobreza extrema y un gran desarrollo económico; paradójicamente, quienes menos consumen presentan el mayor grado de contaminación debido a las flexibilizaciones de sus leyes para atraer capital extranjero de las manos de multinacionales.
Los países menos desarrollados acusan una alta contaminación, producto de la flexibilización legal en sus países que permite la instalación de empresas que no cumplen con un cuidado responsable, aprovechándose de la necesidad económica del entorno.
EL MUNDO COMO UNA COMUNIDAD SIN FRONTERAS
Si bien existe autonomía de los países, en esta encrucijada se hace necesario establecer acuerdos que trasciendan las fronteras, pues un recurso extinto afecta a todo el planeta. La gestión de recursos implica un desarrollo sostenible, es decir, una forma de vida en la que cuentan, por sobre todo, las consecuencias del accionar en el medio ambiente.
Actualmente la mayor cantidad de energía que consumimos viene de recursos no renovables como es el caso del petróleo y el gas natural. Además, su extracción genera un impacto ambiental y este impacto no respeta división política: la contaminación se extiende por toda la Tierra. Tal es así que la necesidad de que la calidad de vida asociada al desarrollo sustentable está contemplada en los Derechos Humanos de tercera generación.
La contaminación no entiende de fronteras, es un problema de todos y se deben crear soluciones a escala global.
NUEVOS DERECHOS HUMANOS
Si bien los Derechos Humanos se establecieron después de la Segunda Guerra Mundial iniciando la década del cincuenta, en la década del sesenta surgen los de tercera generación, también conocidos como los derechos de la solidaridad. Éstos tienen menor respaldo en la práctica pero, por suerte, esta tendencia va cambiando. Entre estos derechos se encuentran el Derecho al desarrollo, a la paz, a un medio ambiente sano, a la información o a la libre determinación. Éstos siguen evolucionando ya que, por ejemplo, el Derecho al desarrollo es producto de las diferentes cumbres sobre desarrollo social y sostenible hasta hacerse un derecho constituido.
En 1986 la ONU reclama consagrar atención a todos los Derechos por igual y en la Declaración y Programa de Acción de Viena de 1993, se reafirma la indivisibilidad, interdependencia e interrelación de todos los Derechos.
Analizando más detenidamente, podemos ver que cada uno de ellos se relaciona, de una u otra manera, con una gestión de recursos que contemple el cuidado del medio ambiente.
Derecho al desarrollo: en 1986, 146 Estados lo aprobaron y en 1992 tuvo mayor impulso y una visión integral debido a la Conferencia de Medio Ambiente y Desarrollo, en Río de Janeiro. En ella, la Cumbre de la Tierra, se aprueba la Declaración sobre Medio Ambiente y Desarrollo, que afirmaba que se podía ejercer dicho Derecho sin poner en riesgo el ecosistema global. Se vinculaba así, al desarrollo económico y social.
Derecho a la Paz: adoptado por la Asamblea de Naciones Unidas en 1984, expresa la voluntad de eliminar la guerra y prevenir una catástrofe nuclear mundial.
Los Derechos Humanos de tercera generación contemplan el derecho colectivo de tener un medio ambiente adecuado ya que la contaminación no es limitada por fronteras y es un problema que nos afecta a todos.
Derecho a la información: es vital trabajar desde el conocimiento para decidir temas que afectan a todos.
Derecho a la libre determinación: es el Derecho Humano Fundamental en la Carta de las Naciones Unidas, en los dos principales Pactos de Derechos Humanos, en la Declaración sobre el Derecho al Desarrollo y en otros instrumentos y Declaraciones internacionales de Naciones Unidas ya que es una condición esencial para la eficaz garantía y observancia de los Derechos Humanos individuales.
En 1992, en Estocolmo, Suecia, se estableció una alianza mundial con el ideal de lograr acuerdos entre naciones para que respetaran el desarrollo sustentable.
LOS DESAFÍOS PARA GOBERNAR
Un gobierno debe velar por el mejoramiento en las condiciones de su país pero ahora, la práctica de un desarrollo sustentable, en armonía con el medio ambiente, complejiza aún más las decisiones que se deben tomar. Muchas veces, a nivel económico, un proyecto puede redituar en un gran aporte de capital, generación de empleo y activación del mercado interno pero a costa de la contaminación irreversible a mediano y largo plazo.
Las decisiones en base al cuidado del planeta no son beneficiosas en el corto plazo, por lo que un plan de gobierno a largo plazo que contemple un desarrollo sustentable implicaría el mantenimiento de un proyecto durante varios períodos eleccionarios a pesar del cambio de dirigencia; algo difícil de mantener si no existe una política centrada en el país y no en personalismos.
Uno de los mayores desafíos para los gobiernos en el mundo es balancear el cuidado del medio ambiente con los problemas urgentes a resolver cuyas soluciones pueden darse en el corto plazo pero sin tener en cuenta al ecosistema.
La lucha de los gobernantes es ardua. Incluye el cambio climático, el crecimiento demográfico con altas tasas de pobreza y los recursos económicos limitados. A ello se suma la insuficiente inversión en recursos humanos y la falta de conocimientos sobre el tema, tanto en la comunidad científica como en la clase gobernante. La globalización, la competitividad, los avances tecnológicos y la amenaza del cambio climático son otras limitantes a tener en cuenta por cada uno de los países.
SUDAMÉRICA EN CRISIS
Algunos recursos corren mayores riesgos que otros ya que gran parte de la población depende de su disponibilidad pues son esenciales para la seguridad alimentaria mundial. Los recursos naturales están ganando mayor atención debido a que su escasez resulta en el aumento de los precios, oferta insuficiente y sobrexplotación. La mayoría de los países no consideran la gestión sostenible de los recursos naturales como base de sus economías, no es todavía posible en su totalidad en las economías de América Latina. Estos gobiernos deben balancear la generación de empleo y los problemas estructurales de su nación, a pesar de que la naturaleza nos proveyó abundantemente de estos recursos.
Beneficios de una gestión sostenible planificada
ALGUNAS INICIATIVAS PARA UNA GESTIÓN SUSTENTABLE
En Argentina existen tres organizaciones que ofrecen microcréditos para financiar pequeños sistemas de energía limpia, o para invertir en esfuerzos de eficiencia energética.
En Bahamas, el Ministerio de Medio Ambiente ha puesto en marcha un programa piloto para distribuir 100 calentadores solares de agua y 33 sistemas fotovoltaicos residenciales de 2kW a usuarios finales sin costo alguno.
La Universidad de Belice construye una planta piloto de energía para ayudar a reducir la dependencia del país de los combustibles fósiles. En febrero de 2011, la Agencia Japonesa de Cooperación Internacional (JICA) les destinó $11,2 millones para desarrollar un proyecto ubicado en el campus universitario para conectarlo a la red nacional.
En Bolivia, las IMFs (instituciones de micro finanzas) están otorgando créditos a MIPYMES para que éstas incorporen tecnologías limpias en sus métodos de producción.
La República Dominicana tiene una de las políticas de energía limpia más ambiciosas: incluye incentivos a los mercados energéticos, disponibilidad de financiación de capital, y exenciones fiscales. Existe en este país un mandato para alcanzar el 25% de la generación de energía total a partir de energías renovables en el año 2020 y un programa de medición total de energía limpia.
Todavía queda mucho por hacer, pero una marcha de diez mil kilómetros comienza con el primer paso. No tenemos tiempo que perder, si queremos seguir contando con las condiciones para poder vivir en este planeta, nuestro hogar.
Belice inició proyectos en su universidad para independizarse del uso del petróleo con la colaboración de capitales japoneses.