El anemoscopio, también conocido como manga de viento, es un utensilio creado para indicar la dirección e intensidad del viento. Su uso es muy frecuente en los aeropuertos, y aunque es un instrumento muy sencillo, logra dar una buena idea de las condiciones del viento a nivel del suelo. Por lo general, se considera que cuando la manga de viento se encuentra en posición vertical, el viento es débil; con una posición de 45º la velocidad del viento es considerable, y cuando se encuentra totalmente horizontal indica la presencia de vientos fuertes. La construcción de un anemoscopio no requiere de muchos materiales por la simplicidad del instrumento, por lo cual hacer nuestro propio instrumento será una tarea muy didáctica.
Anemoscopio o manga de viento.
Materiales:
Trozo de tela de un metro de largo.
Alambre de metal.
Cuerdas delgadas.
Poste de madera de aproximadamente 2 metros de alto.
Hilo y aguja de coser.
Procedimiento:
Lo primero que se requiere hacer es cortar la tela con forma de triángulo, pero con la punta del triángulo truncada. Seguidamente la tela se enrolla para formar un cono y se procede a unir los extremos de la tela con la aguja y el hilo. Terminado el cono de tela, se prosigue armando un círculo con el alambre de metal, el tamaño del círculo tiene que ser de igual tamaño al círculo mayor formado por el cono de tela. Terminado el círculo de alambre, se une con el extremo más grande del cono mediante costura; cuando finalizamos, se usa la cuerda para amarrar el círculo de alambre con el extremo del poste de madera, dejando una distancia prudencial entre el poste y la entrada del cono de tela. Por último, solo queda esperar la llegada de un viento que nos permita ver cómo nuestro anemoscopio empieza a indicar su dirección.