A mediados del siglo XIV y durante la transición al XV se inicia en Europa un ciclo de crisis en todos los aspectos: demográfico, económico, social, feudal y religioso. Desde el ámbito económico, la producción no suministró vías de alimentación suficientes para una población que aumentaba, y las malas cosechas acabaron por agravar aún más la situación. El hambre, la insalubridad y el foco infeccioso fueron solo el inicio de la propagación de mortales epidemias como la Peste Negra o bubónica que acabaría con un tercio de la población europea.
En el plano social la crisis económica generó un clima de tensión tanto en las zonas rurales como en la ciudad. Las confrontaciones entre los señores feudales y los artesanos se hicieron más frecuentes. En lo político se agravó la situación por las ambiciones de poder de la monarquía debido a la pérdida de los poderes por parte del feudalismo. Esto enfrentó a las monarquías europeas, y llevó a diversas luchas contra la nobleza a fin de recuperar el poder.
Jardín del Palacio de Versalles, símbolo de la aristocracia en la Edad Media.
El origen de la crisis europea radicó principalmente en los problemas de insalubridad sufridos en la Edad Media. La falta de medidas para combatir dicho flagelo desencadenó una epidemia en todo el continente, que tuvo como resultado un cese de las actividades comerciales, sociales y educativas en la época.
Monedas como método de pago de las rentas campesinas.
Otro aspecto relevante fue la evidente división de las clases sociales. La ambición de poder y reconocimiento era primordial para las sociedades medievales y con ella sobrevinieron nuevos modelos económicos como el feudalismo, la burguesía y el liberalismo. Éstos fueron protagonistas de múltiples hechos históricos de gran significación.
LA CRISIS ECONÓMICA DEL SIGLO XIV: CARACTERES GENERALES
La agricultura y la ganadería
Gran parte del siglo XIV se vivió en una forzosa escasez de productos alimenticios. El trigo, que era él alimento de mayor consumo y producción, fue uno de los primeros alimentos en desaparecer en la dieta alimenticia del campesinado. Varias son las causas de la escasez, pero la principal fue dada por el cambio de modalidad productiva. Además, principios del siglo XIV se agudizó la crisis agraria por los constantes cambios climáticos, que redujeron en un 85% las cosechas.
Actividades como el pastoreo redujeron en gran medida las extensiones de tierra que estaban destinadas a la producción de los alimentos básicos. Otra de las causas que propició la crisis fueron los desastres naturales: las inundaciones y posteriores períodos de sequía fueron desastrosos. Pérdidas económicas permanentes y las luchas de poder entre la nobleza y los reyes dejaron destrozadas las cosechas, por ende la producción cesó hasta llegar al punto de desaparecer. Las principales consecuencias de este proceso fueron:
Los sectores sociales europeos ante la crisis
Gran parte de la zona norte y sur de Europa sufrió los embates de la falta de salubridad, división de poder y hambre que dejó a su paso la crisis, no obstante las zonas bajas salieron exentas y pudieron mantener la estabilidad de sus territorios (Holanda, Lombardía, Alemania Oriental mantuvieron sus modos de subsistencia como de costumbre. Fueron las únicas regiones de Europa donde la peste y las guerras no pudieron acceder).
Cada vez se hicieron más notorios los cambios en la organización del estado feudal. Esto tuvo graves consecuencias que afectaron las clases sociales más bajas. A continuación, veremos algunos de los lineamientos propuestos ante la crisis:
Representación del campesinado medieval.
Las diversas manifestaciones para solventar la crisis no se hicieron esperar: amplios sectores del campesinado y los artesanos manifestaron su descontento ante el nuevo modelo productivo implementado por el señorío basado en:
Las contradicciones del modelo productivo | |
---|---|
Crecimiento de la población. | Necesidad de inversión. |
Desarrollo del comercio. | Aumento de los gastos y pago de la renta. |
Presión fiscal de la nobleza. | Nuevas rentas para invertir. |
Las contradicciones tuvieron como resultado una descapitalización del campo, descenso en la productividad y las rentas campesinas, debido al gasto suntuario que era un gasto innecesario que se usó para presumir de rentas mayores y estatus social.
Cultivo de trigo, alimento primordial en la dieta medieval.
Origen de la Guerra de los cien años
Su nombre proviene del conflicto sostenido por los reyes de Francia e Inglaterra en el periodo 1337-1453. Las razones fueron una serie de choques militares, caracterizados por campañas bélicas subsidiadas por la monarquía. Aunque las treguas siempre estuvieron presentes, vivían en un estado de guerra permanente. El conflicto inició bajo las condiciones feudales y a causa de los litigios por el poder de la corona. Tanto Francia como Inglaterra fueron asumiendo una administración centralizada de los Estados soberanos.
Ejecuciones en público durante los litigios por la monarquía francesa.
¿SABÍAS QUÉ...?
Durante el siglo XIV la medicina no utilizaba anestesia, los médicos eran sacerdotes o hechiceros. Los instrumentos utilizados estaban sucios, y la mayoría moría por infección.
Los aspectos que dieron pie a la Guerra se remontan a la conquista del trono inglés por Guillermo el Conquistador en 1066, siendo coronado Duque de Normandía. Guillermo y sus herederos tuvieron una participación crucial tanto en la política feudal de Francia como en el gobierno de Inglaterra. Cultural y económicamente Inglaterra dependía del subsidio de Normandía, por lo que pasó a ser colonia y los intereses internos permanecían en Francia.
Crecimiento de la monarquía francesa
El Imperio angevino mantuvo su estatus y reconocimiento social a la par del Imperio francés. En 1202 Felipe Augusto de Francia hizo una convocatoria abierta al Rey de Inglaterra con motivo del incumplimiento del rey para ejercer funciones como señor feudal de Aquitania. En un principio, las tierras de Francia eran manejadas por los señores feudales en su condición de vasallos del rey de Francia, esto originó que Felipe retirara del cargo y de cualquier posesión de tierras a Juan de Inglaterra; la medida fue seguida por incontables guerras. Hasta la firma del Tratado de París (1259) no se llegó a ninguna solución, pero el rey de Inglaterra pudo asumir de nuevo funciones como el señor feudal, pero solo con la condición de que a cambio tenía que ser vasallo de la monarquía.
El rey Enrique II y sus súbditos en el palacio.
Durante 1294 nuevas actividades militares formaron parte del escenario bélico que se venía gestando en años anteriores, que culminaron con la supresión permanente de Aquitania. Los franceses se negaban a modificar sus límites geopolíticos para cederlo a los ingleses.
Una segunda fase de las guerras se consumó en el año 1337, cuando Felipe VI de Francia decretó nuevamente la supresión de Eduardo III de Inglaterra y puso en marcha una campaña militar para apoderarse del territorio inglés. Es 1337 la fecha que se toma como inicio de la guerra de los Cien Años. Fue tan grande la magnitud del conflicto cuando Eduardo se proclamó rey legítimo de Francia, en 1340, los franceses que se oponían a su régimen permanecían en lucha permanente con las fuerzas militares del rey, a fines de defender su opinión por la luchar por la soberanía.
Bahía de Biarritz, actual región de Aquitania.
La disputa por el reino era aún más cruenta. El resentimiento creció en la nobleza francesa por la intromisión del gobierno central en sus asuntos de carácter político y económico. Eduardo no logró identificar este resentimiento de tantos años por parte de los nobles, pero sin embargo, pese al descontento francés, supo ganar protagonismo y poco a poco fue aceptado en algunos círculos sociales. Fue así que se llegó a la conclusión de que debían existir dos reyes en Francia, a fines de expandir las monarquías en 1340.
La batalla de Crécy
La batalla de Crécy (1346) y de Poitiers (1356) involucraron una gran cantidad de fuerzas bélicas, sin embargo Crécy rindió pocos resultados a Eduardo. Por otra parte la batalla de Poitiers terminó con la captura del rey Juan II de Francia, aunque este acontecimiento no tuvo grandes consecuencias. El efecto de las dos victorias y el prestigio de Eduardo fortalecieron su posición de monarca a partir de 1359.
Ubicación de la región de Poitiers en el mapa.
Fue tal el apoyo que poseía Eduardo, que hubo facciones como Flandes, Normandía, Bretaña y Borgoña que mantuvieron total apoyo hacia él, además de tener al rey de Francia como prisionero, con ventajas sobre las garantías de la corona. Luego de grandes batallas y tratados fortuitos durante 1380, 1415 y 1420 Enrique lograría el reconocimiento oficial de Francia a través del tratado de Troyes en 1420, consumando así los sueños de Eduardo de establecer la monarquía por toda Europa. Sin embargo la aparición de nuevos virus y los problemas de insalubridad fueron determinantes para finalizar con sus ambiciones de poder.
¿SABÍAS QUÉ...?
En el año de 1420 no había alcantarillas ni sistemas de conducción de agua, al no haber alcantarillado ni sistema alguno, las calles de las ciudades fortalezas o aldeas, eran insalubres todas las épocas del año, por supuesto el mal olor era parte de la cotidianidad.
La Peste Negra o Bubónica (1348-1351)
Esta peste se originó en la región de Crimea (actualmente ubicada en los límites del territorio ucraniano pero debate su soberanía con Rusia). Los primeros vestigios de la enfermedad se dieron en marinos genoveses, quienes presentaron mordeduras de ratas en varias zonas del cuerpo. Al regresar a Génova la enfermedad se propagó rápidamente por toda Europa. Los síntomas de la peste eran notorios bultos o bubones en la ingle (de allí proviene la palabra bubónica), luego el sangramiento de las encías y la aparición de bultos negros en la zona de los ganglios que supuraban sangre y pus.
Península de Crimea en la actualidad (Ucrania).
Muy pocas zonas de Europa se salvaron de recibir los flagelos de la epidemia que acabó con la vida de un tercio de la población; sin embargo, algunos miembros de las clases sociales superiores no sufrieron el contagio, como es el caso de los nobles y el clero, quienes tenían una alimentación privilegiada en comparación con el resto de la población afectada. Las consecuencias de la peste fueron abrumadoras: la desaparición de poblaciones enteras (las más afectadas fueron las zonas más pobladas y ubicadas en la costa como Cataluña, Barcelona, Aragón y los pueblos de Wesler y Elba donde la población desapareció en un 100%). Más de un siglo tardaron las poblaciones extinguidas por la peste en recuperarse.
Ilustración de personas infectadas con el virus en su primera fase (gripe).
La crisis social, evolución de los señoríos
Debido a la irrupción de la Peste Negra, las clases sociales se vieron en la necesidad de unirse en vista de las mutaciones que seguía sufriendo el virus que había sido propagado a cada uno de los rincones del continente europeo.
Los señoríos unieron fuerzas con el campesinado. En un principio el trato era cordial, pero con el pasar del tiempo esa cordialidad desapareció debido a la supresión de las rentas por la muerte de gran parte del campesinado y, para poder mantener el método de supervivencia habitual debían oprimir a los sobrevivientes exigiéndoles a cambio rentas más altas para saldar las que habían perdido. Esto tuvo como consecuencia una serie de enfrentamientos que fueron reprimidos para dar paso a la consolidación de un nuevo método de pago de las rentas; los contratos feudales dejaron de ser permanentes y los precios fueron modificados. Toda persona que estuviese sujeta al contrato debía pagar la misma renta todos los años, mientras que se ajustaban los nuevos tributos.
Pergamino usado para la redacción de los contratos.
En vista de las nuevas reglas, los señoríos comenzaron una campaña de desacreditación en contra del poder real, que se encontraba visiblemente débil al no poder cesar los enfrentamientos entre clases sociales.
La crisis en la ciudad
La alta burguesía también fue partícipe de los enfrentamientos, quienes en la época eran conocidos como los patricios, se vieron obligados a retirar gran parte de capital y solo se dedicaron a la compra y venta de tierras, viéndose afectados en gran medida los artesanos ya que al cesar la producción comercial y cerrar los talleres de manufactura artesanal perdieron grandes cantidades de dinero. Esto fue razón suficiente para alzarse en contra de la burguesía, teniendo como consecuencia el cese de las actividades laborales por un período extenso a fines de enfrentar al estado burgués y cambiar los métodos de producción.
La lucha de poderes
Las grandes monarquías intentaron en varias oportunidades recuperar el poder que en ese entonces recaía sobre el régimen feudal. En vista de la gran pérdida que tuvieron que enfrentar, se iniciaron los combates y las guerras civiles que dejarían un centenar de muertes en toda Europa. Bajo los principios del Derecho Romano, el rey vence a la nobleza y recupera todo el poder y protagonismo político; sin embargo debió enriquecer a la nobleza. La crisis culmina a finales del siglo XV cuando los ritos paganos transformaron a las comunidades, tomando como medidas la hoguera como castigo perenne a los traidores, además de la aparición de la Edad Moderna y las nuevas colonias, la Edad Media dio paso a la modernización.