Los observatorios representan un enclave científico de gran relevancia en el campo de la astronomía y la astrofísica. Aprovechando las condiciones excepcionales de la montaña, estos observatorios se han convertido en centros de estudio de fenómenos cósmicos fundamentales, contribuyendo significativamente al avance del conocimiento en el campo de las ciencias astronómicas.
HISTORIA
Su historia se remonta a la década de 1960. En ese momento, los científicos comenzaron a darse cuenta del valor de la ubicación de Mauna Kea para la observación astronómica, debido a su alto nivel de claridad atmosférica y su altitud de 4.205 metros sobre el nivel del mar. El primer observatorio en Mauna Kea fue construido por la Universidad de Hawái en 1964, seguido por observatorios de otras universidades e instituciones de investigación. En la década de 1970, la NASA también construyó un observatorio, seguida por la Agencia Espacial Europea y el Instituto Nacional de Astronomía de Japón en la década de 1980. En la actualidad, Mauna Kea alberga algunos de los telescopios más avanzados del mundo.
DESCRIPCIÓN
Consiste en una serie de instalaciones astronómicas ubicadas en la cumbre de Mauna Kea, una montaña en la isla de Hawái, Estados Unidos. Hay más de una docena de observatorios, algunos de los cuales son propiedad y están operados por diferentes países y consorcios de investigación. Estos observatorios albergan una amplia gama de telescopios y equipos especializados, que incluyen:
• Telescopios ópticos.
• Telescopios infrarrojos.
• Telescopios submilimétricos.
• Telescopios de rayos gamma.
ÁREAS DE INVESTIGACIÓN
En Mauna Kea se llevan a cabo una amplia gama de investigaciones astronómicas gracias a las condiciones favorables de la montaña para el estudio de los fenómenos cósmicos.
• Cosmología y astrofísica: utilizan telescopios ópticos, infrarrojos y submilimétricos, para estudiar la formación y evolución de galaxias, la materia oscura, la estructura a gran escala del universo, y la comprensión de los procesos físicos fundamentales que rigen el cosmos.
• Estrellas y planetas: se observan estrellas de diferentes tipos y edades. así como planetas en nuestro sistema solar y más allá, con el fin de comprender su formación, evolución y características físicas.
• Astrofísica de alta energía: se utilizan telescopios de rayos gamma para estudiar fenómenos astrofísicos violentos como agujeros negros, pulsares, supernovas y fuentes de rayos cósmicos.
• Observaciones del Sistema Solar: se llevan a cabo investigaciones sobre asteroides, cometas, planetas enanos y otros objetos del sistema solar para entender mejor su composición, órbitas y características.