El gran patriota

Francisco Javier Manuel de Ascázubi y Matheu fue un político, militar y terrateniente ecuatoriano que vivió durante el siglo XIX. Este líder visionario dedicó su vida a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos de Ecuador. Su legado sigue siendo relevante hoy en día y su nombre es recordado con respeto y admiración en todo el país.

Lápida de Manuel de Ascázubi y Matheu en Quito. Atribución de imagen: JuanferrManuel de Ascasubi TumbaCC BY-SA 3.0

CARRERA POLÍTICA

Ocupó el cargo de encargado del poder ejecutivo de la República del Ecuador en dos ocasiones: la primera desde el 15 de octubre de 1849 hasta el 10 de junio de 1850, y la segunda desde el 16 de mayo de 1869 hasta el 10 de agosto de 18699. Además, fue vicepresidente de la República del Ecuador desde el 15 de septiembre de 1847 hasta el 15 de octubre de 1849. A pesar de su corto tiempo en el poder, realizó contribuciones significativas a la nación en términos de economía, fiscalidad, educación y desarrollo de infraestructuras.

Durante su administración, se destinó una gran cantidad de recursos de Ecuador a mejoras para el pueblo, como la construcción de escuelas, la modernización de hospitales y centros de atención ambulatoria, así como la construcción de puentes y carreteras.

También estableció la Escuela de Obstetricia en Cuenca y reabrió la Escuela Náutica en Guayaquil. De igual forma, creó escuelas dominicales para el pueblo ecuatoriano y para la instrucción de los soldados estableció las escuelas en los cuarteles.

¿Sabías qué?
José Javier de Ascázubi y Matheu, el padre de Manuel de Ascázubi y Matheu, fue perseguido desde el 2 de agosto de 1810 hasta el día de su muerte, por ser considerado un disidente debido a su participación en la primera Junta de Gobierno Autónoma de Quito.