Fueron un grupo de educadoras estadounidenses que llegaron a la Argentina entre 1869 y 1898, por iniciativa del presidente Domingo Faustino Sarmiento, para fundar y dirigir escuelas normales y primarias en todo el país. Su objetivo era mejorar la calidad de la enseñanza, formar maestros locales y difundir los principios de la educación pública, gratuita y laica.
¿QUIÉNES ERAN?
Eran mujeres independientes, de fuertes convicciones, letradas y con alta vocación. Algunas de las maestras más sobresalientes eran:
• Mary Olstine Graham: se desempeñó en San Juan, Paraná y La Plata, e introdujo métodos novedosos como el uso de mapas, globos terráqueos, láminas y experimentos.
• Emma Caprile: fue la primera directora de la Escuela Normal Número 1 de Buenos Aires, y fomentó la educación física, el canto y el dibujo.
• Sarah Chamberlain de Eccleston: estableció la primera escuela normal de Mendoza, y después trabajó en Paraná, Buenos Aires y Concepción del Uruguay.
• Serena Frances Wood: fue la primera maestra en llegar al país, acompañada por Anna e Isabel Dudley. Fundó una escuela primaria en la capital.
• Juanita Stevens: se le encomendó la tarea de establecer las escuelas recién creadas en Catamarca y Santa Fe. Después de completar esta labor, fue seleccionada como la primera directora dela escuela normal en Jujuy. Además era una de las maestras estadunidenses practicante de la religión católica.
IMPACTO
Las maestras de Sarmiento tuvieron un impacto positivo en la educación argentina al lograr lo siguiente:
• Desarrollar la tasa de alfabetización y fomentar la participación ciudadana.
• Dilatar el acceso a la educación pública y laica para todos los sectores de la sociedad.
• Integrar maestros locales utilizando métodos innovadores y científicos.
• Promover áreas como la educación física, el canto, el dibujo, las lenguas y las costumbres de los pueblos originarios.
• Crear escuelas primarias, secundarias y normales en todo el país.
• Impulsar la lectura y la instauración de bibliotecas populares.
Este compromiso, profesionalismo y vocación sirvió de inspiración para varias generaciones de maestros argentinos.