El Intrépido Corsario

Juan Bautista Azopardo fue un personaje multifacético y valeroso durante la independencia de Argentina. Su disposición a luchar en defensa de Buenos Aires y su participación en la guerra contra Brasil son ejemplos de su sacrificio por la libertad. Su vida modesta y su muerte en la pobreza también son recordatorios de los desafíos que enfrentaron muchos héroes anónimos en ese momento.

Monumento a Azopardo en San Nicolás de los Arroyos, Buenos Aires. Atribución de imagen: Carlos Berzzi, Columna Conmemorativa de la Batalla de Juan Bautista Azopardo, CC BY-SA 3.0

COMIENZOS Y CARRERA CORSARIA

Desde temprana edad, estudió la construcción de barcos en el arsenal de Tolón, en Francia. Después, actuó como corsario bajo el mandato de Holanda y España, participó en enfrentamientos contra Inglaterra. En 1804 tuvo un papel importante en la captura de la fragata inglesa Neptuno, que fue llevada al puerto de Montevideo como botín.

Durante las invasiones inglesas de 1806 y 19807, fue responsable de transportar fuerzas para la defensa de Buenos Aires, participando en la lucha contra los invasores británicos.

REVOLUCIÓN DE MAYO Y GUERRA CONTRA BRASIL

En 1810, cuando estalló la Revolución de Mayo, Azopardo se unió a las fuerzas criollas y recibió el grado de teniente coronel de las Milicias Urbanas tras la campaña del Paraguay. Su compromiso con la causa criolla fue inquebrantable. Participó activamente en los eventos que llevaron a la destitución del virrey Cisneros y al establecimiento de la Primera Junta. Su presencia en las calles de Buenos Aires fue un símbolo de resistencia.

Durante la guerra contra Brasil, Azopardo demostró su lealtad a la causa Argentina. Su participación en las operaciones navales fue crucial para la defensa de las costas.

RELACIÓN CON OTROS HÉROES NACIONALES

El legado de Juan Bautista Azopardo se entrelaza con el de otros héroes nacionales argentinos, que forman una red de valentía y compromiso que marcó la historia de la independencia. Algunos de ellos son:

Manuel Belgrano: compartieron un profundo amor por la patria y mientras Azopardo luchaba en las calles de Buenos Aires, Belgrano lideraba movimientos patriotas y diseñaba la bandera Argentina.
Juan José Castelli: enfrentaron desafíos y sacrificios en su búsqueda de la libertad. Castelli participó activamente en la Revolución de Mayo y en la Primera Junta. Su papel en la historia se asemeja al de Azopardo.

¿Sabías qué?
Juan Bautista Azopardo fue encarcelado en tres ocasiones y sentenciado a muerte, pero milagrosamente logró evitar la ejecución de la pena, incluso logró escapar de la cárcel dos veces.

Prócer arequipeño

José María Sánchez-Corbacho y Abril fue un destacado poeta, magistrado y político peruano, que desempeñó un papel fundamental en la independencia del Perú y en la cultura de su país. En sus versos expresó su amor por la libertad y la patria, inspirando a otros a luchar por la emancipación de América.

Pintura del siglo XIX de José María Corbacho y Abril.

1799

Ingresó al Seminario de San Jerónimo de Arequipa como becario.

1807

Se graduó como bachiller en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y se recibió de abogado en Lima.

1813-1814

Después de unirse con Mariano Arce, Mariano Melgar, Manuel José de Rivero, Benito Laso de la Vega, Francisco de Paula Quiros y otros patriotas a la logia patriótica de Arequipa, conocida como la Tertulia Literaria de Arequipa, apoyó la revolución de Mateo Pumacahua.

1821

Proclamó la Independencia de Arequipa.

1822

Fundó la Academia Lauretana de Ciencias y Artes de la que fue catedrático y presidente.

1824

Fue nombrado primer rector del Colegio Nacional de la Independencia Americana de Arequipa.

1832

Fue elegido senador de la República por Arequipa.

1834

Ocupó el cargo de ministro de Relaciones Exteriores por el presidente Luis José de Orbegoso.

1841

Tomó la presidencia de la Corte Superior de Lima.

IMPORTANCIA DE SU OBRA

La obra poética de José María Corbacho y Abril tiene una gran importancia histórica y literaria, ya que refleja su compromiso con la causa de la independencia del Perú y su talento para expresar sus sentimientos patrióticos en versos fluidos y enérgicos. Algunas de sus poesías, como Canto Patriótico, son consideradas como himnos de la emancipación americana y muestras de la amistad y el heroísmo de los próceres peruanos. Lamentablemente, gran parte de su producción poética se perdió, pues antes de morir dispuso la incineración de sus manuscritos. Solo quedan algunas de sus poesías publicadas en periódicos y revistas de su época, recogidas en la antología Lira Arequipeña.

¿Sabías qué?
El Congreso reconoció a José María Corbacho y Abril como prócer y fundador de la independencia muchos años después de que falleciera. Sus restos fueron llevados al Panteón de los Próceres, en el Cercado de Lima, donde yacen hoy en día.