Motivación

En el proceso de aprendizaje es importante tener en mente un conjunto de razones que nos sirvan de guía y entusiasmo para conseguir nuestros objetivos. A ello llamamos tener motivación; es decir, tener motivos que nos muevan a actuar en función a lo que queremos conseguir.

La motivación

La motivación se basa en buscar una razón por la cual hacer las cosas, en el ámbito del aprendizaje nos podríamos preguntar ¿por qué o para qué estudiar?

Vamos a distinguir dos tipos de motivación, la interna y la externa. La interna hace referencia a los gustos personales, es decir, cuando realizamos algo porque nos resulta placentero. Por ejemplo: leer un libro de nuestro autor favorito.
La motivación externa tiene que ver con la realización de una actividad para conseguir un fin. Por ejemplo: capacitarse para conseguir un trabajo bien remunerado.

Así, nos puede suceder que estemos más motivados por un factor externo, por ejemplo, aprobar todos los exámenes para tener unas buenas vacaciones, y que finalmente ese motivo externo se transforme en interno. Por ejemplo: en el momento de estudio descubrimos un tema que nos resultó apasionante; entonces, en un futuro emprendamos un estudio relacionado a ello por simple gusto personal.

Cuando existen mayores motivos internos nos puede resultar más ameno cumplimentar la obligación A su vez la motivación está estrechamente relacionada con el estudio efectivo y el rendimiento. Entonces, cuando estamos motivados por aprender algo, rendimos bien y, a su vez, cuando obtenemos buenos resultados, más motivación sentimos. Si todo ello lo acompañamos con un estudio efectivo, el proceso de aprendizaje lo transitaremos con éxito.

Factores para conseguir un estudio efectivo

¿Por qué?
Debemos plantearnos objetivos a corto y largo plazo con el fin de establecer motivos que nos muevan a estudiar.

¿Cuándo?
Elegir momentos del día donde estemos descansados.

¿Dónde?
En un lugar donde existan pocas distracciones.

¿Qué?
Es conveniente estudiar sobre todo aquello que nos permita cumplimentar nuestros objetivos. No obstante capacitarse en diferentes áreas o informarse sobre diferentes temas nos permiten tener una visión más amplia e incluso podemos descubrir que existen más temas que nos interesan.

¿Cómo?
La organización es la base del éxito, por lo tanto debemos planificar en tiempo y espacio el desarrollo de nuestras actividades.

Leer información complementaria
sirve para comprender de un modo más fácil un tema. Por eso, si en el colegio estás estudiando la economía de los países desarrollados, puedes ampliar el contenido buscando imágenes de esos países, su cultura, etc.