La rabia es una enfermedad viral que afecta al sistema nervioso de los mamíferos, incluyendo al hombre.
En nuestro país los transmisores de rabia son principalmente los perros y los gatos, pero también algunos animales silvestres como los murciélagos y los zorros. En algunas de las provincias del norte, otros mamíferos domesticables como el ganado pueden contraer la rabia, aunque en general no la transmiten.
¿Cómo se transmite?
El virus presente en el animal infectado (rabioso) se puede transmitir a través de la herida causada por una mordedura, o bien cuando el animal lame una parte de cuerpo lastimada recientemente.
¿Cuáles son sus síntomas?
En las personas los síntomas que deben hacer sospechar el diagnóstico de rabia son:
• fiebre;
• inquietud;
• dificultad para tragar;
• dolor de cabeza;
• sensación de hormigueo en el sitio de mordedura o lamedura, días después de haber sido agredido por un animal.
La enfermedad no tiene tratamiento conocido y es de curso mortal.
En los perros y gatos los síntomas incluyen cambios de comportamiento, agresividad, salivación excesiva, imposibilidad de tragar o de beber, pupilas dilatadas, convulsiones, parálisis y muerte.
¿Cómo se previene?
En caso de sufrir una mordedura, lavar la herida con abundante agua y jabón, no colocar alcohol ni otro desinfectante, y concurrir rápidamente al centro de salud más cercano para ser evaluado por un médico.
Cuando esté indicado, debe aplicarse la vacuna antirrábica humana lo más inmediatamente posible después de ocurrida la exposición.
Fuente: Ministerio de Salud – Presidencia de la Nación (Argentina)
http://msal.gob.ar/index.php/component/content/article/48/99-rabia#sthash.ALuvNPuw.dpuf