El teléfono celular

El teléfono celular o móvil se ha convertido en el símbolo de los avances tecnológicos recientes y en un artículo de consumo de demanda creciente con amplias posibilidades.

Se trata de un dispositivo portátil que emite ondas electromagnéticas y que, gracias a su conexión a una red celular, permite al usuario su utilización en cualquier punto cubierto por esa red. El sistema de telefonía móvil avanzada fue empleado por primera vez en 1983 en Estados Unidos.

De forma muy esquemática, un teléfono móvil es un aparato de radio extremadamente sofisticado. Una radio de onda corta, por ejemplo, permite que dos personas se comuniquen utilizando la misma frecuencia, de manera que sólo puede hablar una persona a la vez. Un teléfono móvil es un dispositivo dual: emplea una frecuencia para hablar y otra para escuchar, de manera que dos usuarios pueden hablar al mismo tiempo.

El teléfono celular se utilizó por primera vez en Estados Unidos en 1983.

Estas comunicaciones son, además, de doble sentido entre el teléfono móvil y las estaciones base. Estas estaciones resultan necesarias para captar correctamente la señal, puesto que la comunicación se realiza a baja potencia (alrededor de 2 vatios para estaciones base pequeñas). Las emisiones a baja potencia implican un bajo consumo de energía del teléfono, lo que permite que las baterías sean pequeñas y recargables, reduciendo considerablemente el tamaño del aparato. Los sistemas actuales operan con frecuencias entre 800 y 1 800 MHz.

Red de comunicaciones

Para posibilitar las comunicaciones entre teléfonos móviles distantes se requiere una estructura o red con muchas estaciones base de forma que cada una de ellas ofrezca una cobertura para la comunicación sobre un área geográfica determinada. Para ello, se divide territorialmente un área (una ciudad, por ejemplo) en sectores de unos pocos kilómetros cuadrados de superficie (células). En cada una se emplaza una estación base, equipada con una antena de comunicaciones que soporta un cierto número de llamadas al mismo tiempo. A medida que aumenta el número de usuarios se amplía también el número de estaciones para satisfacer el incremento de llamadas. Los operadores de telefonía disponen en cada ciudad de una oficina central desde donde gestionan y controlan todas las conexiones telefónicas y las estaciones base de la región.

Cuando se efectúa una llamada a un teléfono móvil, la central trata de localizarlo, cosa que consigue si el teléfono está conectado, activándolo en cada célula de la región hasta que responde. Una vez la estación base y el teléfono determinan el canal a emplear en la comunicación, se puede empezar la conversación. A medida que el usuario del teléfono se desplaza, alejándose de una célula y acercándose a otra, las dos estaciones base correspondientes detectan los cambios en la intensidad de la señal. Entonces se coordinan entre sí, por mediación de la central y se relevan sin que los usuarios perciban el cambio de frecuencia. En los sistemas modernos, la red mantiene los datos de la ubicación de cada teléfono y conoce dónde se encuentra si desea localizarlo. A medida que se desplaza, el teléfono detecta los cambios de canal y los compara con los de la nueva célula. Cuando no encuentra canales para escuchar, está fuera de cobertura y, en la pantalla del móvil, aparece entonces el mensaje que lo indica.

En la actualidad existen los teléfonos inteligentes o smartphones, teléfonos capaces de realizar prácticamente todas las funciones de una computadora.

Identificadores

Para cargar el importe de la llamada e impedir usos fraudulentos cuando se efectúa una llamada, además de las claves de acceso al aparato se transmiten dos identificadores: el Número de Identificación Móvil (un número de 10 dígitos derivado del número de teléfono) y el Número de Serie Electrónico (un número de 32 bits preprogramado).
El sistema de mensajes cortos (SMS) es uno de los grandes éxitos de la telefonía móvil. Permite enviar y recibir mensajes de hasta 160 caracteres, en tiempo real, a otros teléfonos móviles a un coste reducido. Los teléfonos móviles digitales emplean una tecnología similar pero comprimen la voz en unos y ceros. Ello permite que el espacio ocupado por la señal analógica se pueda ahora concentrar entre 3 y 10 llamadas telefónicas. Además, estos aparatos ofrecen servicios de correo electrónico y otros.

Hoy en día, los teléfonos celulares forman parte de la vida cotidiana de la mayoría de las personas.

Real Audiencia de Quito

En el territorio del actual Ecuador, la Colonia propiamente dicha se inició con una partida de nacimiento de doble sentido: el institucional, con el establecimiento de la Real Audiencia de Quito en 1563, como parte del Estado español; y el social, con la llamada Rebelión de las Alcabalas en 1592, en tanto manifestación de los intereses de los sectores locales “americanos” en contra de la legitimidad y alcance de la autoridad real sobre este espacio.

En cuanto a los límites jurisdiccionales, mientras que por el norte el Obispado sólo iba hasta Pasto, pues Popayán era la capital de otra diócesis, la Audiencia incluía, además de Pasto, a Popayán, Cali, Buenaventura y Buga. Por el sur, ocurría lo contrario: el Obispado se extendía hasta San Miguel de Piura, que en lo civil pertenecía a la Audiencia de Lima. En lo que hace a los territorios del oriente amazónico, antes de 1563 ya se habían iniciado las exploraciones e incursiones a esta zona; en los límites de la Audiencia también se incluyeron “todos los territorios que se descubrieren y poblaren”.

El primer presidente de la Audiencia fue el sevillano Hernando de Santillán, quien llegó a Quito en 1564 e instaló inmediatamente esta institución. El doble imperativo a que obedeció el establecimiento de la Audiencia (facilitar el control administrativo de estos territorios y, sobre todo, regular las relaciones entre la sociedad blanca y la sociedad indígena) se encarnó perfectamente en este personaje. Además del presidente, la Audiencia contó con cuatro o cinco oidores o jueces, un fiscal, un escribano, un relator y un portero.

Hernando de Santillán fue el primer presidente de la Audiencia

Entre Lima y Santa Fe

La Audiencia de Quito permaneció como provincia dependiente del Virreinato del Perú desde su creación en el siglo XVI hasta el siglo XVIII, época en la que, frente al adelanto que tuvieron en general las provincias dependientes de los virreinatos americanos y la dificultad que representó para el virrey del Perú ejercer un control más vigoroso en tan dilatado territorio, la Corona decidió crear un nuevo virreinato, el de Santa Fe (Nueva Granada), en mayo de 1717, nombrando como primer virrey a Jorge de Villalonga.

Mediante la cédula de erección de este virreinato se suprimió la Audiencia de Quito, la cual pasó a órdenes de la Audiencia de Santa Fe. Desde ese momento sería esta Audiencia la encargada de conocer y determinar lo relativo a la justicia, el gobierno, la política, el Patronato Regio, la guerra y la real hacienda del distrito de Quito.

En 1723 se suprimió el Virreinato de Santa Fe, con lo cual el territorio de la Audiencia de Quito retornó a los mismos términos en que se hallaba antes de su incorporación al mismo, es decir, pasó a depender del Virreinato del Perú. Posteriormente, fueron varios y extensos los informes que se elaboraron con relación al restablecimiento del Virreinato de Santa Fe; el 20 de agosto de 1739 el rey Felipe V resolvió su restablecimiento y determinó que la Audiencia de Quito perteneciera a él, con el carácter de “subordinada” y dependiente, de manera similar a las demás audiencias con respecto a los virreinatos del Perú y Nueva España. Con los mismos propósitos de política defensiva que se consideraron para la creación primera del Virreinato de Santa Fe en 1717, se determinó entonces por cédula real el control y la defensa militar frente a pretensiones extranjeras.

Por otra parte, ante los innumerables conflictos bélicos que atravesó España en el ámbito europeo durante el siglo XVIII (causantes de crisis que afectaron su economía y su poder), las Reformas Borbónicas de la segunda mitad del siglo supusieron un intento de centralización política y mayor control militar de las colonias americanas. De esta forma, la creación de los virreinatos de Santa Fe y del Río de la Plata (1776) se justificaba por “razones de Estado”.

Mapa del territorio de la Real Audiencia de Quito

La Audiencia de Quito, como unidad menor y dependiente, se vio igualmente enmarcada dentro de estos objetivos y, de esta manera, las regiones de su distrito se articularon política y económicamente de una forma más directa a determinada jurisdicción virreinal. Así, por ejemplo, en el ámbito de las economías regionales, la Sierra Norte se articuló en torno al centro minero de Barbacoas, y, por lo mismo, se vinculó al Virreinato de Santa Fe; la Sierra Sur se relacionaba con el Virreinato del Perú; y la Costa, mediante el auge de su producción cacaotera (1774), permitió ampliar el mercado interno interregional vinculado a las provincias santafereñas o a las pertenecientes al virreinato peruano.

Este constante vaivén por el que atravesó la Audiencia de Quito entre los virreinatos del Perú y Santa Fe permite advertir el verdadero carácter de los cambios político-jurisdiccionales y territoriales que atravesó esta institución durante la Colonia. Esto, a su vez, supone comprender que el proceso de organización de este espacio da cuenta de una “historia jurisdiccional” más que de una “historia de límites”.

Diversidad lingüística y poder político

Es evidente que existen implicaciones entre la lengua y el poder político. La lengua o la modalidad de lengua usada en el ejercicio del poder se convierte en prestigiosa y este prestigio es especialmente importante cuando el poder político se extiende por territorios donde se habla una lengua o variedad de lengua diferente.

Esta conexión entre lengua y poder político se advirtió ya en la Península con la expansión del castellano por territorios en que se hablaban otras lenguas neolatinas. Del mismo modo, con el descubrimiento de América la lengua española se impuso como lengua de los nuevos territorios.

La lengua se impone a los pueblos conquistados, al igual que se imponen la cultura y las costumbres. Los grandes imperios a lo largo de la historia han demostrado que el proceso de culturización de los pueblos sometidos es fundamental para la integración de estos. Sin embargo, este proceso puede conllevar la desaparición de las culturas y las lenguas autóctonas.

Durante la colonización, los grandes imperios acabaron con el habla de numerosas lenguas de pueblos originarios.

El análisis de la situación en España refleja distintas situaciones. Cataluña, con un pasado histórico y literario brillante, nunca ha dejado de hablar catalán. En el País Vasco, en cambio, el área de uso del euskera se había reducido progresivamente y parecía condenado a la extinción.

Además, en Cataluña, las lenguas en contacto, catalán y español, son dos lenguas neolatinas y, por lo tanto, la adquisición de una conociendo la otra es relativamente fácil; mientras que en el País Vasco, con dos lenguas sin relación de parentesco, sucede exactamente lo contrario.

Dado el carácter emblemático que para los vascos tiene su lengua, su defensa se convierte en una cuestión vital. En Galicia, el gallego, también lengua neolatina, ha tenido una historia similar a la del catalán.

España, al igual que gran parte de los Estados europeos, ha vivido un último siglo de reivindicaciones nacionalistas basadas en la lengua. Esto ha hecho que muchas lenguas no hayan desaparecido, sino que, por el contrario, se hayan desarrollado y actualmente sean lenguas de enseñanza, de estudio universitario, de cultivo literario y de uso político.

Convivencia de lenguas

Con frecuencia la coexistencia de lenguas en un mismo territorio se debe a factores históricos, como la conquista de un pueblo, pero también se produce por la presión cultural y económica, o se debe al movimiento migratorio hacia las zonas más industrializadas. En cualquier caso, el territorio presenta situación de bilingüismo o plurilingüismo, es decir, de convivencia de dos o más lenguas que, en teoría o de forma ideal, no presentan predominio de una sobre la otra.

Generalmente, la coexistencia de lenguas en un territorio se debe a factores históricos.

Sin embargo, esta coexistencia de lenguas se puede presentar de forma problemática, en especial cuando se da una situación de dominio entre los pueblos, y esto se traduce en opresión lingüística y falta de libertad en el uso de la lengua.

Cuando la convivencia de lenguas adquiere la dimensión de conflicto, se produce el fenómeno de la diglosia.

Bilingüismo

El bilingüismo es la situación en que se encuentra una comunidad que emplea dos lenguas distintas para cubrir exactamente los mismos cometidos comunicativos colectivos e individuales, públicos y privados.

Sin embargo, esta situación es teórica, ya que siempre una de las lenguas ejerce sobre la otra cierta influencia y, por tanto, el bilingüismo puede alcanzar un número infinito de grados.

Para que existiera un pueblo bilingüe real, todos los hablantes de ese pueblo deberían ser bilingües puros y para ello todos deberían usar las dos lenguas indistintamente y con igualdad de oportunidades.

El bilingüismo se produce cuando una comunidad emplea dos lenguas distintas para cubrir exactamente los mismos cometidos comunicativos colectivos e individuales, públicos y privados.

En realidad, esta situación no se da. Por lo general, los hablantes suelen ser monolingües, y si no lo son, una de las dos lenguas predominará en algunos usos y la otra en otros. Así, un hablante bilingüe adoptará la lengua materna, por ejemplo, para su comunicación familiar y la otra lengua, por ejemplo la enseñada en la escuela, para hablar con los compañeros, escribir una solicitud de empleo o dar una conferencia; esta situación ya no cumple con los requisitos del bilingüismo que se podría considerar puro.

El hecho de poder expresarse en dos lenguas no implica bilingüismo, sino plurilingüismo. El hablante plurilingüe piensa solo en una lengua y cuando sueña o se enfada usa esa lengua y no la otra (u otras) que también conoce; esto es signo de que esa es su lengua.

Los Estados en los que se habla más de una lengua no pueden ser calificados de bilingües o trilingües, ya que cada una de las lenguas tiene su propio dominio y cubre una determinada porción del territorio; se establecen, por tanto, áreas lingüísticas diferenciadas dentro del Estado, y las lenguas podrán ser todas oficiales en el ámbito general, cada una en su propia zona, o solo una para todo el territorio, pero este hecho no hace bilingüe un Estado. Será más adecuado hablar de Estados con dos o más lenguas.

Diglosia

La diglosia implica una evaluación de dos lenguas en términos de rango social: lengua A (lengua alta) y lengua B (lengua baja) a las que se asigna distintas funciones. La lengua A será la que se utilice en los actos públicos, en los contactos comerciales, en la enseñanza, en los grandes medios de comunicación y en la rotulación de los espacios urbanos; mientras que la lengua B quedará relegada al ámbito de las relaciones familiares, de los festivales folclóricos y, con algo de suerte, tendrá alguna presencia en las revistas y emisoras locales.

La diglosia implica una evaluación de dos lenguas en términos de rango social.

Por tanto, la lengua A será vehículo de cultura y patrimonio común, mientras que la lengua B, al verse reducida a una función social irrelevante, tenderá a desaparecer a pesar de ser la lengua propia de un pueblo.

Históricamente, la diglosia se ha producido en numerosas ocasiones y parece que es la causa de la extinción de muchas lenguas: el latín, por ejemplo, se impuso como lengua del Imperio (lengua A) y desplazó al umbro, al osco, al galo y a las lenguas peninsulares prerromanas (lenguas B), entre otras.

La presión que una lengua alta ejerce sobre otra socialmente baja es tan intensa que puede llegar a provocar la desaparición de la lengua baja. El proceso de sustitución es largo y complejo. La lengua hablada en la primera infancia y en el ámbito familiar suele mantenerse como lengua propia y personal a lo largo de toda la vida, incluso si se aprenden y usan otras lenguas con más prestigio social. Sin embargo, en una sociedad en la que convivan lenguas en una situación de diglosia, el cambio de una lengua a otra se suele producir de una forma más sencilla. Si un hablante de la lengua baja contrae matrimonio con un hablante de la lengua alta, incluso si ambos conocen las dos lenguas, es probable que adopten como lengua común la lengua socialmente más prestigiosa, y es probable también que sea esa la que transmitan a sus hijos, lo que significará que el hablante de la lengua baja acabará probablemente, con el tiempo, cambiando de lengua.

La diglosia puede ser combatida si se da la conciencia lingüística adecuada en los hablantes y en la sociedad. La defensa de la lengua B puede frenar su extinción, y esto será posible si esta se muestra como vehículo de cultura, como lengua de enseñanza en todos sus niveles y como lengua de los medios de comunicación.

La normalización lingüística es el conjunto de procesos que una comunidad lingüística inicia y desarrolla para construir las condiciones necesarias que aseguren el uso normal de su lengua y su estabilidad futura. Este proceso generalmente comporta la sustitución del uso de la lengua A por el de la lengua B en las funciones más públicas.

República de Corea

También conocida como Corea del Sur, la República de Corea es un Estado de Asia oriental, en la zona meridional de la península de Corea, que limita al N con la República Democrática Popular de Corea (Corea del Norte), al S con el mar de China Oriental, al E con el mar de Japón, y al O con el mar Amarillo.

Geografía física

La República de Corea es un territorio montañoso, con abundantes valles y llanuras litorales. En su relieve contrasta claramente el sector oriental, de montaña (Taebaek Sanmaek), con otro, en el O, ocupado por diversos llanos (Seúl, Kunsan) y colinas. El pico más alto es el Halla-san (1 950 m), situado en la isla de Cheju. Los principales ríos del Estado son el Naktong, el Kum y el Han. El clima es continental y recibe la influencia monzónica, con lluvias copiosas, sobre todo, en el litoral oriental.

Bandera de la República de Corea

Economía y población

La economía de Corea del Sur está muy penetrada por el capital extranjero, especialmente nipón, que, atraído tanto por las ventajas fiscales como por una mano de obra barata y bien preparada, controla importantes sectores de la producción. Después de Japón, Corea del Sur es uno de los países más industrializados de Asia oriental, con importantes sectores como el automovilístico, electrónico, metalmecánico, textil, químico y petroquímico, siderúrgico, naval y, más recientemente, informático. Corea del Sur está reforzando su industria pesada con la construcción de diversas fábricas petroquímicas en el litoral oriental, con dos notables acererías y varios centros de mecánica pesada. Este país, notablemente industrializado, es, sin embargo, deficitario tanto en combustible (debe pues importar el petróleo) como en otras materias primas. Extrae, no obstante, cantidades nada desdeñables de carbón y produce electricidad, la mitad de la cual es de origen nuclear. Su actividad agrícola se centra principalmente en los cultivos de algodón, tabaco y, sobre todo, de arroz; este último satisface la demanda interna gracias a sus elevados rendimientos y se beneficia de las ayudas estatales. La ganadería se halla poco desarrollada y, así, las proteínas de la alimentación proceden en un porcentaje mayoritario de la pesca.

La capital de la República de Corea es Seúl.

Corea del Sur, Estado más pequeño que Corea del Norte, tiene un número mucho mayor de habitantes (aproximadamente el doble) que la vecina república norteña. De ello resulta una de las densidades medias más altas del mundo (444 hab./km2, y con valores de hasta 600 hab./km2 en determinadas zonas del S del país). La población coreana, homogénea por lo que se refiere a su composición étnica, se concentra preferentemente en las llanuras (y de modo particular en la de Seúl, donde se asienta la capital, con más de 10 millones y medio de habitantes). Otras ciudades importantes son Pusan, Taegu, Inchon y Kwuangju, todas con más de un millón de habitantes.

Historia de internet

El primer esbozo de lo que acabaría siendo la Red se remonta al momento de incertidumbre inmediatamente posterior a la Segunda Guerra Mundial, en el cual las naciones más poderosas llegaron a la conclusión de que era del todo necesario inventar un nuevo sistema de comunicaciones descentralizado que no pudiera ser saboteado por un hipotético enemigo.

En este contexto, el presidente estadounidense Dwight Eisenhower creó el ARPA (Advanced Research Projects Agency), agencia militar en la que empezará a desarrollarse, a mediados de la década de 1960, la idea de una red cooperativa de computadoras.

En sus inicios, Internet era utilizada solo para fines militares

Más de medio siglo después, la Red se ha desvinculado de sus lazos con la disciplina militar y ha llegado a ser, además de un descomunal canal y medio de acceso a todo tipo de información, una ventana a través de la cual es posible asomarse a cualquier punto de planeta. A principios del s. xxi se calculaba que eran más de 70 millones las computadoras conectadas a Internet. De este modo, Internet ha contribuido sin duda al proceso de globalización, al acortar las distancias entre puntos dispares del globo mediante un simple clic del ratón.

Inicios de internet

Entre 1966 y 1969, se dio luz verde a un proyecto que se materializó en la creación una red de computadoras denominada ARPANET, considerada unánimemente la semilla que acabaría dando lugar a Internet. La red ARPANET enlazaba dos universidades de California, el Instituto de Investigación de Stanford y la Universidad de Utah.

Ya en la década de 1970, los descubrimientos se suceden y son muchas las redes que proliferan, pero éstas no pueden conectarse entre ellas por estar basadas en diferentes protocolos para la transmisión de datos.

Este problema se solucionará con el advenimiento de uno de los inventos cruciales para la creación de la WWW: el Protocolo de Control de Transmisión o TCP (siglas del inglés).

Pero Internet como tal, cuyo nombre corresponde a la abreviatura de Interconnected Networks (redes interconectadas), nace en 1982, cuando ARPANET adopta como estándar el protocolo TCP/ IP. Un año más tarde, la Red se escinde de la agencia militar que la había auspiciado y, de este modo, la década de 1980 ve cómo Internet se expande a pasos agigantados: se crea el protocolo FTP para la transferencia de ficheros, el sistema de denominación de dominios (DNS) la Red llega a Europa y se efectúan los primeros actos de sabotaje por parte de los temidos hackers (piratas).

¿Lo sabías? La sigla “www” significa World Wide Web.

La década de 1990 se inicia con un avance capital para la aproximación de Internet a los usuarios no especializados: la World Wide Web, una manera fácil e intuitiva de interactuar con la Red basada en el concepto de hipervínculo y desarrollada por Tim BernersLee, investigador del Instituto de Física del CERN de Ginebra. Responsable también del protocolo HTTP y del lenguaje HTML, se considera a BernersLee la figura clave del advenimiento, en el año 1995, de la consolidación definitiva de la Red. A partir de entonces, usuarios de todo el mundo se incorporaron de forma masiva a esta gran telaraña de la información, y en los años sucesivos se desarrolló enormemente la amplísima gama de utilidades, servicios y posibilidades que ofrece Internet en la actualidad.

Internet es uno de los principales factores que ha permitido el proceso de globalización.

Algunas curiosidades de los inicios de internet

  • El primer envío de un mensaje electrónico entre dos terminales se realizó en febrero de 1969 en la costa Oeste de EE UU.
  • El programa capaz de enviar mensajes entre computadoras, creado en 1971, abrió las puertas al actual correo electrónico.
  • ARPANET, USENET y BitNet, todas de EE UU fueron las primeras redes, antecedentes de Internet. Isabel II, reina de Inglaterra, fue la primera mandataria mundial que mandó un correo electrónico; sucedió en febrero de 1976.
  • El término Internet empezó a emplearse en 1982. El primer sitio (servidor de Internet que almacena páginas web) fue Symbolics.com, creado en 1985.

República Democrática Popular de Corea

La República Democrática Popular de Corea, más conocida como Corea del Norte, es un Estado de Asia oriental ubicado al norte de la península de Corea, que limita al norte con China, al noreste con Rusia, al sur con la República de Corea (Corea del Sur), al este con el mar de Japón y al oeste con el mar Amarillo.

Geografía física

El relieve de Corea del Norte es eminentemente montañoso, sobre todo en sus sectores septentrional y oriental, donde conecta con las cadenas de Manchuria. El pico más alto del país es el Paektu-san, a 2.744 m de altitud. Al oeste se abren una serie de llanuras como la de Pyongyang, junto al litoral del mar Amarillo. Los golfos de Sojoson, al oeste, y Tongjoson, al este, estrechan el territorio por su sector central. La costa occidental es más recortada que la oriental debido a la presencia de una serie de profundos estuarios (ríos Chonchon y Taedong). El curso fluvial más importante es el Yalú. Corea del Norte, bajo la influencia de los monzones, posee un clima continental en el que a inviernos rigurosos y secos, con temperaturas de -43 °C, suceden veranos cálidos (20 °C) durante los cuales se concentran 800 mm de precipitaciones anuales.

Economía y población

La agricultura, colectivizada según el modelo de economía marxista, continúa ocupando a un porcentaje considerable de la población activa norcoreana (en torno al 40 %) y de ella cabe destacar los cultivos de arroz y cereales (maíz, mijo, trigo). También es notable la actividad pesquera. Corea del Norte cuenta con algunos yacimientos mineros de cierta importancia (hulla, lignito, hierro y metales no ferrosos), los cuales, junto con las centrales hidroeléctricas (valle del Yalú), han servido para sentar las bases de una industrialización centrada en los sectores pesados (siderurgia, mecánicas, químicas) que actualmente atraviesa por dificultades.

La actividad manufacturera se localiza preferentemente en la capital de la república, Pyongyang, así como en el cercano puerto de Nampo y los enclaves portuarios que se localizan a lo largo de la fachada del mar de Japón (Chongjin, Kimchak, Hungnam, Wonsan). La población urbana representa el 59 % del total del Estado.

Pyongyang es la capital de la República Democrática Popular de Corea.

Roger Federer

Roger Federer, gran estrella del tenis mundial de la década de 2000, nació en Binningen, localidad del cantón de Basilea-Campiña (Suiza), el 8 de agosto de 1981.

Se inició en el tenis con apenas tres años y destacó ya en su etapa júnior. Como profesional debutó a los 17 años, en 1998, y al año siguiente conquistó sus primeros torneos, de modo que acabó la temporada en el puesto 64 de la clasificación de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP).

A partir de 2001, una progresión espectacular lo encaramó a las cimas del tenis mundial, hasta alcanzar su cénit deportivo en febrero de 2004, cuando se convirtió en número uno de la ATP. Durante 237 semanas mantuvo su supremacía deportiva, temporalmente arrebatada por el español Rafael Nadal en agosto de 2008. Sin embargo, Federer recuperó el primer puesto mundial en julio de 2009, clasificación que mantenía en septiembre del mismo año, cuando era el único jugador en activo que había ganado los cuatro trofeos del Grand Slam (Roland Garros, Wimbledon, Abierto de Australia y Abierto de Estados Unidos). En total eran 69 los torneos ganados por el suizo (entre ellos, 15 del Grand Slam), triunfos a los que se sumaba la medalla de oro en dobles masculinos de los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, obtenida junto con Stanislas Wawrinka.

Numerosos comentaristas y aficionados consideran a Federer como el mejor tenista de todos los tiempos, no solo por la efectividad de su juego, sino también por la elegancia y ductilidad con la que se desenvuelve dentro de la pista, sea cual sea la superficie sobre la que juegue.

Cabe indicar también que se le debe la creación (2003) de la Fundación Roger Federer, que patrocina proyectos de ayuda humanitaria cuyos principales destinatarios son los niños de Sudáfrica, país del que es originaria la madre del tenista. Con ocasión del maremoto que asoló las costas del Sudeste Asiático en 2004, Federer participó activamente en las campañas de ayuda a las víctimas. También ha colaborado en iniciativas contra la propagación del SIDA y desde 2006 ejerce como Embajador de Buena Voluntad de UNICEF.

Michael Jordan

Michael Jordan es un exbasquetbolista estadounidense, nacido el 17 de febrero de 1963 en la ciudad de Brooklyn. Para muchos es sin duda el mejor jugador de la historia de este deporte.

En 1981 ingresó en el equipo de la Universidad de Carolina del Norte, y ya al año siguiente era elegido mejor jugador de la temporada.

En 1984 fue miembro de la selección de Estados Unidos, ganando la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles, experiencia que repitió en los Juegos de Barcelona de 1992.

El mismo año fue fichado por los Chicago Bulls, equipo en el que permaneció a lo largo de toda su carrera deportiva y con el cual obtuvo seis campeonatos de la NBA. Máximo encestador en diez temporadas, obtuvo un promedio de 32 puntos por partido, récord absoluto de la NBA, y fue elegido mejor jugador en 1988, 1991, 1992, 1996 y 1998.

En octubre de 1993, tras el asesinato de su padre, abandonó la competición, pero regresó a la NBA en marzo de 1995. Anunció de nuevo su retirada en 1999, pero en 2001, con 38 años, regresó a la competición, y dos años más tarde volvió a retirarse.

Considerado el mejor jugador de baloncesto de todos los tiempos, dentro de la cancha destacó por su rapidez, elegancia e inteligencia, y fuera de ella, por su sencillez y honestidad.

Nicolás Maduro

El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, nació en la ciudad de Caracas el 23 de noviembre de 1962, en el seno de una familia trabajadora. Durante su primera juventud fue militante de las organizaciones izquierdistas Ruptura y Liga Socialista. En ese tiempo asimiló su formación cristiana a las ideas marxistas.

Entre 1991 y 1998 trabajó como conductor en el Metro de Caracas, cuyo sindicato llegó a dirigir. En 1993 encabezó una delegación de trabajadores que se entrevistó con el teniente coronel Hugo Chávez, en prisión tras la rebelión militar de 1992; desde entonces, el futuro líder del movimiento bolivariano sería el principal referente político de Maduro. Además, el actual mandatario contrajo matrimonio con la abogada de Chávez, Cilia Flores, quien más adelante alcanzaría la presidencia de la Asamblea Nacional.

A partir de 1993, Maduro se convirtió en un fiel seguidor de Hugo Chavez(foto).

Miembro destacado del Movimiento V República (fundado por Chávez en 1997, tras su salida de prisión), Maduro fue elegido diputado de la Asamblea Constituyente de 1999, autora de la Constitución bolivariana de Venezuela. Al año siguiente obtuvo un escaño de diputado de la Asamblea Nacional (2000); cámara que presidió entre 2005 y 2006, año en que Chávez -presidente de la República desde 1999- lo nombró ministro de Relaciones Exteriores. Como titular de esta cartera, que desempeñó hasta 2013, Maduro impulsó el desarrollo de organismos internacionales de integración latinoamericana, como el ALBA (Alianza Bolivariana para América), la CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) y UNASUR (Unión de Naciones de América del Sur), así como el ingreso de Venezuela en el Mercosur.

Tras las elecciones presidenciales de octubre de 2012, el otrora líder sindical fue nombrado vicepresidente de la República.

En diciembre de 2012 se agravó el cáncer padecido desde hacía meses por el presidente Chávez, quien hubo de someterse a nuevos tratamientos en La Habana (Cuba). El mandatario declaró que, en caso de quedar incapacitado, Maduro debería relevarle en la jefatura del Estado venezolano hasta la convocatoria de nuevas elecciones. Esta instrucción divergía del texto constitucional, que confiaba el cargo transitorio al presidente de la Asamblea Nacional.

Nicolas Maduro fue elegido vicepresidente el 10 de octubre de 2012. Asumió como presidente el 5 de marzo de 2013, tras el fallecimiento del presidente electo Hugo Chávez.

Como resultado de tal directriz, una vez fallecido Chávez (5 de marzo de 2013), Maduro asumió la jefatura de Estado y de gobierno en calidad de “presidente encargado”.

Los comicios preceptivos para la restauración de la normalidad democrática tuvieron lugar el 14 de abril de 2013. En las urnas, Maduro se impuso al candidato de la oposición, el liberal Henrique Carriles, por menos de 250.000 votos. A pesar de las denuncias de fraude esgrimidas por Capriles, el Consejo Nacional Electoral reconoció la validez de los resultados y proclamó presidente al sucesor político de Chávez.

Diego Armando Maradona

El futbolista más popular de Argentina nació el día 30 de octubre de 1961 en Lanús, aunque todos lo identifiquen como “el Pelusa” de Villa Fiorito, donde transcurrió su infancia y desde donde saltó a la fama.

A los nueve años inició su romance con el fútbol, cuando actuaba en un equipo infantil conocido como Los Cebollitas. Don Diego, su padre, regentaba una canchita en el barrio y dirigía el equipo Estrella Roja, al que Diego hijo accedió siendo adolescente y a despecho de sus compañeros de más edad. Estudió en el colegio comercial Avellaneda, pero no terminó el primer año del secundario pues pasaba sus horas haciendo jueguitos -casi malabares- con la pelota.

Debutó en Argentinos Juniors el 20 de octubre de 1976, diez días antes de cumplir 16 años. Siguió jugando en Argentinos Juniors hasta 1980, y un año después lo hizo en Boca Juniors, para dar un salto internacional en 1982, contratado por el Fútbol Club Barcelona, de España. Una hepatitis y una lesión importante perjudicaron su rendimiento y en 1984 pasó al Nápoles italiano, con el que conquistó la copa de la UEFA (1989) y cuya camiseta llevó hasta 1991. Su carrera internacional culminó en Sevilla, España, donde realizó la temporada 1992-1993.

Es uno de los mayores ídolos de la historia de Boca Juniors

Para entonces había lucido su magia en la selección juvenil argentina, que ganó el campeonato mundial de esa categoría en Japón (1979), y en la de categoría máxima, que se alzó con el campeonato del mundo disputado en México (1986) -donde, en la final, la selección Argentina, llevada de su mano, venció a Inglaterra- y el subcampeonato, en Italia (1990). Integró asimismo la selección que participó en Estados Unidos (1994), pero, al dar positivo en un control antidopaje, fue suspendido.

Cuando regresó a Argentina tras su experiencia europea actuó en el club rosarino Newell’s Old Boys (1993-1994) y tras cumplir la suspensión impuesta en 1994 por la autoridad futbolística internacional (FIFA) volvió a vestir la camiseta de Boca Juniors, en una temporada irregular en cuanto a sus presentaciones. Maradona hizo también algunos intentos de actuar como director técnico.

Tras su retirada en 1997, Maradona ha sido comentarista deportivo, directivo de Boca Juniors y presentador de televisión. El Pelusa ha sabido emocionar a los amantes del fútbol y se ganó un lugar en la historia de este deporte. La canción que compuso Fito Páez (Dale alegría a mi corazón) y el tango Mago Diego, de Enrique Bugatti, son algunos de los homenajes que sus compatriotas le han dedicado. En 2008 fue nombrado director técnico de la selección argentina de fútbol. Fallece el 25 de noviembre de 2020, luego de sufrir una descompensación cardíaca en su residencia (Dique Luján, Argentina).