Cacique Inacayal

Modesto Inacayal fue un cacique tehuelche que vivió en el siglo XIX y protagonizó una de las últimas resistencias indígenas frente a la Conquista del Desierto. Su vida, marcada por la lucha, la dignidad y la tragedia, refleja la historia de los pueblos originarios de la Patagonia argentina.

Cacique Inacayal.

1863

Actuó en representación de su padre y firmó el Tratado de Paz de Sayhueque con el gobierno argentino. También hospedó a exploradores como Guillermo Cox, George Musters y Francisco P. Moreno en su campamento.

1879

Se sumó a la resistencia de los pueblos originarios frente a la campaña conocida como la Conquista del Desierto, encabezada por el general Julio Argentino Roca. En compañía de otros caciques como Sayhueque y Foyel, Inacayal se replegó hacia el sur, desafiando la persecución militar argentina durante tres años.

1884

Se rindió junto con los últimos caciques, lanceros y seguidores en el fuerte de Junín de los Andes. Fue capturado y trasladado en varias ocasiones. Después, fue liberado gracias a la mediación del explorador Francisco P. Moreno, quien se sentía en deuda con el cacique por la hospitalidad que le brindó durante sus viajes de exploración por la región.

1885

Fue llevado al Museo de Ciencias Naturales de La Plata, dirigido por el célebre Moreno. Allí fue expuesto vivo como una rareza antropológica junto con otros indígenas.

¿Sabías qué?
Modesto Inacayal antes de morir, tuvo un gesto simbólico de despedida de su tierra y su pueblo. Según el relato de Clemente Onelli, Inacayal se desnudó el torso, saludó al sol poniente, extendió el brazo hacia el sur, pronunció unas palabras en su lengua y se desvaneció. Esa misma noche del 26 se septiembre de 1888, falleció en el Museo de Ciencias Naturales de la Plata.

La Reina

María la Grande fue una cacique tehuelche que ejerció un gran liderazgo en la Patagonia entre fines del siglo XVIII y principios del siglo XIX. Su habilidad para negociar y comerciar con los europeos le permitió establecer alianzas pacíficas y obtener beneficios para su pueblo. Fue la primera mujer originaria en pisar las islas Malvinas y dejó una huella imborrable en la historia de la región.

Monumento Tehuelche en Puerto Madryn, Argentina. Atribución de imagen: Alejandro Martín LodesMonumento tehuelche madrynCC BY-SA 4.0

RELACIONES ENTRE TEHUELCHES Y EUROPEOS

Tuvo un impacto positivo en las interacciones entre los tehuelches y los europeos, ya que consolidó alianzas y obtuvo importantes beneficios para su comunidad. Gracias a su habilidad para hablar español y su destreza en la negociación, María intercambió bienes y servicios con los loberos, navegantes, exploradores y misioneros que visitaban su región. Debido a que ella era una figura de autoridad y respeto entre los tehuelches, su aprobación era necesaria para dar luz verde a las actividades comerciales en la zona.

LEGADO

Dejó un legado significativo a su comunidad, se destacó como una figura clave en la defensa de los derechos e identidad de los tehuelches durante la expansión europea en la Patagonia. Se distinguió por ser una de las primeras en fomentar el comercio y la diplomacia con los colonizadores, logró así ventajas tanto materiales como culturales para su gente. Además, desafió las normas tradicionales de género al asumir roles de liderazgo político y militar, y se ganó el respeto de todos.

¿Sabías qué?
María la Grande fue la primera mujer de origen nativo en llegar a las islas Malvinas. Según algunas historias, viajó allí en 1833 con el empresario Luis Vernet y junto a otros tehuelches, cuando Vernet tenía permiso para aprovechar los recursos del archipiélago. Se dice que María presenció la ocupación británica de las islas y la resistencia de los gauchos argentinos.