VIH – SIDA

VIH significa Virus de Inmunodeficiencia Humana. Es un virus que afecta las células inmunitarias, encargadas de protegernos de las enfermedades.


Cada vez más personas viven con VIH sin tener sida. Hoy en día, incluso habiendo tenido sida, se puede recuperar las defensas y volver a convivir con VIH gracias a la eficacia de los medicamentos. El tratamiento no cura la infección pero hace que el virus se multiplique más lento y, por lo tanto, no destruya las defensas del cuerpo. Hoy, con este tratamiento, el VIH puede convertirse en una infección crónica.

¿Cuál es la diferencia entre VIH y SIDA?

No es lo mismo tener VIH que tener sida. Sida significa Síndrome de Inmuno Deficiencia Adquirida, es la etapa avanzada de la infección causada por el VIH.
El síndrome (conjunto de síntomas) aparece cuando el VIH ha debilitado las defensas del cuerpo.
Esta situación predispone a las personas a desarrollar las enfermedades oportunistas, aprovechando la caída de las defensas.

¿Cómo se transmite y cómo no se transmite? 

¿Cómo SÍ se transmite?

– Por relaciones sexuales (orales, anales o vaginales) sin preservativo.
– Por compartir jeringas, máquinas de afeitar o canutos.
– Por el embarazo, el parto y la leche materna.

¿Cómo NO se transmite?

– Por abrazar y besar
– Por deportes de contacto
– Por la picadura de mosquito
– Por relaciones sexuales con preservativos
– Por compartir el mate

¿Cómo puede prevenirse?

Usar preservativos en todas las relaciones sexuales (anales, orales o vaginales) de principio a fin.
No compartir elementos que puedan tener sangre de otra persona (máquina de afeitar, cepillos de dientes, jeringas, canutos, pipas).
Exigir el uso de materiales descartables o esterilizados al hacerte tatuajes, piercings o implantes.
Realizar un tratamiento en las mujeres embarazadas para que no pase al bebé.

¿Qué podés hacer si vos o tu pareja tienen VIH? 

– Si el que tiene el virus es el varón, el preservativo es la única manera de evitar que la mujer se infecte. Si la mujer no se infecta, tampoco se infecta el bebé.
– Si los dos tienen VIH, igual deben cuidarse usando preservativo para evitar reinfectarse. Las reinfecciones se producen porque el VIH no es siempre igual: existen distintos tipos de VIH (se llaman cepas) que cambian de persona a apersona. Reinfectarse es infectarse con más de una cepa.
– Si la que tiene el virus es la mujer, además de usar preservativos en sus relaciones sexuales, tiene que tomar medidas preventivas para que el virus no se transmita a su hijo. Si estás tomando anticonceptivos o querés empezar a hacerlo, es recomendable que consultes a tu médico para que te de la medicación adecuada a tu tratamiento. De cualquier manera, siempre es importante que, aún estando embazada, utilices preservativo para evitar reinfectarte.

Fuente: Ministerio de Salud – Presidencia de la Nación (Argentina)

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Fiebre hemorrágica Argentina

Esta enfermedad, también conocida como “mal de los rastrojos”, es causada por el virus Junín, y afecta a una región del país que abarca parte de las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y La Pampa. La contraen principalmente las personas que viven o trabajan en el campo.

¿Cómo se transmite?

El virus Junín suele estar presente en algunas especies de roedores silvestres. Estos roedores presentan infecciones crónicas sin síntomas, con eliminación del virus, particularmente por la saliva, que contagia a roedores sanos y contamina el medio ambiente, a partir del cual el hombre se infecta accidentalmente.

La fiebre hemorrágica argentina suele ser contraída por personas que trabajan en el campo.

¿Cuáles son los síntomas?

Es una enfermedad aguda que presenta cuadros clínicos de gravedad variable, desde formas leves a formas graves caracterizada por fiebre y alteraciones de la sangre, neurológicas, renales y cardiovasculares, que sin tratamiento puede evolucionar hacia la muerte en un lapso de una a dos semanas.

El comienzo de la enfermedad es inespecífico, con decaimiento, dolor de cabeza y fiebre moderada. Con el avance de la enfermedad se agregan dolores musculares y articulares, dolor retroocular, dolor abdominal, mareos, náuseas y vómitos. En caso de haber hemorragias, éstas se limitan a leves hemorragias nasales o en las encías.

Los signos neurológicos son frecuentes: irritabilidad, somnolencia, temblores.

¿Cuál es el tratamiento?

El diagnóstico y tratamiento precoz aumentan enormemente las posibilidades de cura de esta enfermedad. El tratamiento específico es la administración precoz de plasma.

¿Cómo puede prevenirse?

– Realizar la vacunación contra la fiebre hemorrágica argentina, la que está indicada a partir de los 15 años de edad en las zonas de riesgo del país.

– Realizar una higiene cuidadosa, principalmente de las manos y cambio de ropas, cada vez que se hayan frecuentado zonas con roedores.

– No introducir tallos, hojas o granos en la boca.

– No acostarse sobre bolsas o en el suelo, comer y dormir en habitaciones limpias. Usar calzado cerrado.

– Mantener desmalezados los alrededores de la vivienda para evitar que las lauchas se acerquen a ella.

– Disponer de lugares libres de maleza para los juegos de niños.

– No destruir la fauna de predadores de roedor: lechuzas, lechuzones y chimangos, entre otros.

Fuente: Ministerio de Salud – Presidencia de la Nación (Argentina) http://www.msal.gob.ar/index.php/component/content/article/48/192-fiebre-hemorragica-argentina#sthash.aj1FPoKM.dpuf