Antepara fue precursor de la independencia de Guayaquil, Ecuador. Si bien es homenajeado en su país natal por su relevante participación en la emancipación hispanoamericana, cumplió un rol fundamental como periodista en Londres, donde editó un periódico en el que publicaba sus entusiastas ideas revolucionarias.
Amistad con Miranda
A principios del siglo XIX, los patriotas sudamericanos ubicados en la capital inglesa se concentraron alrededor del prócer venezolano Francisco de Miranda para crear la logia Lautaro: organización que trabajaba en secreto con el fin de lograr la independencia americana del poder español. A este grupo pertenecieron, entre otros, San Martín, Bernardo O’Higgins y José Antepara.
Antepara fue el secretario privado y el confidente de Miranda. Ambos, agitados con la sensación de libertad que pregonada el movimiento, concibieron la idea de independencia de Guayaquil (lugar de nacimiento de Antepara) y Venezuela (patria de Miranda) desde su estadía en el continente europeo.
¿Sabías qué?
Antepara participó en los acontecimientos del 9 de octubre de 1820 (Día de la Independencia de Guayaquil) y en las campañas militares posteriores.
Labores periodísticas
Hacia 1810, en Londres no solo existía un gran entusiasmo por las ideas independentistas, sino también por el desarrollo del correo, el noticiero manuscrito y la imprenta: un perfecto escenario para la difusión de ideas a través de periódicos.
Antepara fue un apasionado redactor y plasmó sus opiniones a favor de la independencia de los pueblos de América en El Colombiano: primer periódico libre fundado en Londres que divulgaba ideas de revolución en el Nuevo Mundo.
El Colombiano nació de la colaboración de varios personajes:
Miranda, fundador y coeditor.
Antepara, redactor principal y coeditor.
Los Fagoaga, financistas para la edición y distribución.
Cortés Campomanes, colaborador en materia militar.
Dr. Constancio, Gould Francis Leckie y Jamen Mill, entendidos en asuntos diplomáticos.
Características de El Colombiano
Fue un periódico de material político-literario. Difundía especialmente ideas independentistas.
Redactado en español.
Tenía un formato regular, 2 pliegos de 8 páginas, a 2 columnas.
Se publicó en la imprenta del tipógrafo R. Juigné, en 17 Margaret Street, Cavendish Square, Londres.
Contaba con un lema en latín en la primera página.
Su primer número circuló el 15 de marzo de 1810.
Su quinto y último número circuló el 15 de mayo de 1810.
Se distribuyó quincenalmente.
El Gobierno español lo llamó “papel incendiario”.
Antepara, a pesar de ser redactor de un periódico londinense, no tuvo la oportunidad de dedicarse al periodismo en su ciudad natal, pues, destinó sus últimos días a las actividades políticas y militares en Guayaquil después de la memorable Revolución del 9 de octubre de 1820.
Entre los días 27 de julio y 12 de agosto de 2012 tuvieron lugar en Londres, la capital del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, los Juegos Olímpicos de Verano correspondientes a la XXX Olimpiada de la era moderna. Era la tercera vez que la ciudad británica acogía este evento mundial, como ya hizo en 1908 y 1948.
El Comité Olímpico Internacional adjudicó a Londres la organización de los Juegos en su 117ª sesión, reunida en Singapur en julio de 2005. Las candidaturas desestimadas en su beneficio correspondieron a las ciudades de Moscú, Nueva York, Madrid y París.
La preparación del evento corrió a cargo de un Comité Organizador, encargado de la planificación general y la recaudación de fondos, y de la Oficina de Proyectos de las Olimpiadas, que asumió la realización de las obras y la provisión de servicios. También se contó con la colaboración y patrocinio material de distintas entidades privadas y públicas.
La municipalidad londinense aprovechó las inversiones estatales recibidas en proyectos de renovación urbanística de importantes zonas de la capital. También se mejoraron las condiciones urbanas de sostenibilidad, con la apertura de nuevas zonas verdes, mejoras en el transporte público, y la renovación del servicio de recogida y procesamiento de basuras.
El capítulo de seguridad fue cubierto, a escala nacional, por un impresionante dispositivo conjunto de la policía y el ejército, que movilizó a cerca de 50.000 efectivos (17.000 de ellos militares, más de los que el Reino Unido tenía desplegados en Afganistán).
Como prolegómeno a los Juegos, el peregrinaje de la antorcha olímpica tuvo ese año una modificación sustancial en su acostumbrada travesía, pues fue trasladada directamente desde Grecia al Reino Unido, por cuya geografía realizó el tradicional periplo previo a su triunfal entrada en el Estadio Olímpico londinense, al término de la gala inaugural del evento.
El principal escenario deportivo fue el Parque Olímpico de Londres, construido sobre 200 hectáreas de antiguo uso industrial en el distrito de Stratford, al este de la ciudad. Allí estaban la Villa Olímpica, el Estadio Olímpico, el pabellón Arena de baloncesto, el Centro Acuático y el Velódromo, entre otras instalaciones. Sin embargo, la competición no se ciñó en exclusiva al citado Parque, pues buena parte de ella se desarrolló en equipamientos deportivos o de esparcimiento ya existentes antes de la aprobación de la candidatura, por ejemplo el estadio de Wembley, el club de tenis de Wimbledon o Hyde Park.
El conjunto residencial que albergó a los atletas se convertirá en un nuevo barrio londinense, que pasará a denominarse East Village.
Participaron en los Juegos de Londres las delegaciones de 204 estados (alrededor de 10.500 atletas). Entre ellos figuró un representante de Sudán del Sur, el país de más reciente creación, si bien acudió a título de Participante Olímpico Independiente, por no haberse creado aún el Comité Olímpico de la joven nación.
Cabe destacar que todas las delegaciones nacionales de atletas incluyeron al menos una mujer, primera ocasión de la historia del olimpismo en que así ocurría; en total, el 46 % de los participantes correspondió al sexo femenino, sensible avance con respecto a los Juegos de Pekín (2008), donde este porcentaje se situó en un 42 %. La delegación que Estados Unidos contaba en Londres con mayoría de mujeres.
La competición sumó 26 deportes olímpicos, que abarcaron las 39 disciplinas siguientes: atletismo, bádminton, baloncesto, balonmano, boxeo, ciclismo (en sus especialidades de BMX, montaña, pista y ruta), deportes acuáticos (natación, natación sincronizada, saltos y waterpolo), equitación, esgrima, fútbol, gimnasia (artística, rítmica y acrobática), halterofilia, hockey sobre hierba, judo, lucha (grecorromana y libre olímpica), piragüismo (en eslalon y en aguas tranquilas), pentatlón moderno, remo, taekwondo, tenis, tenis de mesa, tiro con arco, tiro olímpico, triatlón, vela y voleibol (voleibol y voleibol playa).
Las grandes favoritas para la cabeza del medallero eran las delegaciones de Estados Unidos y China, triunfadoras en Pekín 2008, donde la primera obtuvo el mayor número de preseas de oro, y la segunda, el monto superior de insignias de las tres categorías (oro, plata y bronce). No decepcionaron las expectativas: Estados Unidos ocupó el primer puesto con 104 preseas (46 de oro, 29 de plata y 29 de bronce), seguida de China, con 88 metales (38 de oro, 27 de plata y 23 de bronce); a la zaga quedaron Reino Unido con 65 (29 de oro, 17 de plata y 19 de bronce), y Rusia con 82 (24 de oro, 26 de plata y 32 de bronce). España ocupó el puesto 21 de la clasificación con 17 medallas (3 de oro, 10 de plata y 4 de bronce). Países latinoamericanos con presencia en el podio de los triunfadores fueron: Brasil, con 17 preseas (3 de oro, 5 de plata y 9 de bronce); Colombia, con 8 (1 de oro, 3 de plata y 4 de bronce); México con 7 (1 de oro, 3 de plata y 4 de bronce); Argentina con 4 (1 de oro, 1 de plata y 2 de bronce); República Dominicana con 1 de oro y 1 de plata y Venezuela con 1 de oro.
Para los anales del deporte olímpico quedarán los triunfos del jamaicano Usain Bolt, ganador del oro en las pruebas reinas de la velocidad, los 100 y 200 m lisos, además de la prueba de relevos de 4×100 m lisos, con lo que se convertía en el primer velocista de la historia que sumaba seis oros olímpicos; la victoria del keniano David Rudisha en los 800 m, cuya plusmarca mundial batió holgadamente; los seis metales -cuatro oros y dos platas- con los que alcanzó 22 preseas olímpicas el estadounidense Michael Phelps, el mejor nadador de todos los tiempos; y cómo no, la meritoria participación en la prueba de los 400 m del sudafricano Oscar Pistorius, primer campeón paralímpico que accedía a la palestra de los Juegos, inconfundible por las prótesis de fibra de carbono que sustituían a sus pies amputados.
Concluidos los Juegos de verano, el 12 de agosto, el espíritu de la Olimpiada perduró durante los Juegos Paralímpicos, que también se disputaron en Londres, entre los días 29 de agosto y 9 de septiembre de 2012.