El objetivo de la asistencia social es el de brindar ayuda a las personas, grupos familiares, comunidades y grupos de personas socialmente en desventaja, contribuyendo al mejoramiento de las condiciones de vida a través de un adecuado funcionamiento social que sea capaz de prevenir y evitar situaciones extremas. Esto implica la prestación de múltiples servicios básicos destinados a servir por igual a los necesitados sin pedir contribución a cambio. Por tanto, la labor de la asistencia social tiene la misión de modificar determinados aspectos del sistema social para que las personas puedan adaptarse al mismo según sus aptitudes y de acuerdo a las normas y valores del sistema.
De acuerdo a estos objetivos, entre las prestaciones que brinda se encuentra la asistencia médica, la asistencia a adultos mayores, a ciegos, a enfermos graves, a la infancia y a la familia.
La mayoría de los asistentes sociales, aunque en menor proporción entre los que tienen formación profesional, se emplean en programas de subsidios familiares como los de asistencia a los niños minusválidos, ancianos y otros servicios subsidiarios a los beneficiarios de la seguridad social.
Debido a la escasez de asistentes sociales preparados, los países desarrollados impulsan programas de reclutamiento activo para poder cubrir los puestos necesarios para un correcto funcionamiento de sus tareas. La necesidad ha hecho que creciera el número de escuelas de asistencia social en el mundo entero, con baja matrícula, pero con tendencia a aumentar.
La evolución de la actividad se percibe en la importancia institucional y comunitaria que se le otorga, y en el estímulo a participar en ella.
Las ONG
Las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) han desempeñado en los últimos años un rol fundamental, sensibilizando a la opinión pública sobre los problemas del desarrollo en el llamado Tercer Mundo. Cumpliendo una función dinamizadora y crítica, han impulsado a los gobiernos para que organicen acciones de cooperación internacional, incrementando los recursos que destinan a la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD).
Además de impulsar y llevar a cabo programas innovadores de desarrollo para resolver los problemas del llamado Tercer Mundo, las ONG han cobrado relevancia por la capacidad de resolver situaciones valiéndose de estructuras reducidas y canalizando la ayuda de manera directa.
Una primera y simple clasificación distingue dos tipos de ONG: las que trabajan directamente con los sectores pobres estableciéndose en el Tercer Mundo, y las que están instaladas en los países desarrollados y apoyan a las primeras financiándolas o realizando actividades de educación para el desarrollo.
Los objetivos se llevan a cabo colaborando con ayuda de urgencia y realizando acciones solidarias allí donde se presentan catástrofes naturales, guerras u otros desastres. La colaboración la prestan de manera directa, o a través de los gobiernos o de las organizaciones internacionales competentes. Así mismo las ONG de países desarrollados se dedican a la investigación de los problemas de desarrollo en los países del sur, y a la búsqueda de alternativas para revertir esta situación como la elección de tecnologías apropiadas, el desarrollo cooperativo y otras variantes.
El rol del Estado
La existencia de las ONG y de todo tipo de voluntariado en la asistencia social, no inhibe al Estado de su rol en la conducción de toda estrategia que tenga como objetivo la promoción de la justicia social, la búsqueda de equidad entre los grupos sociales y la sustentabilidad. El Estado democrático es irremplazable como instrumento de la sociedad para enfrentar los problemas económicos y sociales.
El Estado está obligado moralmente a prestar asistencia social; atender a los sectores sociales más vulnerables es inherente a su razón de ser, y esto comprende a Estados nacionales, provinciales, departamentales o municipales.
La descentralización es favorable para garantizar la eficacia de los servicios y fortalecer la gestión del desarrollo social.
Organismos internacionales
Puede definírselos como toda asociación integrada por sujetos de Derecho Internacional Público con un conjunto de normas que regulan su actividad, con miembros, objetivos, presencia internacional y fines comunes.
Lo habitual es utilizar el término para las organizaciones intergubernamentales, como Naciones Unidas, la Organización Mundial del Comercio o el Consejo de Europa, cuyos miembros son Estados soberanos o de otras organizaciones intergubernamentales. Pero en la actualidad, por su propia evolución y por efecto de la globalización, se las ha clasificado en dos tipos, la organización internacional pública u organización intergubernamental (OIG), y la organización internacional privada u organización no gubernamental (ONG), tratada en el punto anterior de esta nota.
Esta diferencia remarca la tendencia de llamar organización internacional a aquellas que son intergubernamentales aún cuando ONG como Cruz Roja, Amnistía Internacional o Médicos sin Fronteras tengan también presencia y objetivos internacionales. La diferencia se centra en que las ONG fijan sus metas en torno a cuestiones particulares y no abordan problemas de Estado a niveles sistémicos. Por esto es que el término organización internacional es hoy un término menos específico. Hoy en los documentos oficiales y de cuestiones técnicas se habla de organización intergubernamental (OIG) y de organizaciones no gubernamentales (ONG), para que las expresiones sean más claras.
Naciones Unidas
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) o Naciones Unidas, es la mayor organización internacional del mundo. Se define a sí misma como una asociación de gobiernos global que facilita la cooperación en asuntos como el derecho internacional, la paz y seguridad internacionales, el desarrollo económico y social, los asuntos humanitarios y los derechos humanos.