Grandes conjuntos del relieve americano

La riqueza y variedad del continente americano nos ofrece un amplio abanico de elevaciones y depresiones que enriquecen el paisaje. Estas formaciones atraviesan el continente en todas sus divisiones conformando extensos e imponentes conjuntos.

 

Con una masa continental que alcanza los más de 42 millones de kilómetros cuadrados, y siendo el segundo continente más grande del planeta, América presenta una amplia variedad de conjuntos de relieve en su geografía. Los contrastes que se presentan van de extensas cadenas montañosas a amplias llanuras, dando lugar a una de las alturas medias más elevadas del planeta respecto a las otras masas continentales.

En términos generales podemos distinguir tres grandes grupos que corresponden a un sentido meridiano en dirección norte-sur: al oeste podemos observar las cordilleras; al centro las zonas de grandes llanuras; y al este una serie de sistemas montañosos dominados por mesetas de mediana altitud.

Cordilleras de América

Como hemos mencionado las elevaciones más imponentes del continente americano se encuentran distribuidas al oeste a lo largo de sus tres divisiones: América del Norte, América Central y América del Sur.

Las montañas que integran estas cadenas de cordilleras son jóvenes y se encuentran próximas a la costa, siendo este elemento uno de los factores determinantes para el clima de algunas regiones. Recorriendo el continente de norte a sur, se trata de un cordón apenas interrumpido en algunos tramos de América Central. Por lo general se suelen destacar tres grandes grupos correspondientes a cada división geográfica de América: las Montañas Rocosas o Rocallosas, la Sierra Madre y la Cordillera de los Andes, que son los cordones montañosos más extensos.

Picos más elevados de América

1. Monte Aconcagua – 6960,8 metros – Situado en la cordillera de los Andes, en Argentina.
2. Nevado Ojos del Salado – 6891,3 metros – Situado en la cordillera de los Andes, en el límite entre Argentina y Chile.
3. Monte Pissis – 6795 metros – Situado en un ramal de la cordillera de los Andes, en Argentina.
4. Cerro Mercedario – 6770 metros – Situado en un ramal de la cordillera de los Andes, en Argentina.
5. Huascarán – 6768 metros – Situado en la cordillera de los Andes, en Perú.

Monte Aconcagua.
¿Sabías qué...?
Los Andes continúan de forma submarina en el mar Caribe.

América del Norte
(principales cordones montañosos)

Montañas Rocosas: ubicadas al occidente de América del Norte, se trata de un extenso sistema de cordilleras que se extiende desde el noroeste de Alaska hasta el suroeste de Estados Unidos, pasando por Canadá. Se originaron a raíz de las fuerzas tectónicas correspondientes a la placa del Pacífico contra la región del subcontinente norteamericano, hace aproximadamente 2,5 millones de años, durante la orogénesis cenozoica. Está conformado por un núcleo de rocas cristalinas que se encuentra rodeado por formaciones de rocas sedimentarias, viéndose afectado de forma determinante por la glaciación cuaternaria y la erosión atmosférica. Debido a que geológicamente se trata de una formación joven, continúa elevándose y son frecuentes los terremotos y fenómenos volcánicos. El pico más elevado es el Mount Elbert, con 4401 metros.

Monte Elbert.

Cadena costera del Pacífico: su nombre se refiere a un eje montañoso que es paralelo a la costa del océano Pacífico. Se extiende de norte a sur, desde el punto culminante de América del Norte hasta el centro de México, y va perdiendo altura progresivamente hacia el sur. Al ser parte del Cinturón del Pacífico se trata de una zona con un vulcanismo activo y alta sismicidad. El monte más alto de esta cadena es también el pico más alto de América del Norte, el Monte McKinley con 6193 metros.

Monte McKinley.

Sierra Madre Occidental: cubre casi 1400 kilómetros y se extiende de forma paralela al golfo de California, desde la frontera compartida entre México y Estados Unidos hasta la ciudad de Guadalajara en México. La altitud media de las regiones que atraviesa esta formación es elevada, situándose entre los 2400 y los 3300 metros, conformando parte de la altiplanicie mexicana. Se encuentra atravesada por numerosos ríos que dan lugar a profundos y vistosos cañones. Con 3350 metros, el cerro Mohinora es el pico más alto.

Sierra Madre Occidental.

Sierra Madre Oriental: cubre aproximadamente unos 700 kilómetros que son paralelos al golfo de México, desde el sur del estado de Coahuila hasta el norte del estado de Puebla en México. Si bien al norte de la formación las alturas son bajas, hacia el sur se incrementa la altura, alcanzando elevaciones que superan los 3500 metros. El pico más alto corresponde al Cerro San Rafael, con 3700 metros.

Sierra Madre del Sur: esta formación que se extiende a lo largo de 1200 kilómetros cubre desde el extremo de la Sierra Madre Occidental al sur de Michoacán hasta el istmo de Tehuantepec al este del estado de Oaxaca, en México. La altitud media de esta formación es de 2000 metros y puede superar los 3700 metros. El pico más elevado es el Cerro Nube, con 3720 metros.

Pico de Orizaba.

Cordillera Neovolcánica: El nombre corresponde a la elevada actividad volcánica y sísmica que se detecta en esta región montañosa. Su actividad constante ha llevado a que se utilice el prefijo “neo” (nuevo), para su denominación. En este sistema montañoso se encuentran algunas de las cumbres más elevadas de la región como el Pico de Orizaba (5743 metros) o el Popocatépetl (5482 metros).

 

América Central
(principales cordones montañosos)

Cordillera Centroamericana: atraviesa todos los países de la región, desde Guatemala a Costa Rica y se encuentra conformada por sierras, montañas, mesetas y volcanes. Esto da lugar a terrenos irregulares y a picos donde la altitud puede superar los 3000 metros. Su ubicación esta próxima al Océano Pacífico, con cumbres como el Volcán Tajumalco en Guatemala, de 4220 metros.

Volcán San Pedro.

Antillas: en esta región correspondiente al Caribe encontramos valles y montañas de poca elevación, como es el caso del Pico Turquino en Sierra Maestra, con 1974 metros, o el Macizo de la Selle en Haití, que llega a los 2680 metros de altura.

Montañas de República Dominicana.

 

América del Sur

Cordillera de los Andes: extendiéndose a lo largo de 7240 kilómetros, esta enorme cadena montañosa es junto al Himalaya la más extensa de la tierra. En Sudamérica atraviesa el territorio de Argentina, Bolivia, Chile, Ecuador, Colombia, Perú y una parte de Venezuela. De acuerdo a estudios geológicos recientes, se cree que el origen de este cordón montañoso se dio hace entre 6 y 10 millones de años. El crecimiento habría sido de forma acelerada impulsado por un proceso conocido como “delaminación”, que consiste en el desprendimiento de la raíz de la montaña hacia el manto de la corteza terrestre dando lugar a que se haya alzado casi 4000 metros una vez liberada de ese peso. Dada su extensión se la suele dividir por regiones: lo Andes septentrionales, ubicados al norte del golfo de Guayaquil (Ecuador y Perú); los Andes centrales, ubicados entre el golfo de Guayaquil y el golfo de Penas (Chile); y los Andes australes, ubicados al sur del Golfo de Penas hasta la isla Grande de Tierra del Fuego (Argentina y Chile).

Cordillera de los Andes.
Más allá de los límites

Los Andes se prolongan por debajo del mar para formar el Arco de las Antillas Australes y surgen nuevamente en el continente antártico para dar lugar a los Antartandes, una cadena montañosa que tiene a picos como el monte Coman (3657 metros) o el monte Esperanza (2860 metros).

 

Llanuras de América

Estas superficies planas que apenas superan los 150 metros de altura sobre el nivel del mar se encuentran en las porciones de territorio más extensas del continente: América del Norte y América del Sur. En el caso de América del Norte el origen de estos territorios se debe a depósitos glaciares y a procesos de sedimentación atribuidos a actividad volcánica y fluvial, mientras que para América del Sur se debe a la sedimentación de aluviones que son transportados por el caudal de los ríos.

América del Norte:

Llanura central o Grandes Llanuras: este territorio se extiende a lo largo de un área de casi 1.300.000 km2, abarcando regiones de Canadá, Estados Unidos y México. Su formación corresponde a los sedimentos depositados durante el Período Terciario y Cuaternario. Debido a las glaciaciones correspondientes al cuaternario, se conformó la principal red hidrográfica de este territorio cuando los hielos se retiraron: tal es el caso de los Grandes Lagos y los correspondientes a la región de Mackenzie, como los lagos de los Esclavos y de los Osos. La sedimentación ocurrida durante el Terciario y Secundario conformaron el sector sur que se extiende hasta el Golfo de México, pasando por la región central correspondiente a la Llanura del Mississippi.

América del Sur:

Llanos del Orinoco: esta región de territorios proclives a inundaciones se encuentra ubicada sobre la cuenca del río Orinoco, atravesando aproximadamente 3000 km entre Colombia y Venezuela. El aspecto plano y ondulado de esta región que favorece la ganadería desciende de norte a sur y de oeste a este.

Río Orinoco.

Llanura del Amazonas: se extiende a lo largo de casi toda la cuenca del río Amazonas ocupando el noroeste de Brasil, el norte de Bolivia, el este de Perú y Ecuador y el sur de Colombia y Venezuela. Debido a que se trata de una zona atravesada por numerosos ríos no se da lugar a la formación de cerros o montañas y la altitud va de los 100 a los 350 metros sobre el nivel del mar. Debido al soplido de las masas de aire pueden hallarse sedimentos de origen marino o de los altiplanos.

Selva Amazónica.

Llanura Chaco-Pampeana: se trata de una de las llanuras más extensas del mundo y ocupa regiones correspondientes a Argentina, Bolivia, Brasil y Paraguay. Puede apreciarse un declive que va del noroeste al sudoeste, apenas alcanzando mayor relieve en la región de la Pampa alta (borde oriental de Córdoba) y los sistemas serranos de la provincia de Buenos Aires, como Ventania y Tandilia. En la superficie pueden hallarse una gran cantidad de rocas aluviales integradas por sedimentos de fluviales o de agua dulce y rocas salinas.

 

Mesetas de América

Originadas durante el período Precámbrico, se trata de montañas poco elevadas debido a la incidencia del viento, la lluvia y las glaciaciones. Al igual que en el caso de las llanuras, su presencia más importante se encuentra en las mayores masas continentales.

América del Norte:

Escudo canadiense: situado al norte de Canadá, se trata de una capa de suelo delgada que se originó tras la última glaciación como consecuencia de la erosión del hielo sobre la roca. Esto ha llevado a la ausencia de tierra y al surgimiento de numerosos ríos y lagos. Originalmente, en esta zona había una gran cantidad de montañas elevadas, pero la erosión ha dado lugar a las superficies planas y alturas más bajas que rondan entre los 300 y los 600 metros, con la irrupción ocasional de montes que apenas superan los 1500 metros de altura.

Montes Apalaches: se extienden a lo largo de casi 2400 kilómetros y van desde Terranova y Labrador en Canadá hasta Alabama en Estados Unidos. Su formación se remonta a la antigüedad, Era Primaria o Paleozoico, y su aspecto fue afectado por agentes como la erosión, dando lugar al aspecto achatado de sus cumbres. La montaña Mitchell, con 2040 metros es el pico más alto de esta cordillera situada en el oriente de América del Norte.

América del del Sur:

Macizo de las Guayanas: se trata de una extensa región que se encuentra entre las formaciones geológicas más antiguas, abarcando sectores de Venezuela, Guyana, Surinam, Guayana francesa, Colombia y Brasil. La forma irregular del terreno se debe a que se trata de un macizo precámbrico que ha sido fracturado y elevado por los movimientos andinos. La erosión provocada por el agua dio lugar a formas amesetadas particulares, como es el caso de los tepuy o caídas imponentes como el Salto Ángel.

Macizo brasileño: el macizo brasileño abarca diferentes países del centro-este de América del Sur, atravesando Brasil, Uruguay, Paraguay y Argentina. A través de las fracturas de esta formación corren los ríos correspondientes a las
cuencas del Amazonas y del Plata. Este sistema de mesetas que se hacen más elevadas hacia los bordes, cuenta con
alturas que pueden alcanzar los 2000 metros.

Problemas fronterizos entre Venezuela y el Mar Caribe

Las continuas disputas territoriales de Venezuela y las preocupaciones en seguridad fronteriza con varios de sus vecinos caribeños crean una incómoda historia. Los esfuerzos de esta nación por extender su alcance en el Mar Caribe involucran en gran medida el mantenimiento de un pequeño islote a 547 km de la costa de Venezuela.

Disputa por fronteras

Desde 1978, los gobiernos de Antigua y Barbuda, San Cristóbal y Nieves, Dominica, Santa Lucía y Montserrat han tenido quejas en curso en las Naciones Unidas con respecto a una reclamación venezolana a una Zona Económica Exclusiva (ZEE) de 370 kilómetros que rodea Isla de Aves.

La Isla de Aves es un banco de arena que descansa sobre un sub-cimiento coralino.

Establecido por una fuerza naval venezolana en 1950 y con una misión científica permanente en 1978, esta isla ha sido cubierta de tierra transportada desde el continente y arrecifes artificiales que se han construido para mantenerla y evitar que pueda ser completamente sumergida durante huracanes o marea alta.

Bajo la administración del presidente Hugo Chávez, en el 2004 el ejército venezolano estableció un pequeño puesto avanzado en el territorio, en el que construyeron el edificio sobre pilotes debido a la falta de terreno firme disponible.

¿Sabías qué...?
En 1980, Isla de Aves fue sumergida y dividida en dos por el huracán Allen, pero más adelante se recuperó. Hoy en día es lugar de paso y anidación de algunas aves marinas y tortugas verdes.

Las aguas en el Caribe oriental son excelentes para la pesca y se cree que contienen grandes reservas de petróleo submarino. Sin embargo, algunos países del Caribe cuestionan la afirmación de la ZEE de Venezuela bajo el argumento de que Aves no satisface la definición de isla de la ONU, son simplemente islotes rocosos aislados y no islas verdaderas, que la lleva a ser catalogada en un estatus que permite un número considerablemente menor de derechos. Además, la posición de Caracas sobre el tema ha dejado a muchas naciones insulares del Caribe con ZEE reducidas, que limita el área de sus pescadores y expande la influencia de Venezuela en la cuenca.

Los estados del Caribe cuestionan la soberanía de Venezuela sobre los islotes.

En 2005, Venezuela lanzó su iniciativa Petrocaribe, que permitía a los países del Caribe oriental comprar petróleo bajo condiciones de préstamos preferenciales. Después de esta oferta, la mayoría de las disputas sobre la legitimidad de la demanda de Venezuela a Aves se cayeron, no obstante, las objeciones permanecen sobre la ZEE asociada con la demanda.

Pequeña causa, gran efecto

El pequeño islote de Aves se ha utilizado para justificar una extensión enormemente desproporcionada de la ZEE de Venezuela hasta el mar abierto adyacente a Guadalupe. Este crédito se ha efectuado con el aval de Francia, Países Bajos y Estados Unidos, en nombre de sus dependencias insulares dentro de la zona.

Venezuela y Barbados

Venezuela también tiene una disputa marítima con Barbados, originada en 2008 cuando la nación insular comenzó a perforar en alta mar en una zona del Océano Atlántico también reclamada por Caracas. El reclamo no es reconocido por las Naciones Unidas.

 

La Comisión de Límites de la ONU fijó en abril de 2010 algunas sugerencias para el límite exterior de su plataforma continental.

Venezuela y Antillas Neerlandesas

El presidente Chávez creó preocupación entre las autoridades holandesas a principios del 2010 al acusar a los aviones militares holandeses estacionados en la cercana cadena de islas Antillas Neerlandesas de violar el espacio aéreo venezolano. El presidente venezolano ha acusado repetidamente a los holandeses, que controlan la política exterior y defensa de la isla, de facilitar la invasión estadounidense de su país.

Venezuela ha reclamado los territorios insulares holandeses situados a pocos kilómetros de su costa, desde la década de 1940.

Zonas económicas exclusivas

Los problemas relacionados con las ZEE son de fecha más reciente y preocupan a la mayoría de los estados y territorios de la región, como las islas, que no están en la lista de conflictos históricos. A su vez, tienden a ser menos agudos, ya que cubren tramos de mar donde las reclamaciones de derechos no están tan arraigadas y donde los recursos son generalmente limitados.

Con algunas excepciones locales, el espacio marítimo caribeño no es rico en poblaciones de peces. Casi todos los países son importadores netos de productos del mar, y sólo unos pocos mantienen flotas pesqueras de alta mar; así como también, los recursos explotados que normalmente se encuentran en el fondo marino están lejos de ser significativos.

Por consiguiente, el potencial conocido de las ZEE no es lo suficientemente grande como para justificar su desarrollo en un futuro previsible, por lo que para la mayoría de los países en cuestión no deberían comprometer los medios y los esfuerzos. Además, en cualquier caso, difícilmente tienen los medios, ya sean técnicos, militares, financieros o simplemente humanos, para ejercer una verdadera soberanía, controlar y eventualmente explotar estas enormes extensiones de mar.

Las dos disputas más significativas, que abarcan cientos de miles de kilómetros cuadrados entre numerosos estados, son por su naturaleza fácilmente comparables y se refieren a las ZEE de Colombia y Venezuela, donde ninguno de los dos estados ha ratificado la Convención de Bahía Montego y que aparecen claramente en el mapa como “anomalías”.