Estructura y función del sacro

La cara posterior de la pelvis está formada por un hueso de forma triangular en el que se fusionan múltiples vértebras. Gracias a este hueso llamado sacro los humanos pueden pararse y caminar, ya que su gruesa estructura ayuda a soportar y transmitir el peso del cuerpo.

ESTRUCTURA

  • Base. Es la parte superior del sacro, donde se conecta con la vértebra lumbar más grande y más baja, la L5.
  • Promontorio sacro. Es la cresta que atraviesa la parte frontal o anterior de la vértebra S1.
  • Agujeros sacro anteriores (foramen). Están ubicados a ambos lados del sacro y son el resultado de vértebras individuales fusionadas. Aunque por lo general hay cuatro agujeros, puede haber de tres a cinco. Estos orificios sirven como canal para los nervios y vasos sanguíneos sacros.
  • Líneas transversales. Son cada una de las pequeñas crestas que se forman entre cada una de las vértebras fusionadas.
  • Ápice. Es la parte inferior del sacro, lugar en el que se conecta con el coxis.
  • Apófisis auriculares. Están ubicadas en los laterales del sacro y se articulan con los huesos de la cadera.
Anatomía del sacro.

FUNCIONES

  • Es un punto de anclaje entre la columna vertebral y la pelvis; de este modo, proporciona estabilidad al núcleo del cuerpo.
  • Es la superficie de descanso de la columna vertebral cuando nos sentamos.
  • Favorece el parto y da flexibilidad a la cintura pélvica.

¿Sabías qué?
El humano necesita tener un sacro de mayor tamaño que otros mamíferos porque camina erguido y, por lo tanto, requiere mayor estabilidad para mantener el equilibrio y la movilidad al estar de pie o sentado.

Dimorfismo sexual

El sacro de las mujeres no es igual al de los hombres. En las mujeres, el promontorio sacro es menos prominente que en los hombres; así, las mujeres tienen una entrada pélvica de forma ovalada y los hombres la tienen en forma de corazón. Un promontorio más pequeño permite una medición anteroposterior más amplia, lo que significa un espacio más grande que posibilita el parto.

Inserciones musculares

El sacro sirve como punto de origen o unión de varios músculos de las extremidades inferiores y de la espalda, por ejemplo, el piriforme, el ilíaco, el multífido y el erector de la columna.

Anatomía de la pelvis

La pelvis es una región en la parte central del esqueleto humano. Se trata de una cavidad compuesta por un complejo grupo de huesos y órganos que, en conjunto, juegan un papel importante en el soporte del peso y la estabilidad del cuerpo, lo que permite acciones como ponerse de pie, sentarse o caminar.

Estructura

  • La pelvis está compuesta por dos grandes zonas: el hueso coxal y la columna vertebral.
    • El hueso coxal, ubicado a cada lado de la pelvis, está compuesto por el ilion, el isquion y los huesos del pubis.
    • La columna vertebral a nivel de la pelvis es un segmento ubicado debajo de la columna lumbar, en esta parte se ubican el sacro y el coxis, huesos que se conectan anteriormente por la sínfisis púbica.
Huesos de la pelvis.

Funciones

Cuando estamos de pie, el centro de gravedad se encuentra en el centro del cuerpo. Los huesos pélvicos soportan el peso y dan estabilidad al cuerpo; igualmente, ayudan a transferir la carga de la parte superior al fémur y las extremidades inferiores durante la caminata o al estar de pie o sentado.

Además, la pelvis es el lugar en el que se originan los músculos y órganos reproductores, y provee el ambiente necesario para el feto en el embarazo.

¿Sabías qué?
Las características anatómicas de la pelvis son cruciales al momento de llevar a cabo un parto.

Variaciones

La pelvis de las mujeres es distinta a la de los hombres. Esto se debe a que las mujeres tienen una estructura adecuada para la cabeza del feto durante el parto, por lo tanto, suele ser más ancha y menos profunda, con huesos púbicos con un ángulo de amplitud más grande que en el de los hombres. Asimismo, el coxis es más móvil y el sacro más corto.

Vista frontal de la pelvis ósea masculina.

 

Vista frontal de la pelvis ósea femenina.
Clasificación

La pelvis puede clasificarse como ginecoide, androide, antropoide y platipeloide. Siendo las primeras dos las más comunes.

  • La pelvis ginecoide es la forma más común en las mujeres y la más favorable para el parto natural. El sacro es ancho con una concavidad profunda, mientas que el angulo subpubiano es amplio y redondeado.
  • La pelvis androide es la más frecuente en hombres. El estrecho superior tiene forma de corazón, el sacro es ligeramente curvo, con una estructura ideal para ocupar músculos voluminosos.
Diferencias entre una pelvis ginecoide y una pelvis androide.