Fue un militar que participó activamente en la Revolución de Quito de 1809, apoyando a los patriotas. Su historia es un símbolo de valentía y dedicación a la causa independentista, dejó un legado que continua siendo una fuente de inspiración para muchos ecuatorianos y latinoamericanos en general.
TRAYECTORIA POLÍTICA Y MILITAR
• Combatió en las filas independentistas de Simón Bolívar y ganó el favor de Antonio José de Sucre durante la liberación de Quito en 1821, Aguirre reunió caballos y abastecimientos para ayudar en la campaña que culminó con la victoria colombiana.
• Durante la Gran Colombia ocupó cargos importantes como comandante general provisional de los ejércitos del distrito del Sur e intendente del departamento de Ecuador. Por su destacada participación en la batalla de Pichincha, en 1822, fue ascendido a coronel y luego a general por Bolívar.
• En 1826, se postuló para la vicepresidencia de la Gran Colombia por el mismo distrito.
• Participó como general del ejército dirigido por Isidoro Barriga en la revolución de los Chihuahuas, en 1835.
• Después de la separación de Ecuador de la Gran Colombia, entre 1850 y 1851, desempeñó roles políticos y militares como diputado, senador del Congreso y ministro de guerra y marina durante la presidencia de Diego Noboa.
¿Sabías qué?
El general Vicente Aguirre se casó con Rosa de Montúfar y Larrea-Zurbano, hija del marqués de Selva Alegre, en enero de 1815 en la ciudad de Quito. Esto le permitió ingresar a la alta sociedad y la política de la ciudad, así como acceder a parte de la enorme fortuna familiar. De este matrimonio nacieron dos hijos: Carlos Aguirre Montúfar y Juan Aguirre Montúfar.
Fue un prócer de la independencia de Quito, que lideró la revolución de los Marqueses y la Primera Junta de Gobierno Autónoma de Quito en 1809. Fue también alcalde de Quito, comandante de las tropas quiteñas y tío de Carlos Montúfar, otro destacado héroe de la libertad. Su vida fue una aventura de valor, patriotismo y nobleza.
1778
Contrajo matrimonio con Maria Nicolassa Guerrero y Matheu, hija del conde de Selva Florida.
1793
Fue elegido como alcalde de segundo voto del cabildo de Quito.
1808
Formó parte de la Revolución de los Marqueses, que estableció la Primera Junta de Gobierno Autónoma de Quito.
1809
Asumió como alcalde de primer voto y presidente del Cabildo.
1812
Participó en la batalla de San Antonio e Ibarra, en la que el Estado de Quito fue derrotado por las fuerzas realistas.
1822
Al terminar la batalla de Pichincha, que marcó definitivamente la independencia de Quito, se unió a la Gran Colombia de Bolívar.
1830
Reconoció la creación de la República del Ecuador bajo el mando de Juan José Flores.
PRIMERA JUNTA AUTÓNOMA DE GOBIERNO
Se estableció el 10 de agosto de 1809 con la destitución del presidente de la Real Audiencia de Quito, Manuel Ruiz Urriés de Castilla, y la formación de la primera Junta de Gobierno Autónoma de Quito. Montúfar era el alcalde de primer voto y presidente del cabildo de Quito, y junto a otros nobles quiteños, proclamó la soberanía de la ciudad y fidelidad al rey Fernando VII, que había sido depuesto por Napoleón Bonaparte.
Esta Primera Junta fue el primer grito de independencia de las colonias españolas en América, y se inspiró en la Junta Central Suprema que se había formado en España para resistir la invasión francesa. La Junta de Quito envió cartas al virrey de Nueva Granada y a los Infantes de España, solicitando el reconocimiento de su autonomía y lealtad al rey. Sin embargo, la junta fue disuelta por las fuerzas realistas en noviembre del mismo año, y Pedro de Montúfar fue capturado y enviado como prisionero a lima.
¿Sabías qué?
Pedro de Montúfar fue el único prócer de la independencia de Quito que vivió hasta ver la creación de la República del Ecuador en 1830, bajo el mando de Juan José Flores. Montúfar reconoció la nueva nación y se mantuvo al margen de las luchas políticas que siguieron a la separación de la Gran Colombia.
Manuel Antonio López Borrero fue un destacado personaje de la independencia de América del Sur. Este militar e historiador colombiano luchó por la libertad de su patria y de otras naciones hermanas. Su vida de sacrificios y conocimientos lo llevó a participar en batallas decisivas y a escribir obras fundamentales para la memoria histórica de Colombia y Perú.
1818
Se unió a las fuerzas de la patria a los 15 años.
1819
Se unió al Ejército Libertador de Colombia y fue capturado por los realistas.
1820
Escapó y se reincorporó al Rjército Republicano, siendo nombrado asistente del Estado Mayor.
1822
Participó en la batalla de Pichincha.
1824
Luchó en la Batalla de Ayacucho con el rango de capitán.
1826
Regresó a Colombia y se estableció en Venezuela, ocupó cargos públicos y periodísticos.
1830
Fue confinado por el general Rafael Urdaneta por supuestos lazos con los septembristas.
1831
Fue liberado y regresó a Colombia, donde continuó trabajando como funcionario y escritor.
OBRAS ESCRITAS
Entre sus principales obras se encuentran:
• Campaña del Perú por el Ejército Unido Libertador de Colombia: un relato de las batallas que tuvo el ejército de Bolívar en Perú, con mapas y archivos.
• Recuerdos históricos del coronel Manuel Antonio López: una autobiografía en la que cuenta sus vivencias como asistente del Estado mayor General Libertador en Colombia y Perú.
• Quito, Luz de América: un trabajo que destaca la importancia de Quito como impulsora de la independencia de América.
¿Sabías qué?
Manuel Antonio López Borrero estuvo a cargo de la bandera del ejército independentista durante la Batalla de Pichincha, lo cual marcó la liberación de Ecuador. También se rumorea que fue testigo de la ejecución de 50 patriotas cuando fue capturado por los realistas, pero debido a su juventud, le perdonaron la pena de muerte.
La Batalla de Pichincha significó más que la independencia de Quito y el inicio de la liberación de otros territorios del dominio español en Suramérica, fue también un ejemplo de sacrificio y heroísmo de los quiteños, guayaquileños, colombianos y de los habitantes de otras regiones del continente. Entre los muchos hombres que se destacaron en la contienda gloriosa se destacó Abdón Calderón, que recibió heridas que le causaron la muerte y aun así no dejaba de arengar a la tropa.
Nacimiento de un Héroe
El 30 de julio de 1804 nació en Cuenca Abdón Calderón Garaycoa, un niño que estaría llamado a convertirse en Héroe. Fue bautizado al día siguiente de nacer. Sus padres fueron el cubano Francisco Calderón, contador de las Cajas Reales y funcionario del gobierno español en Cuenca, y la guayaquileña Manuela de Jesús de Garaycoa y Llaguno, perteneciente a una de las más influyentes familias de Guayaquil.
¿Sabías qué...?
Los miembros del batallón al que perteneció Abdón Calderón decidieron no tener, en lo adelante, capitán.
A pesar de ser funcionario de la metrópoli, Francisco Calderón apoyó el movimiento patriótico de 1809. Por esta posición fue hecho prisionero y enviado a Guayaquil, Cuenca y Machala. Cuando se estableció la Junta Superior de Gobierno, en 1810, fue liberado y se incorporó al Ejército Independentista de Quito, con el grado de coronel. Participó activamente, como parte de los radicales, en la campaña de 1811-1812. Fue fusilado, en Ibarra, al ser éstos derrotados en el Combate de El Panecillo.
Francisco fue un ejemplo a seguir de su hijo Abdón, debido a su recta trayectoria y la acción realizada el día en que iba a ser ejecutado, que pidió, como última voluntad, que le quitaran la venda de sus ojos y le entregaran el escapulario al futuro Héroe de Pichincha.
Los golpes en la vida de Abdón Calderón
Tras la muerte del padre, con sólo ocho años de edad, Abdón tuvo que enfrentar las penurias de la pobreza. Al ser incautados los bienes de su padre, su madre quedó en la miseria y murió un año más tarde, en Guayaquil.
¿Sabías qué...?
En las revistas militares, al mencionarse el nombre de Abdón Calderón, la tropa contestaba: “Murió gloriosamente en el Pichincha, pero vive en nuestros corazones”.
Los estudios
Los años de niñez en Guayaquil transcurrieron tranquilos para Abdón, que estudió con muy buenos resultados con profesores de la talla de Vicente Rocafuerte, quien fuera su pariente al casarse, en 1842, con su hermana, dos años menor, Baltazara Calderón.
De los estudios a la guerra
El nueve de octubre de 1820, cuando estalla la insurrección por la independencia en Guayaquil, Abdón sólo tiene 16 años de edad. José Joaquín Olmedo, el ilustre escritor y político, creó un ejército al que llamó División Protectora de Quito, que tenía como fin luchar por la independencia de las vecinas audiencias. El joven, de inmediato se alista en la tropa. Allí alcanzó el grado de subteniente del Batallón de Voluntarios de la Patria. El patriota Ignacio Salazar fue su jefe inmediato.
Con la victoria de Camino Real, un mes después del triunfo de la revuelta en Guayaquil, donde se destacó el joven patriota por su valor, fue ascendido a teniente. El coronel Luis Urdaneta lo elogió grandemente. Entre 1820 y 1822 participó en los combates siguientes: la primera derrota de Huachi, la de Tanizagua, la victoria de Cone, la segunda derrota de Huachi, el avance de Guayaquil a Cuenca y de Cuenca a Quito. Es por ello que cuando participó en la Batalla del Pichincha, Abdón Calderón, a pesar de su juventud, ya era todo un veterano conocedor de la guerra.
Una victoria y dos temores
Con el triunfo de Pichincha Ecuador se liberó del dominio español, pero Bolívar temía al realismo, que continuaba en el poder del Alto y Bajo Perú y tratarían de reconquistar los derechos perdidos en la Gran Colombia.
Cronología de los combates
Camino Real
Huachi 1
Tanizagua
Babahoyo
Yaguachi
Huachi 2
Guayaquil – Cuenca
Pichincha
El fin de una vida y el comienzo de la inmortalidad: la Batalla de Pichincha
El 24 de mayo de 1822 se produjo la histórica Batalla de Pichincha. La participación de Abdón Calderón en este hecho ha sido objeto de orgullo para los cuencanos y ecuatorianos en general. Este joven de 18 años de edad recibió cuatro heridas de bala ese día. Pero a pesar de las heridas decidió permanecer en la primera línea de combate, arengando a la tropa de su batallón y portando la bandera azul de Guayaquil.
La revancha de Abdón por la muerte de su padre
Abdón Calderón heredó de su padre el sacrificio, la valentía, el desprendimiento y el patriotismo y a su muerte juró vengar la afrenta infame ocasionada por los realistas en San Antonio de Ibarra.
A la primera herida la recibió en el brazo derecho, tomó la espada con la mano izquierda y continuó combatiendo; recibió otro balazo en el brazo izquierdo que le interesa un tendón y le rompe el antebrazo, por lo que tiene que soltar la espada que fue colocada en su vaina por un sargento; continuó al mando de la Compañía cuando recibió un tercer balazo, esta vez en el muslo izquierdo, que le fracturó el hueso. En ese estado, arremetió contra el enemigo, recibiendo un cuarto balazo en el muslo derecho que le astilló el hueso. Cayó desfallecido al suelo, inmóvil. Sus compañeros lo trasladaron al campamento, donde lo tendieron en el suelo. Un soldado le calmó la sed y lo asistió. Al día siguiente lo trasladaron a Quito y lo asistieron en el Hospital San Juan de Dios, donde falleció finalmente.
Algunos historiadores han afirmado que murió en el combate, pero lo cierto es que fue trasladado herido a Quito, donde murió catorce días después, el 7 de junio de 1822. Según los médicos, la causa de la muerte de Calderón fue, además de las complicaciones de lacepticemia en sus heridas, la deshidratación por disentería, al ingerir comida dañada y no querer retirarse del combate para recuperarse.
Honores post mortem
Antes de morir, en su Informe de los Resultados de la Batalla, del 28 de mayo, el mariscal Antonio José de Sucre escribió: “…hago una particular memoria de la conducta del teniente Calderón, que habiendo recibido sucesivamente cuatro heridas, no quiso retirarse del combate. Probablemente morirá, pero el Gobierno de la República sabrá compensar a la familia los servicios de este oficial heroico”.
Cuando Simón Bolívar llegó a Quito, unos días después de la victoria, y conoció los hechos ocurridos, ascendió póstumamente a Abdón Calderón al grado de Capitán.