En 1809, cuando se instauró la Primera Junta de Gobierno Autónoma de Quito, el recién nombrado ministro de Gracia y Justicia Manuel Rodríguez de Quiroga redactó un comunicado que expresaba los motivos del movimiento y las razones por las que los pueblos cercanos debían solidarizarse con la causa. Si bien esta Junta no duró mucho tiempo, el texto forma parte del archivo histórico que fundamenta la independencia del Ecuador.
la proclama
Pueblos de la América:
La sacrosanta ley de Jesucristo y el imperio de Fernando VII perseguido y desterrado de la península, han fijado su augusta mansión en Quito. Bajo el Ecuador han erigido un baluarte inexpugnable contra las infernales empresas de la opresión y la herejía. En este dichoso suelo, donde en dulce unión hay confraternidad, tienen ya su trono la paz y la justicia: no resuenan más que los tiernos y sagrados nombres de Dios, el rey y la patria. ¿Quién será tan vil y tan infame que no exhale el último aliento de la vida, derrame toda la sangre que corre en sus venas y muera cubierto de gloria por tan preciosos e inexplicables objetos? Si hay alguno, levante la voz, y la execración general será su castigo: no es hombre, deje la sociedad y vaya a vivir con las fieras. En este fértil clima, en esta tierra regada antes de lágrimas y sembrada de aflicción y dolores, se halla ya concentrada la felicidad pública. Dios en su santa Iglesia y el Rey en el sabio gobierno que le representa, son los solos dueños que exigen nuestro debido homenaje y respeto. El primero manda que nos amemos como hermanos, y el segundo anhela por hacernos felices en la sociedad en que vivimos. Lo seremos, paisanos y hermanos nuestros, pues la equidad y la justicia presiden nuestros consejos. Lejos ya los temores de un yugo opresor que nos amenazaba el sanguinario tirano de Europa. Lejos los recelos de las funestas consecuencias que traen consigo la anarquía y las sangrientas empresas de la ambición que acecha la ocasión oportuna de coger su presa. El orden reina, se ha precavido el riesgo y se han echado por el voto uniforme del pueblo los inmóviles fundamentos de la seguridad pública. Las leyes reasumen su antiguo imperio; la razón afianza su dignidad y su poder irresistibles; y los augustos derechos del hombre ya no quedan expuestos al consejo de las pasiones ni al imperioso mandato del poder arbitrario. En una palabra, desapareció el despotismo y ha bajado de los cielos a ocupar su lugar la justicia. A la sombra de los laureles de la paz, tranquilo el ciudadano dormirá en los brazos del gobierno que vela por su conservación civil y política. Al despertarse alabará la luz que le alumbra y bendecirá a la Providencia que le da de comer aquel día, cuando fueron tantos los que pasó en la necesidad y en la miseria. Tales son las bendiciones y felicidades de un gobierno nacional. ¿Quién será capaz de censurar sus providencias y caminos? Que el enemigo devastador de la Europa cubra de sangre sus injustas conquistas, que llene de cadáveres y destrozos humanos los campos del antiguo mundo, que lleve la muerte y las furias delante de sus legiones infernales para saciar su ambición y extender los términos del odioso imperio que ha establecido: tranquilo y sosegado, Quito insulta y desprecia su poder usurpado. Que pase los mares, si fuese capaz de tanto: aquí le espera un pueblo lleno de religión, de valor y de energía. ¿Quién será capaz de resistir a estas armas? Pueblos del continente americano, favoreced nuestros santos designios, reunid vuestros esfuerzos al espíritu que nos inspira y nos inflama. Seamos unos, seamos felices y dichosos, y conspiremos unánimemente al individuo objeto de morir por Dios, por el Rey y la patria. Esta es nuestra divisa, esta será también la gloriosa herencia que dejemos a nuestra posteridad.
Fuente: Romero, José Luis y Romero, Luis Alberto (1977). Pensamiento político de la emancipación (1790-1825) Tomo I. Biblioteca Ayacucho.
También conocida como la batalla de Yaguachi, fue un combate armado que se libró en la actual provincia ecuatoriana de Guayas, cerca de la zona de Yaguachi, entre las tropas de la División Protectora de Quito y las fuerzas realistas. Este conflicto resultó con la victoria patriota y la independencia definitiva de Guayaquil.
datos de interés
Fecha: 19 de agosto de 1821
Lugar: Yaguachi, provincia del Guayas, Ecuador
Resultado: victoria independentista
Cambios: se logró la independencia de Guayaquil
Beligerantes: Gran Colombia, Guayaquil y División Protectora de Quito contra el Imperio español y su Ejército realista
Comandantes: Antonio José de Sucre contra Francisco González
DESARROLLO
El presidente Aymerich diseñó un plan ofensivo con una tropa comandada por el coronel Francisco González, que había viajado desde Quito para terminar definitivamente con la revolución del 9 de octubre de 1820, fecha en la que Guayaquil proclamó su independencia. La idea consistía en enfrentar a ambos bandos el 20 de agosto de 1821.
Antonio José de Sucre lideraba las fuerzas independentistas y, al conocer las intenciones del ejército español, envió al general Mires a atacar de forma anticipada a los realista en Yaguachi, el 19 de agosto de 1821. La estrategia militar de Mires obligó al bando enemigo a replegarse, reorganizarse y a retroceder lentamente. La batalla terminó con la derrota de los realistas.
¿Sabías qué?
El coronel González se fugó del lugar del enfrentamiento con unos pocos hombres. En el campo de batalla las bajas realistas superaron por mucho a las patriotas, mientras que las fuerzas españolas perdieron cerca de 400 soldados, los independentistas tuvieron unas 20 víctimas.
El éxito patriota restauró el ánimo libertario, razón por la que se expidió el Decreto de Gratitud y Agradecimiento a la República de Colombia al general Sucre y sus oficiales.
Algunas de las más destacadas actuaciones durante esta contienda fueron llevadas a cabo por personajes como el coronel Cayetano Cestaris, el mayor Morán, Abdón Calderon, Baltazar García y de la Rocha y José Ariza, entre otros.
También llamada Junta Protectora de Quito o Ejército de Guayaquil, fue una tropa militar creada después de la independencia de Guayaquil para lograr la liberación de otros pueblos de la Real Audiencia de Quito. Estuvo comandada por el coronel Luis Urdaneta, con León de Febres Cordero como jefe de Estado Mayor
FORMACIÓN
La independencia de Guayaquil se logró el 9 de octubre del 1820, con este suceso se rompieron los lazos entre la Provincia de Guayaquil y el Imperio español. Después de redactar el acta de independencia, la recién organizada Junta de Gobierno provisional pretendía expandir las intenciones emancipadoras hacia otros poblados cercanos, como Quito y Cuenca. De este modo, en noviembre de 1820, se creó la División Protectora de Quito.
La División Protectora de Quito estaba conformada por los batallones Libertadores, Vengadores, Voluntarios de la Patria y Daule, entre otros, bajo el mando directo del coronel Luis Urdaneta y con el coronel León de Febres Cordero como jefe de Estado Mayor.
TRAYECTORIA
Batalla de Camino Real
Fecha: 9 de noviembre de 1820
Lugar: sector de Camino Real, cerca de Bilován, Ecuador
Resultado: victoria guayaquileña
Primera batalla de Huachi
Fecha: 28 de noviembre de 1820
Lugar: sector de Huachi Grande, a las afueras de Ambato, Ecuador
Resultado: victoria realista
Batalla de Yaguachi
Fecha: 19 de agosto de 1821
Lugar: Cantón de Yaguachi, Provincia del Guayas, Ecuador
Resultado: victoria independentista
Segunda batalla de Huachi
Fecha: 12 de septiembre de 1821
Lugar: Huachi Grande, cerca de Ambato, Ecuador
Resultado: victoria realista
Batalla de Tanizagua
Fecha: 3 de enero de 1821
Lugar: Guaranda, provincia de Bolívar, Ecuador
Resultado: victoria realista
Batalla de Pichincha
Fecha: 24 de mayo de 1822
Lugar: faldas del volcán Pichincha, Quito, Ecuador
Resultado: victoria independentista, toma de Quito
¿Sabías qué?
El 6 de abril de 1821, Antonio José de Sucre llegó a Guayaquil y lideró la División Protectora de Quito para partir a Yaguachi.
FIN DE LA DIVISIÓN
Tras la batalla de Pichincha, Sucre entró a la ciudad de Quito y, meses después, en julio, Guayaquil se incorporó a la Gran Colombia. Bajo este contexto, se ordenó la desintegración de la División Protectora de Quito.
Manuela Espejo fue una de las quiteñas más representativas de su época. No solo fue gestora de los ideales independentista y la lucha por la libertad, sino también una precursora de la enfermería, el periodismo femenino y la defensa de las mujeres en el Ecuador. Esta ilustre revolucionaria marcó la historia de su país y su influencia en la sociedad de antaño se mantiene hasta la actualidad.
LA ENFERMERA
Aunque para el siglo XVIII las oportunidades de estudio para las mujeres eran escasas, Manuela obtuvo una muy buena educación en su hogar centrada en las ciencias naturales y la medicina. Desde muy joven participó en actividades humanitarias y asistió a los enfermos y desvalidos; inicialmente con su padre, el médico y cirujano Luis Espejo; luego acompañó a su hermano Eugenio, insigne doctor y personaje de renombre en Quito.
En 1785, cuando la fiebre amarilla azotó a la población quiteña, Manuela y su hermano tuvieron una notable labor, pues ofrecieron asistencia médica a todos lo que la necesitaran, especialmente a los más pobres. Además de su amplio conocimiento sobre el área, su entrega, pasión y bondad, le confirieron el título de pionera de la enfermería en el país.
LA PERIODISTA Y FEMINISTA
Manuela fue la primera mujer de su país que se aventuró a expresar sus ideas en la prensa. Escondió su identidad bajo el seudónimo Erophilia en el diario Primicias de la cultura de Quito.
Aprovechó ese espacio para plasmar su opinión sobre la discriminación de las mujeres, las limitaciones a las que estaban sometidas y exigir un trato igualitario; asimismo, en este medio defendió la postura política de sus hermanos, que eran perseguidos por el gobierno de la Real Audiencia. Manuela nunca se silenció y dio los primeros pasos de los movimientos feministas en el país.
LA INDEPENDENTISTA
Manuela contribuyó activamente al círculo independentista. Luchó con valentía, seguridad e inteligencia por estos ideales. Siempre respaldó a sus hermanos, quienes fueron perseguidos políticos y posteriormente encarcelados. Llegó a a acusar al presidente Luis Muñoz de Guzmán por provocar la muerte de su hermano y fue a juicio, pero no tuvo éxito.
Afortunadamente, logró ver el fruto de sus esfuerzos: a su país libre. Su trabajo por la causa patriota fue aclamado en toda la región y se convirtió en una figura de valor para la historia ecuatoriana.
¿Sabías qué?
En su honor, el municipio de Quito creó el premio Manuela Espejo, entregado a aquellas mujeres que hayan cumplido un trabajo destacado en el desarrollo local y nacional a través de actividades culturales, educativas y ambientales, entre otras.
Carlos de Montúfar, hijo de Juan Pío de Montúfar (presidente de la Primera Junta de Gobierno Autónoma de Quito y precursor de la independencia nacional) fue un coronel y patriota ecuatoriano, considerado uno de los libertadores del país. Su carrera militar inició durante su permanencia en España y terminó en el territorio de la actual Colombia, mientras era coronel y ayudante general del ejército de Simón Bolívar.
Batalla de Bailén (1808)
Tras la invasión napoleónica a España, se inició la guerra de la Independencia española. Montúfar participó en la batalla de Bailén como ayudante del principal jefe militar español, el general Francisco Xavier Castaños. España salió victoriosa y Napoleón tuvo su primera derrota militar.
Sitio de Zaragoza (1808)
Fueron dos asedios ocurridos en la ciudad de Zaragoza. Allí pelearon las tropas del primer Imperio francés de Napoleón Bonaparte contra las fuerzas españolas de la dinastía Borbón. Terminó con la retirada de las fuerzas francesas.
Batalla de Somosierra (1808)
Los franceses obtuvieron la victoria en este conflicto y Napoleón logró ingresar a Madrid. No obstante, la participación de Montúfar destacó por su heroísmo.
¿Sabías qué?
La Junta Central Suprema y Gubernativa del Reino eligió a Montúfar como comisionado regio en Ecuador, donde la revolución quiteña debilitaba el dominio colonial. El objetivo era llevar la paz a su país y guíar a los líderes hacia el nuevo sistema constitucional del Imperio español. Al llegar a Quito, Montúfar fue arrastrado por las filas revolucionarias, decidió unirse a la causa patriota y luchar contra los españoles.
Batalla de El Panecillo (1812)
Este cruel combate se llevó a cabo en el cerro El Panecillo de Quito, donde se enfrentaron las tropas realistas de Toribio Montes y Sámano y los defensores de Quito comandados por Carlos de Montúfar. Resultó en la victoria realista y Montúfar se vio obligado a salir de la ciudad.
Los escapes de Montúfar
Tras huir de Quito, Montúfar se trasladó a la ciudad de Ibarra. A finales de 1812 fue capturado y desterrado a España. Allí logró escaparse y viajar hasta Panamá, donde se incorporó a las fuerzas del libertador Simón Bolívar.
Batalla de la Cuchilla del Tambo (1816)
En este conflicto lucharon las tropas independentistas de Nueva Granada y las tropas de la Corona española en Popayán, Colombia. La derrota de los patriotas representó el fin de la Primera República. Montúfar fue capturado, condenado a muerte y ejecutado por la espalda por ser considerado un traidor.
Ecuador se vio marcada por uno de los hechos más sangrientos de su historia el 2 de agosto de 1810, cuando inició una revuelta ciudadana en Quito en la que patriotas atacaron el Real Cuartel de Lima e intentaron liberar a los próceres que actuaron el 10 de agosto de 1809 en la Primera Junta de Gobierno. El suceso se convirtió en una cruel matanza, cientos de quiteños murieron ese día.
Precedente: inicia la revolución
Un grupo de patriotas se reunió la noche del 9 al 10 de agosto de 1809 en la casa de Manuela Cañizares para firmar un acuerdo y establecer una nueva Junta que gobernara en nombre de Fernando VII y que destituiría al presidente Manuel de Urriez, conde de Ruiz de Castilla.
nuevo gobierno
El capitán Juan Salinas, quien apoyó el movimiento desde el inicio, ofreció sus soldados, y durante la mañana del 10 de agosto él y su pequeño ejército se apoderaron de las edificaciones gubernamentales. La soberanía recayó en la Junta Suprema, con Juan Pío Montúfar como presidente; José Cuero y Caicedo como vicepresidente, y Juan de Dios Morales, Manuel Rodríguez de Quiroga y Juan Larrea como secretarios de Estado.
La Junta implantó diversas reformas que gozaron de popularidad, sin embargo, muchos sectores no se sentían representados por sus líderes políticos y rechazaron el movimiento revolucionario. De este modo, la ejecución de este gobierno ejecutivo se hizo más difícil con el tiempo y, luego de unos 3 meses, cesó sus funciones.
Algunos cargos de la Primera Junta de Gobierno Autónoma de Quito
tensión en las calles
Ante su frustrado gobierno, Juan Pío Montúfar renunció a la presidencia de la Junta el 12 de octubre de 1809 y días después hizo un pacto con Ruiz de Castilla que consistía en mantener la Junta y no tomar ningún tipo de represalias. El 29 de octubre de 1809, Ruiz de Castilla se instaló nuevamente en el poder.
Ruiz de Castilla, contrario a lo que había prometido, desató un persecución contra todos aquellos que habían sido participes de la Primera Junta de Gobierno Autónoma de Quito y aprisionó a varios en el Cuartel Real de Lima.
día de la matanza
El 2 de agosto de 1810, Quito estaba fuera de control por la presencia teniente coronel Manuel Arredondo y sus tropas, que tenían ocupada la ciudad, y se experimentó un máximo momento de tensión cuando un grupo de patriotas intentaron liberar a los presos del Cuartel Real de Lima. Esto desató una cruenta batalla que terminó con la orden del Conde Ruiz de Castilla de matar a los reclusos en sus propias celdas, entre ellos a los ministros Quiroga, Morales, Larrea y el comandante Salinas.
La violencia invadió a la ciudad y un gran número de civiles resultaron heridos y muertos. Los ataques cesaron cuando el obispo Cuero y Caicedo recorrió las calles con un Cristo y pidió que cesara la lucha. Dos días después hubo una Asamblea de conciliación en la que se acordó la salida definitiva de Arredondo de la ciudad y un alto a las represalias.
Desde entonces, cada 2 de agosto se rinde homenaje en el país a las víctimas de la venganza colonial, tanto a los próceres como a las múltiples víctimas anónimas que lucharon y entregaron sus vidas por la libertad de su país.
En esta Vuelta al Mundo aterrizamos en Ecuador, un país ubicado sobre la línea ecuatorial en América del Sur, donde se distinguen cuatro regiones: la cálida Costa bañada por el Pacífico, las alturas nevadas de los Andes, la verde alfombra amazónica y las famosas islas Galápagos.
DATOS BÁSICOS
Nombre Oficial: República de Ecuador Extensión: 256.370 Km2 Capital: Quito Forma de Gobierno: Democrática Presidente: Guillermo Lasso Ciudades Principales: Quito, Guayaquil, Cuenca Idioma Oficial: Español Fiesta de Independencia: 10 de Agosto Unidad Monetaria: Dólar Religión: Libertad de culto, predominio de la religión Católica.
Un país de contrastes no sólo por la diversidad ecológica, producto de sus diversos paisajes, sino también por la pluralidad de culturas. Las primeras poblaciones que se asentaron en este territorio datan del 12.000 a.C, luego se formaron los llamados “pueblos precolombinos”. Hacia el siglo XV el Imperio incaico conquistó gran parte de la región y hacia el siglo XVI llegaron los españoles convirtiendo a la zona en una de sus colonias.
Luego de casi trescientos años de estar bajo el mando de los españoles, en 1809 comenzó el período independentista que culminó con éxito: gran parte del territorio se integró a la Gran Colombia y el sector litoral permaneció independiente hasta la anexión vía manu militari por parte de Simón Bolívar.
En 1830 los territorios colombianos del sur se dividieron y se creó la nación ecuatoriana. Si bien parecía comenzar una etapa de paz, en los inicios de la república existió gran inestabilidad política que condujo al país a una serie de revoluciones.
Durante el siglo XX, Ecuador no cobró mayor protagonismo en el ámbito internacional ya que no participó en las guerras mundiales. Los hechos más relevantes fueron los conflictos limítrofes que tuvo con Perú y la conformación de gobiernos militares.
Hacia 1979 Ecuador regresó al sistema democrático. No obstante la inestabilidad política siguió siendo una realidad: entre 1996 y 2006 el país protagonizó una gran crisis económica y social, dando como resultado la dolarización del país y tres presidentes derrocados antes de terminar su mandato.
CULTURA
Ecuador es un país donde convergen diferentes etnias; como se puede apreciar en su historia, las influencias de los conquistadores españoles y de los pueblos precolombinos fueron fundamentales en el proceso de consolidación del país. A su vez existen marcadas fronteras culturales entre las regiones de los Andes, la Costa y Amazonía.
Actualmente el grupo étnico predominante es el de los mestizos (aquellos de linaje mixto español y Amerindio) que, de acuerdo al último censo poblacional del 2010, alcanza el 71.9% de la población. El 7% son indígenas, el 6.1% caucásicos, el 7,2% afroecuatorianos y el 7,4% montubios.
La mayoría de estos grupos se encuentran integrados en la cultura establecida a nivel general, pero aún existen comunidades que practican sus propias costumbres, concretamente esta situación ocurre en lo más remoto de la cuenca pacha.
La lengua más hablada es el idioma español aunque, cabe destacar, que existen variantes locales de esta lengua, así como modalidades diferentes que verían de acuerdo a la etnia, la clase social o la región. También existe una pequeña minoría que habla lenguas nativas como el shuar, achuar, a’ingae, etc.
La religión más practicada es la católica romana, pero debido a la diversidad cultural también existen otras confesiones cristianas. Los indígenas suelen mezclar prácticas del catolicismo con sus creencias tradicionales. También existen comunidades que aún conservan sus creencias y practicas antiguas de adoración a la tierra, montañas, y el sol.
FIESTAS POPULARES
El calendario de las fiestas populares de Ecuador es bastante completo; las más importantes son:
• Día de la Región Amazónica. Se festeja el 12 de febrero en honor al descubrimiento del río Amazonas, en esta ocasión se organiza bailes y se bebe chicha.
• Carnaval. Se celebra en todo el país en el fin de semana antes de la Cuaresma.
• Festival de las Frutas y las Flores. Para celebrar se organizan desfiles, espectáculos y show de fuegos artificiales. Se lleva a cabo el 17 de febrero de cada año en la provincia de Tungurahua (Ambato-Ecuador). Es en conmemoración a la pérdida sufrida por los habitantes de la ciudad a raíz del terremoto del 5 de agosto de 1949; tras el trágico episodio, el pueblo procuró reactivarse y dejar de lado este suceso, por lo que los socios del Centro Agrícola Cantonal fueron el eje principal de la organización de la primera fiesta que se llevó a cabo el 17 de febrero de 1951.
• Inti Raymi. Es la Fiesta del Sol que se celebra durante junio y julio, con el evento principal en el solsticio de verano. Los grupos indígenas toman las plazas para simbolizar la rebelión contra los opresores coloniales.
• Corpus Christi. Es la celebración católica de la Eucaristía, se mezcla con tradiciones indígenas. Se festeja en un jueves de junio.
• Paseo del Chagra. Se le llama Chagra al campesino de los Andes ecuatorianos. La celebración se realiza el 20 de julio en Machachi (Pichincha).
• Festival de la Cosecha de Maíz. Tiene lugar cada 16 de agosto en Tarqui, cerca de Cuenca.
• Yamor. Se celebra del 1 al 8 de septiembre en Otavalo para agradecer a la “Pacha Mama” o madre tierra por sus dones, especialmente por el maíz.
• La Mama Negra. Es una fiesta tradicional propia de la ciudad de Latacunga, es una simbiosis de las culturas indígena, española y africana. La máxima expresión es la aparición de la Mama Negra (Madre Negra) que es en realidad un hombre vestido de mujer, pintado de negro y llevando muñecos, para representar a sus hijos.
• Rodeo mantubio. Se festeja el 12 de octubre, es una celebración de la herencia española en Ecuador.
• Día de los Muertos. Se festeja en todo el territorio ecuatoriano el 2 de noviembre.
• El Pase del Niño. Es el 24 de diciembre en Cuenca. Los niños desfilan vestidos de personajes bíblicos rindiendo homenaje al Niño Jesús.
También hay ciudades que tienen celebraciones únicas donde se hacen evidentes las mezclas de las creencias españolas con las indígenas.
PATRIMONIOS DE LA HUMANIDAD
La Organización para la Educación, la Ciencia y la Cultura de las Naciones Unidas, (UNESCO, por sus siglas en inglés) ha declarado ciertos lugares de Ecuador Patrimonio Cultural o Natural de la Humanidad, este título los convierte en posesión de la humanidad y reciben protección de un comité internacional. Conozcamos esos lugares tan interesantes de Ecuador:
• Centro Histórico de Quito
Se encuentra entre volcanes andinos, a 2.800 metros sobre el nivel del mar, se extiende por más de 320 hectáreas y es el más grande de América. Cuenta con 130 edificaciones monumentales, aproximadamente, en las cuales se puede percibir una gran diversidad de arte pictórico y escultórico, principalmente de carácter religioso inspirado en una multifacética gama de escuelas y estilos. Además hay cinco mil inmuebles registrados en el inventario municipal de bienes patrimoniales.
Junto al centro histórico de Cracovia en Polonia, fue uno de los primeros en ser declarados Patrimonio Cultural de la humanidad por la UNESCO, el 18 de septiembre de 1978. Esta organización internacional ha destacado algunas de las iglesias del Centro Histórico, como La Compañía, y los monasterios de San Francisco y Santo Domingo que representan ejemplos de la arquitectura barroca de Quito que ha resultado de la mezcla de las influencias española, italiana, morisca, flamenca e indígena.
• Cuenca
Santa Ana de los Ríos de Cuenca es la tercera ciudad más grande de Ecuador, se encuentra ubicada en un valle interandino de la sierra sur ecuatoriana, a 441 km al sur de Quito. Se la conoce como la Atenas del Ecuador por su majestuosa arquitectura, su diversidad cultural, su aporte a las artes, ciencias y letras ecuatorianas y por ser el lugar de nacimiento de muchos personajes ilustres de la sociedad ecuatoriana. Además es una ciudad destacada por haber conservado rígidamente el mismo plan urbano que fuera ordenado por el rey español Carlos V, hace más de 400 años. Su Centro Histórico fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1999.
• Las Islas Galápagos
Son 19 islas volcánicas que conforman un parque nacional y una reserva ecológica. Se encuentran situadas en medio del Océano Pacífico, aproximadamente a mil kilómetros hacia el Oeste de Ecuador. Hace siglos fueron el refugio de Piratas y hoy son el destino preferido de turistas y científicos. Existe una gran diversidad de animales y vegetales; entre los animales se distinguen las tortugas gigantes, una variedad de pájaros como los patas azules, patas rojas, flamingos, frigatas, albatroses y pequeños pingüinos, entre otros. Además constituyen un importante ejemplo del proceso evolutivo. Prueba de ello es la investigación que llevó a cabo Charles Darwin en las islas para desarrollar la Teoría de la Evolución. En 1978 fueron declaradas Patrimonio Natural de la Humanidad y en 2007 fueron añadidas a la lista de Patrimonios de la Humanidad en peligro.
• Parque Nacional Sangay
Se encuentra entre las provincias de Morona Santiago, Chimborazo y Tungurahua. El acceso no es sencillo, existen varios senderos pero la mayoría de ellos requieren largas caminatas. Los paisajes son impactantes y hacen valer la pena el esfuerzo por ingresar. Este parque es el hogar de muchas especies andinas raras como el tapir de montaña, el cóndor, el oso de anteojos, el margay y la nutria gigante, especies que se preservan gracias a la ubicación aislada del parque. Además contiene dos volcanes activos, el Sangay y el Tungurahua, así como una amplia variedad de ecosistemas que van desde bosque tropical hasta glaciares. En 1983 fue declarado Patrimonio Natural de la Humanidad.
SÍMBOLOS NACIONALES
Bandera
Consiste en tres bandas horizontales: amarillo (la superior es de doble anchura), azul, y rojo, con el escudo de armas superpuesto en el centro de la bandera. Es similar a la bandera de Colombia, que es más corta y que no lleva el escudo de armas.
El origen de la bandera y su similitud con las tricolores de Venezuela y Colombia recuerda el carácter bolivariano del Ecuador, pues las banderas actuales de estos tres países tienen como origen común el pabellón que enarboló desde 1806 el precursor de la Independencia, Francisco de Miranda, en sus expediciones libertadoras en Venezuela. Esos mismos colores ondearon durante la “campaña admirable” (1813), en la batalla de Carabobo (1821) y en la batalla del Pichincha (1822), así como en la liberación del Perú (1824); ello explica que un tricolor similar fuese adoptado por la Gran Colombia en 1821 y 1824. Tan significativa trayectoria histórica es la respuesta a la pregunta del escritor cubano José Martí sobre la enseña tricolor de Miranda: “¿Qué tiene esa bandera, que todas las demás la reconocen por madre?”
Escudo
El cóndor con las alas desplegadas que corona el escudo significa el poder y el valor. Los signos zodiacales de aries, tauro, géminis y cáncer que aparecen en la elíptica -símbolo, respectivamente, de los meses de marzo, abril, mayo y junio- representan el período de tiempo que duró la lucha por la libertad ecuatoriana. En la falda de un monte, el Chimborazo, nace un río, el Guayas; el primero representa la belleza y los recursos de la Sierra, y el segundo, los de la Costa. El barco de vapor que aparece sobre el río es el Guayas, construido en los astilleros guayaquileños en 1841, y el caduceo que ostenta a modo de mástil simboliza el comercio y la navegación, fuentes de la riqueza del Ecuador. La rama de palma es el emblema de la paz, y la rama de laurel representa las gestas de los héroes republicanos. Los haces consulares representan la dignidad republicana.
ÍCONOS DE ECUADOR
Mitad del Mundo
En la parroquia de San Antonio del Distrito Metropolitano de Quito, al norte del centro de la ciudad de Quito, se encuentra la Ciudad más pequeña del país: Mitad del Mundo. Allí existe una sede de la Unión de Naciones Suramericanas, el Museo Etnográfico Mitad del Mundo, un planetario y un monumento de 30 metros de altura que está coronado por una esfera metálica que representa a la Tierra. Se construyó entre 1979 y 1982 para marcar el punto donde se consideraba que el Ecuador atravesaba el país. Incluso se trazó una línea desde el centro de la escalera del monumento que da al este para marcar la línea del ecuador. Muchos turistas se han fotografiado cruzando la línea pero en el siglo XX, tras la creación de la tecnología GPS, se ha establecido que la estructura se encuentra a 240 metros al sur del verdadero ecuador. En el interior del monumento hay un museo donde se exhiben elementos de la cultura indígena de Ecuador, como vestimenta, descripciones de los diversos grupos étnicos, y muestras de sus actividades. Alrededor del monumento se ha levantado una réplica de una pequeña ciudad colonial española. En esta ciudad también hay una Plaza Central donde se llevan a cabo espectáculos culturales para los turistas.
Tortugas
Uno de los principales atractivos de Ecuador son las islas Galápagos donde habitan 11 especies distintas de tortugas. Algunas de ellas son exclusivas de determinadas islas. Las más grandes alcanzan las 650 libras y desarrollan un caparazón de casi 4 pies de largo. Hay grandes y pequeñas, la mayoría son extremadamente longevas.
En junio de 2012 murió la última tortuga gigante de la especie Geochelone nigra abingdoni. Tenía más de 100 años y había sido encontrada en 1972 cuando se creía que la especie de tortugas de la isla Pinta estaba totalmente extinguida, como consecuencia de la introducción de cabras ferales que acabaron con la vegetación de la que se alimenta la tortuga, reduciendo la población entera a este único individuo. En diferentes ocasiones se procuró que esta tortuga, llamada “Solitario George”, lograra reproducirse pero nunca se logró. Con una hembra de la especie Geochelone nigra becki del volcán Wolf en la isla Isabela llegó a aparearse después de 15 años de convivencia pero los huevos resultaron infértiles y el “Solitario George” se quedó sin hijos.
Bananas
Ecuador cuenta con las condiciones climáticas, de suelo y de luminosidad adecuadas para producir bananas de excelente calidad. El nivel de producción les ha permitido exportar convirtiéndose en uno de los principales proveedores.
La planta de banano parece un árbol por su tamaño y apariencia pero es una planta herbácea gigante. Puede alcanzar los 7 metros de altura.
Petróleo
La industria petrolera es una de las principales actividades económicas de Ecuador. Comenzó a cobrar importancia a principios del siglo XX en la península de Santa Elena y se convirtió en una de las principales actividades en 1967, cuando se hallaron grandes yacimientos en la Amazonía.
Sombreros
Los sombreros son otros de los elementos que representan a Ecuador, los tradicionales se fabrican de paja toquilla y son creados artesanalmente por los tejedores. Se comercializan en más de 30 países del mundo.des yacimientos en la Amazonía.
Flores
La calidad y diversidad de las flores de Ecuador hace que sean unas de las más preciadas del mundo. Las más características son las rosas de Cayambe. La situación geográfica del país es el factor que permite contar con micro climas y una luminosidad adecuada para cultivar flores únicas con tallos largos, gruesos y totalmente verticales, botones grandes y colores sumamente vivos.
Café
Las condiciones climatológicas y la situación geográfica de Ecuador convierten al territorio en uno de los pocos lugares del mundo donde se pueden producir casi todas las variedades de café verde: Arábigo lavado, Arábigo natural y Robusta.
Los cafetos están bien adaptados a los diferentes ecosistemas de las cuatro regiones del país. Los cultivos de café en Ecuador ocupan una superficie aproximada de 230 mil hectáreas.
En el territorio del actual Ecuador, la Colonia propiamente dicha se inició con una partida de nacimiento de doble sentido: el institucional, con el establecimiento de la Real Audiencia de Quito en 1563, como parte del Estado español; y el social, con la llamada Rebelión de las Alcabalas en 1592, en tanto manifestación de los intereses de los sectores locales “americanos” en contra de la legitimidad y alcance de la autoridad real sobre este espacio.
En cuanto a los límites jurisdiccionales, mientras que por el norte el Obispado sólo iba hasta Pasto, pues Popayán era la capital de otra diócesis, la Audiencia incluía, además de Pasto, a Popayán, Cali, Buenaventura y Buga. Por el sur, ocurría lo contrario: el Obispado se extendía hasta San Miguel de Piura, que en lo civil pertenecía a la Audiencia de Lima. En lo que hace a los territorios del oriente amazónico, antes de 1563 ya se habían iniciado las exploraciones e incursiones a esta zona; en los límites de la Audiencia también se incluyeron “todos los territorios que se descubrieren y poblaren”.
El primer presidente de la Audiencia fue el sevillano Hernando de Santillán, quien llegó a Quito en 1564 e instaló inmediatamente esta institución. El doble imperativo a que obedeció el establecimiento de la Audiencia (facilitar el control administrativo de estos territorios y, sobre todo, regular las relaciones entre la sociedad blanca y la sociedad indígena) se encarnó perfectamente en este personaje. Además del presidente, la Audiencia contó con cuatro o cinco oidores o jueces, un fiscal, un escribano, un relator y un portero.
Entre Lima y Santa Fe
La Audiencia de Quito permaneció como provincia dependiente del Virreinato del Perú desde su creación en el siglo XVI hasta el siglo XVIII, época en la que, frente al adelanto que tuvieron en general las provincias dependientes de los virreinatos americanos y la dificultad que representó para el virrey del Perú ejercer un control más vigoroso en tan dilatado territorio, la Corona decidió crear un nuevo virreinato, el de Santa Fe (Nueva Granada), en mayo de 1717, nombrando como primer virrey a Jorge de Villalonga.
Mediante la cédula de erección de este virreinato se suprimió la Audiencia de Quito, la cual pasó a órdenes de la Audiencia de Santa Fe. Desde ese momento sería esta Audiencia la encargada de conocer y determinar lo relativo a la justicia, el gobierno, la política, el Patronato Regio, la guerra y la real hacienda del distrito de Quito.
En 1723 se suprimió el Virreinato de Santa Fe, con lo cual el territorio de la Audiencia de Quito retornó a los mismos términos en que se hallaba antes de su incorporación al mismo, es decir, pasó a depender del Virreinato del Perú. Posteriormente, fueron varios y extensos los informes que se elaboraron con relación al restablecimiento del Virreinato de Santa Fe; el 20 de agosto de 1739 el rey Felipe V resolvió su restablecimiento y determinó que la Audiencia de Quito perteneciera a él, con el carácter de “subordinada” y dependiente, de manera similar a las demás audiencias con respecto a los virreinatos del Perú y Nueva España. Con los mismos propósitos de política defensiva que se consideraron para la creación primera del Virreinato de Santa Fe en 1717, se determinó entonces por cédula real el control y la defensa militar frente a pretensiones extranjeras.
Por otra parte, ante los innumerables conflictos bélicos que atravesó España en el ámbito europeo durante el siglo XVIII (causantes de crisis que afectaron su economía y su poder), las Reformas Borbónicas de la segunda mitad del siglo supusieron un intento de centralización política y mayor control militar de las colonias americanas. De esta forma, la creación de los virreinatos de Santa Fe y del Río de la Plata (1776) se justificaba por “razones de Estado”.
La Audiencia de Quito, como unidad menor y dependiente, se vio igualmente enmarcada dentro de estos objetivos y, de esta manera, las regiones de su distrito se articularon política y económicamente de una forma más directa a determinada jurisdicción virreinal. Así, por ejemplo, en el ámbito de las economías regionales, la Sierra Norte se articuló en torno al centro minero de Barbacoas, y, por lo mismo, se vinculó al Virreinato de Santa Fe; la Sierra Sur se relacionaba con el Virreinato del Perú; y la Costa, mediante el auge de su producción cacaotera (1774), permitió ampliar el mercado interno interregional vinculado a las provincias santafereñas o a las pertenecientes al virreinato peruano.
Este constante vaivén por el que atravesó la Audiencia de Quito entre los virreinatos del Perú y Santa Fe permite advertir el verdadero carácter de los cambios político-jurisdiccionales y territoriales que atravesó esta institución durante la Colonia. Esto, a su vez, supone comprender que el proceso de organización de este espacio da cuenta de una “historia jurisdiccional” más que de una “historia de límites”.
“Pueblo donde la libertad es efecto de las leyes y las leyes son sagradas, por fuerza es pueblo libre”. Juan MontalvoLa Primera Constitución de Ecuador aparece en 1830, cuando el país se desligó de la Gran Colombia y formó una república independiente. Se hizo necesario, entonces, contar con una Ley de Leyes que norme la forma de gobierno que asumiría y cómo serían las relaciones del Estado con el ciudadano.
¿Qué es una constitución?
La constitución es la ley fundamental de un Estado soberano, establecida o aceptada como guía para su gobernación, y puede ser escrita u oral. Su objetivo es establecer los límites y definir las relaciones entre los tres poderes del Estado: legislativo, ejecutivo y judicial, y garantizar los derechos ciudadanos. Casi la totalidad de los países poseen constituciones escritas.
¿Sabías qué...?
La Constitución de 1830 en Ecuador contiene el Preámbulo, 75 artículos, divididos en 9 títulos, 2 artículos transitorios y la Disposición Final.
República: Estado y ciudadanos
La República es un sistema político fundamentado en el poder de la constitución y la igualdad ante la ley. En ella se respetan los derechos de los ciudadanos y las libertades civiles y se escogen los gobernantes bajo el principio de legitimidad y soberanía.
Constitución y república
Las repúblicas requieren, para su funcionamiento, de las constituciones, ya que debe existir una norma jurídica que regule aspectos esenciales como la forma de gobierno, el mecanismo para su elección, las personas con derecho al voto, la definición de ciudadano y sus derechos y obligaciones con relación al Estado, así como otros aspectos esenciales para mantener la soberanía.
La gran Colombia
Con la unión, en 1819, de Ecuador a Colombia y Venezuela se conformó la Gran Colombia. Once años después se separó Guayaquil y se formó y consolidó la República de Ecuador, mediante su anexión a Quito y Cuenca. Para ello fue necesario conformar una Asamblea Constituyente y elaborar la carta magna que regiría los destinos de la naciente República del Ecuador.
1830: La nueva República
Lo que es el actual territorio de Ecuador formaba parte del Distrito Sur de la Gran Colombia, que se separó y conformó el nuevo país. En la ciudad de Riobamba, por espacio de 45 días, se reunió el Congreso Constituyente, que inició sus funciones a partir del 14 de agosto, con la presencia de 21 diputados, o sea siete representantes por cada uno de los departamentos que conformaron el territorio (Cuenca, Guayaquil y Quito).
Una Constitución efímera
La primera Constitución de Ecuador o Constitución de 1830 tuvo una duración corta: fue sustituida por la de 1835.
Juan José Flores
La principal figura en todo este proceso lo constituyó Juan José Flores, natural de Puerto Cabello, en Venezuela, nacido el 19 de julio de 1800. Desde muy joven se vinculó a la figura de Simón Bolívar, al que le demostró confianza extrema. Entró al ejército español a la temprana edad de 15 años, pasando luego a servir en las filas insurrectas por la causa de la libertad. Se destacó en la Batalla de Tarqui, donde obtuvo el grado de general de división. Murió el primero de octubre de 1864, en la isla Puná, perteneciente al territorio actual de Guayaquil.
Un mérito de Flores
En el año 1832, bajo el gobierno de Juan José Flores se incorporan las Islas Galápagos al territorio de Ecuador, que se conservan como parte de la nación hasta el momento.
La primera Constitución
La primera constitución de Ecuador se aprobó en la Asamblea Constituyente que sesionó en la ciudad de Riobamba, entre los días 14 de agosto y 11 de septiembre de 1830, fecha en que se promulgó la Carta Magna. Los criterios fueron encontrados y las discusiones se prolongaron al debatir temas controversiales como la forma que tendría el gobierno, las características y requisitos para ser elegido presidente, los ciudadanos que tendrían derecho al voto y la relación del Estado con la Iglesia.
¿Sabías qué...?
La inestabilidad política del Ecuador ha sido la causa de la existencia de 20 constituciones en su historia republicana.
En el nombre de Dios
La nueva constitución adoptada se inició con un Preámbulo en el que se invocó a Dios, como autor y legislador de la sociedad. Su artículo 8 expresó textualmente:
“La Religión Católica, Apostólica y Romana es la Religión del Estado. Es un deber del Gobierno, en ejercicio del patronato, protegerla con exclusión de cualquiera otra”.
La forma de Gobierno
La nueva República significó un logro en la conformación del Estado Nacional, al agrupar bajo una misma bandera los departamentos de Azuay, Guayas y Quito, con lo que se consolidó la unidad política y territorial de una nación que perdura hasta la actualidad. El Estado de Ecuador, mediante el Artículo 2 de la Constitución, formó parte de la República de Colombia. El Gobierno adoptó las características de popular, representativo, alternativo y responsable.
Nacionalidad y ciudadanía
Para los legisladores y según el Artículo 9, se consideraron ciudadanos ecuatorianos:
Los nacidos en el territorio y sus hijos.
Los naturales de los otros Estados de Colombia, avecindados en el Ecuador.
Los militares que estaban en servicio del Ecuador al tiempo de declararse en Estado independiente.
Los extranjeros, que eran ciudadanos en la misma época.
Los extranjeros, que por sus servicios al país obtengan carta de naturaleza.
Los naturales, que habiéndose domiciliado en otro país, vuelvan y declaren ante la autoridad que determine la ley, que desean recuperar su antiguo domicilio.
La Constitución, en este y en otros aspectos, siguió los principios esbozados en la Declaración de Derechos del Hombre y el Ciudadano, que resultó de la Revolución Francesa.
Las elecciones
Las elecciones adoptaron la forma de la representatividad, o sea los elegidos en los diferentes cantones concurrirían a la Asamblea Provincial, siendo elegidos por un período de cuatro años. Las diferentes Asambleas eligen a los Diputados de las Provincias y los suplentes.
La división de poderes
La nueva nación surgió bajo el principio de la división de poderes. Se conformó un poder ejecutivo, con un Jefe de Estado, denominado Presidente del Estado del Ecuador, elegido por un periodo de cuatro años; el Vice-Presidente; los ministros de Estado, de Hacienda y de Guerra y Marina y el Consejo de Estado, que auxiliaría al Presidente en la administración y estaría compuesto por el Vice-Presidente, el Ministro Secretario, el Jefe de Estado Mayor General, un Ministro de la Alta Corte de Justicia, un eclesiástico respetable y tres vecinos de probada conducta.
El poder legislativo, estaría compuesto por el Congreso de Diputados (10 por cada departamento, hasta que se definiera si este número sería fijo o dependería de la cantidad de habitantes).
Por su parte, el poder judicial, regulado en el Título V de la Carta Magna, que en su Sección I estableció lo relativo a las Cortes de Justicia, las Cortes de Apelación y los demás tribunales y juzgados.
Requisitos para ser elector
1. Ser sufragante parroquial.
2. Haber cumplido veinticinco años.
3. Ser vecino de una de las parroquias del Cantón.
4. Gozar de una renta anual de doscientos pesos que provenga de bienes raíces, o del ejercicio de alguna profesión o industria útil.
Artículo 33
Requisitos para ser Presidente:
1. Nacer en Ecuador o ser colombiano al servicio del país al tiempo de declararse Estado independiente, prestando al Estado del Ecuador grandes servicios, casado con una ecuatoriana de nacimiento y que tenga propiedades raíces valoradas en más de treinta mil pesos.
2. Tener treinta años de edad.
3. Gozar de reputación general por su buena conducta.
Libertad de expresión
El artículo 64 se refirió a que todo ciudadano puede expresar y publicar libremente sus pensamientos por medio de la prensa, respetando la decencia y moral pública, y sujetándose siempre a la responsabilidad de la ley.
Eugenio Espejo no es sólo el precursor de la independencia americana, sino el crisol de la nacionalidad ecuatoriana. En él está presente el mestizaje en sus vertientes indígena, negra y española. Como médico conjugó los conocimientos propios de la sabiduría popular y natural de los aborígenes con los adelantos científicos de Europa. Fue el primer gran pensador de Ecuador y uno de los principales intelectuales de América. Su saber ilustrado abarcó diversas ramas como la política, la economía, la agricultura, la medicina, la religión, la educación, el arte y los oficios. Acosado por el régimen colonial, murió en la cárcel, en 1795.
La época
Eugenio Espejo nació en 1747 y falleció en 1795. Vivió 47 años durante la más agitada etapa de la historia de Quito, donde se gestaron movimientos por la reivindicación de los valores autóctonos americanos y quiteños, en contraposición a las ideas colonialistas de los peninsulares españoles.
¿Sabías qué...?
El Cabildo de Quito, en 1785, le solicitó a Eugenio Espejo la elaboración de un método para evitar la viruela. En él mencionó como causas las de tipo sociales y culturales, generando una gran polémica, por lo que fue encarcelado en 1787 y liberado inmediatamente por ausencia de pruebas.
La conciencia criolla se reflejó en la primera obra Historia del Reino de Quito que fue escrita por el padre jesuita Juan de Velasco, expulsado al exilio desde Riobamba, donde oficiaba. En este importante libro relató los hechos más connotados acontecidos en lo que hoy es Ecuador. En la descripción de sus recursos naturales y en la exaltación de sus valores encontraron los lectores los elementos formativos de la conciencia criolla.
La raza de Eugenio
Espejo no es el verdadero apellido de Eugenio. En realidad nació de padre indígena y madre mulata. Su padre fue un indígena quechua, procedente de Cajamarca, en Perú, conocido como Luis Chushig, quien trabajaba como ayudante del fraile José del Rosario, que era médico en el Hospital La Misericordia, de Quito. Su madre fue María Catalina Aldaz y Larraincar, natural de Nueva Granada, residente en Quito al igual que su padre.
Intelectual y revolucionario
Eugenio Espejo no fue ni revolucionario ni subversivo, era un intelectual que buscaba el bien de Quito y el despertar de su espíritu adormilado y resignado a lo malo.
Luis Benítez, como fue inscripto, aprendió a leer y escribir de forma subversiva, ya que estaba prohibido para los indígenas. Con ese apellido contrajo matrimonio con Catalina Aldás. El apellido Santa Cruz y Espejo no está aún esclarecido, pero se presume por los historiadores que fue puesto por algún español al ser evangelizado.
En una sociedad tan racista como la que le tocó vivir, Eugenio Espejo tuvo que cambiar sus apellidos para poder ingresar a los colegios y universidades, y realizar estudios. Sus dotes de inteligencia y sus ideas políticas permitieron que los ricos criollos le ayudaran en el empeño por graduarse de médico primero y luego abogado.
Los orígenes del genio
A Francisco Javier Eugenio de Santa Cruz y Espejo le tocó vivir una etapa poco favorable para el desarrollo del intelecto. Una década antes de venir al mundo, la Misión Geodésica, compuesta por científicos franceses y españoles de renombre que tenían el objetivo de medir un meridiano y determinar el grado cero, visitó Quito. Su visita a Quito permitió un despertar de las ideas renovadoras en las ciencias y la educación, sin embargo su influencia en 1747 se había disuelto ya. Otro acontecimiento desfavorable para Espejo fue la expulsión de los jesuitas, que representaron lo más avanzado de las ideas y los métodos de enseñanza de la época.
Le tocó, entonces, a Eugenio Espejo educarse y formarse en colegios de otras órdenes más dogmáticas y retrógradas. Las ideas de profesores como Juan Magnin, Juan de Hospital y Miguel Antonio Rodríguez, quedaron en el olvido. Por tanto, Espejo sufrió las clases monótonas y carentes de interés, con métodos escolásticos y memoristas, que tanto debieron molestarlo. No obstante, se graduó de doctor en Medicina y de licenciado en Derecho Civil y Canónico.
Cronología de una vida de dificultades
El 21 de febrero de 1747 es bautizado en Quito.
Entre 1759 y 1762 estudia con los jesuitas.
En 1762 se gradua de maestro de Filosofía.
En 1764 ocurren dos hechos significativos en su vida: muere su hermano, víctima de la viruela y se produce la Rebelión de los Estancos.
En 1765 inicia los estudios de Medicina en el colegio dominico San Fernando.
Se gradua de doctor en Medicina en 1767, año que coincide con el de la expulsión de los jesuitas del territorio.
En 1767 inicia los estudios de Derecho Civil y Canónico en la Universidad de Santo Tomás.
Se titula de Licenciado en Derecho en 1770.
Entre 1770 y 1772 ejerce la Medicina.
Publica, en 1772, El retrato de Golilla, sátira donde criticó al Rey Carlos III y al marqués de la Sonora.
El 22 de noviembre de 1778 muere su padre.
En 1783 se dicta una orden de prisión en su contra, por lo que es apresado y encarcelado por espacio de 45 días.
Publica un método para combatir la viruela.
Es acusado nuevamente por la autoría de El retrato de Golilla, por lo que guardó prisión.
Viaja a Colombia y regresa en 1790, sobreseído de los cargos en su contra.
Funda la Sociedad Patriótica de Amigos del País, en 1791.
Ese mismo año es nombrado Director de la Primera Biblioteca Pública de Quito.
Recibe la tercera orden de prisión y es encarcelado, por parte del presidente Muñoz de Guzmán, el 30 de enero de 1895.
Se solicita su excarcelación por problemas de salud, el 27 de marzo.
Muñoz de Guzmán no atiende la orden y Eugenio Espejo muere el 27 de diciembre de ese año.
El periodista y escritor
Entre los años 1779 y 1780 surgió, de la pluma de Eugenio Espejo, la que el erudito Menéndez y Pelayo calificó como la primera crítica estructurada compuesta en América de habla castellana, bajo el título de “El Nuevo Luciano de Quito”. En realidad este fue el primer tomo de una trilogía que incluyó a “Marco Porcio Catón”, en 1780, y a “La Ciencia Blancardina”, en 1781. La circulación manuscrita de esta magna obra despertó mucha curiosidad e interés en los quiteños.
“El Nuevo Luciano de Quito” hurgó en todos los sectores de la vida cultural y educativa de Quito, haciendo un análisis pormenorizado de las instituciones y personajes. Se convirtió en la obra más controversial del momento, no sólo por su carácter crítico, sino por la fina ironía utilizada en su redacción. Se escribió en forma de diálogo, en el que el Doctor Mera, defensor de las ideas de la Ilustración, se enfrenta al Doctor Murillo, representante de las ideas retrógradas y conservadoras del pensamiento tradicional y escolástico.
Esta obra produjo un efecto de debate y enfrentamiento entre los hombres cultos del entorno quiteño y alcanzó al propio Espejo, que sufrió prisión en más de una ocasión y, finalmente murió en ese lugar, sin el perdón de las autoridades, a pesar de la sentencia revocatoria del juez.
Las prisiones no pueden acallar al rebelde
Obras escritas por Eugenio Espejo
El nuevo Luciano (1779)
Marco Porcio Catón (1780)
Retrato de Golilla (1780)
Ciencia Blancardilla (1781)
Cartas riobambenses (1787)
Cartas latacungueñas (1788)
Carta a Europhilia (1792)
Pasquines de “Las banderitas” (1794)
Dedicatoria de Trato de Longino (1781)
Reflexiones sobre la viruela (1785)
Discurso de la concordia (1789)
Primicias de la Cultura de Quito (1792)
Testamento (1795)
También escribió cartas, defensas, oficios, apelaciones, solicitudes, agradecimientos, sermones y panegíricos.
Espejo: periodista
Eugenio Espejo tuvo el mérito de editar el primer periódico de la historia de Ecuador. Bajo el nombre de “Primicias de la Cultura de Quito”, editado por el apoyo de la Escuela de la Concordia. Circuló por primera vez el 5 de enero de 1792. El contenido de la publicación era diverso y variado. Iba desde reflexiones y disquisiciones filosóficas, hasta consejos de buenas costumbres, pasando por recomendaciones y noticias sobre salubridad, higiene y otros temas de interés para los quiteños.
En el periódico se dio una visión crítica, aunque real del estado de la cultura y la educación, enfrentó la dura y difícil realidad social y económica de Quito. Analizó las causas del estado en que se encontraba el territorio, y se las atribuyó a la insensibilidad de las autoridades, los bajos incentivos para los productores y las epidemias que diezmaron a la población.
“Primicias…” tenía una frecuencia de aparición de 15 días. El costo de cada ejemplar, de un pliego completo, era de un real y medio. La publicación no tuvo una buena acogida entre los quiteños, al contrario, su publicación fue recibida con frialdad y hasta con rechazo, llegando incluso a que su autor intelectual fuera perseguido y duramente criticado.
Entre las causas del rechazo estuvieron el lenguaje rebuscado y elitista usado por Espejo. Cuestión contradictoria en él que había reconocido con anterioridad que existía poca instrucción y educación en la población. El periódico tuvo una corta existencia. Su última publicación (la séptima) fue el día 29 de marzo de 1792.
El barón de Carondelet
El barón Héctor de Carondelet, como gobernador de Quito, desarrolló una política en favor de los criollos y luchó por una mayor autonomía, con la creación de una Capitanía General.
Anonimato: cobardía o estrategia
Eugenio Espejo se impuso como objetivo la promoción de una educación que debía responder a la solución de los problemas sociales y que no sólo fuera instrumento de divulgación del saber científico. La educación debía formar nobles ciudadanos para el servicio a la patria, contribuir a la creación de un espacio para la literatura, que permita discutir los problemas políticos y sociales y ayudar al mejoramiento de Quito.
En Eugenio Espejo la educación y el periodismo se superponen: el periodismo es, ante todo, un vehículo para la educación ciudadana. Por ello, el uso del anonimato satírico en Espejo representó una estrategia: “…despertar a los ingenios quiteños y alertarlos sobre el estado de barbarie social en que viven”. En Espejo se da la dicotomía entre barbarie y civilización, entendida la primera como “…la indiferencia en la que han caído los letrados con respecto a las necesidades sociales del pueblo” y que deberá combatirse. En este sentido Espejo fue un precursor en Ecuador.
El oficio de escritor para el intelectual quiteño era sinónimo de compromiso. Significó la separación de la Iglesia del poder del príncipe y, por otra parte, afiliarse a la lucha contra los problemas sociales que tenía el pueblo. En él la literatura tenía un papel social de servicio a la comunidad y su fin último lo constituía el objetivo político más universal: reformar las costumbres de una época. Para lograr esos fines cualquier medio era válido, por eso se escudó en el anonimato.
¿Sabías qué...?
El Banco Central del Ecuador realizó la emisión de la Serie GZ el 8 de junio de 1988 por el valor de 500 sucres, realizando así un homenaje póstumo al precursor de la independencia de América.