Tuberculosis bovina

¿Qué es?

Es una enfermedad infecto-contagiosa producida por una bacteria que padecen los bovinos (vacas y toros) y se transmite a otros animales domésticos (chanchos, ovejas, cabras, caballos, perros, gatos), animales silvestres y al hombre.

Es una enfermedad de riesgo profesional para trabajadores rurales, tamberos, veterinarios, trabajadores de la industria frigorífica y carniceros.

¿Cómo se transmite?

La vía más común de contagio es al ingerir leche cruda (no pasteurizada) o comer productos lácteos derivados de leche cruda. También las bacterias pueden ingresar al cuerpo al respirar o por lesiones en la piel (contacto directo), aunque esta vía de contagio es menos frecuente.

¿Cuáles son los síntomas?

En general, las personas infectadas no muestren síntomas hasta que la infección se desarrolla en pulmones, en los riñones, la medula e incluso en el cerebro.
Los síntomas de la infección en los pulmones suelen incluir: fiebre, dolor en el pecho y tos. A menudo, las personas infectadas al toser expulsan sangre.

¿Cómo se trata?

Es importante consultar al médico ante la aparición de síntomas, en especial si se trata de trabajadores rurales, tamberos, veterinarios, trabajadores de la industria frigorífica y carniceros.
El tratamiento lo debe indicar un médico. Es en base a antibióticos por períodos prolongados.

¿Cómo se puede prevenir?

Para evitar esta enfermedad es importante:
• No beber leche cruda ni consumir productos lácteos que contengan leche cruda.
• Ante la manifestación de síntomas de enfermedad en bovinos, consultar a un veterinario y separar a aquellos animales que están infectados del rodeo.

Fuente: Ministerio de Salud – Presidencia de la Nación (Argentina)

http://www.msal.gob.ar/index.php/component/content/article/48/86-tuberculosis-bovina#sthash.7ts2icOd.dpuf

Sangre

La sangre es un tejido líquido que recorre el organismo, a través de los vasos sanguíneos, transportando células y todos los elementos necesarios para realizar sus funciones vitales. La cantidad de sangre está en relación con la edad, el peso, sexo y altura. Un adulto tiene entre 4,5 y 6 litros de sangre, el 7 % de su peso.

¿Qué funciones cumple?

Como todos los tejidos del organismo la sangre cumple múltiples funciones necesarias para la vida como la defensa ante infecciones, los intercambios gaseosos y la distribución de nutrientes.

Para cumplir con todas estas funciones cuenta con diferentes tipos de células suspendidas en el plasma.

Todas las células que componen la sangre se fabrican en la médula ósea. Ésta se encuentra en el tejido esponjoso de los huesos planos (cráneo, vértebras, esternón, crestas ilíacas) y en los canales medulares de los huesos largos (fémur, húmero).

La sangre es un tejido renovable del cuerpo humano, esto quiere decir que la médula ósea fabrica, durante toda la vida, células sanguíneas ya que éstas tienen un tiempo limitado de vida. Esta “fábrica”, ante determinadas situaciones de salud, puede aumentar su producción en función de las necesidades. Por ejemplo, ante una hemorragia, aumenta hasta siete veces la producción de glóbulos rojos, y ante una infección aumenta la producción de glóbulos blancos.

¿Cómo se compone?

  • Plasma
  • Glóbulos rojos
  • Glóbulos blancos
  • Plaquetas

El plasma sirve como transporte para los nutrientes y las células sanguíneas. Contiene diversas proteínas: inmunoglobulinas, albúmina y factores de coagulación, que son de utilidad en la terapia transfusional.

Los glóbulos rojos transportan el oxígeno de los pulmones hacia los tejidos y captan el anhídrido carbónico producido en los tejidos que es eliminado luego por las vías respiratorias.

Los glóbulos blancos defienden al organismo contra las infecciones bacterianas y virales.

Las plaquetas impiden las hemorragias, favoreciendo la coagulación de la sangre.

Grupos sanguíneos

A pesar de que la sangre cumple las mismas funciones en todos los individuos, no es idéntica en todos. Existen diferentes “tipos” de sangre. Esta característica es genética, es decir, nacemos con una sangre que pertenece a determinado grupo. Por lo tanto, nuestro organismo acepta sólo la sangre del mismo grupo (la sangre compatible) y rechaza la de los otros grupos, con reacciones que pueden llegar a ser muy graves.

Los sistemas de grupos sanguíneos más conocidos son el Sistema ABO (grupoA, grupo B, grupo AB y grupo O) y el Sistema Rhesus, conocido como Factor Rh, (Positivo o Negativo). Estos Sistemas están presentes simultáneamente en todos los individuos. Cuando se habla de Grupo y Factor nos referimos al Sistema ABO y Rh.

La sangre no se puede fabricar. En Argentina, como en todo el mundo, dependemos de la generosidad de los ciudadanos para que los centros de atención de la salud puedan realizar trasplantes, operaciones y tratamientos oncológicos, entre otros.

La sangre no se puede almacenar indefinidamente ya que caduca: las plaquetas se tienen que utilizar antes de cinco días, los glóbulos rojos antes de 42 días y el plasma antes de un año.

Fuente: Ministerio de Salud – Presidencia de la Nación (Argentina)

http://msal.gob.ar/index.php/component/content/article/48/303-sangre#sthash.mZ3ZA8Zg.dpuf

Leishmaniasis visceral

La leishmaniasis visceral es una enfermedad grave que afecta a personas y perros. En Misiones, Formosa, Corrientes y Santiago del Estero se han presentado casos de esta enfermedad.

¿Cómo se transmite?

Se transmite a través de la picadura de un insecto muy pequeño (2 a 4 mm) denominado flebótomo o conocido también como torito, plumilla o carachai. Cuando este insecto pica a un perro infectado con el parásito que causa leishmaniasis, al tomar su sangre también lo ingiere. La próxima vez que pique a otro perro o persona, el parásito pasará a ellos infectándolos. No se transmite persona a persona ni con el contacto directo con los perros.

¿Cuáles son los síntomas?

En las personas, la leishmaniasis visceral afecta al bazo, hígado, médula ósea y otros órganos. Los síntomas que produce son fiebre prolongada, aumento de tamaño del abdomen, pérdida de apetito, disminución de peso, tos seca, diarrea y vómitos.

En los perros los síntomas que produce son decaimiento, falta de apetito, falta de pelo y descamación especialmente alrededor de los ojos y en el hocico, crecimiento exagerado de las uñas, úlceras en la piel y hemorragia nasal.

¿Cuál es el tratamiento?

El tratamiento incluye el tratamiento farmacológico y el sintomático y de las complicaciones de la enfermedad. Se recomienda la internación de los pacientes durante los primeros 7 a 10 días para su seguimiento clínico y terapéutico estricto. El Ministerio de Salud de la Nación provee la medicación en forma gratuita a todo el país.

¿Cómo se puede prevenir?

La primordial medida preventiva es erradicar el flebótomo de los hogares y evitar que los perros se infecten, y detectar los síntomas que en el perro pueden hacer sospechar leishmaniasis. Para eso:

– Erradiquemos hojas y malezas de los alrededores de las viviendas y la basura acumulada en nuestras casas.
– Mantengamos el terreno alrededor de la vivienda libre de malezas y corrales, y los animales domésticos y mascotas alejados de la vivienda durante la noche.
– Utilicemos repelentes para insectos, mosquiteros o telas metálicas.
– Usemos camisas de manga larga y pantalones o coloquémonos repelente en el caso de transitar por zonas selváticas o con mucha vegetación.
– Se deben limpiar los lugares donde habitan los perros y evitar que sean picados por los flebótomos mediante collares o pipetas repelentes que deben ser renovadas según las instrucciones.
– Debemos estar atentos si nuestra mascota presenta alguno de estos síntomas y si aparece llevarlo al veterinario:

a) Caída del pelo especialmente alrededor de los ojos y las orejas.
b) Fatiga.
c) Pérdida de peso.
d) Seborrea escamosa (como caspa).
e) Crecimiento exagerado de las uñas.
f) Ulceras en la piel.
g) Hemorragia nasal.

– Se debe evitar el traslado de perros sanos e infectados desde y hacia zonas con leishmaniasis visceral.

 

Fuente: Ministerio de Salud – Presidencia de la Nación (Argentina)

http://msal.gob.ar/index.php/component/content/article/48/110-leishmaniasis-visceral#sthash.oTHcIia2.dpuf