Nutrientes de las frutas

Las frutas son parte importante de una dieta saludable, y la variedad es tan importante como la cantidad. Comer fruta no solo proporciona nutrientes vitales para la salud y el mantenimiento de nuestro cuerpo, sino que también ayuda a reducir el riesgo de contraer enfermedades como la diabetes, la obesidad, las enfermedades cardíacas y el cáncer.

Las frutas tienen menos calorías por taza que otros alimentos.

Las dietas ricas en alimentos que contienen fibra, como la mayoría de las frutas, pueden reducir el riesgo de constraer muchas enfermedades. Las investigaciones muestran que debido a que tienen menos calorías que otros alimentos, pueden ser útiles para ayudar a reducir la ingesta total de calorías.

Las frutas pueden ser excelentes fuentes de nutrientes importantes, como:

carbohidratos

La principal fuente de calorías de la fruta son los carbohidratos. El contenido de carbohidratos y calorías de la fruta variará según el tamaño de la porción y el tipo de fruta.

Una porción es una fruta fresca de tamaño pequeño a mediano, 1/2 taza de fruta enlatada o 1/4 taza de fruta seca. Cada porción tiene aproximadamente 15 gramos de carbohidratos y 60 calorías. Las calorías y los carbohidratos de la fruta pueden acumularse rápidamente.

Sin embargo, algunas frutas son naturalmente más bajas en calorías y carbohidratos que otras. Por ejemplo, una taza de ruibarbo fresco contiene 26 calorías y 6 gramos de carbohidratos. Por el contrario, una taza de uvas contiene 110 calorías y 29 gramos de carbohidratos.

Los cítricos contienen carbohidratos simples como la fructosa, la glucosa y la sacarosa, así como ácido cítrico que también puede proporcionar una pequeña cantidad de energía.

fibra

La fruta fresca es una buena fuente de fibra. El contenido de fibra de frutas varía en cada una de ellas:

Bayas (moras y frambuesas): contienen 8 gramos de fibra por porción de una taza.

Uva, toronja y melón: contienen entre 1 y 2 gramos de fibra por porción.

Cáscaras comestibles de frutas como manzanas, peras y melocotones: proporcionan una buena fuente de fibra insoluble, la fibra dietética, que puede ayudar a prevenir el estreñimiento.

Manzanas y naranjas: contienen fibra soluble que ha demostrado que puede reducir los niveles de colesterol en sangre.

Potasio

Las frutas también son una buena fuente de potasio. El potasio es un mineral esencial que trabaja para mantener el equilibrio hídrico y ácido del cuerpo. Como electrolito importante, desempeña un papel en la transmisión de los impulsos nerviosos a los músculos, en la contracción muscular y en el mantenimiento de la presión arterial normal.

Las frutas ricas en potasio incluyen kiwi, papaya, melón, albaricoques, duraznos, melón dulce, plátanos y granadas.

Una naranja mediana y un vaso de jugo de naranja de 225 ml proporcionan aproximadamente 235 mg y 500 mg de potasio.

vitaminas

Las vitaminas antioxidantes, como la vitamina A y la vitamina C presentes en las frutas, pueden ayudar a prevenir el cáncer y los efectos del envejecimiento al neutralizar los radicales libres que pueden dañar las células.

  • La vitamina A mantiene los ojos y la piel sanos y ayuda a proteger contra infecciones.
  • La vitamina C juega un papel clave en la formación de colágeno, un componente principal de gran parte del tejido conectivo del cuerpo.

Para una ingesta adecuada de vitaminas esenciales, se debe incluir en la dieta al menos una fruta rica en vitamina A   y al menos una rica en vitamina C todos los días.

Frutas ricas en vitamina A Frutas ricas en vitamina C
Guayaba Piña
Sandía Naranja
Pomelo Arándanos
Papaya Mora
Melón Mango
Albaricoque Toronja
Mandarina Frambuesas
Mango Kiwi

Folato

El folato es una vitamina soluble en agua esencial para la producción y el crecimiento de nuevas células. Ayuda en la producción de ADN, ARN y glóbulos rojos maduros, que en última instancia previenen la anemia.

Las dietas saludables con una cantidad adecuada de folato pueden reducir el riesgo de que una mujer tenga un hijo con un defecto cerebral o de la médula espinal.

¿Sabías qué?
Un vaso de 225 ml de jugo de naranja proporciona 75 mcg de ácido fólico.

Fitoquímicos

Estos compuestos naturales que se encuentran en las plantas tienen una amplia gama de efectos fisiológicos y pueden ayudar a proteger contra diversas enfermedades crónicas, incluido el cáncer y las enfermedades cardíacas. Varias clases de fitoquímicos como los monoterpenos, los limonoides, los flavonoides, los carotenoides y el ácido hidroxicinámico se han aislado de los cítricos.

otros nutrientes

  • Calcio: es esencial para los huesos y para mantener los dientes sanos. También es necesario para el funcionamiento normal de músculos, nervios y algunas glándulas.
  • Hierro: necesario para la sangre y el funcionamiento normal de todas las células.
  • Magnesio: necesario para mantener los huesos sanos y está involucrado con más de 300 enzimas del cuerpo. Los niveles inadecuados pueden provocar calambres musculares y presión arterial alta.
  • Sodio: necesario para el funcionamiento normal de las células en todo el cuerpo.
Las dietas que incluyen grandes cantidades de sodio pueden afectar los niveles de presión arterial.
Recomendaciones

Para obtener el mejor valor nutricional de la fruta se deben elegir frutas enteras o en trozos en lugar de jugo. Es recomendable comprar frutas frescas de temporada cuando pueden ser menos costosas y tienen mejor sabor. Algunas frutas, como los plátanos y la mayoría de las frutas congeladas, son asequibles durante todo el año.

Reflujo gástrico

En la entrada del estómago se encuentra una válvula en forma de anillo muscular llamado esfínter esofágico inferior. Normalmente, éste se cierra tan pronto como el alimento pasa a través suyo, si no lo hace completamente o si se abre frecuentemente, el ácido producido por el estómago puede desplazarse a través del esófago.

El paso del ácido a través del esófago genera síntomas como fuerte dolor en el pecho o una sensación de ardor en la garganta. Si los síntomas de reflujo ácido ocurren más de dos veces por semana, se debe comenzar a tratar como la enfermedad por reflujo gástrico o gastroesofágico.

La acidez estomacal es una molestia, una sensación ardiente que ocurre en el esófago y se siente detrás del área del esternón.
La acidez estomacal es una molestia, una sensación ardiente que ocurre en el esófago y se siente detrás del área del esternón.

Causas

Una causa común de esta enfermedad es una anomalía del estómago llamada hernia hiatal. Ésta ocurre debido a que la parte superior del estómago y el esfínter esofágico se mueven por encima del diafragma.

Normalmente, el diafragma ayuda a mantener el ácido en el estómago. Pero si la persona tiene una hernia hiatal, el ácido puede moverse hacia el esófago y causar síntomas incómodos de reflujo.

De esta manera el reflujo ácido llega al esófago.
De esta manera el reflujo ácido llega al esófago.

Los factores de riesgo comunes para la enfermedad por reflujo gástrico son:

  • Consumo de grandes comidas o acostarse justo después de una comida.
  • Sobrepeso u obesidad.
  • Alta ingesta de sal de mesa.
  • Bajo consumo de fibra dietética.
  • Bajos niveles de ejercicio físico.
  • Meriendas cerca de la hora de acostarse.
  • Ingesta de ciertos alimentos, como cítricos, tomate, chocolate, menta, ajo, cebolla o alimentos picantes y/o grasos.
  • Consumo de bebidas como alcohol, bebidas carbonatadas, café o té.
  • Fumar
  • Embarazo
  • Uso de aspirina, ibuprofeno, relajantes musculares o medicamentos para la presión arterial.

Síntomas

Si el episodio de reflujo gástrico es inofensivo, aislado o si es persistente, por lo general produce el mismo síntoma principal, la acidez; por lo general, ésta empeora al momento en el que la persona se acuesta o se inclina.

El líquido estomacal puede llegar a la parte posterior de la garganta en algunos casos, lo que produce un sabor amargo.

Además de la acidez, con la enfermedad por reflujo gastroesofágico se presentan los siguientes síntomas:

  • Tos seca y persistente.
  • Asma y neumonía recurrente.
  • Náuseas y vómitos.
  • Problemas en la garganta como dificultad o dolor al tragar, ronquera o laringitis.
  • Dolor abdominal o en el pecho.
  • Erosión dental.
  • Mal aliento.

Otros síntomas de la enfermedad incluyen:

  • Vómitos y heces con sangre.
  • Eructos recurrentes.
  • Hipo que no se detiene.
  • Pérdida de peso sin causa conocida.
Aunque el reflujo ácido es común y no peligroso, la acidez estomacal crónica puede traer complicaciones.
Aunque el reflujo ácido es común y no peligroso, la acidez estomacal crónica puede traer complicaciones.

¿Cómo se diagnostica?

Si se presentan los síntomas anteriormente descritos, se debe recurrir al médico; éste puede ordenar exámenes para confirmar un diagnóstico y buscar otros problemas. Las pruebas que comúnmente se realizan son:

  • Trago de bario o esofagograma para detectar úlceras o un estrechamiento del esófago.
  • Manometría esofágica para comprobar la función del esófago y del esfínter esofágico inferior.
  • Monitorización del pH para verificar la presencia de ácido en el esófago.
  • Endoscopia o gastroscopia para detectar problemas en el esófago o el estómago.
Se puede tomar una biopsia durante la endoscopia para detectar infecciones o anormalidades.
Se puede tomar una biopsia durante la endoscopia para detectar infecciones o anormalidades.

Tratamiento

En muchos casos, el cambio en el estilo de vida es todo lo que necesita una persona para controlar los síntomas de la enfermedad por reflujo gástrico.

Los antiácidos pueden neutralizar el ácido del estómago; sin embargo, en muchos casos pueden causar diarrea o estreñimiento, especialmente si se usan en exceso. Por lo que es recomendable utilizar los que contengan hidróxido de magnesio e hidróxido de aluminio.

Los antiácidos proporcionan un alivio rápido pero a corto plazo, al reducir la acidez del contenido estomacal.
Los antiácidos proporcionan un alivio rápido pero a corto plazo, al reducir la acidez del contenido estomacal.

¿Qué se recomienda?

Una de las maneras más eficaces para tratar la enfermedad de reflujo ácido es evitar los alimentos y bebidas que desencadenan los síntomas y además se recomienda:

  • Consumir pequeñas cantidades de comida con más frecuencia durante todo el día.
  • Dejar de fumar.
  • Comer por lo menos 3 horas antes de acostarse.
  • Tratar de dormir en una silla para las siestas diurnas.
  • No usar ropa apretada o cinturones ajustados.
  • Tomar medidas para bajar de peso en caso de exceso de peso u obesidad.

Alimentos que pueden ayudar a reducir los síntomas

  1. Verduras de hojas verdes: son bajas en grasa y azúcar y ayudan a reducir el ácido del estómago.
  2. Jengibre: tiene propiedades anti-inflamatorias naturales y es un tratamiento natural para la acidez estomacal y otros problemas gastrointestinales.
  3. Harina de avena: es una fuente importante de fibra, ayuda a absorber ácido en el estómago y reducir los síntomas de reflujo.
  4. Frutas: que no sean cítricas como melones, plátanos, manzanas y peras, son menos propensas a desencadenar síntomas de reflujo que las frutas ácidas.
  5. Carnes magras: como pollo, pavo, pescado y mariscos a la parrilla, asados y horneados, son de bajo contenido de grasa y reducen los síntomas de reflujo ácido.

Los vegetales de hojas verdes no deben faltar en la dieta de una persona que padece reflujo.

¿Se debe recurrir a la cirugía?

En raros casos, la enfermedad de reflujo gastroesofágico que es severa y no responde al tratamiento médico puede justificar la intervención quirúrgica en forma de un procedimiento llamado funduplicatura.