El exilio de Javiera Carrera

Javiera Carrera Verdugo fue una chilena considerada como uno de los más importantes y comprometidos personajes de la causa patriota en la historia de la independencia de Chile. Sin embargo, las disputas internas en el país que involucraban a sus hermanos la sometieron a muy precarias situaciones durante años.

Tras la terrible derrota de la batalla de Rancagua en 1814, en donde los realistas españoles recuperaron el control del país, los supervivientes patriotas y muchos civiles se vieron obligados a exiliarse a Mendoza, en las Provincias Unidas del Río de la Plata, en busca de refugio. Javiera Carrera, a pesar de estar casada en ese momento de un aristócrata español, y por lo tanto no correr peligro, decidió unirse al éxodo con sus compatriotas, incluidos sus hermanos José Miguel, Juan José y Luis, y abandonar a su esposo e hijos.

No obstante, el recibimiento de los Carrera allí fue desfavorable. Habían sido culpados y desprestigiados por los partidarios de O’Higgins, lo que sembró la desconfianza por esta familia en las autoridades rioplatenses e hicieron que fueran trasladados a Buenos Aires en consecuencia.

Allí, Javiera se encontró con graves problemas económicos y su salud comenzó a deteriorarse. Pese a ello, esto no le impidió comenzar una conspiración junto a sus hermanos Juan José y Luis, de la que se cree que era autora intelectual, para destronar a O’Higgins luego de que este recuperara el poder de Chile en la victoria de Chacabuco de 1817, mientras José Miguel se encontraba en Estados Unidos en busca de aliados. Estos planes fracasaron rápidamente, lo que condujo al fusilamiento de Juan José y Luis en 1818, y al destierro de Javiera a la localidad de Luján, para poco después ser recluida en un convento de Buenos Aires.

Logró escapar en 1819 en un barco portugués que se dirigía a Montevideo, y allí se enteró del fusilamiento de su último hermano, José Miguel, en 1821, ya que había causado muchos problemas en las Provincias Unidas del Río de la Plata en su campaña por retomar el poder de Chile. Javiera se encontraba destrozada y en peor estado de salud que nunca, pero se negó a volver a Chile mientras O’Higgins siguiera en el poder. El caudillo abdicó en 1823 y Javiera pudo regresar a su país un año después, donde vivió en paz hasta su fallecimiento en 1862.

¿Sabías qué?
Se dice que fue Javiera Carrera quien, en 1812, bordó la primera bandera de Chile como símbolo de la naciente nación independiente. Su diseño consistía en tres franjas horizontales de color azul, blanca y amarilla respectivamente.
Retrato de Javiera Carrera.

Consecuencias de la batalla de San Carlos

La batalla de San Carlos fue una de las contiendas militares ocurridas en 1813 que formaron parte del proceso de la independencia de Chile, durante la etapa conocida como Patria Vieja. El resultado ambiguo de la batalla y la derrota que le siguió poco después tuvo importantes consecuencias para sus participantes y para la historia del país.

La batalla de San Carlos

Tras la batalla de Yerbas Buenas, el Ejército realista español ocupó la villa de San Carlos para reabastecerse y recuperar fuerzas, desde donde enviaron a una buena parte de sus hombres y artillería por adelantado hacia Chillán. El general José Miguel Carrera vio la oportunidad y decidió atacar a las debilitadas tropas realistas que permanecieron en San Carlos.

Carrera envió entonces a la división militar que comandaba su hermano Luis a impedir cualquier posible huida de los realistas desde San Carlos, mientras tanto, el resto de patriotas los atacaría. Sin embargo, el desempeño de estos fue deficiente, con una ejecución de órdenes confusa y desorganizada, gracias a lo cual el ejército realista pudo escapar a Chillán. Es por ello que, a pesar de que pudo haber sido una victoria decisiva para los patriotas por la ventajosa situación con la que contaban, la batalla tuvo un resultado ambiguo.

El sitio de Chillán

Una vez en Chillán, los realistas, comandados por el general Juan Francisco Sánchez, tuvieron la oportunidad de reagruparse, desde donde además solicitaron refuerzos aliados con la intención de fortalecerse. La Junta de Gobierno de Chile exigió a sus tropas, de nuevo al mando de José Miguel Carrera, que reclamaran la ciudad y derrotaran a los realistas antes de la llegada de estos refuerzos, por lo que los patriotas comenzaron a rodear y asediar la ciudad el 27 de julio.

No obstante, pese a la inferioridad numérica realista, la ciudad se encontraba en una colina que no era difícil de defender debido a su posición estratégica, a lo que se sumaba la dificultad que las condiciones invernales de ese momento causaban a los atacantes y sus suministros. La situación llevó a Carrera a ordenar desesperadamente dos ataques directos en agosto, los cuales, además de fracasar, tomaron la vida de cientos de civiles inocentes en el fuego cruzado.

Todos estos resultados desastrosos forzaron la retirada de los patriotas y marcaron la victoria realista en Chillán.

¿Sabías qué?
Los resultados de la batalla de San Carlos y el sitio de Chillán desprestigiaron a José Miguel Carrera ante la Junta de Gobierno de Chile, por lo que lo destituyeron de su cargo como general en jefe del Ejército y se lo otorgaron a Bernardo O’Higgins. Carrera recuperó brevemente este título tras el golpe de Estado que dio en 1814.
José Miguel Carrera en la batalla de San Carlos.

Juan Mackenna y su rivalidad con los hermanos Carrera

Juan Mackenna O’Reilly fue un general del ejército chileno que tuvo una gran participación política y militar en la historia del país, antes y durante su proceso de independencia. Sin embargo, en este ambiente de autoridad política surgieron poderosos opositores, entre ellos se destaca la familia de próceres Carrera.

Enero de 1814

Juan Mackenna se definió como un incondicional aliado y la mano derecha de Bernardo O’Higgins, que recién ocupaba su nuevo puesto como general en jefe del Ejército y cuya rivalidad con los hermanos Carrera era ya conocida y compartida desde años anteriores. Durante este tiempo, Mackenna emitió un informe de unas 53 páginas dedicado únicamente a arremeter en contra de los hermanos Carrera.

¿Sabías qué?
En el informe emitido por Mackenna en enero de 1814 destacan históricamente las siguientes líneas: “Tres jóvenes sin los menores conocimientos militares, ni políticos, sin valor personal, y sin más cualidades de tiranos que la irreligión y la inmoralidad; se constituyen, mediante el abuso de cuánto hay de sagrado entre los hombres, árbitros de la suerte de un millón de almas”.

Julio de 1814

José Miguel Carrera tomó el poder tras un golpe de Estado, tras lo cual procedió inmediatamente a exiliar a Mackenna a la ciudad de Mendoza, en las Provincias Unidas del Río de la Plata.

Octubre de 1814

La derrota de la batalla de Rancagua, donde José Miguel Carrera participó como uno de los líderes independentistas, forzó la huida de los supervivientes chilenos a territorio argentino en busca de refugio. Allí, Juan Mackenna y otros representantes del bando de O’Higgins se encargaron de desprestigiar a los hermanos Carrera y hacerlos responsables por la derrota ante José de San Martín, por lo que este los hizo apresar y trasladar a Buenos Aires.

Noviembre de 1814

Una vez en Buenos Aires, y resentido por todas las ofensas causadas hacia su familia, Luis Carrera exigió a Juan Mackenna una disculpa pública o de lo contrario deberían resolver sus diferencias en un duelo a muerte con pistolas, a lo que Mackenna eligió la segunda alternativa. Una vez en el lugar acordado inició el duelo, donde ambos salieron ilesos en la primera ronda; sin embargo, la segunda tuvo resultados fatales para Mackenna, quien falleció de un disparo en la garganta a manos de su adversario.

Retrato de Juan Mackenna.
Retrato de José Miguel Carrera.

Trayectoria militar de Carlos de Montúfar

Carlos de Montúfar, hijo de Juan Pío de Montúfar (presidente de la Primera Junta de Gobierno Autónoma de Quito y precursor de la independencia nacional) fue un coronel y patriota ecuatoriano, considerado uno de los libertadores del país. Su carrera militar inició durante su permanencia en España y terminó en el territorio de la actual Colombia, mientras era coronel y ayudante general del ejército de Simón Bolívar.

Carlos de Montúfar y Larrea-Zurbano (1780-1816), apodado el Caudillo, inició su formación militar en el Colegio de Nobles de Madrid. Su participación en la guerra de la Independencia española le valió una condecoración y el grado de teniente coronel del ejército español.

Batalla de Bailén (1808)

Tras la invasión napoleónica a España, se inició la guerra de la Independencia española. Montúfar participó en la batalla de Bailén como ayudante del principal jefe militar español, el general Francisco Xavier Castaños. España salió victoriosa y Napoleón tuvo su primera derrota militar.

Sitio de Zaragoza (1808)

Fueron dos asedios ocurridos en la ciudad de Zaragoza. Allí pelearon las tropas del primer Imperio francés de Napoleón Bonaparte contra las fuerzas españolas de la dinastía Borbón. Terminó con la retirada de las fuerzas francesas.

Batalla de Somosierra (1808)

Los franceses obtuvieron la victoria en este conflicto y Napoleón logró ingresar a Madrid. No obstante, la participación de Montúfar destacó por su heroísmo.

Obra que representa la batalla de Somosierra.
¿Sabías qué?

La Junta Central Suprema y Gubernativa del Reino eligió a Montúfar como comisionado regio en Ecuador, donde la revolución quiteña debilitaba el dominio colonial. El objetivo era llevar la paz a su país y guíar a los líderes hacia el nuevo sistema constitucional del Imperio español. Al llegar a Quito, Montúfar fue arrastrado por las filas revolucionarias, decidió unirse a la causa patriota y luchar contra los españoles.

Batalla de El Panecillo (1812)

Este cruel combate se llevó a cabo en el cerro El Panecillo de Quito, donde se enfrentaron las tropas realistas de Toribio Montes y Sámano y los defensores de Quito comandados por Carlos de Montúfar. Resultó en la victoria realista y Montúfar se vio obligado a salir de la ciudad.

Los escapes de Montúfar

Tras huir de Quito, Montúfar se trasladó a la ciudad de Ibarra. A finales de 1812 fue capturado y desterrado a España. Allí logró escaparse y viajar hasta Panamá, donde se incorporó a las fuerzas del libertador Simón Bolívar.

Batalla de la Cuchilla del Tambo (1816)

En este conflicto lucharon las tropas independentistas de Nueva Granada y las tropas de la Corona española en Popayán, Colombia. La derrota de los patriotas representó el fin de la Primera República. Montúfar fue capturado, condenado a muerte y ejecutado por la espalda por ser considerado un traidor.

Pintura de batalla de la Cuchilla del Tambo. La victoria realista representó el final de la reconquista española en Nueva Granada.

Carrera militar de Manuel Ascencio Padilla

Manuel Ascencio Padilla fue un líder militar que tuvo una destacada participación en las guerras por la independencia de Argentina y Bolivia. Demostró un gran compromiso por la causa patriótica en su lucha contra las fuerzas realistas, a las cuales enfrentó principalmente con la ayuda de cientos de miles de guerrilleros de los pueblos originarios de la región.

Revolución de Chuquisaca (1809)

Ascencio Padilla se unió a la revolución desde su comienzo el 25 de mayo, donde, entre otras acciones, utilizó su cargo como alcalde pedáneo de la parroquia de San Miguel de Moromoro en Chuquisaca para evitar el envío de suministros y provisiones a las tropas asignadas a reprimir la rebelión. Sin embargo, meses después, este movimiento cayó y Ascencio Padilla se vio obligado a huir hacia las aldeas de las serranías circundantes.

Revolución de Mayo (1810)

Sirvió como apoyo a la recién formada Junta de Buenos Aires, a través de la cual los revolucionarios despojaron del poder al virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros.

Revolución de Cochabamba (1810)

Luego de la victoria patriota del 14 de septiembre, la ciudad de Cochabamba reconoció la autoridad de la Junta de Buenos Aires y nombró a Padilla comandante civil y militar de una región que tenía su sede en el pueblo de La Laguna, el cual fue renombrado posteriormente como Padilla en su honor.

Batallas libradas entre 1810 y 1816

Durante los siguientes años comandó algunos batallones y reforzó otros bajo el mando de Manuel Belgrano, donde logró reunir cientos de miles de guerrilleros, principalmente quechuas y chiriguanos, agrupaciones que recibían el nombre de republiquetas. Aquí destaca su aporte al famoso Ejército del Norte, tanto al sumar hombres a sus filas como al servir de anfitrión para sus tropas.

Participó en una gran cantidad de batallas contra los realistas españoles con resultados variados, con mención de las victorias en las batallas de Aroma, Pintatora, Tucumán y Salta, y las derrotas de Huaqui, Tacobamba, Vilcapugio y Ayohuma, entre otras batallas y operaciones de guerrilla. Su estrategia de combate consistía en atacar por sorpresa y retirarse a tiempo a lugares seguros de montaña antes de que el enemigo pudiese responder satisfactoriamente.

Batalla de La Laguna (1816)

Ascencio Padilla encontró la muerte a manos del coronel realista Francisco Javier Aguilera, quien rodeó y derrotó a su ejército en La Laguna y lo decapitó.

¿Sabías qué?
Ascencio Padilla compartió toda su carrera militar, de principio a fin, con su esposa Juana Azurduy, otra famosa y aguerrida personalidad de las guerras de independencia hispanoamericana. Es por ello que rara vez se menciona a uno sin incluir al otro en los relatos históricos.
Juana Azurduy, esposa de Manuel Ascencio Padilla.

Atletismo

En esta disciplina conviven el pasado remoto y el presente, siendo una actividad milenaria en la que se han contado un sinnúmero de hazañas desde hace más de 5.000 años. Parte fundamental de los Juegos Olímpicos y un deporte que aún despierta desafíos entre miles de deportistas, el atletismo continúa siendo el deporte por excelencia.

En el atletismo se abarca una amplia cantidad y variedad de disciplinas, entre las que se encuentran carreras, saltos, lanzamientos, pruebas combinadas y marcha. Su denominación proviene de la palabra griega -athlos, que significa lucha.

En estas competiciones, el objetivo está centrado exclusivamente en la superación constante de la aptitud física del deportista. Esto generará que el atleta termine alcanzando los resultados que le brindarán la victoria. Así, las pruebas están supeditadas a diversos factores, como la velocidad, la resistencia, la distancia o la altura.

En la actualidad todas las competiciones están regidas por reglamentos, que pueden encontrar variantes según vayan cambiando las categorías de la prueba: cadete, infantil, juvenil, junior, veterano y profesional.

¿Sabías qué...?
Anthony Scott Weiland, de 27 años, corrió la maratón de Detroit hacia atrás en 4 horas, 7 minutos y 54 segundos en 1982.

Desde hace ya gran cantidad de años el atletismo es uno de los pocos deportes que son practicados alrededor de todo el mundo. Esto se debe a los pocos requerimientos materiales que posibilitan la efectiva realización de algunas de las prácticas allí englobadas.

Las pruebas atléticas se estructuran en dos grandes bloques:

a) Las pruebas de pista, entre las que se incluyen las carreras de velocidad, las carreras de vallas y las de fondo.
b) Las pruebas de campo, que engloban las realizadas en el césped del estadio: lanzamientos y saltos.

Las pruebas de pista

La carrera es considerada un movimiento instintivo y natural, como consecuencia de la aceleración de la marcha. En el desplazamiento interviene una fuerza muscular interna que actúa contra la resistencia del suelo y contra fuerzas externas como la gravedad y la resistencia del aire. Todas las modalidades adaptadas por el atletismo tienen como objetivo recorrer una distancia en el menor tiempo posible. Las carreras se estructuran en dos grandes bloques: de velocidad y de resistencia.

En el caso de las carreras de velocidad, las competencias se encuentran subdivididas de la siguiente forma:

a) Carreras de velocidad lisas: la velocidad de carrera depende de la potencia muscular provocada en cada impulso y de la rapidez en la secuenciación de los movimientos. En las pruebas de velocidad la salida es muy importante: es primordial mantener una buena concentración para intuir y reaccionar lo más rápidamente posible a la señal. Se incluyen en este apartado las competiciones de 60, 100, 200 y 400 metros lisos. El reglamento determina la utilización de tacos para todas las carreras de velocidad, incluidos los 400 metros, con el objetivo de favorecer la salida y mejorar el control por parte de los jueces en las salidas nulas.

b) Carreras de relevos: se desarrollan por equipos de cuatro componentes, en 100 y 400 metros. En el relevo de 4 x 400 el paso del testigo se realiza por calle libre a partir de la primera curva.
En las dos distancias (100 y 400 metros) cada relevista debe pasar el relevo al siguiente componente del equipo en una zona de transferencia delimitada claramente. Es un movimiento sincronizado entre los dos atletas y se puede hacer de dos formas diferentes: con la técnica de abajo arriba o bien de arriba abajo. La técnica usada es importante debido a que la menor demora de tiempo en el paso del relevo condiciona el desenlace final de la carrera.

c) Carreras de velocidad con vallas: los 100 metros vallas en las mujeres y los 110 y 400 metros en los hombres son las pruebas más características, en las cuales tanto la altura de las vallas como la distancia entre ellas dependerá de la prueba y de la categoría de los corredores. El vallista debe ser un atleta completo, con la velocidad de un esprínter y unas extremidades inferiores lo suficientemente largas que le permitan una amplia zancada, y el mínimo esfuerzo con la menor pérdida de tiempo posible en el paso del obstáculo. La salida y la posición de los tacos se modifican en función de la pierna con que se ataca la primera valla y se condiciona a los pasos necesarios para atacar la valla correctamente.

Por su parte, las carreras de resistencia, que también pueden ser lisas o de obstáculos, se dividen en:

a) Carreras de medio fondo: la distancia establecida se sitúa entre las pruebas de 800 metros, 1.500 metros y 3.000 metros. Suelen ser carreras tácticas en las que es muy importante estar bien situado en los grupos de cabeza. El corredor mediofondista debe ser una mezcla perfecta entre el velocista de 400 metros. y el corredor de fondo, con una buena resistencia para prolongar el esfuerzo en situaciones sub máximas.

b) Carreras de fondo: se encuentran en este grupo los 3.000 metros femeninos, los 5.000 metros masculinos, los 10.000 metros y el maratón, con sus 42.195 metros. Las exigencias físicas de todo fondista se basan en una gran capacidad de resistencia aeróbica, conseguida con un entrenamiento continuado a lo largo de toda la temporada. La prueba de maratón es, después de los 50 kilómetros marcha, la prueba más larga del calendario olímpico. Durante la carrera los corredores cuentan con puestos de avituallamiento a intervalos de 5 kilómetros, con el objetivo de reponer fuerzas y evitar la deshidratación de los atletas.

c) Marcha: la marcha es una modalidad muy característica que consiste en desplazarse a paso ligero de forma que siempre debe haber un pie en contacto con el suelo. Se consigue mediante un movimiento de rotación de la cadera, secuenciando el contacto del pie con el suelo desde el talón hasta la punta. A nivel competitivo se desarrolla sobre tres distancias: 10 km. para las mujeres y 20 km. y 50 km. para los hombres. Los jueces de carrera se encargan de controlar a lo largo del recorrido que los marchadores realicen correctamente la técnica manteniendo siempre un pie en contacto con el suelo, so pena de descalificación.

d) Carreras de resistencia con obstáculos: los 3.000 metros obstáculos es una especialidad que se disputa sólo en la categoría masculina. Los atletas deben dar siete vueltas y media al perímetro de la pista y franquear en total 28 obstáculos y 7 rías, una por vuelta. Esta prueba es una de las más duras y exigentes de la competición atlética, en la que los corredores combinan una excelente resistencia y una gran capacidad para soportar los cambios de ritmo.

Carrera de resistencia con obstáculos.

Records de carreras lisas de velocidad

• En los 60 metros el norteamericano Maurice Greene ostenta el record con un tiempo de 6.39 segundos desde 1998. En las mujeres el record es de la rusa Irina Privalova desde el año 1993, con 6.92 segundos.
• En los 100 metros la mejor marca la ha mantenido desde el 2009 el jamaiquino Usain Bolt con 9.58 segundos. En las mujeres el record es de la norteamericana Florence Griffith-Joyner desde 1988, con 10.49 segundos.
• En los 200 metros la marca record corresponde nuevamente a Usain Bolt desde el 2009, con 19.19 segundos. En el caso de las mujeres el record también es de Florence Griffith-Joyner desde 1988, con 21.34 segundos.
• En los 400 metros el record es del norteamericano Michael Johnson desde 1999, con un tiempo de 43.18 segundos. En la categoría mujeres el record es de la alemana Marita Koch desde 1985.

El origen del maratón

La denominación se remonta a la leyenda generada a partir de la Batalla de Maratón en el 490 a. C., cuando para evitar que ocurriera una tragedia Filípides corrió los 42 km. que separaban a la ciudad de Maratón de la de Atenas después de la agotadora batalla contra los persas. La razón era que, a pesar de haber ganado la batalla, los griegos demoraron más de lo previsto y se había acordado para evitar la violación y la esclavización de sus familias que, en caso de que los persas ganasen, las mujeres maten a sus hijos y luego se suiciden. Temiendo que por la demora las mujeres de Atenas llevaran a cabo lo previsto creyendo que habían ganado los persas, se envío a Filípides que al dar la noticia de la victoria en Atenas cayó muerto del agotamiento, salvando a mujeres y niños.

Las pruebas de campo

Los lanzamientos

Los lanzamientos son gestos técnicos específicos, cuyo objetivo está en impulsar un artefacto. El lanzador debe conseguir la máxima eficacia en la aplicación de su fuerza, una buena velocidad en los movimientos preliminares, y un buen ángulo de proyección con el objeto de conseguir un buen lanzamiento, lo más aerodinámico posible. Los lanzamientos se pueden clasificar por la forma de lanzar, ya sea en traslación (peso y jabalina), o en rotación (disco y martillo); o por el peso del artefacto, clasificados en pesados (martillo y peso) y ligeros (disco y jabalina).
En el lanzamiento de disco se desarrolla un movimiento rotatorio sobre el propio eje, con el objetivo de acumular la energía suficiente para propulsar el disco a la mayor distancia posible. El disco tiene un diámetro de 22 cm. y 2 kg. de peso para los hombres, y 18,1 cm. y 1 kg. para las mujeres.

Por otra parte, el lanzamiento de jabalina es otra destacada disciplina del atletismo. La jabalina es una lanza con la parte central más ancha. Mide 2,60 m para los hombres y 2,20 m para las mujeres. Su peso es de 800 y 600 gramos, respectivamente.

El centro de gravedad está desplazado hacia la parte delantera, para que pueda caer de punta y no planee tantos metros.

¿Sabías qué...?
La mayor carrera sin parar que se registra es de 568 km en 121 horas y 54 minutos, por Bertil Järlaker (Suecia) en 1980.

Los saltos

Las pruebas de saltos en atletismo constan de las siguientes disciplinas: salto de altura, triple salto, salto de longitud y salto con pértiga. En la ejecución de los saltos, todo atleta debe ser capaz de conseguir una buena velocidad lineal en su carrera de aceleración y paralelamente aprovechar el máximo impulso para elevarse y desplazarse en el aire, en contra de la fuerza de gravedad, todo su cuerpo, ya sea por sus propios medios, o bien utilizando una pértiga. Las cuatro fases de todos los saltos son: la carrera, la batida, el vuelo y la caída.

En el caso del salto de altura se tiene el objetivo de superar una barra horizontal entre dos soportes verticales que se encuentran separados por 4 metros, aumentando la altura progresivamente y contando con tres ocasiones para superar cada altura. En el caso del salto de longitud el atleta corre por una pista e intenta cubrir la mayor distancia posible tras saltar desde una línea marcada con plastilina, arrojando sus piernas hacia delante para lograr un salto más largo. En el triple salto el objetivo es cubrir la máxima distancia posible a partir de tres saltos que se entrelazan luego de correr una corta distancia en la pista para ganar impulso. Quizá el más llamativo y espectacular es el salto con pértiga, donde el atleta debe superar un listón situado a una altura considerable utilizando una pértiga flexible que mide entre 4 y 5 metros.

Salto de altura.
Salto en longitud.
Salto en pértiga.

Para el olvido

La competencia atlética ha dado lugar a rendimientos que lejos de resultar competitivos se han convertido en marcas donde figura más el valor de la voluntad de participar que el ansia de victoria.

• Samoa Americana registra algunos de los peores tiempos en competencias atléticas con Sogelau Tuvalu que en 100 metros hizo 15.66 segundos y en mujeres Savannah Sanitoa que hizo la misma distancia en 14.56 segundos.

• El maratonista Abdul Baser Wasiqi de Afganistán logró la peor marca de la historia en esta especialización llegando a su objetivo en la marca de 4 horas y 24 minutos. También es célebre el caso de la mongola Luvsanlkhündegiin Otgonbayar que completó la maratón de Atenas 2004 en 3 horas y 48 minutos.

• Tras no encontrar su especialidad de lanzamiento de martillo en el itinerario de los primeros Juegos Olímpicos de la
era moderna (1896), el estadounidense George Stuart Robinson decidió participar en lanzamiento de bala y disco,
consiguiendo la peor marca jamás lograda hasta la actualidad en disco con 25.20 metros.