Cuidados de la piel

La piel es el órgano más amplio del cuerpo humano, reviste al organismo y está compuesto por dos capas de tejidos, que de fuera adentro son: la epidermis y la dermis. Las afecciones de la piel pueden tener sus causas en numerosas circunstancias como: sobre exposición al sol, deshidratación, daños por mala alimentación, estrés, consumo de tabaco, etc. Mantener este órgano saludable es cuestión de rutina.

El sistema tegumentario está formado por la piel y sus anexos (pelos, uñas, glándulas, sudoríparas y glándulas sebáceas). La piel o tegumento es el órgano que constituye el límite del cuerpo, representa una superficie de más de 2 m2 y pesa entre 4 a 5 kg.

Sus principales funciones son:

1. Protección: debido a que recubre el cuerpo, lo protege de ataques mecánicos, físicos, químicos o microbianos desde el exterior. Brinda protección contra las infecciones y radiaciones ultravioletas, y es una capa aislante que evita el exceso de evaporación de agua.

2. Transmisión: es el medio de comunicación entre el cuerpo y el mundo exterior. Cuenta con terminaciones nerviosas que reciben estímulos táctiles, térmicos y dolorosos.

3. Regulación térmica: ayuda a mantener la temperatura corporal dentro de un valor constante.

4. Excreción: eliminación del sudor.

5. Síntesis: en la piel se sintetizan carotenos, vitamina D y la melanina.

Capas de la piel

La piel está formada por dos capas: epidermis, que es la capa superficial, y dermis, capa interna.
La epidermis es la capa más externa, está formada por células epiteliales y no posee vasos sanguíneos ni terminaciones nerviosas. Es sumamente delgada y su espesor varía en diferentes partes del cuerpo. Se pueden distinguir cuatro capas:

• Subcapa basal: es la más profunda, sus células se encuentran en constante reproducción.

• Subcapa espinosa: está constituida por varias hileras de células que representan otro estadio de evolución de las células basales.

• Subcapa granulosa: está formada por elementos celulares aplanados que contienen gránulos de queratohialina, sustancia córnea característica de esta capa. Estas células no poseen capacidad de dividirse, ya que están dedicadas exclusivamente a la síntesis o formación de queratina.

• Subcapa córnea: está formada por células muertas, que se desprenden permanentemente.

La dermis es la capa media de la piel, está formada por tejido conjuntivo rico en fibras de colágeno, fibras elásticas y vasos sanguíneos. También contiene las terminaciones nerviosas que nos permite sentir la sensación de frío, calor, dolor, etc.

Se encuentran además, las glándulas sebácias que secretan sebo, una materia grasa cuya misión es impermeabilizar y lubricar la piel y los pelos; las glándulas sudoríparas que secretan sudor el cual se libera por los poros de la piel; y por último, los folículos pilosos que son los responsables del nacimiento del cabello.

La hipodermis representa el estrato más profundo, forma el denominado tejido celular subcutáneo. Está compuesto por tejido conjuntivo laxo y no representa una delimitación pronunciada con el cutis. Además, constituye un depósito de grasa y una reserva energética muy importante.

¿Sabías qué...?
Cada minuto, la piel pierde miles de células muertas.

Mantener la piel sana

Como ya vimos la piel es un órgano importante que nos protege de nuestro entorno. Mantener este órgano sano es importante no sólo para nuestra apariencia física sino también para llevar adelante una vida saludable.

Un dato interesante es que la piel se renueva cada 28 días, durante ese tiempo se van originando en la membrana basal nuevas células las cuales van subiendo a la base de nuestra piel. Esta situación requiere de un aporte continuo de nutrientes.

Diversas situaciones como el estrés, el exceso de radiación solar, exposición a productos químico y el tabaquismo, entre otros, son las principales causas de enfermedades en la piel. Algunas de las afecciones más frecuentes son: alteraciones vasculares, falta de flujo sanguíneo, quemaduras, melanomas, cáncer y envejecimiento prematuro debido al consumo de tabaco.

A continuación mencionamos ciertos hábitos que se deben seguir para mantener una piel saludable:

• Beber Agua

Beber una buena cantidad de agua todos los días no sólo contribuye a un mejor funcionamiento del organismo en general, sino también a hidratar y dar elasticidad a la piel. Previene la deshidratación porque es capaz de producir sebo o grasa provenientes de las glándulas sebáceas. Además, las células de todo el organismo se oxigenan y la piel se mantiene sana y brillante.

• Dieta saludable

Las frutas y vegetales de colores intensos, como los tomates, zanahorias, pimientos y melones contienen carotenoides que protegen la piel de los efectos que puede causar la exposición al sol y contribuyen a mantener una piel brillosa.

Vitamina A: ayudan a reconstruir el tejido y desintoxicar la piel evitando los granos de acné y manchas. Se encuentra en frutas y verduras.

Vitamina B: forma las bases de la piel, pelo y uñas. Estimula el sistema inmunológico y protege contra las enfermedades de la piel. Se encuentra en cereales integrales, espinaca y coliflor.

Vitamina C: protege la piel de la exposición al sol, previniendo las manchas y cáncer en la piel. Además previene el envejecimiento prematuro. Se encuentra en pimientos, jugo de arándano y de uva, coliflor y hojas verdes.

Vitamina E: hidrata y suaviza la piel. La protege de la exposición al sol y al ser antioxidante previene su envejecimiento. Se puede encontrar en la aceitunas, espinacas, nueces, semillas y aceites vegetales.

Vitamina K: ayuda a reducir los círculos negros bajo los ojos y los moretones. Se encuentra en verduras de hoja verde, productos lácteos, carne de puerco e hígado.

• Exposición al sol moderada

El agujero en la capa de ozono, y un cambio en los hábitos de tomar el Sol han causado a escala mundial un aumento en el número de casos de cáncer de piel. Científicos británicos de la Newcastle University, expertos en investigación sobre el cáncer, han hecho pruebas que demuestran lo rápidamente que la piel envejece y se daña al ser expuesta a los rayos solares.

Mark Birch-Machin, científico de Newcastle University, afirmó que tomar Sol puede ser muy peligroso para el ADN de las células, y además hace más gruesa la piel. Cada vez que tomamos un baño solar, y sobre todo cuando nos quemamos por sus efectos, añadimos una capa extra, lo que hace que nuestra piel acabe teniendo un aspecto descolorido, rugoso, etc.

• Minimizar el estrés

Muchas manchas o eccemas que aparecen en la piel son productos del estrés emocional. Inclusive se puede generar un círculo vicioso porque las personas que ven afectada su apariencia, se estresan más, y eso los conduce a tener mayor probabilidad de generar nuevas manchas.

El estrés produce desbalances hormonales como el cortisol y la adrenalina; su exceso afecta la piel directamente. Si bien existen cremas para el tratamiento de estas manchas, lo ideal es identificar el problema que causa estrés, consultar al médico, realizar actividad física y llevar a cabo técnicas de relajación.

¿Sabías qué...?
Las uñas crecen más durante las épocas cálidas que durante las frías.

Trastornos y enfermedades

Acné

Es una afección dermatológica a causa de la obstrucción de los folículos sebáceos que se produce especialmente en la cara, espalda y tórax.
Un producto natural que se encuentra en el aceite de coco y en la leche materna humana, el ácido láurico, se perfila como un posible nuevo tratamiento para el acné. Un equipo de especialistas ha desarrollado un “sistema de aplicación inteligente” capaz de enviar bombas nanométricas llenas de ácido láurico directamente hacia bacterias Propionibacterium acnes que habitan en la piel y que provocan el acné común.

Acné.

Psoriasis

Se manifiesta por la aparición de manchas rojas y escamosas a causa de una producción demasiado rápida de células de la piel. No es contagiosa pero sí hereditaria. Puede aparecer a cualquier edad, aunque se manifiesta generalmente en la adolescencia y en la edad madura.

Psoriasis.

Hongos

Los hongos de la piel se alojan en la capa superficial, en general se trata de microorganismos que crecen en condiciones de humedad y calor. Por ello, muchas micosis suelen contraerse en lugares públicos como piscinas, duchas o vestuarios. Estas infecciones por hongos sólo provocan irritación leve. Otros tipos de infecciones por hongos penetran con mayor profundidad y pueden ser causa de comezón, inflamación, ampollas y descamación.

Dermatitis

Científicamente miliaria cristalina, es más frecuente en verano por el incremento de la sudoración, aunque también es sumamente habitual en niños pequeños que permanecen excesivamente abrigados durante el invierno. No hay inflamación asociada, por lo tanto no se presenta enrojecimiento ni debajo ni alrededor de las ampollas.

Rosácea

Es una afección crónica que afecta la piel y a veces los ojos. Puede ocasionar hinchazón y úlceras cutáneas que lucen como acné. Afecta a personas de piel blanca y puede llevar a que la persona que padece sienta timidez y vergüenza. Esta dolencia puede ser confundida y en algunos casos co-existir con el acné vulgaris y/o la dermatitis seborreica.

Urticaria

Se caracteriza por la erupción, regional o diseminada, de relieves edematosos y circunscritos (ronchas), redondeados, rosados, de consistencia elástica y fugaces. Aunque puede ser provocada de manera ocasional por causas no alérgicas (agentes físicos, contacto con sustancias de naturaleza vegetal o animal, etc.), generalmente la urticaria constituye la expresión más típica de alergia cutánea de tipo inmediato.

Urticaria.

Ecuador

En esta Vuelta al Mundo aterrizamos en Ecuador, un país ubicado sobre la línea ecuatorial en América del Sur, donde se distinguen cuatro regiones: la cálida Costa bañada por el Pacífico, las alturas nevadas de los Andes, la verde alfombra amazónica y las famosas islas Galápagos.

Ecuador es un país situado en la región noroccidental de América del Sur.

 

DATOS BÁSICOS

Nombre Oficial: República de Ecuador
Extensión: 256.370 Km2
Capital: Quito
Forma de Gobierno: Democrática
Presidente: Guillermo Lasso
Ciudades Principales: Quito, Guayaquil, Cuenca
Idioma Oficial: Español
Fiesta de Independencia: 10 de Agosto
Unidad Monetaria: Dólar
Religión: Libertad de culto, predominio de la religión Católica.

Un país de contrastes no sólo por la diversidad ecológica, producto de sus diversos paisajes, sino también por la pluralidad de culturas. Las primeras poblaciones que se asentaron en este territorio datan del 12.000 a.C, luego se formaron los llamados “pueblos precolombinos”. Hacia el siglo XV el Imperio incaico conquistó gran parte de la región y hacia el siglo XVI llegaron los españoles convirtiendo a la zona en una de sus colonias.

Luego de casi trescientos años de estar bajo el mando de los españoles, en 1809 comenzó el período independentista que culminó con éxito: gran parte del territorio se integró a la Gran Colombia y el sector litoral permaneció independiente hasta la anexión vía manu militari por parte de Simón Bolívar.

En 1830 los territorios colombianos del sur se dividieron y se creó la nación ecuatoriana. Si bien parecía comenzar una etapa de paz, en los inicios de la república existió gran inestabilidad política que condujo al país a una serie de revoluciones.

Durante el siglo XX, Ecuador no cobró mayor protagonismo en el ámbito internacional ya que no participó en las guerras mundiales. Los hechos más relevantes fueron los conflictos limítrofes que tuvo con Perú y la conformación de gobiernos militares.

Hacia 1979 Ecuador regresó al sistema democrático. No obstante la inestabilidad política siguió siendo una realidad: entre 1996 y 2006 el país protagonizó una gran crisis económica y social, dando como resultado la dolarización del país y tres presidentes derrocados antes de terminar su mandato.

CULTURA

Ecuador es un país donde convergen diferentes etnias; como se puede apreciar en su historia, las influencias de los conquistadores españoles y de los pueblos precolombinos fueron fundamentales en el proceso de consolidación del país. A su vez existen marcadas fronteras culturales entre las regiones de los Andes, la Costa y Amazonía.

Actualmente el grupo étnico predominante es el de los mestizos (aquellos de linaje mixto español y Amerindio) que, de acuerdo al último censo poblacional del 2010, alcanza el 71.9% de la población. El 7% son indígenas, el 6.1% caucásicos, el 7,2% afroecuatorianos y el 7,4% montubios.

La mayoría de estos grupos se encuentran integrados en la cultura establecida a nivel general, pero aún existen comunidades que practican sus propias costumbres, concretamente esta situación ocurre en lo más remoto de la cuenca pacha.

La lengua más hablada es el idioma español aunque, cabe destacar, que existen variantes locales de esta lengua, así como modalidades diferentes que verían de acuerdo a la etnia, la clase social o la región. También existe una pequeña minoría que habla lenguas nativas como el shuar, achuar, a’ingae, etc.

La religión más practicada es la católica romana, pero debido a la diversidad cultural también existen otras confesiones cristianas. Los indígenas suelen mezclar prácticas del catolicismo con sus creencias tradicionales. También existen comunidades que aún conservan sus creencias y practicas antiguas de adoración a la tierra, montañas, y el sol.

FIESTAS POPULARES

El calendario de las fiestas populares de Ecuador es bastante completo; las más importantes son:

• Día de la Región Amazónica. Se festeja el 12 de febrero en honor al descubrimiento del río Amazonas, en esta ocasión se organiza bailes y se bebe chicha.

• Carnaval. Se celebra en todo el país en el fin de semana antes de la Cuaresma.

• Festival de las Frutas y las Flores. Para celebrar se organizan desfiles, espectáculos y show de fuegos artificiales. Se lleva a cabo el 17 de febrero de cada año en la provincia de Tungurahua (Ambato-Ecuador). Es en conmemoración a la pérdida sufrida por los habitantes de la ciudad a raíz del terremoto del 5 de agosto de 1949; tras el trágico episodio, el pueblo procuró reactivarse y dejar de lado este suceso, por lo que los socios del Centro Agrícola Cantonal fueron el eje principal de la organización de la primera fiesta que se llevó a cabo el 17 de febrero de 1951.

• Inti Raymi. Es la Fiesta del Sol que se celebra durante junio y julio, con el evento principal en el solsticio de verano. Los grupos indígenas toman las plazas para simbolizar la rebelión contra los opresores coloniales.

• Corpus Christi. Es la celebración católica de la Eucaristía, se mezcla con tradiciones indígenas. Se festeja en un jueves de junio.

• Paseo del Chagra. Se le llama Chagra al campesino de los Andes ecuatorianos. La celebración se realiza el 20 de julio en Machachi (Pichincha).

• Festival de la Cosecha de Maíz. Tiene lugar cada 16 de agosto en Tarqui, cerca de Cuenca.

• Yamor. Se celebra del 1 al 8 de septiembre en Otavalo para agradecer a la “Pacha Mama” o madre tierra por sus dones, especialmente por el maíz.

• La Mama Negra. Es una fiesta tradicional propia de la ciudad de Latacunga, es una simbiosis de las culturas indígena, española y africana. La máxima expresión es la aparición de la Mama Negra (Madre Negra) que es en realidad un hombre vestido de mujer, pintado de negro y llevando muñecos, para representar a sus hijos.

• Rodeo mantubio. Se festeja el 12 de octubre, es una celebración de la herencia española en Ecuador.

• Día de los Muertos. Se festeja en todo el territorio ecuatoriano el 2 de noviembre.

• El Pase del Niño. Es el 24 de diciembre en Cuenca. Los niños desfilan vestidos de personajes bíblicos rindiendo homenaje al Niño Jesús.

También hay ciudades que tienen celebraciones únicas donde se hacen evidentes las mezclas de las creencias españolas con las indígenas.

PATRIMONIOS DE LA HUMANIDAD

La Organización para la Educación, la Ciencia y la Cultura de las Naciones Unidas, (UNESCO, por sus siglas en inglés) ha declarado ciertos lugares de Ecuador Patrimonio Cultural o Natural de la Humanidad, este título los convierte en posesión de la humanidad y reciben protección de un comité internacional. Conozcamos esos lugares tan interesantes de Ecuador:

• Centro Histórico de Quito

Se encuentra entre volcanes andinos, a 2.800 metros sobre el nivel del mar, se extiende por más de 320 hectáreas y es el más grande de América. Cuenta con 130 edificaciones monumentales, aproximadamente, en las cuales se puede percibir una gran diversidad de arte pictórico y escultórico, principalmente de carácter religioso inspirado en una multifacética gama de escuelas y estilos. Además hay cinco mil inmuebles registrados en el inventario municipal de bienes patrimoniales.

Junto al centro histórico de Cracovia en Polonia, fue uno de los primeros en ser declarados Patrimonio Cultural de la humanidad por la UNESCO, el 18 de septiembre de 1978. Esta organización internacional ha destacado algunas de las iglesias del Centro Histórico, como La Compañía, y los monasterios de San Francisco y Santo Domingo que representan ejemplos de la arquitectura barroca de Quito que ha resultado de la mezcla de las influencias española, italiana, morisca, flamenca e indígena.

• Cuenca

Santa Ana de los Ríos de Cuenca es la tercera ciudad más grande de Ecuador, se encuentra ubicada en un valle interandino de la sierra sur ecuatoriana, a 441 km al sur de Quito. Se la conoce como la Atenas del Ecuador por su majestuosa arquitectura, su diversidad cultural, su aporte a las artes, ciencias y letras ecuatorianas y por ser el lugar de nacimiento de muchos personajes ilustres de la sociedad ecuatoriana. Además es una ciudad destacada por haber conservado rígidamente el mismo plan urbano que fuera ordenado por el rey español Carlos V, hace más de 400 años. Su Centro Histórico fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1999.

• Las Islas Galápagos

Son 19 islas volcánicas que conforman un parque nacional y una reserva ecológica. Se encuentran situadas en medio del Océano Pacífico, aproximadamente a mil kilómetros hacia el Oeste de Ecuador. Hace siglos fueron el refugio de Piratas y hoy son el destino preferido de turistas y científicos. Existe una gran diversidad de animales y vegetales; entre los animales se distinguen las tortugas gigantes, una variedad de pájaros como los patas azules, patas rojas, flamingos, frigatas, albatroses y pequeños pingüinos, entre otros. Además constituyen un importante ejemplo del proceso evolutivo. Prueba de ello es la investigación que llevó a cabo Charles Darwin en las islas para desarrollar la Teoría de la Evolución. En 1978 fueron declaradas Patrimonio Natural de la Humanidad y en 2007 fueron añadidas a la lista de Patrimonios de la Humanidad en peligro.

• Parque Nacional Sangay

Se encuentra entre las provincias de Morona Santiago, Chimborazo y Tungurahua. El acceso no es sencillo, existen varios senderos pero la mayoría de ellos requieren largas caminatas. Los paisajes son impactantes y hacen valer la pena el esfuerzo por ingresar. Este parque es el hogar de muchas especies andinas raras como el tapir de montaña, el cóndor, el oso de anteojos, el margay y la nutria gigante, especies que se preservan gracias a la ubicación aislada del parque. Además contiene dos volcanes activos, el Sangay y el Tungurahua, así como una amplia variedad de ecosistemas que van desde bosque tropical hasta glaciares. En 1983 fue declarado Patrimonio Natural de la Humanidad.

SÍMBOLOS NACIONALES

Bandera

Consiste en tres bandas horizontales: amarillo (la superior es de doble anchura), azul, y rojo, con el escudo de armas superpuesto en el centro de la bandera. Es similar a la bandera de Colombia, que es más corta y que no lleva el escudo de armas.

El origen de la bandera y su similitud con las tricolores de Venezuela y Colombia recuerda el carácter bolivariano del Ecuador, pues las banderas actuales de estos tres países tienen como origen común el pabellón que enarboló desde 1806 el precursor de la Independencia, Francisco de Miranda, en sus expediciones libertadoras en Venezuela. Esos mismos colores ondearon durante la “campaña admirable” (1813), en la batalla de Carabobo (1821) y en la batalla del Pichincha (1822), así como en la liberación del Perú (1824); ello explica que un tricolor similar fuese adoptado por la Gran Colombia en 1821 y 1824. Tan significativa trayectoria histórica es la respuesta a la pregunta del escritor cubano José Martí sobre la enseña tricolor de Miranda: “¿Qué tiene esa bandera, que todas las demás la reconocen por madre?”

Escudo

El cóndor con las alas desplegadas que corona el escudo significa el poder y el valor. Los signos zodiacales de aries, tauro, géminis y cáncer que aparecen en la elíptica -símbolo, respectivamente, de los meses de marzo, abril, mayo y junio- representan el período de tiempo que duró la lucha por la libertad ecuatoriana. En la falda de un monte, el Chimborazo, nace un río, el Guayas; el primero representa la belleza y los recursos de la Sierra, y el segundo, los de la Costa. El barco de vapor que aparece sobre el río es el Guayas, construido en los astilleros guayaquileños en 1841, y el caduceo que ostenta a modo de mástil simboliza el comercio y la navegación, fuentes de la riqueza del Ecuador. La rama de palma es el emblema de la paz, y la rama de laurel representa las gestas de los héroes republicanos. Los haces consulares representan la dignidad republicana.


ÍCONOS DE ECUADOR

Mitad del Mundo

En la parroquia de San Antonio del Distrito Metropolitano de Quito, al norte del centro de la ciudad de Quito, se encuentra la Ciudad más pequeña del país: Mitad del Mundo. Allí existe una sede de la Unión de Naciones Suramericanas, el Museo Etnográfico Mitad del Mundo, un planetario y un monumento de 30 metros de altura que está coronado por una esfera metálica que representa a la Tierra. Se construyó entre 1979 y 1982 para marcar el punto donde se consideraba que el Ecuador atravesaba el país. Incluso se trazó una línea desde el centro de la escalera del monumento que da al este para marcar la línea del ecuador. Muchos turistas se han fotografiado cruzando la línea pero en el siglo XX, tras la creación de la tecnología GPS, se ha establecido que la estructura se encuentra a 240 metros al sur del verdadero ecuador. En el interior del monumento hay un museo donde se exhiben elementos de la cultura indígena de Ecuador, como vestimenta, descripciones de los diversos grupos étnicos, y muestras de sus actividades. Alrededor del monumento se ha levantado una réplica de una pequeña ciudad colonial española. En esta ciudad también hay una Plaza Central donde se llevan a cabo espectáculos culturales para los turistas.

Tortugas

Uno de los principales atractivos de Ecuador son las islas Galápagos donde habitan 11 especies distintas de tortugas. Algunas de ellas son exclusivas de determinadas islas. Las más grandes alcanzan las 650 libras y desarrollan un caparazón de casi 4 pies de largo. Hay grandes y pequeñas, la mayoría son extremadamente longevas.

En junio de 2012 murió la última tortuga gigante de la especie Geochelone nigra abingdoni. Tenía más de 100 años y había sido encontrada en 1972 cuando se creía que la especie de tortugas de la isla Pinta estaba totalmente extinguida, como consecuencia de la introducción de cabras ferales que acabaron con la vegetación de la que se alimenta la tortuga, reduciendo la población entera a este único individuo. En diferentes ocasiones se procuró que esta tortuga, llamada “Solitario George”, lograra reproducirse pero nunca se logró. Con una hembra de la especie Geochelone nigra becki del volcán Wolf en la isla Isabela llegó a aparearse después de 15 años de convivencia pero los huevos resultaron infértiles y el “Solitario George” se quedó sin hijos.

Bananas

Ecuador cuenta con las condiciones climáticas, de suelo y de luminosidad adecuadas para producir bananas de excelente calidad. El nivel de producción les ha permitido exportar convirtiéndose en uno de los principales proveedores.

La planta de banano parece un árbol por su tamaño y apariencia pero es una planta herbácea gigante. Puede alcanzar los 7 metros de altura.

Petróleo

La industria petrolera es una de las principales actividades económicas de Ecuador. Comenzó a cobrar importancia a principios del siglo XX en la península de Santa Elena y se convirtió en una de las principales actividades en 1967, cuando se hallaron grandes yacimientos en la Amazonía.

Sombreros

Los sombreros son otros de los elementos que representan a Ecuador, los tradicionales se fabrican de paja toquilla y son creados artesanalmente por los tejedores. Se comercializan en más de 30 países del mundo.des yacimientos en la Amazonía.

Flores

La calidad y diversidad de las flores de Ecuador hace que sean unas de las más preciadas del mundo. Las más características son las rosas de Cayambe. La situación geográfica del país es el factor que permite contar con micro climas y una luminosidad adecuada para cultivar flores únicas con tallos largos, gruesos y totalmente verticales, botones grandes y colores sumamente vivos.

Café

Las condiciones climatológicas y la situación geográfica de Ecuador convierten al territorio en uno de los pocos lugares del mundo donde se pueden producir casi todas las variedades de café verde: Arábigo lavado, Arábigo natural y Robusta.

Los cafetos están bien adaptados a los diferentes ecosistemas de las cuatro regiones del país. Los cultivos de café en Ecuador ocupan una superficie aproximada de 230 mil hectáreas.

Cuentos de la selva, por Horacio Quiroga

En este volumen de cuentos, Horacio Quiroga logra una de las obras más importantes de las letras latinoamericanas internándose en las salvajes inmediaciones de la selva sudamericana para contar algunas de las historias infantiles más memorables.

Pocos escritores tienen el prestigio de resultar parte de tantas generaciones como el uruguayo Horacio Quiroga, un autor que a pesar de estar signado por la tragedia y una obra esencialmente oscura nos regaló este volumen de cuentos, Cuentos de la selva, teniendo en mente su experiencia de vida en la selva y el deseo de contarle nuevos relatos a sus hijos. Estas narraciones, al que otro gran escritor de su nacionalidad, Juan Carlos Onetti, refirió como “construidos de manera impecable”, tienen un espíritu vital donde animales y humanos mantienen una misteriosa convivencia, donde la vida y la muerte se corresponden como un devenir inevitable. Quizá por eso, se trata de un escritor parcialmente enmarcado en el estilo naturalista de finales del siglo XIX.

Un sendero de ocho caminos

Más allá del indiscutible núcleo que resulta ser la selva (y en particular la selva misionera), las historias de Cuentos de la selva están interconectadas por la presencia de animales parlantes y su interacción con el entorno humano a lo largo de ocho cuentos: “La tortuga gigante”, “Las medias de los flamencos”, “El loro pelado”, “La guerra de los yacarés”, “La gama ciega”, “Historia de dos cachorros de coatí y de dos cachorros de hombre”, “El paso del Yabebirí” y “La abeja haragana”.

En el momento en que Quiroga publica Cuentos de la selva en 1918 ya era una figura reconocida en el ambiente literario, debido principalmente a la publicación de la antología Cuentos de amor de locura y de muerte en 1917. Sin embargo, el escritor uruguayo contaba ya con varios ejercicios literarios y publicaciones que habían apuntalado su estilo cercano a la literatura de Edgar A. Poe o Guy de Maupassant, ganándose la vida a través de publicaciones que realizaba en revistas como Caras y caretas. En ese entonces decidió trasladar algunas de sus vivencias en la selva a través de unos cuentos para niños que redactó en la ciudad de Buenos Aires, viviendo en un pequeño apartamento ubicado sobre la calle Agüero luego del suicidio de su esposa en 1915.

Las intenciones del escritor eran realizar un texto de lectura destinado a la escuela primaria de Uruguay, pero este intento fue infructuoso debido a que el Consejo de Enseñanza rechazó al texto por “incorrecciones sintácticas”. Sin embargo, la publicación de este libro de cuentos no pasó inadvertida. Después de todo, se trataba en Latinoamérica de uno de los primeros libros de relatos destinado a un público infantil. Pero además, su tono amable y simple lo acerca a un registro oral con el que Quiroga ya había convivido en su estancia en la selva misionera al interactuar con los pueblos originarios de la región, sin renegar de recursos literarios que había perfeccionado desde la primera publicación (en 1905) y la influencia del cine que había aprendido a amar a través de los escritos críticos que publicó en numerosos diarios (lo cual lo llevó a incorporar recursos narrativos como la elipsis o el racconto, por ejemplo, en la literatura).

La temática de sus cuentos, que a menudo se centran en la interacción entre el hombre y la naturaleza, preanuncian un inédito –hasta el momento- interés por la preservación del medio ambiente en algunos de sus relatos. Al retrato negativo del hombre que en su afán por pescar arroja bombas en un río matando todo lo que hay (como en “El paso del Yabebirí”) o lo contamina con el paso de sus navíos (leer “La guerra de los yacarés”), se suma el deseo de convivencia entre ese mundo salvaje y la civilización, expresado en cuentos como “La tortuga gigante” o “Historia de dos cachorros de coatí y de dos cachorros de hombre”, por ejemplo.

Por otro lado, el valor literario también aparece en la filosofía con que Quiroga enlaza a esa polaridad del siglo XIX que era la “Civilización o barbarie” planteada por Domingo Faustino Sarmiento. Ante esta dicotomía del romanticismo, Quiroga no negaba los avances de la civilización, pero buscaba y fomentaba la convivencia entre la barbarie y la civilización proponiendo la posibilidad de una convivencia pacífica y solidaria (como finalmente sucede en el citado “La tortuga gigante” o “La guerra de los yacarés”). Si prestamos atención a los antagonistas que se nos presentan en el relato veremos que a menudo, cuando se trata de animales, cuentan con atribuciones con las cuales se suele presentar a un antagonista humano en su caricatura: torpe, bruto, prepotente y esencialmente malvado, se trata de una figura que actúa con violencia, como en el caso del tigre en “El loro pelado”. Otro elemento inteligente en la construcción del antagonista radica en que habitualmente se trata de predadores que resultan una amenaza tanto para el hombre como para la mayoría de los animales del ecosistema selvático elegido por Quiroga, obligando a una convivencia pacífica para combatir una adversidad.

En todo caso y más allá del breve análisis, se trata de cuentos que cumplen con la facultad de entretener y captar la imaginación de los niños, sin perder actualidad gracias a la clara, simple, pero sumamente elegante, pluma de Horacio Quiroga.

El autor

Si bien referir que la vida del autor de Cuentos de la selva puede tener mucho que ver con otros trabajos como Cuentos de amor de locura y de muerte (1917) o Los desterrados (1926), lo cierto es que se puede caer en una lectura facilista, sin relieves, sobre la figura de Quiroga. Sin embargo, la tentación parece inevitable cuando se advierte, como se mencionó al iniciar esta nota, como la tragedia y la pérdida ha atravesado su vida de forma casi constante. Horacio Silvestre Quiroga Forteza nació el 31 de diciembre de 1878 en la ciudad de Salto, Uruguay, en un hogar acaudalado con vínculos políticos con el poder. Dado que contrajo tos convulsa apenas pasaron dos meses, sus padres decidieron trasladarse a un entorno rural cercano a la ciudad de Salto y asoma la primera y temprana tragedia de su vida: en un paseo por el campo su padre, Prudencio Quiroga, se dispara accidentalmente un disparo de escopeta y muere en el acto.

Su formación estuvo a cargo de su madre, realizando sus estudios en la ciudad de Montevideo y destacándose en actividades deportivas, sintiendo especial afecto por el ciclismo. Sin embargo, su vocación artística se despertaba a raíz de su interés por la literatura y la fotografía, comenzando a colaborar en algunas publicaciones como La revista o La reforma entre los años 1894 y 1897. En 1896 ocurre una segunda perdida en su vida, la de su padrastro Asencio Barcos, que tras sufrir una hemorragia cerebral decide quitarse la vida de un disparo que es presenciado por el joven Quiroga al ingresar a su habitación. Sin embargo, estos hechos sombríos no cortan sus inquietudes creativas e incluso lo llevan a formarse en filosofía y conocer la pluma de un argentino que lo influenciaría de forma determinante en su labor creativa: Leopoldo Lugones. En 1898 tiene su primera incursión romántica con María Esther Jurkovski, pero el origen no judío de Quiroga impidió la relación debido a que los padres de la niña reprobaban esta relación y la condujeron a una separación inevitable.

Sus inquietudes bohemias y su búsqueda de perfeccionarse en el arte literario lo llevaron a utilizar la cuantiosa herencia que había recibido de su padrastro para dirigirse a la ciudad de París en el año 1900. Su retorno tras cuatro meses allí fue visto por sus amistades como un fracaso, siendo encontrado en un estado calamitoso respecto al joven que había ido al viejo continente.

Ese año se reencuentra con el grupo de intelectuales salteños que con- En el año 1911 nace la primera hija de la pareja, Eglé Quiroga, y en 1912 nace su hijo, Darío Quiroga. Con ellos convive en ese entorno selvático y comienza a elaborar desde la oralidad algunos de los relatos que luego formaran parte de Cuentos de la selva, buscando entretenerlos. Pero esta vida idílica en un entorno rústico no agradó de la misma manera a su esposa, con la cual discutía diariamente, y finalmente decidió quitarse la vida en 1915 tomando una dosis fuerte de sublimado que la condujo a una lenta agonía de ocho días. Esta muerte lo llevó a una profunda depresión de la cual lo rescató el amor por sus hijos y en 1916 decide volver a Buenos Aires para trabajar en su oficio de escritor. Manuel Gálvez le solicita un libro en 1917 y Quiroga decide editarlo con cuentos que ya había publicado en distintas revistas, dando lugar a Cuentos de amor de locura y de muerte. En 1918 afirma su calidad literaria con Cuentos de la selva, un compilado de historias para niños que había gestado para entretener a sus hijos durante su vida en Misiones.

Esta etapa en Buenos Aires sería particularmente prolífica a raíz de la edición de un nuevo libro de cuentos El salvaje (1919), la obra teatral Las sacrificadas (1920) y el volumen Anaconda y otros cuentos (1921). Al mismo tiempo colaboraba con distintos diarios de importancia como La Nación, lo cual contribuyó a darle mayor popularidad, permitiéndole acceder a raíz de su prestigio a distintos cargos políticos. Pero además, en esta etapa descubre su amor por el cine y comienza a desempeñarse como un crítico especializado, convirtiéndose en uno de los pioneros del oficio. En esos años retorna a la selva y se enamora de Ana María Palacio, de 17 años, pero la negativa de los padres atentará contra está posibilidad, llevándose a su hija lejos de allí para que no se consume ese amor.

En 1926 decide volver a Buenos Aires, donde es homenajeado por distintas figuras de la cultura y en 1927 publica el volumen de cuentos Los desterrados. Ese año se enamora de María Elena Bravo, una compañera de su hija que aceptó casarse con él y en 1928 tiene una nueva hija con esta pareja, María Elena o “Pitoca”.

En 1932 decide retirarse nuevamente a la selva misionera junto a su nueva esposa y su hija, en busca de encontrar la tranquilidad que no encontraba en la ciudad. Sin embargo, no se trató de una convivencia pacífica y estuvo signada por constantes discusiones donde el eje era el rechazo a esa vida en la selva. Esta etapa conflictiva daría lugar al volumen de cuentos Más allá (1935).

1935 sería un año negativo para Quiroga, quien luego de que le diagnosticaran hipertrofia de próstata se encontraría solo y enfermo en Misiones a raíz del abandono de su esposa e hija. Sin embargo, los dolores lo llevarían a residir en Buenos Aires para que traten sus dolores, siéndole diagnosticado en 1937 cáncer de próstata, que a esa altura ya era intratable e inoperable. Permaneció en el hospital de clínicas con la compañía de un paciente que padecía elefantitis, que debido a sus deformaciones era ocultado a la mayoría de la gente. Fue la ayuda del paciente lo que llevo a Quiroga a poder finalmente consumar el suicidio para evitarse los dolores del cáncer, tomando un vaso de cianuro.

Obras de Horacio Quiroga

Poesía:
• Los arrecifes de coral (1901)

Cuentos:
• El crimen del otro (1904)
• Los perseguidos (1905)
• Cuentos de amor de locura y de muerte (1917)
• Cuentos de la selva (1918)
• El salvaje (1920)
• Anaconda (1921)
• El desierto (1924)
• Los desterrados (1926)
• Pasado amor (1929)
• Más allá (1935)

Novelas:
• Historia de un amor turbio (1908)
• Pasado amor (1929)

Teatro:
• Las sacrificadas (1921)

Tarzán, la fabulosa historia del hombre mono

Un día de 1914, en fecha cuyos datos precisos aquí son irrelevantes, un hombre atlético y corpulento descendió de los árboles colgando de una liana, y con el impulso de su espíritu salvaje se metió en las librerías. Era Tarzán, el rey de los monos y desde ese momento habitante infaltable del anaquel destinado a las novelas de aventura en todas las librerías del mundo.

Creado por el escritor Edgar Rice Burroughs, Tarzán protagonizaba la primera novela de una saga que alcanzaría los 24 títulos e inspiraría 89 películas, diversas historietas y varias series de televisión.

La historia

Hijo de un lord inglés y una dama inglesa, John Calyton III, Lord de Greystoke, nació a fines del siglo XIX en un lugar de la selva africana donde sus padres fueron abandonados. Al año de vida queda huérfano y es adoptado y criado por una tribu de monos, los mangani, surgida de la imaginación del autor y que mezcla características de gorilas, chimpancés y homínidos. Ellos lo rebautizan Tarzán, que en la forma de lenguaje primitivo en la que se comunican, significa piel blanca.

Los títulos

Tarzán de los monos (1912)
El regreso de Tarzán (1913)
Las fieras de Tarzán (1914)
El Hijo de Tarzán (1914)
Tarzán y las joyas de Opar (1916)
Historias de la Jungla (1919)
Tarzán el indómito (1920)
Tarzán el terrible (1921)
Tarzán y el león dorado (1922/1923)
Tarzán y los hombres hormiga (1924)
Tarzán y los gemelos (1927)
Tarzán, Señor de la jungla (1927/1928)
Tarzán y el Imperio Perdido (1928)
Tarzán en el centro de la tierra (1929)
Tarzán el invencible (1930/1931)
Tarzán Triunfante(1931)
Tarzán y la ciudad de oro (1932)
Tarzán y el hombre león (1933/1934)
Tarzán y los hombres Leopardo (1935)
La búsqueda de Tarzán (1935/1936)
Tarzán y la ciudad prohibida (1938)
Tarzán el Gran Jeque (1939)
Tarzán y los náufragos (1941)
Tarzán y la Legión Extranjera (1947)

Tarzán, que ha heredado de sus padres una gran inteligencia, recibe de los monos una formación atlética y una serie de habilidades que le permiten adaptarse a las condiciones de vida en que las circunstancias lo colocaron. Pero la inesperada aparición de otros hombres, quienes sorprendidos lo encuentran viviendo como señor de la selva, modifica su vida. Sobre todo por el impacto que le produce una mujer…

Es así que aprende francés e inglés y llega al “mundo civilizado” para conocer sus orígenes. Sin embargo rechaza la oferta de esa civilización que no comparte, y regresa al mundo que conoce y ama, la jungla.

Allí vive nuevas aventuras a través de 23 volúmenes que el autor escribe hasta 1941, cuando se publica Tarzán y los náufragos, cerrando la saga con tres emocionantes relatos de uno de los ciclos más leídos, versionados, admirados y copiados en la historia de la cultura popular. En la primera de ellas, Tarzán escapa de ser llevado a Estados Unidos como atracción circense; en la segunda, se enfrenta a un famoso boxeador que va a África en busca de aventuras y a una tribu de caníbales; en la tercera, resuelve un enigmático caso de espionaje durante la segunda guerra mundial.

De la literatura al cine

De acuerdos a los datos que proporciona la Internet Movie Database, desde 1918 hasta 2010 se hicieron ochenta y nueve películas sobre Tarzán. Así el personaje alcanza el cuarto lugar en el ranking de los que más han sido llevados a la pantalla grande, sólo superado por Sherlock Holmes, Drácula y Frankenstein.

La primera se filmó en 1918, y fue una adaptación poco ortodoxa de la novela Tarzán de los monos. Por primera vez en la corta historia del cine una película superaba el millón de dólares de taquilla.

Semejante éxito alentó la secuela y muy pronto se realizó el segundo título: El romance de Tarzán. La tercera fue La venganza de Tarzán y en ella se cambió al protagonista de las anteriores, Elmo Lincoln, por el actor Gene Pollar.

De acuerdo con la modalidad de la época en 1920 se realizó el primer serial sobre una cuidada adaptación de la novela El hijo de Tarzán, con el protagónico a cargo de P. Dempsey. Se trataba de 15 capítulos que totalizaban 253 minutos de película.

En 1932 fue Johnny Weissmuller quien se puso la piel de Tarzán. Sin experiencia como actor, pero con una fama ganada como nadador olímpico, con varias medallas de oro en su haber, Weissmuller debuta como Tarzán en Tarzán de los monos, primera película sonora sobre este personaje, por tanto la primera en que se escuchó su voz. Después haría otras once películas convirtiéndose en el indiscutible y único Tarzán para toda una generación.

El siguiente actor que representó a Tarzán en el cine fue Lex Baker, quien protagonizó dignamente cinco películas, aunque sin llegar a convencer a los seguidores del rey de la jungla. Entre 1955 y 1960 el actor Gordon Scott representó seis veces el papel de Tarzán, y por eso mismo tiempo Jock Mahoney, Denny Miller y Mike Henry, también probaron suerte en el papel aunque sin mayor trascendencia.

Los ´80 no fueron una buena década para el personaje creado por Edgard Rice Burroughs. Una película de estética softcore se estrenó en 1982 con Bo Derek como mayor atractivo interpretando a Jane. Dos años después se estrena Greystoke: The Legend Of Tarzan, Lord Of The Apes, con el popular actor Christopher Lambert en el papel central. El film resultó interesante pero sin el encanto de las viejas producciones.

En 1999 la Disney estrenó la versión más exitosa de todos los tiempos con el escueto título de Tarzán; se trata de una animación con diseños técnicamente impecables y un guión flojo.

Del cine a la tele

En 1966 subió a la pantalla chica la serie Tarzán, que consigue a través de la identificación con su protagonista, Ron Ely, llevar nuevamente el personaje a la cima de la popularidad. Sobre esta serie hay un dato sumamente curioso: se grabaron sólo 57 capítulos en dos años y luego se levantó por no alcanzar los objetivos de rating que se habían propuesto sus productores. Pero la repetición de esos 57 capítulos la transformaron en un éxito en todo el mundo. Llegados los ´90 se conoció la serie Tarzán, potagonizada por Wolf Larson, con altibajos en el rating lo que llevó a su cancelación después de tres temporadas irregulares. En 1996 la televisión insistió con el tema emitiendo Tarzan the Epic Adventures, con Joe Lara haciendo de Tarzán, pero bastó una temporada para determinar su fracaso y bajarla de la programación.

Y también a la historieta

De todas las versiones de historieta que se han hecho de Tarzán, se destacan con brillo propio las de Harold Foster y la de Burne Hogarth.

Foster la creó para United Fature Syndicate, comenzando a publicarse en varios diarios de Estados Unidos el 7 de enero de 1929. Se trataba de la adaptación de la primera novela de Burroughs, a cuyo final llegó con la entrega del 16 de marzo del mismo año. Dado el éxito, le encargaron al dibujante una adaptación de la segunda novela, pero se negó y su lugar fue ocupado por Rex Maxon, de quien se publicó la primera entrega el 15 de marzo de 1931.

Cinco años después tuvo su oportunidad el dibujante Burne Hogarth, quien impuso a su trabajo un dinamismo barroco que provocó gran agitación, inédita hasta entonces en la historieta. Hogarth continuó produciendo esta página dominical durante doce años, en dos periodos, de 1937 a 1945, y de 1947 a 1950.

Después de 22 años, Burne Hogarth reapareció con el personaje que le había dado una gran popularidad, haciendo Tarzán de los monos, un libro de historieta de tapa dura y gran formato que se editó en once idiomas, y es considerado una de las primeras novelas gráficas. El éxito lo llevó cuatro años más tarde a publicar Jungle Tales of Tarzan utilizando técnicas que hasta entonces no se habían aplicado.

El autor

Una noche de 1911 el escritor Edgard Rice Burroughs, agobiado por su complicada situación económica, busca refugio en su imaginación y allí encuentra a Tarzán, el Hombre Mono, quien llega batiendo parche sobre su pecho para cambiar definitivamente la suerte de su mentor.

Es que la vida del literato nacido en Chicago el 1 de setiembre de 1875, había llegado hasta ese momento mostrándole sólo fracasos.

Después de pasar por la Harvard School de su ciudad natal, trabajó como vaquero en un rancho durante dos años, al cabo de los cuales ingresó en la Philips Academy, de la que fue expulsado por no adaptarse a sus exigencias disciplinarias. Pasó entonces un periodo de entrenamiento en la Academia Militar de Michigan y luego se incorporó al Séptimo de Caballería de los Estados Unidos. Por pedido propio se lo envió al peor de los destinos, Fort Grant, un lugar salvaje en el desierto de Arizona. Allí se nutrió con las historias de hombres que habían participado en las guerras contra comanches y apaches, historias que luego utilizaría en un ciclo de novelas sobre el tema.

Cuando consideró agotada esta etapa de su vida, abandonó el ejército y se casó con Emma Centennia Hubert. De ahí en adelante a pesar de sus esfuerzos por encontrar estabilidad para su hogar, desempeñó diversas tareas en distintos lugares: fue vaquero nuevamente; policía en Salt Lake City, carnicero en Pocatello, Idaho; buscador de oro; y revisor de avisos de venta para la Roebuck and Co. Mientras trabajaba allí escribió un relato y lo envió a la revista All Story Magazine. El relató gustó al editor que lo publicó entre febrero y julio de 1912, en seis entregas con el título La princesa de Marte. Para entonces ya había comenzado a pergeñar Tarzán, y aprovechando los 400 dólares que le reportó la publicación de su primera obra, le dedicó tiempo a la escritura y logró que en octubre del mismo año la misma revista comprara los derechos de la novela y comenzara a publicarla como un folletín, para que, finalmente en 1914 la editara con formato de libro la Casa Mc. Clurg and Company, convirtiéndose en el mayor éxito editorial del año.

Burroughs siguió escribiendo hasta convertirse en uno de los más prolíferos escritores estadounidenses, además de cubrir a los 66 años de edad, como corresponsal de guerra para el Los Ángeles Time, la Segunda Guerra Mundial.
Murió en Encino, California, el 19 de marzo de 1950.

El León

Melena majestuosa, cuerpo musculoso, rugido potente, cautiva desde siempre a los humanos, que deslumbrados por su porte han hecho de él un símbolo de fuerza y realeza. Coronado como “rey de la selva”, su reino es en realidad la sabana africana, donde se enseñorea como el depredador por excelencia.

Perteneciente a la familia de los félidos, su nombre científico es panthera leo ya que es una de las cuatro especies del género panthera; las otras tres son el jaguar, el leopardo y el tigre. Mamífero carnívoro, vive en manadas que tienen uno o varios machos dominantes que vigilan y defienden su territorio, en tanto las hembras llevan adelante estrategias de caza colectiva que resultan más efectivas que las de otros felinos que cazan en solitario.

Hasta hace unos 10.000 años el león era entre los mamíferos grandes el más extendido en el planeta. Se lo podía encontrar en la mayor parte de África, en Europa, Asia y América.

ORIGEN y EVOLUCIÓN

Durante la era Cenozoica (periodo Terciario), hace aproximadamente sesenta millones de años, en pleno Paleoceno, se produjo la separación entre los carnívoros y los demás mamíferos. En la era siguiente, la del Eoceno, ocurrió la diversificación que concluyó en las once familias que existen en la actualidad en el orden.

Entre estas familias, la de los félidos se diferenció en tiempos del Oligoceno, treinta y cinco millones de años atrás. De ella surgió el género Panthera, hace tres millones de años, con su representante más antiguo, la pantera de las nieves. Un millón de años después, en el Pleistoceno, aparece el ancestro de los cuatro felinos más emparentados de la actualidad: el jaguar, el tigre, el leopardo y el león.

Las constantes investigaciones han podido determinar que la Panthera leo ya existía en África hace un millón y medio de años; en Europa, exactamente en Isernia, Italia, aparece hace setecientos mil años con el Panthera leo fossilis. Este animal es el que trescientos mil años atrás dio origen al llamado león de las cavernas o Panthera leo spelaea. Es posible que este león cavernario haya emigrado a América del Norte a finales del Pleistoceno.

CARACTERÍSTICAS FÍSICAS

De complexión notablemente fuerte y musculosa, es después del tigre el felino de mayor tamaño. Pero a su vez es el único que presenta la particularidad del dimorfismo sexual: el aspecto de machos y hembras es evidentemente distinto debido a la diferencia en los roles que ocupan unos y otras dentro del grupo. La leona, que es quien se ocupa de la caza, no tiene melena pues esto perjudicaría la posibilidad de camuflarse para emboscar a su presa. En cambio al león, que es quien protege al grupo, la melena le da mayor porte y esconde la garganta, lugar preferido para el ataque de los felinos. Esta melena va del rubio al negro, oscureciéndose con el paso de los años.

En el tamaño también se hace ostensible la diferencia. Mientras los machos pesan entre los 150 y los 250 kg., las hembras tienen un peso promedio que va de los 110 a los 180 kg. Sin embargo el peso es variable y depende de la subespecie. Los machos sudafricanos pasan los 250 kg., en tanto los asiáticos es raro que superen los 190, e incluso entre los de la reserva nacional Masai, Kenia, no pasan los 170 kg. Con las hembras pasa lo mismo, las de Sudáfrica suelen rondar los 160 kg., en tanto las asiáticas no pasan de los 115 kg.

¿Sabías qué...?
El rugido de un león es capaz de ser escuchado a 8 kilómetros de distancia.

El mayor peso del que se tiene registro entre los machos, corresponde a un león africano en cautiverio que alcanzó los 366 kg; mientras que, de los que llevan su vida en libertad el más grande pesó 313 kg., aunque vale aclarar que son ejemplares que padecen de gigantismo.

En cuanto a la longitud, los machos tienen una altura en los hombros de un poco más de 1,20 m., y una longitud de 3,3 m, considerando la cola, que sola alcanza el metro; las hembras de altura en los hombros tienen algo menos de 1,10 m, y de longitud llegan a los 2,7 m.

MELENA

Si algo distingue al león macho es su magnífica melena. De largo pelaje, insertada en su cuello y hombros, se presenta de un color que va del amarillo pálido al intenso, o del pardo claro al oscuro y llega a veces a negro. Esta melena comienza a crecerles al año y medio de vida, y continúa su proceso de desarrollo hasta los cinco o seis años, oscureciéndose con el correr del tiempo. La melena permite que los machos se reconozcan entre sí y sepan entre ellos cuál es más o menos viejo. Excepcionalmente, se encuentran machos con una melena muy reducida o que incluso carecen de ella, tal como se ha observado en Senegal y en Kenia. También se ha comprobado que en los leones castrados la melena es mínima, lo mismo que ocurre en sus poblaciones consanguíneas, donde además el nivel de fertilidad es muy bajo.

Una pregunta que aún no encuentra respuesta es el de la utilidad de esta melena. Se habla de la apariencia que confiere al animal aumentando su porte, lo que lo ayudaría en su rol de protector de la manada, disimulando además el cuello, para el caso de que tuviera un enfrentamiento con otro felino, animales que tienen como blanco favorito de sus ataques justamente el cuello del enemigo.

Pero ya de por sí la envergadura disuade y en más de una oportunidad evita la confrontación, y en el caso de los leones no implica mayor consumo por el tamaño, porque sólo se trata de una mata de pelos que impresiona. Fuera de esta explicación, es difícil entender que necesidad habría de una melena en animales de clima cálido.

PELAJE

De pelo corto y color uniforme que varía según la población del amarillo grisáceo al pardo rojizo. En las hembras la coloración es más pálida, aclarándose aún más en la garganta y la parte inferior del cuerpo. Los sexos tienen en común un mechón blanquecino en el mentón.

Los jóvenes muestran manchas de color parduzco, incluso negro, en forma de roseta y rayas, que desaparecen progresivamente durante el crecimiento.

CABEZA Y CUERPO

Tiene un cuerpo compacto y musculoso pero esbelto y una cabeza de cráneo ancho y robusto sobre la que se insertan orejas pequeñas y redondeadas.

PATAS Y COLAS

Sus patas se caracterizan por ser muy fuertes y anchas, con garras retráctiles y almohadillas plantares para soportar el apoyo sobre suelo duro como es el de la sabana.
La cola es larga y de pelo corto, con un pequeño estuche córneo en su extremo, cubierto por una borla de pelos largos y oscuros. Tiene como principal función la de espantar insectos, muy comunes en las regiones cálidas, a los que el león es tan reacio que suele trepar árboles de gran altura para evitarlos.

FAUCES

Las mandíbulas si bien no son muy largas, sí son anchas y fuertes, y sirven para aferrar y desgarrar a las presas, más que para masticar. Su dentadura es muy desarrollada y de gran tamaño, con muelas carniceras muy grandes y coronas dentales que funcionan como dos largas cuchillas que al encajar una sobre otra cortan y rebanan la carne a la perfección. Los colmillos son los típicos del felino, pero con un largo de 6 cm.

REPRODUCCIÓN Y CICLO VITAL

El celo no se da en una época fija; las hembras entran en ese estado cada tres meses y dura entre cuatro y ocho días. Pero aún cuando la hembra no está en celo los machos intentan aparearse, ya que copulando inducen la ovulación.
El rito del apareamiento comienza cuando el macho dominante se acerca a la hembra que, o lo recibe o lo rechaza violentamente. Cuando la hembra está receptiva el olor de su orina se vuelve sumamente fuerte, entonces empieza un cortejo mutuo en el que frotan sus cabezas y se huelen entre los muslos, gruñen y simulan morderse y arañarse. Luego la hembra se sienta en el suelo y ronronea, mientras el macho la lame y muerde suavemente su nuca.

La cópula dura unos 20 segundos y se repite varias veces al día durante varios días. Si en el transcurso de este tiempo se acerca otro macho e intenta desplazarlo, es advertido por un feroz gruñido que lo aleja sin insistir. Pero si el primer macho se duerme o va de caza, la hembra acepta sin vueltas al que se acerca.

El periodo de gestación dura en promedio 110 días. Cuando se acerca el momento de la parición, la hembra se separa de la manada y busca un terreno rocoso y con vegetación para refugiarse. De esta manera mantendrá a la cría protegida de los machos y de los depredadores como la hiena y el leopardo.

Las crías nacen ciegas y abren los ojos una semana después del nacimiento. Su peso al nacer oscila entre el 1,2 y los 2,100 kg. Se arrastran a partir del segundo día y a las tres semanas andan sobre las cuatro patas. Durante este tiempo la leona realiza desplazamientos para evitar que el olor se acumule y llame la atención de los depredadores. Cuando lo hace, lleva a las crías asidas por la piel de la nuca.

Los cachorros no se destetan hasta que cumplen medio año, pero a los tres meses pueden combinar la leche materna con la carne que les trae su madre. A los 5-6 meses los cachorros ya pueden considerarse jóvenes y se integran en la manada. Allí se dedican a jugar entre sí y a llamar cariñosamente la atención de los adultos, especialmente de los machos, para evitar que los vean como comida.

Las hembras vuelven con su cría al grupo alrededor de 8 semanas después de haber parido. Pero si coincidentemente hay otra hembra en su misma situación, vuelven antes. Esto ocurre a menudo porque lo planifican, ya que sincronizar la parición permite que las madres cooperen entre sí en la cría y el amamantamiento de los cachorros que se amamantan indistintamente de cualquiera de las hembras del grupo. Otra ventaja es la formación de camadas de igual tamaño, porque cuando los cachorros se escalonan, los más grandes dejan sin alimentos a los más chicos, que terminan muriendo de hambre; o puede ocurrir que los nuevos machos asociados a la manada maten a la cría del desplazado, porque mientras las hembras están ocupadas en atenderlos no ovulan; y el otro problema que buscan evitar armando estas camadas es el de los depredadores. Tantos son los peligros que acechan a las crías que hasta el 80 % de los cachorros mueren antes de llegar a los dos años de edad.

Cuando los cachorros se incorporan a la manada se mueven con desconfianza, jugando entre ellos y tratando de incorporar a otros a su juego. Los machos adultos tienen una paciencia limitada con las crías, cuando se cansan de sus juegos las echan con un gruñido.

Después de cumplir el año y medio y antes de llegar a los dos, son echados de la manada. Si esto no ocurre, la abandonan voluntariamente para evitar la endogamia. Entonces deambulan con otros machos de su edad hasta los tres años, que es cuando alcanzan la madurez sexual y se incorporan a manadas con pocos machos y buenas posibilidades de desbancarlos.

El envejecimiento comienza entre los diez y quince años de edad, en tanto no hayan sido heridos de gravedad cuidando la manada. La vida en cautiverio, con mucha menos rudeza que en su hábitat natural, puede llegar a los treinta años, el doble de lo que viven promedio machos y hembras en libertad.

Cuando el macho dominante toma el control de la manada busca procrear lo antes posible. La leona intenta ante el usurpador resguardar a su cría, pero generalmente el macho, con mejores aptitudes para la pelea, termina matándolas. Las hembras pueden tener éxito en la protección de sus cachorros cuando actúan en conjunto. Si no lo logran, a los pocos días de que el usurpador mató sus crías, entran en celo nuevamente.

Cuando se da el caso de manadas que crecen demasiado y se vuelven excesivamente numerosas, también las hembras son expulsadas al llegar a la juventud, obligándolas a buscar su propio territorio. Esto puede suceder también cuando un nuevo macho toma el control de la manada y decide expulsar tanto machos como hembras que aún no han alcanzado la adultez.

Salud

A pesar de no tener depredadores naturales se cree que la mayoría de los leones terminan en una muerte violenta causada por otros leones o por los humanos. El macho corre más riesgos que la hembra por ser el defensor de la manada, lo que lo lleva a situaciones de agresividad con otros machos. Por eso es que si bien pueden llegar a los dieciséis años de edad, la mayoría apenas si alcanza los diez. Cuando por cuestiones territoriales se produce el enfrentamiento de manadas, también las hembras pueden resultar heridas o muertas.

Fuera de esto, las enfermedades comunes en los leones son los parásitos, las garrapatas, que producen infecciones en orejas, cuello e ingles, y la llamada solitaria, que se produce por comer formas larvarias en la carne del antílope.
Los que viven en cautiverio padecen virus del moquillo, virus de inmunodeficiencia felina y peritonitis infecciosa, como principales enfermedades.

MEDIO NATURAL

DISTRIBUCIÓN

Con un pasado que los vio pasearse por todo el Oriente Próximo, Afganistán, Irak, Irán, Pakistán y la India hasta Nepal; el este de Europa y el norte de América, la actualidad ha quedado reducida para ellos a gran parte del África subsahariana hasta Sudáfrica, evitando la región centro-occidental de la selva húmeda. Fuera de ese continente, sólo sobrevive un reducido grupo descendiente del león asiático en un punto del noroeste de la India: el bosque de Gir, en la península de Kathiyavar, que pertenece al estado de Gujarat.

LA SABANA

Las sabanas ocupan grandes extensiones en África, Asia, Australia y América del Sur. Son biomas propios de los trópicos en los que hay preeminencia de vegetación herbácea, lo que no significa que carezca de árboles sino que estos se encuentran dispersos.

Las sabanas se caracterizan por su suelo arcilloso e impermeable y la alternancia de las estaciones húmeda y seca; la seca es muy árida y facilita la propagación del fuego, lo que agiliza el desarrollo de las hierbas frenando el de los árboles, acelera la mineralización del suelo y favorece el crecimiento de las plantas que se adaptan a esas condiciones.

La sabana africana, ocupa el este del área central del continente, zona en la que se registran temperaturas medias de 23º C., con precipitaciones que llegan a los 600 mm anuales. La particularidad es que no presenta límites definidos sino que el terreno boscoso se va internando en la sabana por medio de especies arbóreas de hojas caducas, que son aquellas que caen en la estación seca. Abundan las acacias y los baobabes y está poblado por antílopes, cebras, jirafas, rinocerontes, elefantes y grandes mamíferos carniceros, animales originarios de selvas y bosques que acudieron allí por la abundancia de alimentos. El suelo es poco profundo y se distingue una primera capa con una mezcla de materia orgánica en descomposición y una segunda capa donde predominan los minerales.

HÁBITAT

El león se ha adaptado a todas las variantes de sabana, tanto húmedas como secas, sean arbóreas o arbustivas, y a pesar de su preferencia por las de tipo herbáceo de las llanuras abiertas, se ha adaptado tanto a zonas muy áridas como a tupidos bosques que bordean ríos. En lo referente a la altitud, está cómodo hasta los 3.500 m y se lo ha encontrado en lugares de hasta 5.000 m de altura. El color de su pelaje le sirve para camuflarse en este terreno, pero su historia nos muestra que en otro tiempo también se adaptaba a la selva, de ahí que los que quedan en India ocupen una zona boscosa, aunque seca y afectada por el monzón. En África, en cambio, viven en herbazales de sabana con acacias dispersas que les ofrecen su sombra.

Si bien la mayoría de los leones son sedentarios, se movilizan detrás de los grandes herbívoros cuando estos se desplazan buscando mejores pastos. Esto ocurre, por ejemplo, en la planicie de Serengeti, donde para no perder contacto con los numerosos rebaños de rumiantes, se desplazan cientos de kilómetros.

COMPORTAMIENTO SOCIAL

ORGANIZACIÓN

La sociedad leonina alcanza un grado de complejidad único entre los félidos. Su base es la manada que componen, promedio, quince individuos, pero que pueden llegar hasta cuarenta. Cada manada tiene de uno a seis machos adultos, que pueden o no estar emparentados entre sí; de cuatro a doce hembras, por lo general emparentadas; varios jóvenes de entre uno y dos años y cachorros de más de seis meses.

Si bien en el momento en que comparten una presa puede observarse el orden jerárquico que encabezan los machos dominantes, la caracterización de la manada la dan las hembras, porque además de tener lazos familiares entre sí, pueden ser hijas de los integrantes del grupo y permanecer toda su vida en la manada. Por el contrario, los machos se hacen un lugar en una manada que no es la de origen, desplazando a otros machos dominantes.

Cuando los jóvenes son obligados a abandonar la manada, participan de otra forma de organización que es la de los nómadas, movilizándose por grandes extensiones solos o en parejas, generalmente de machos emparentados. Esto marca un cambio en el estilo de vida que va del sedentarismo de la manada al nomadismo casi solitario y viceversa. Pero suele ocurrir que un macho que ha abandonado su manada no pueda insertarse en otra el resto de su vida. A las hembras nómadas les resulta muy difícil la reinserción en la vida social porque las hembras de los grupos están emparentadas y las rechazan negándoles la posibilidad de unirse a su grupo familiar.

CONFLICTOS

Los jóvenes son expulsados de la manada cuando se aproximan a los dos años de edad, tiempo en que empieza a crecerles la melena. Los que se ocupan de expulsarlos son los machos adultos, pero en caso de que las amenazas no los disuadieran, intervienen las hembras, incluso su madre, que sabe que una segunda advertencia será cruenta.

Otro conflicto se producirá cuando ya adultos quieran incorporarse a otra manada. En ese caso deberán enfrentarse a los machos ya instalados quienes les mostrarán su ira. Esto generalmente hace que se retiren, pero si insisten puede desatarse un enfrentamiento que termine con la muerte de uno de ellos. De ser así, el león vencedor come a su víctima compartiéndola con los otros componentes de la manada.

SUPERVIVENCIA

La manada no tolera individuos enfermos o heridos. Cuando esto se produce, el afectado es abandonado, marginándolo del grupo para evitar que se transforme en una carga que ya no podrá aportar ni a la caza ni a la reproducción. De esta manera cuidan la continuidad del grupo, amenazada por diversos peligros que acechan incluso a sus cachorros. Es por eso que las hembras embarazadas suelen organizarse para cuidar su futura prole; cuando nacen las crías, mientras unas cazan las otras los protegen, y de esta manera van rotando sus actividades.

La caza

Las leonas, que son quienes llevan adelante la cacería por ser más pequeñas, veloces y ágiles que los machos, aplican una estrategia que les permite conseguir una efectividad del 25% y que consiste en el ataque llevado a cabo por parte de una o dos hembras, que avanzan sobre la manada de herbívoros mientras el resto de las leonas espera agazapada en lugares estratégicos para cortarles la retirada. Lo hacen generalmente durante la noche, aguzando vista y oído, no así el olfato porque cazan yendo contra el viento.

Cuando las hembras han terminado el trabajo, lo usuales que los machos se acerquen y sean los primeros en comer, siguiendo un orden jerárquico que, cuando la comida escasea, condena a los cachorros que son los últimos en acceder al alimento. Una hembra adulta requiere cerca de 5 kg de carne por día, mientras que los machos unos 7 kg.
Si la cacería es llevada a cabo por una pareja solitaria, el macho participa y generalmente es él el que logra la presa.
Las presas favoritas son los mamíferos grandes como los ñus, impalas, cebras, búfalos y facóqueros, en África, o nilgós, jabalíes y ciervos en la India.

Comunicación

En su tiempo de descanso los leones realizan comportamientos y movimientos que constituyen medios expresivos avanzados. Utilizan una serie de expresiones faciales y posturas corporales que constituyen gestos de sociabilidad, como frotarse la cabeza, o lamerse mutuamente, algo comparable al acicalamiento de los primates. También se frotan la cabeza y acarician la frente del otro con el hocico en lo que parece un saludo, pues de acuerdo a las observaciones que se han hecho, lo repiten con el animal que ha estado separado del resto por alguna pelea. Los machos se frotan entre sí mientras cachorros y hembras frotan a otras hembras.

Los lametones los realizan combinándolos con los roces de cabezas, por lo general de manera mutua, y aparentemente el receptor siente placer. Las zonas que más se lamen son el cuello y la cabeza.

En cuanto a las vocalizaciones, varían en intensidad y altura de los sonidos, y van más allá de los gestos visuales al punto que parecerían ser la base de la comunicación. Entre sus sonidos se incluyen respingos, siseos, maullidos, ladridos y rugidos. Su rugir es muy especial, empezando con rugidos graves y largos para pasar a una serie de rugidos cortos, generalmente por la noche y con un alcance de hasta 8 km. El león es entre los félidos, el de rugido más potente.

PELIGRO DE EXTINCIÓN

A pesar de que nadie se manifiesta reclamando la protección de los leones, se están extinguiendo. Apenas si quedan 20.000 leones africanos entre los cuales los machos son menos de 5.000. Para que quede claro, hay menos leones africanos que ballenas azules o rinocerontes blancos.

Si bien las causas son muchas, una de las principales es la medicina tradicional china, que ya ha acabado con los tigres como fuente de suministros y hoy va en busca de los huesos de león como materia prima para los medicamentos alternativos. Este dato parece decisivo para la suerte de los leones si se tiene en cuenta la cantidad de trabajadores chinos desempeñando funciones en obras en el continente africano.

Como si fuera poco, las agencias de viaje suelen añadir como incentivo turístico la oportunidad de matar al “rey de la selva”; un trofeo a cambio de unas pocas monedas más.

Así es como la población de leones africanos ha disminuido un 90% en los últimos 20 años, y parece encaminarse sin remedio hacia su extinción.

CURIOSIDADES

Los comedores de hombres

Por distintas situaciones como la escasez, la vejez, la enfermedad, o porque se sienten invadidos en su área, los leones suelen atacar a los seres humanos. Son situaciones de excepción, pero cuando se producen vuelven peligroso al animal que ha descubierto en el ser humano, dada su lentitud y la relación de fuerzas, una presa fácil.

Leones en el circo romano

En la Antigua Roma existía la costumbre de echar a la arena del circo a todos aquellos que se diferenciaban por algo, molestaban al poder, o eran prisioneros de guerra a los que no les encontraban utilidad. Pero no los echaban solos, claro está; con ellos salían a la arena los leones que debían devorarlos. Sin embargo no siempre los animales cumplían con lo que se esperaba de ellos, o al menos con lo que esperaba el público que asistía al circo a entretenerse. Es que los leones a pesar de haber sido alimentados durante meses con carne de humanos, siguiendo su instinto, pasaban del hombre indefenso pues su deseo seguía siendo el de alimentarse con la carne de animales cazados en libertad. De allí tal vez venga el dicho popular: “No es tan fiero el león como lo pintan”.

Leones blancos

El llamado popularmente león blanco no es una subespecie sino una forma especial que se da por un trastorno genético denominado leucismo, que da a la piel una coloración más pálida que la habitual por la participación de un gen recesivo. El trastorno es similar al melanismo, que es el que le da la coloración a las panteras negras.

Se han encontrado leones blancos en el este de Sudáfrica, en el Parque Nacional Kruger y sus alrededores, y en Timbavati Game Reserve, pero es en cautiverio donde se da más seguido porque los criadores los seleccionan expresamente.

Recién a fines del siglo XX se llegó a la certeza de la existencia de los leones blancos. Hasta entonces se creía que se trataba sólo de una leyenda que vincula el color del pelaje con la bondad del animal. A principios de la década de 1900 se hicieron algunas observaciones que pusieron a los investigadores en la pista de que se trataba de algo más que un mito, pero recién en 1975 se pudo localizar una camada de crías de león blanco en Timbavati Game Reserve.

Pizarra digital interactiva

Se la denomina pizarra digital interactiva porque al funcionamiento de su antecedente tecnológico, la tradicional pizarra digital, agrega la posibilidad de la interactividad, ampliando de esta manera su potencial.

Conocidas como PIDI, las pizarras digitales interactivas ocupan hoy un lugar de privilegio entre los dispositivos tecnológicos al servicio de la enseñanza. Esto se debe a las múltiples posibilidades que ofrecen y que hacen de ellas una herramienta de gran utilidad para los docentes. Como toda tecnología no tiene un valor intrínseco, pero está demostrado que su correcto uso favorece el aprendizaje constructivista y mejora la didáctica docente.

Funcionamiento

Funciona por medio de un ordenador conectado a un video-proyector, cuya señal es recibida por una superficie lisa y rígida desde la que se puede controlar al ordenador e incluso hacer anotaciones sobre las imágenes proyectadas. Opera mediante el uso de un bolígrafo, el dedo o un dispositivo similar a un ratón. Esto hace que un docente capacitado en su uso necesite, entonces, una buena conectividad y una adecuada instalación en el aula para sacarle el mayor provecho.

COMPONENTES:

Ordenador

El ordenador debe ser capaz de reproducir toda la información multimedios almacenada en disco. El sistema operativo del ordenador debe ser compatible con el software de la pizarra. Las pizarras disponen de un software compatible con Windows 98, 2000, NT, ME, XP, Vista, V7, Linux y Mac (los dos últimos según el modelo).

Pantalla

Sobre la pantalla interactiva se proyecta la imagen emitida por el ordenador, controlándola mediante el uso de un puntero o el dedo. El sistema permite visualizar e interactuar a varias personas que acceden a documentos, Internet o información en diversos formatos como las presentaciones multimedios o videos y documentos de disco.

Piso direccional

Las acciones se ejecutan mediante anotaciones sobre la superficie de proyección. Se trata de un piso conectado a un ordenador que a su vez se conecta con un video-proyector. Este pie interactivo denominado piso direccional interactivo (PDi), permite operar todas las funciones, y su sustento tecnológico está dado por inducción electromagnética o por infrarrojos, resistiva u óptica.

Versión Portátil

Se dice de una PDi que es portátil cuando cumple una de las dos funciones que acá se describen:

a) Se puede trasladar fácilmente (se utiliza un accesorio que se agrega a una superficie rígida convirtiéndola en una pizarra interactiva).
b) Se puede utilizar cualquier superficie de proyección, aunque sea una pantalla enrollable o una pantalla gigante en un auditorio (se conecta una tableta al ordenador, sin cables, permitiendo el control desde cualquier lugar del recinto donde esté hecha la conexión).

Visualizador de documentos

Es un accesorio de las pizarras interactivas para las aulas TIC que funciona como una cámara que lee un documento y luego a través del proyector se comparte con toda la clase. Gracias a sus características los docentes pueden trabajar en sus clases con muchos materiales no digitalizados: objetos 3D, textos, imágenes, libros, etc. Incluso puede mostrar cualquier actividad en tiempo real.

Puntero

Se utiliza un lápiz especial como puntero, combinado con una malla contenida en toda la superficie de proyección. Dicha malla detecta la señal del lápiz en toda la pantalla con muy alta precisión (una pizarra electromagnética tiene en una pulgada la misma resolución que una táctil de 77” en toda la superficie) y envía un mensaje al ordenador cuando se pulsa con la punta del lápiz puntero.

Proyector

Permite ver la imagen del ordenador sobre la pizarra. Conviene utilizarlo colocándolo alto y a una distancia de la pantalla que le permita proyectar una imagen clara y luminosa.

El uso de un editor de textos o de imágenes para preparar una clase o realizar apuntes, debería ser habitual para educadores y educandos.

Ventajas de su uso

Si bien el uso no garantiza los resultados, se obtiene una dinámica motivadora de la que sacan provecho los estudiantes consiguiendo una mayor concentración, facilitando a su vez la tarea de los docentes en la exposición de temas complicados.

Esto no se consigue por un supuesto encanto mágico provocado por la tecnología, sino por la habilidad con que el docente prepara y desarrolla sus clases aprovechando las utilidades de la herramienta de que dispone.

Utilizarla requiere dedicar un tiempo a la preparación de la clase, de manera que se puedan presentar una serie de actividades variadas, ya que su modalidad de uso no tolera la monotonía. Esto, si bien implica un esfuerzo de parte del docente, lo recompensa, pues el recurso didáctico favorece el proceso de enseñanza, desarrolla nuevos entornos de aprendizaje y, sobre todo, potencia el trabajo interactivo y colaborativo haciéndolo rápido y positivo para las partes que intervienen.

Una pregunta frecuente respecto a las pizarras digitales interactivas es cuáles son los contenidos que mejor se potencian con su uso. Pero esto, una vez más está relacionado directamente con la capacidad del docente para elegir o generar las aplicaciones que mejor cuadren al nivel de su grupo o curso. Por lo tanto puede ser tan efectiva para exponer una clase de matemática como para hacerlo con una de artes visuales o música.

Hechas las aclaraciones correspondientes vemos que la gran ventaja es la de reunir todas las potencialidades de una computadora proyectándolas a una audiencia que tiene plena interactividad sobre lo proyectado.

Contando con una PIDI en el aula se puede:

• Interactuar. Dependiendo del tipo de pizarra, se puede interactuar mediante lápices electrónicos o simplemente los dedos con todo el software o aplicaciones instaladas en la computadora.
• Desarrollar contenidos de enseñanza enmarcados en el currículum nacional y de cualquier subsector o nivel educativo, con apoyo de actividades innovadoras y atractivas, que promuevan un nuevo clima al interior del aula.
• Ampliar considerablemente la cantidad de recursos a utilizar pedagógicamente dentro del aula e interactuar con ellos desde la pizarra y para toda la clase.
• Visitar sitios web con importancia educativa que sean generadores de instancias para el debate de puntos de vista diferentes.
• Almacenar todas las intervenciones realizadas en la pizarra, lo que permite tener un registro de todos los procesos desarrollados en la clase.
• Organizar y optimizar el tiempo durante el inicio, desarrollo y cierre de una clase.
• Promover un trabajo activo y colaborativo, generando nuevas formas de interacción entre los estudiantes y el profesor.

El papel del educador en el nuevo contexto

Hay quienes afirman que el uso de las pizarras digitales, así como en general de todas las TICs, como se denomina a las nuevas tecnologías de información y comunicación, ha cambiado el rol del docente frente a sus alumnos, disminuyendo su control sobre los contenidos y convirtiéndolo en un mero guía de la travesía emprendida por dichos contenidos. Sin embargo esto no minimiza el rol del docente ya que conserva la atribución fundamental de su función como educador, que es la de acompañar, orientar y ayudar a descubrir. Los tiempos del itinerario rígido de conocimientos y pautas de pensamiento que los docentes transmitían a sus alumnos, van dando paso a hechos más valiosos, como la adquisición de destrezas para encontrar información útil, lo que hoy se impone sobre la acumulación de contenidos.

Para avanzar en esta dirección es imprescindible contar con la disponibilidad técnica de recursos; contar con ordenadores, redes y líneas de comunicación al servicio de los docentes. Pero aún así, no sería suficiente. La otra pata que sostiene la implementación del uso cotidiano de las TICs en la educación, son los educadores, quienes no pueden esperar que esto se convierta en algo de uso normal en las escuelas cuando es excepcional en su vida.

Las TICs son versátiles y se adecúan con facilidad a necesidades diversas, pero permiten a su vez hacer un seguimiento individual sobre determinados problemas, al punto de parecer en algunas ocasiones diseñadas específicamente con ese objetivo. Para que eso suceda hay que conocer las posibilidades de los recursos para establecer cuál es el adecuado para las circunstancias en que se va a emplear, establecer objetivos y evaluar luego si esos objetivos se han alcanzado.

El uso de las nuevas tecnologías para la información y la comunicación, entre las que la pizarra digital interactiva es una de las más codiciadas, no implica el abandono del soporte papel, los libros siguen siendo un recurso insubstituible: son ligeros, económicos, durables, portables y no consumen energía. Solo se justificaría el abandono del papel impreso si apareciera un dispositivo que, contando con estas propiedades, pudiera aportar, además, nuevas funcionalidades. Entonces si podría ocurrir como con el papel y el pergamino, o el pergamino y su antecedente, las tablas de arcilla, en el que un elemento sustituyó al otro.

Lo fundamental es que la escuela no le dé la espalda al mundo, sino que se inserte en él, lo que no significa seguir modas marcadas por el consumismo sino adoptar las estrategias de comunicación que utilizan los medios para comunicarse mejor con los alumnos.

Mapuches

Los antecesores de los mapuches (gente de la tierra) se establecieron en la región de los lagos precordilleranos del valle central de Chile alrededor del año 500 d. C. Sus poblaciones se extendieron por el sur hasta el río Maullín, y por el oeste probablemente hayan llegado hasta el centro y norte de la actual provincia de Neuquén, Argentina.

Se organizaban en grupos reducidos dedicados a la caza, la recolección y el cultivo de papas en pequeños huertos ubicados en terrenos húmedos. Cuando llegaron los españoles habitaban la región situada entre los ríos Itata Y Toltén, compartiendo con los Picunche (“gente del norte”) y los Huiliche (“gente del sur”) una misma lengua, que se extendió desde del Río Choapa, al norte, hasta Chiloé, al sur.

Esta región fue identificada por los conquistadores como Arauco o Araucanía y sus habitantes como araucanos, pero aún hoy sus descendientes se reconocen mapuches.

El ingreso de los mapuches en el actual territorio argentino se produjo a partir del siglo XVII, en parte empujados por la persecución de los españoles, en parte atraídos por el ganado salvaje. Desde entonces fueron ocupando paulatinamente la zona comprendida por las provincias de San Luís, sur de Córdoba, La Pampa, Neuquén y Buenos Aires, donde permanecieron hasta que las expediciones militares de finales del siglo XIX los llevaron a instalarse al sur del río Limay. El impacto cultural que significó el ingreso masivo del pueblo mapuche en territorio argentino, provocó un cambio profundo que influyó en las culturas autóctonas dando lugar a un proceso de mestizaje e intercambio cultural que terminó conformando la población paisana de las provincias de Neuquén, Río Negro y Chubut.

LENGUA

El mapandungun, lengua mapuche, está estrechamente vinculada a la lengua de los araucanos chilenos, de la que sólo la diferencian pequeñas variaciones fonéticas y léxicas. Esto se debe a que la continua afluencia de nuevos integrantes en el tiempo transcurrido, impidió tanto una mayor diversificación como una mayor unificación y fijación de las distintas modalidades regionales que en el nuevo ambiente iban surgiendo. Por esto es que apenas si se han fijado algunas particularidades como una tendencia a convertir la R chilena en S, y la T en CH.

ECONOMÍA: DE LA AGRICULTURA A LOS MALONES

Los recursos ofrecidos por el ambiente en el que se desenvolvió la cultura mapuche en Chile, favorecieron el desarrollo de una agricultura en pequeña escala con cultivos de maíz, papa, quínoa, calabaza, habas y ají, entre otros. Esta actividad se completaba con la recolección de plantas silvestres, la caza y la cría de llamas y animales menores en el norte, y la pesca y recolección de mariscos en la costa.

Instalados en la Argentina, los mapuches continuaron con la práctica de la agricultura, fundamentalmente en Neuquén, del mismo modo que conservaron sus actividades manufactureras tradicionales. En este rubro producían elementos de uso cotidiano en madera, piezas de orfebrería, talabartería y tejidos. La base de su subsistencia se completaba con el tráfico de ganado, tarea que a fines del siglo XVIII los llevó a controlar los arreos que partiendo de la pampa húmeda, trasladaban los animales por los pasos neuquinos para comerciar en Chile. Al desaparecer los animales sueltos y extenderse la frontera blanca, los mapuches se valieron de la apropiación forzosa del ganado mediante acciones denominadas “malones”, centradas en las estancias, para conservar su fuente de recursos.

ORGANIZACIÓN POLÍTICA Y SOCIAL

La organización social que se dio en la cultura Mapuche estaba basada en la familia. Las familias se reunían en linajes relacionados por los varones emparentados y se asentaban en una misma región en la que disponían de un territorio para la agricultura, la recolección y el pastoreo. A medida que el territorio iba resultando estrecho por el crecimiento del linaje, algunos varones migraban para dar origen a un nuevo linaje que con el tiempo perdía los vínculos de sangre con el linaje original. A pesar de esto, el recuerdo de un antepasado común continuaba uniéndolos, pero se trataba de seres mitológicos como el Nahuel (tigre), el Filu (serpiente), el Ñancu (aguilucho); o elementos de la naturaleza como el Curá (piedra), el Antu (sol) que daba nombre a los linajes emparentados. El jefe o Toki era el varón más anciano. Él se encargaba de distribuir las riquezas durante los festejos ceremoniales pero el poder de mando sólo lo ejercía durante los tiempos de guerra. Esta organización social se modificó cuando los mapuches llegaron a la Argentina, debido a los enfrentamientos permanentes con el blanco y la incorporación de los malones como recurso de supervivencia. A consecuencia de este nuevo contexto, el poder de mando del Toki se acrecentó hasta volverse permanente. Los cambios llevaron a que en el siglo XIX se constituyeran los llamados “Grandes Cacicatos”, dominios de extenso territorio controlados con el apoyo de los caciques menores y los capitanejos.

ORGANIZACIÓN MILITAR

Hasta el momento en que entraron en contacto con los españoles, los araucanos tenían prácticas militares similares a las de otros pueblos con el mismo estado de evolución social, incluso sus armas eran semejantes. La dirección de la guerra entre tribus correspondía al jefe hereditario o rehue, pero cuando se formaban alianzas se elegía un jefe supremo que era el encargado de dar un rumbo común a las acciones. En la elección de estos jefes intervenían las cofradías o asociaciones guerreras, instituciones secretas de las tribus que por lo general delegaban el poder en el guerrero de más alta graduación dentro de la asociación. Por esta razón es que no siempre coincidía el jefe de guerra con el Toki que ejercía la jefatura en tiempos de paz. A su vez la autoridad del Toki de guerra caducaba al finalizar la contienda. Las cuestiones de la guerra eran tratadas en juntas secretas de aillarehues, a las que sólo concurrían guerreros iniciados. El resto tenía vedado el acceso, y la violación de esta disposición era castigada con la ejecución del infractor. La reunión era convocada en forma secreta mediante un heraldo que corría en una flecha ensangrentada que podía llevar también el dedo de un enemigo muerto.

¿Sabías qué...?
En Chile vivían 1 millón de indígenas antes de la llegada de los españoles.

Las deliberaciones no daban comienzo hasta que no concluían con los ritos religiosos tradicionales en los que solían sacrificar a un prisionero de guerra, o a un chillihueque o carnero de la tierra. Luego empezaban las deliberaciones hasta obtener los acuerdos que debían ser aprobados por aclamación por los jefes de las asambleas. Cuando se trataba de acciones de envergadura, antes de emprenderlas consultaban a los adivinos que determinaban lo propicio o adverso de los augurios. Según el resultado de estas consultas, realizaban o no las acciones previstas. También acudían a los sacerdotes o chamanes que examinaban el corazón de la víctima y se comunicaban con el Pillán, divinidad suprema, durante el proceso de sueño o éxtasis para conocer el posible suceso de la campaña. La elección del Toki se disponía cuando los augurios eran favorables. Los candidatos no favorecidos por la elección se subordinaban de inmediato al elegido sometiéndose a sus órdenes con absoluta disciplina. El Toki se ocupaba del nombramiento de los subjefes y oficiales y luego arengaba a los asistentes.

Al concluir la guerra, el triunfo se celebraba con una fiesta o reunión en la que el Toki se congratulaba con los que lo habían acompañado en la campaña. Durante estas fiestas honraban al Pillán y al tótem de acción de gracias en una ceremonia religiosa en la que ofrecían prisioneros enemigos en sacrificio expiatorio. Las víctimas eran despedazadas de acuerdo a prácticas ancestrales propias de los pueblos bárbaros. Cuando el número de prisioneros era alto, dejaban con vida una parte de ellos para canjearlos por los propios que hubieran caído en poder del enemigo. Los prisioneros también podían ser adoptados o vendidos a otros jefes interesados.

Lanzas y macanas

Las armas utilizadas por los mapuches, antes de la lucha con los españoles, evolucionaron tan velozmente como su organización militar, por lo que es difícil obtener descripciones certeras sobre ellas, pero sí se puede afirmar que hacia 1536 utilizaban su arma favorita, la macana, además del arco y probablemente también la lanza. Cuando hacia 1550 se enfrentaron con las segunda expedición de Valdivia, usaban en la primera fila de guerreros picas cortas que medían entre cuatro y cinco metros, en tanto los de la segunda fila iban armados con lanzas largas de seis a ocho metros. Las astas de las armas estaban hechas de coligüe y las puntas de madera endurecida, material que cambiaron por el metal de las espadas quitadas a los españoles. Junto a los piqueros iban soldados armados de macanas y mazas. La macana era un palo duro y pesado de tres metros de largo, de luma o de temo, del grueso de la muñeca de la mano. En el extremo superior llevaba una vuelta de 30 centímetros para darle peso.
En la formación detrás de los piqueros se ubicaban los honderos y los arqueros, que cubrían el aire con una nube de piedras y flechas de unos cincuenta centímetros de largo.

COSMOVISIÓN

Los orígenes

Los mapuches ubican sus orígenes en la lucha entre la culebra Cai-Cai, habitante de lo más profundo del mar, y la culebra Ten-Ten, que vivía en lo más alto de los cerros. Según la leyenda fue esta última quien aconsejó a los mapuches que subieran a las montañas cuando el agua comenzara a crecer. Siguiendo el consejo, lo intentaron, pero muchos murieron ahogados transformándose en peces. Para contrarrestar lo que consideraron el enojo del agua, hicieron sacrificios que la calmaron, lo que les dio la oportunidad de bajar de la montaña y poblar la tierra.

Este fue el nacimiento legendario de los mapuches, pero de su origen real no hay precisiones ni recuerdos anteriores al diluvio.

El cosmos

Las creencias mapuches dan por cierta la existencia de un cosmos dividido en siete niveles superpuestos verticalmente en el espacio. Divinidades, ancestros y espíritus benéficos habitan las cuatro plataformas superiores, en tanto en una plataforma del mal, ubicada entre la plataforma terrestre y las cuatro benéficas, residen los wekufe o entidades maléficas. Los mapuches habitan en la plataforma terrestre, donde se manifiestan tanto las fuerzas del bien como las del mal, ejerciendo sus influjos sobre la conducta humana. La última plataforma sirve de hábitat a los malignos hombres enanos, los Caftrache.

CULTURA

Vestimenta: “Bota´e potro” y chiripá.

La vestimenta típica de las mujeres consistía en dos mantas; con una se cubrían todo el cuerpo dejando libres los brazos y la parte inferior de las piernas, ceñida a la cintura con una faja de lana cubierta de cuentas de colores; la otra les servía como capa que lucían sobre los hombros prendida al pecho con un gran alfiler de plata. Eran cuidadosas con el peinado usando por lo general dos trenzas que se bamboleaban sobre sus espaldas. Llevaban adornos como collares, pulseras, tobilleras y aros de plata, y se pintaban partes de la cara de negro, azul y blanco. Los hombres se vestían con una prenda que luego se hizo típica entre las prendas de los gauchos, el chiripá, ideal para sus actividades ecuestres. Esta prenda era un paño que cubría la parte delantera de los muslos hasta la rodilla, y que se sostenía desde la cintura por medio de una faja. Ante el rigor de los inviernos, o para andar sobre los caballos, usaban poncho. El calzado consistía en botas de potro a las que adosaban en el extremo inferior pequeñas espuelas de madera, hierro, bronce o plata con las que azuzaban a los caballos. El cabello lo usaban largo y con vincha al frente.

Los toldos

Como vivienda los mapuches armaban las clásicas tolderías en las proximidades del agua, entre las que situaban celdas para caballos, carros o peatones. El tamaño variaba de acuerdo a los recursos naturales con que contaban, utilizando para la construcción palos de madera sobre los que colgaban cueros, en principio de guanaco y con el tiempo de potro. El hábitat se armaba con recintos que tenían funciones específicas, cocina, dormitorio y depósito.

Una vez que instalaban sus viviendas en lugares aptos para el desarrollo de sus comunidades, no se trasladaban, a menos que se produjera un cambio drástico que variara de manera adversa las condiciones de vida, lo que indica que eran fundamentalmente sedentarios.

ARTE

Tanto hombres como mujeres mapuches demostraban grandes aptitudes para el trabajo manual. Sus habilidades les permitieron elaborar infinidad de piezas de utilidad, pero también expresiones artísticas en las que transmitían su espiritualidad. Los hombres fabricaban sus botas de potro, sus boleadoras, cuchillos y platos, riendas para la cabalgadura, etc. Para sus trabajos utilizaban una variedad de técnicas entre las que se destacaba el trabajo en piedra, el tejido, las fibras vegetales, la madera y la cerámica, pero en lo que más se destacaban era sin duda en la orfebrería, con sus trabajos de cincelado y repujado a mano de la plata, que aumentó cuando a la llegada de los españoles tuvieron mayores posibilidades de obtener el metal. Sus joyas no sólo tenían un particular valor estético sino que además expresaban las percepciones cosmogónicas del pueblo y los misterios de su teogonía. Las joyas de plata eran apreciadas por las mujeres, sobre todo por las esposas de los lonkos o caciques, quienes las lucían en fiestas y ceremonias religiosas. Los diseños no eran sólo de piezas femeninas, sino que también los había para piezas masculinas y eran utilizados para realzar el atuendo del jinete y sus caballos.

La especialidad de las mujeres era el tejido hecho al telar.

Malón: el terror del huinca1

Los mapuches, como otros grupos aborígenes, usaron el malón como táctica militar. La sorpresa y rapidez con la que un grupo de guerreros asaltaba posiciones enemigas, ya fuera de blancos o de otros grupos indígenas, les permitía apoderarse de ganado y provisiones de sus adversarios, y retirarse llevando prisioneros. El desconcierto les garantizaba el éxito y en su veloz retirada dejaban tras de sí una población devastada y sin capacidad de reacción.

1Término despectivo con el que los mapuches nombraban a los conquistadores españoles.

EL CULTRÚN

Este instrumento, que en apariencia no es otra cosa que un tambor, representa la síntesis de la cosmovisión mapuche. Es una caja de resonancia hecha con madera del canelo o de laurel, árboles que los mapuches consideran sagrados. Para el parche usan cuero de potro, guanaco u oveja. Antes de tensarlo la Machi mete allí su canto para dejar en la caja parte de su alma; luego introduce pequeños objetos sagrados como piedras, plumas y plantas medicinales, que al sacudir el instrumento suenan como una sonaja. El parche lo ilustran con los símbolos que representan el universo Mapuche. Con el dibujo de una cruz dividen el parche en cuatro; la línea vertical representa el cosmos y la horizontal la tierra. El centro de la tierra es la intersección de ambas líneas y marca el espacio sagrado en el que el Machi alcanza la comunicación con dioses y ancestros mientras hace sonar el cultrún.

Caribes

También conocidos como caríbales o galibi, los caribes, provenientes de la región amazónica brasileña, ingresaron a la cuenca del Orinoco, el oriente, la costa central de Venezuela y el sur del Lago de Maracaibo, hacia el siglo II d. C.

Agricultores y ceramistas, inicialmente ubicaron su centro operativo en el Mato Grosso y las cabeceras del Amazonas, desde donde habrían iniciado su expansión hacia el Orinoco, llegando a conquistar la costa atlántica colombiana hacia el siglo VIII, la cuenca del lago Maracaibo hacia el siglo XI, la costa central oriental de Venezuela hacia el siglo XIII, logrando en su despliegue desplazar o absorber a los pueblos de ascendencia arawaca que ocupaban esos territorios desde 1.000 años a. C.

Una vez que ocuparon la región norte de la costa atlántica de Sudamérica, desde Paria hasta la boca del Amazonas entre los siglos IX y XIV, detuvieron su expansión controlando además la mayor parte del Caribe Insular.

La gran expansión de los caribes por América tuvo que ver con las posibilidades que les daba la navegación, tanto por mares como por cuencas fluviales, y su exogamia. Pero el área territorial en la que alcanzaron mayor desarrollo parece haber sido el norte de Colombia y Venezuela, ubicando sus puntos septentrionales extremos en las Grandes Antillas como Cuba y La Española, los meridionales en el departamento de Loreto, Perú, y en el sureste el alto curso del río Xingú, en el Mato Grosso brasileño.

LENGUA

La cantidad de lenguas que componen la familia lingüística caribe, y el carácter expansionista de los pueblos que la integran, la convirtieron en una de las más amplias de América, con diferencias muy marcadas entre las distintas zonas, producidas por el contacto con otras etnias.

HISTORIA

Los colonizadores europeos llegaron a las Antillas hacia fines del siglo XV; para entonces los arawacos eran mayoría en la región, pero hacía ya muchos años que habían empezado a ser colonizados por pueblos caribes muy belicosos. Incluso encontraron comunidades mixtas con hombres que hablaban un léxico de origen caribe mientras mujeres y niños usaban léxico arawak (de la variante eyeri o iñeri). En el dato se ve expresada la estrategia expansionista de los caribes: aniquilar a los hombres y mestizarse con las mujeres arawak. Pero la inesperada aparición de los europeos echó por tierra sus planes.

Entre los años 1492 y 1700, murió el 90% de su población, la mayoría a causa de las enfermedades traídas por los colonos. Se calcula que al llegar los primeros expedicionarios los pobladores de las Antillas Menores oscilaban entre los 7.000 y los 15.000 individuos, aunque hay historiadores que calculan entre 20.000 y 30.000 caribes, los que lentamente fueron expulsados de las islas hasta terminar refugiados en Dominica a mediados del siglo XVIII.
Las dificultades se agravaron cuando holandeses, franceses y británicos se lanzaron a la captura de aborígenes para venderlos como esclavos en las plantaciones, excusándose en su canibalismo. De este modo, la población siguió reduciéndose y en lugares como Guadalupe resultó casi exterminada.

¿Sabías qué...?
Sólo en Dominica aún quedan poblaciones de Caribes.

Franceses e ingleses fueron resistidos en sus intentos por controlar las Antillas Menores. Los caribes se valían de su capacidad como navegantes para enfrentarlos, o llegado el caso, escapar entre las islas. Sin embargo, la resistencia no alcanzó para detener la ambición de los europeos, quienes finalmente se adueñaron de Guadalupe y fundaron Saint George en Granada. Los aborígenes americanos contraatacaron para recuperar sus tierras, pero fueron exterminados borrando el último foco de resistencia hacia el año 1654. El resto del siglo se caracterizó por los acuerdos y los enfrentamientos entre las fuerzas en pugna.

A comienzos del siglo siguiente los franceses conquistaron Martinica convirtiéndola oficialmente en una colonia del Reino de Francia. La misma isla pasó a manos inglesas en 1761, pero al año siguiente, luego del tratado de París, fue devuelta a Francia.

Los caribes resistieron en la isla de San Vicente, donde se les unieron esclavos africanos que huían de Barbados, Santa Lucía y Granada, y que, al mezclarse con los nativos, dieron origen a los garífunas o caribes negros, quienes negociaron con los españoles su traslado a Honduras, donde la tierra era más fértil, a cambio de la protección de las costas.

En la actualidad en Dominica quedan unos 3.000 caribes; se autodenominan kaliganos y ninguno habla la lengua original, idioma que se considera extinto desde 1920. En San Vicente hay unos 6.000, y en algunos pueblos costeros quedan pequeños grupos.

RAZONES DE LA DERROTA

A pesar de la resistencia y las diferentes alianzas que alternativamente fueron estableciendo con holandeses, ingleses, franceses y españoles, los caribes fueron finalmente derrotados militarmente por dos cuestiones fundamentales: por un lado, los europeos dejaron de enfrentarse entre ellos estableciendo tratados de paz en los que se repartieron el mundo; por otro lado, la concepción de la guerra que tenían los caribes hacía que luego de ganar una batalla volvieran a sus poblados retomando sus tareas cotidianas, los españoles, en cambio, desde su visión imperial, consideraban propio el territorio al que llegaban sus soldados, cuya única función era consolidar las posiciones alcanzadas.

ORGANIZACIÓN SOCIAL

Agrupados en clanes familiares, los caribes seguían el linaje patrilineal en grupos llamados cacicazgos, estableciendo alianzas de pueblos federados.

La sociedad se dividía en dos grupos. El primer grupo estaba conformado por los caciques, los jefes militares y los sacerdotes, quienes se dedicaban a gobernar, defender el territorio y organizar las ceremonias religiosas. El segundo grupo estaba conformado por trabajadores, específicamente cultivadores, tejedores, orfebres, ceramistas y comerciantes. A ellos correspondía pagar los impuestos con los que se sostenía a los caciques, militares y sacerdotes. Los grupos familiares estaban bajo la autoridad de un cacique, quien conducía asesorado por sus parientes mayores. Su autoridad era absoluta pues la creencia era que descendían de los dioses.

Construían sus bahareques sobre pilotes de madera.

No se asentaban en poblados sino que construían cuidadosamente sus bahareques alejados uno de otro. Los materiales que usaban eran naturales: pilotes estructurales de madera con techos a dos aguas hechos con hojas de palmera; paredes interiores en esterillas de guadua, cactus, caña brava, que recubrían con una argamasa de origen vegetal (utilizada también para el mobiliario), y una última capa con la que le daban lustre con cal.

ACTIVIDADES PRODUCTIVAS

Los caribes eran pescadores de especies grandes, tanto de río como de mar. El pescado era la base de su alimentación. Para conservarlo utilizaban técnicas de humeado, secado y salado. Tenían por cocina un mesón de madera cubierto por tierra, donde asaban y cocinaban; lo llamaban barbacoa.

Se ocupaban también de la agricultura cosechando papas, yuca, mandioca, tabaco, cacao, frijoles, algodón, etc.
Elaboraban mantas tejidas que pintaban de varios colores. También demostraron ser muy hábiles en la elaboración de piezas de cerámica y de oro, a tal punto que los quimbayas (grupo caribe) fueron considerados como los mejores orfebres de América.

Para la comercialización de sus productos organizaban ferias comerciales de las que participaban otras comunidades.

Vista del río Orinoco, primera etapa de su expansión.

COSMOVISIÓN

Los caribes eran politeístas, adoraban al Sol y la Luna, las estrellas, las piedras, y otros dioses representados en animales como la culebra, a la que llegaron a considerar su protectora; hacían sacrificios en ceremonias especiales acompañadas con música, danzando en honor de sus dioses y muertos, a quienes veneraban. Enterraban a los caciques y a los guerreros en urnas con tapas de figuras antropomorfas, en tanto para el resto de la población utilizaban tumbas simples. Otra de sus costumbres era la de deformar los cráneos mediante el uso de tablas ajustadas alrededor de la cabeza. De igual manera, deformaban las pantorrillas y los brazos.

Los mohanes, brujos o médicos, eran los encargados de tratar las enfermedades del cuerpo y del espíritu.

¿Sabías qué...?
Venezuela fue el primer país de Sudamérica en proclamarse independiente de la Corona Española.

CULTURA

Pintura coporal

Tenían por costumbre, como ocurría en general con todas las etnias de regiones tropicales, el no cubrir sus genitales. En cambio usaban tintes vegetales para fabricar pinturas cosméticas, que servían además como protectoras contra los insectos. Pero la razón fundamental de las pinturas con las que adornaban su cuerpo, era la de identificar mediante este procedimiento a las familias, distinguiéndose para reconocimiento de otras etnias. Utilizando tintes de color negro, representaban el animal que caracterizaba a la familia a la que pertenecían. El más común era el del murciélago, además usaban el jaguar, la araña y el mono.

La familia

Practicaban la poligamia masculina por medio de la endogamia y la exogamia, en este último caso con importantes implicancias antropológicas vinculadas al carácter expansionista de la etnia. En caso de uniones consentidas la exogamia seguía patrones matrilineales y patrilineales, según lo pactado por las familias. Cuando se trataba de uniones no consentidas, se sacrificaba a los varones de la etnia sometida para que las mujeres estuvieran aptas para la unión, asegurando de esta forma la trasmisión del material genético de manera patrilineal.

Antropofagia

Si bien hay crónicas históricas que hablan de la práctica de la antropofagia por parte de los caribes, los antropólogos se encuentran divididos sobre la verdad de esta costumbre.

Comercio de ultramar

La economía marítima ha sido históricamente una de las fuentes más importantes del comercio, siendo a menudo el núcleo sobre el cual sentaron sus bases numerosos imperios de la antigüedad. Actualmente esta actividad constituye casi el 90 por ciento del comercio mundial.

La importancia del comercio marítimo en el desarrollo de la economía ha llevado a que el hombre busque y tome iniciativas para incorporar el océano como un medio para unir distintos puntos geográficos desde tiempos remotos. El valor de los barcos se vio inmediatamente en las ventajas que este transporte representaba frente a los medios terrestres, otorgando mayor velocidad y capacidad. Las rutas marítimas que se han ido estableciendo se diferenciaron inmediatamente de las rutas de exploración porque sus vías son permanentes y aseguran un flujo constante de viajeros y mercancías.

Al igual que las rutas aéreas y terrestres, que operan en su propio espacio, las rutas marítimas operan teniendo en cuenta el factor geográfico por los atributos físicos del territorio, el factor estratégico por el control ejercido y el factor comercial por el uso que finalmente se le da. Si bien el factor geográfico tiende a mantenerse en el tiempo de forma constante, el factor estratégico y sobre todo el comercial tiende a ser mucho más dinámico. A la noción que se tiene de la existencia de itinerarios regulares para el transporte marítimo es a lo que finalmente se llama rutas marítimas.

¿Qué quiere decir ultramar?

La utilización de este término hace referencia históricamente a un lugar que se encuentra al otro lado del mar, teniendo en cuenta como punto de referencia el lugar desde donde se habla. A lo largo de la historia el término comercio ultramarino hizo referencia a todo intercambio que se hiciera al otro lado del mar, conectando dos puntos. Durante la etapa colonial era común hablar de colonias ultramarinas por aquellos territorios que se encontraban situados atravesando el mar, tomando como referencia a las potencias coloniales europeas (España, Portugal o Gran Bretaña, por ejemplo).

La importancia y la configuración de las rutas marítimas ha cambiado con el desarrollo económico y los avances técnicos. Por ejemplo, la containerización (ver infografía de Comercio de Ultramar) –es decir, el uso del container como medio de almacenamiento- modificó la configuración de las rutas de navegación proporcionando nuevos servicios. Antes del proceso de containerización, que comenzó a utilizarse masivamente en la década del ´80, cargar o descargar un barco era muy caro y consumía mucho tiempo, haciendo que el navío este más tiempo atracado que en el mar.

La containerización comenzó a utilizarse a comienzos de la década del ’60 y en los ´80 comenzó a desarrollarse de forma masiva.

Uno de los primeros pueblos que supo aprovechar las ventajas del comercio marítimo fue el egipcio, que ya hacia el año 1500 a.C. generó una fluida ruta con el legendario país de Punt, que se cree que debió haber estado ubicado en la costa africana del océano Índico. Este comercio se basaba en el intercambio de productos exóticos y manufacturas, utilizándose embarcaciones con madera que era transportada desde el Líbano. Sin embargo, las intenciones comerciales se basaban en un mero intercambio que partía exclusivamente del deseo del faraón, siendo poco alentado un comercio más fluido. Al contrario, en Mesopotamia se fomentaba el comercio a través de múltiples rutas que favorecieron el establecimiento de colonias en el Asia Menor. Los mercaderes asirios habían logrado tal progreso en el comercio que lograron una modernización de la economía, dando lugar a términos corrientes en la actualidad como “cuenta corriente”, “orden de pago” o “cheque”.

Sin lugar a dudas fue la civilización minoica (3000 – 1400 a.C.), cuyo epicentro se situaba en la isla mediterránea de Creta, la cultura que mejor supo aprovechar las posibilidades del comercio marítimo. Pueblo eminentemente marino, sus naves atravesaron el Mediterráneo enlazando a las culturas más importantes de la antigüedad, influyendo de forma decisiva sobre pueblos posteriores como el fenicio o el griego. El comercio de productos manufacturados por mercancía exótica de oriente era el intercambio más común, siendo particularmente codiciados el vino, el aceite, las especias o los minerales.

El mar Mediterráneo fue la cuna de las rutas marítimas en la antigüedad.

Sin embargo, el producto más buscado de esta etapa de la Edad de Bronce fue el estaño, que resultaba fundamental para desarrollar la tecnología de ese entonces. Por esta razón eran fundamentales destinos como las enigmáticas islas Casitérides –situadas en el Atlántico, sin que aún pueda definirse su ubicación exacta-, que contaban con este material en grandes cantidades. Otro núcleo importante para el comercio de metales era Tartessos, que se cree que pudo estar localizada al sur de la actual España y rivalizó con los fenicios por el comercio marítimo en el Mediterráneo. Posteriores a los fenicios, los cartagineses extendieron su poderío marítimo desarrollando sus rutas más allá del Peñón de Gibraltar y utilizando las rutas ya exploradas por la civilización minoica para afianzar el comercio.

¿Sabías qué...?
El Canal de Panamá fue inaugurado el 15 de agosto de 1914.

Sobre estas bases los avances más significativos se hicieron durante la Era de los descubrimientos (principios de siglo XV),permitiendo que Portugal llegara a las indias atravesando el Cabo de Buena Esperanza, actual Sudáfrica, para evitar la ruta terrestre habitual –la “Ruta de las Especias”- debido a que se prefería evitar atravesar el territorio dominado por el Imperio Otomano. Las rutas comerciales se extendieron hasta el extremo oriente y abrieron la necesidad de buscar una nueva ruta marítima, que fue el móvil económico de Cristóbal Colón para llegar al “Nuevo Mundo”, es decir, el continente americano. El monopolio de las rutas marítimas ejercido por Portugal y España a mediados del siglo XVI estaba focalizado principalmente en la obtención del oro y la plata que era extraído desde las nuevas colonias, dando lugar a un intercambio y un comercio cada vez más fluido que apuntaló con la intervención de otras potencias centrales europeas (como Gran Bretaña, Francia u Holanda) el comercio marítimo tal como lo conocemos en la actualidad.

Relieves costeros

Todos disfrutamos de la playa en verano pero, ¿qué hay sumergido más allá de la costa arenosa? ¿Cómo se conforman esos paisajes donde nos bañamos? Aquí veremos algo sobre las playas, pero también sobre el accidentado terreno del océano.

Playa de la Isla Margarita, en Venezuela.

Seguramente referirnos a “relieves costeros” será en primera instancia críptico o confuso. Sin embargo, cuando pensamos en la playa que frecuentamos en verano, en los paisajes con elevados acantilados como murallas y en las paradisíacas islas, lo que estamos viendo forma parte de lo que se denomina relieve costero.

Primero comencemos definiendo que es el relieve: sin rodeos, hace referencia a la suma de irregularidades que se pueden apreciar en la superficie terrestre. Lejos de ser estáticas, estas irregularidades se encuentran en una dinámica constante –por el movimiento de las placas tectónicas- , llevando a numerosos cambios a lo largo del tiempo. Por lo tanto, cuando hablamos de relieve costero, estamos hablando de irregularidades de las costas, un lugar donde se encuentra la tierra emergida (es decir, aquel terreno que se encuentra fuera del agua) y el mar. Un sinónimo frecuente de costa es litoral.

Acantilados típicos de la región patagónica en Argentina.

Donde el océano se encuentra con la tierra

Existen varias formas de clasificar los relieves costeros, pero en primera instancia se puede dividir a cada accidente geográfico en dos subgrupos:

• Hablamos de un relieve costero entrante cuando observamos que está rodeado completamente de tierra por tres de sus lados, pero por uno cuentan con una salida al mar.
• Por otro lado, hablamos de un relieve costero saliente cuando el terreno se interna en el océano. Puede estar rodeado de agua por tres de sus lados y por el otro se enlaza a la tierra, habitualmente por la formación de un istmo.

Por otro lado también se pueden subdividir acorde a las características morfológicas (es decir, su forma), siendo abruptos o llanos.

Veamos primero aquellos acorde a su morfología:

Abruptos

• Acantilado: se trata de una formación abrupta y vertical que es rocosa y se presenta en la costa. Se forman por acción de la erosión del oleaje sobre la roca, convirtiéndose en imponentes murallones.

• Rasa mareal: se presenta en la costa y es una plataforma rocosa que se encuentra al nivel de la marea baja,apareciendo por delante de un acantilado. Este tipo de formación se conforma por la erosión del mar sobre el acantilado y, al encontrarse por debajo del nivel del mar, sólo es visible cuando se retira el oleaje.

• Terraza marina: es una plataforma que aparece expuesta gracias a las variaciones del nivel del mar y los cambios provocados por la placa tectónica, dando lugar a alzamientos y subsidencias a lo largo de la costa.

• Farallón: se trata de un promontorio (muralla rocosa) que se alza de forma aislada en el mar, en la zona costera. Se origina por el proceso de erosión de las olas sobre las partes blandas de un acantilado.

Farallones situados en la costa australiana.

• Estrecho: también se lo puede denominar canal o paso y consiste en un canal de agua que conecta dos mares u océanos, encontrándose entre dos masas de tierra.

Llanos

• Playa: es un deposito de sedimentos que por lo general se componen de arena y grava y se extiende desde el límite donde finaliza la vegetación hasta la profundidad del mar donde los sedimentos ya no se mueven.

• Flecha litoral: es un deposito de arena que se encuentra acumulado delante de la costa, apoyándose en cabos o promontorios.

• Llanura de marea: se trata de un humedal costero formado con sedimentos, al igual que la playa, pero en este caso los sedimentos son detríticos (arcillas, limos o arena) y son reelaborados por las mareas.

Llanura de marea situada en Bridgwater Bay, en el Reino Unido.

• Marisma: es un ecosistema húmedo donde predominan las plantas herbáceas que crecen en el agua.

• Albufera: es una laguna costera de agua salada o salobre que se encuentra separada del mar por un cordón o lengua de tierra o arena, comunicándose con el mar a través de uno o más puntos.

• Delta: es una extensión de territorio que se forma por los materiales depositados por un río en las zonas próximas a su desembocadura. El nombre hace referencia a la forma triangular de delta que adquieren estos accidentes.

Parque natural de La albufera, en España.

Ahora sí, veamos las principales subdivisiones de los relieves costeros:

Entrantes

• Golfo: es una amplia extensión de mar que se encuentra cerrada por puntas o cabos de tierra.

• Bahía: tiene las mismas características que el golfo pero su tamaño es más pequeño. Debido a sus características su uso más habitual es el de la construcción de puertos.

Bahía de la Playa Cavoli, en Italia.

• Ensenada: es una formación que comparte características del golfo y la bahía, pero es de menores dimensiones.

• Rada: también es una entrada al mar semejante a la ensenada o la bahía, pero su tamaño es más chico y la entrada mucho más estrecha.

• Ría: este tipo de accidentes se ven en algunas desembocaduras de ríos, siendo un valle costero que quedo sumergido bajo el nivel del mar por la elevación de las aguas.

• Fiordo: quizá el más imponente de este tipo de relieves; se trata de un barranco que fue excavado por un glaciar, siendo luego ocupado por el mar. Habitualmente estas formaciones están rodeadas de montañas empinadas que se conforman por la erosión.

Salientes

• Península: es una extensión de tierra que se encuentra rodeada por el mar, salvo en una zona estrecha a la que se llama istmo y la une con el continente.

• Cabo: también denominado punta, es cuando una parte de la costa se adentra en el mar.

• Tómbolo: es cuando una flecha litoral une una isla con el continente o dos islas entre sí.

• Isla: es una extensión de tierra firme que está completamente rodeada de agua. Esto suele corresponder a una cadena montañosa sumergida que emerge parcialmente desde el fondo del mar.

• Archipiélago: es una cadena o conjunto de islas que se suelen formar por la actividad volcánica. Estas formaciones suelen encontrarse en mar abierto, lejos de las grandes masas continentales.

Cabo San Vicente, en Portugal.