Nuestro cuerpo está conformado, entre otras cosas, por múltiples fibras que conducen impulsos nerviosos entre el sistema nervioso y las demás partes de la anatomía humana. Uno de ellos es el nervio glúteo superior, responsable de la inervación motora y sensitiva del glúteo medio y menor, el tensor de la fascia lata y el piriforme.
plexo sacro
Es una red nerviosa ubicada en la pared pélvica posterior, conformada por el tronco lumbosacro (L4, L5) y los nervios espinales sacros (S1-S4).
NERVIO GLÚTEO SUPERIOR
Es un nervio de la pelvis inferior que surge de las raíces nerviosas L4, L5 y S1 del plexo sacro.
Nace del agujero ciático mayor, sobre el músculo piriforme.
Es el responsable de enviar los impulsos nerviosos a los músculos glúteo medio, glúteo menor, piriforme y tensor de la fascia lata.
Acompaña a la arteria y la vena glúteas superiores.
Se divide en una rama superior y una rama inferior.
Se puede lesionar tras una luxación, artroplastia o fractura de cadera. Este daño produce parálisis del músculo glúteo medio.
¿Sabías qué?
El músculo glúteo medio abduce la articulación de la cadera y trabaja junto con el glúteo menor y el tensor de la fascia lata. Además, el glúteo menor es parte fundamental de la rotación medial del muslo.
Marcha de Trendelenburg
Al inervar el glúteo medio y el glúteo menor, el nervio glúteo superior juega un papel crucial en la estabilización de la pelvis durante la locomoción. Cuando este nervio se daña, los glúteos descritos se paralizan y provocan la desestabilización de la pelvis, lo que se conoce como marcha Trendelenburg.
Un signo de Trendelenburg positivo se produce cuando un paciente se para sin ayuda sobre cada pierna por turno y se produce una caída pélvica en la pierna sin apoyo. De este modo, por ejemplo, si los músculos del glúteo izquierdo están atrofiados, el lado derecho de la pelvis caerá cuando la persona esté parada sobre la pierna izquierda, lo que resta apoyo a la pierna derecha.
La glotis es un orificio entre las cuerdas vocales, considerada la válvula principal entre los pulmones y la boca. Es el componente de la laringe que está más relacionado con la producción de sonidos (fonación) y, además, también está asociado con el paso del aire en la función respiratoria y en el proceso de deglución.
anatomía
Se ubica en la parte media de la laringe, entre la supraglotis y la subglotis.
La supraglotis es el área de la laringe que está entre la base de la lengua y las cuerdas vocales.
La subglotis es el área de la laringe que está debajo las cuerdas vocales hasta la abertura traqueal.
Consta de las cuerdas vocales y de la rima glótica.
Las cuerdas vocales son un par de pliegues mucosos ubicados a cada lado de la cavidad laríngea. Cada pliegue consta de un ligamento vocal, un músculo vocal y un revestimiento mucoso. Son las responsables de la producción del sonido en el aparato fonador.
La rima glótica es la abertura estrecha, de forma triangula, ubicada entre las dos cuerdas vocales adyacentes. Su forma depende del tipo de actividad que hace la laringe.
Acción de la laringe
Forma de la rima glótica
Respiración regular en reposo
Cuña estrecha
Respiración forzada
Triangular (cuerdas vocales separadas)
Fonación
Hendidura (cuerdas vocales acercadas entre sí)
La glotis se sitúa justo entre dos pliegues: un par inferior llamado “cuerdas vocales verdaderas”, ya que son las que producen el sonido, y un par superior llamado “cuerdas vocales falsas”, que no juegan papel alguno en la producción de sonido.
¿Sabías qué?
Las cuerdas vocales verdaderas son las responsables de la producción del sonido, lo que sucede por medio de la vibración de sus pliegues a causa de la entrada del aire a través de la rima glótica.
Glotis vs. Epiglotis
La glotis y epiglotis son totalmente diferentes. Mientras que la glotis posibilita la entrada de aire a los pulmones; la epiglotis, que es un cartílago elástico, cierra la entrada de la laringe durante la deglución y previene la entrada de comida o bebida a la tráquea al sistema respiratorio inferior.
Es un hueso pequeño y esponjoso, uno de los más frágiles del cuerpo humano, constituido por finas láminas óseas. Está ubicado en la zona mediofacial del cráneo y es un elemento importante que contribuye a la formación de la órbita, el tabique nasal, la cavidad nasal y el suelo de la fosa craneal anterior.
estructura y funciones
Hueso de tamaño reducido con estructura cúbica.
Consta de cuatro componentes principales: una placa cribiforme, dos laberintos etmoidales y la placa perpendicular.
Está separado de las órbitas por la lámina papirácea.
De las masas laterales etmoidales surgen los cornetes superior y medio, convirtiéndose en el meato superior y medio.
Alberga células aéreas etmoidales, responsables, entre otras cosas, de la sensación olfativa, la fonación y la ventilación.
Repercute en el drenaje de los senos frontales y maxilares mediante el complejo osteomeatal.
¿Sabías qué?
La palabra “etmoides” proviene del griego ēthmoeidés, que significa “(hueso) en forma de criba”. Lo que está directamente relacionado con su estructura esponjosa y ligera.
Articulaciones
El hueso etmoides se articula con trece huesos: en la parte superior con el frontal; en la parte posterior con el esfenoides y con los palatinos; en la parte anterior con los nasales; en la parte lateral con los maxilares superiores y el unguis, y en la parte inferior con el vómer.
Músculos y nervios
El etmoides, al formar parte de la órbita, está asociado con siete músculos extraoculares. Seis de esos músculos nacen del vértice orbitario. El oblicuo inferior surge del suelo de la órbita, mientras que los músculos rectos (superior, inferior, lateral y medial) salen del anillo de Zinn.
Asimismo, el hueso etmoidal y los senos etmoidales están asociados con algunos nervios craneales, como el nervio olfatorio y el nervio óptico.
Fractura etmoidal
El hueso etmoides puede romperse o fracturarse tras un golpe o caída grave. Algunos signos de la fractura están relacionados con la estructura del hueso, por ejemplo:
Fractura de la placa cribiforme. Puede provocar pérdida del sentido del olfato.
Fractura del laberinto. Puede provocar enfisema orbital.
El cuello puede doblarse y girar gracias a un poderoso músculo llamado esternocleidomastoideo (ECM). El estrés y la mala postura pueden alterar la salud de este músculo y provocar dolor y rigidez. Algunas opciones para su tratamiento incluyen los estiramientos, las fisioterapias y la manipulación osteopática.
¿Qué es?
El músculo ECM es el más grande de la parte frontal del cuello y se extiende desde la apófisis mastoides hasta la clavícula y el esternón. Se puede sentir con los dedos si se toca el lado derecho e izquierdo del cuello.
La ubicación del ECM da origen a su nombre:
ESTERNO
CLEIDO
MASTOIDEO
Relativo al esternón.
Relativo a la clavícula.
Relativo a la apófisis mastoidea.
Una parte del ECM se conecta con el esternón: hueso plano y largo en el centro del pecho.
Una parte del ECM se conecta en el centro de las clavículas izquierda y derecha.
El ECM conecta su otro extremo a la apófisis mastoides.
¿Sabías qué?
El esternocleidomastoideo cubre parcialmente la arteria carótida y la vena yugular; entonces, se puede sentir el pulso carotídeo al palpar el tercio medio de la parte frontal de dicho músculo.
FUNCIONES
Mantener la postura. Estabiliza el cuello incluso cuando no se está moviendo.
Respirar. Junto con otros músculos de cuello, el ECM permite levantar el esternón y la clavícula cuando se inhala. Este movimiento hace que haya más espacio para que los pulmones tomen aire.
Masticar. Mantiene conectada la articulación de la mandíbula (ATM) con el cráneo, lo que ayuda a abrir y cerrar la boca.
Fibras
El ECM está conformado por fibras musculares que utilizan oxígeno para la obtención de energía. De estas, el 60 % son fibras anaeróbicas blancas y el 40 % son fibras aeróbicas rojas. Por lo general, las fibras blancas son más potentes y provocan contracciones más fuertes que las rojas.
Trastornos
Síndrome esternocleidomastoideo: afección aguda que involucra, entre otras síntomas, rigidez del cuello y dolor. Sucede cuando se desarrollan zonas sensibles, tensas o puntos gatillos en el músculo ECM.
Trastornos de la articulación temporomandibulares (ATM): pasa cuando los músculos y ligamentos que sostienen la articulación temporomandibulares se irritan o lesionan.
Tortícolis: ocurre cuando los músculos del ECM se tensan o contraen y hacen que la cabeza se incline hacia un lado, causando dolor.
Tratamientos comunes
Terapias. Puede ser física o de frío y calor. Ayudan a aliviar la inflamación y el dolor.
Estiramientos. Fortalecen y alargan las fibras musculares.
Masajes. Relajan y liberan el músculo.
Tratamiento de manipulación osteopática.
Tratamiento de manipulación osteopática
Es un método de tratamiento para el dolor muscular, tendinoso y óseo. Los médicos en medicina osteopática utilizan esta práctica para diagnosticar, prevenir y corregir desequilibrios estructurales del cuerpo y aliviar el dolor. Dentro de sus técnicas se incluye la aplicación de una presión suave sobre los músculos, articulaciones y tejidos blandos.
Nuestro antebrazo está formado por dos huesos largos igualmente importantes: el cúbito y el radio. Estos, en conjunto, permiten la movilidad del brazo y la muñeca. Las fracturas pueden ocurrir en uno o ambos huesos y en diferentes niveles, ya sea en el extremo distal o proximal. Asimismo, las causas son variadas.
Anatomía del antebrazo
El cúbito y el radio son huesos largos y levemente curvados.
El cúbito y el radio están paralelos desde el codo hasta la muñeca. En el codo se articulan con el húmero, en la muñeca se articula con el carpo.
El cúbito está del lado del dedo meñique, mientras que el radio está del lado del dedo pulgar.
El cúbito es un poco más largo que el radio.
El cúbito y el radio soportan músculos, tendones, vasos sanguíneos y ligamentos de importancia para el cuerpo.
Rotura de huesos
Los huesos del antebrazo pueden romperse o fracturarse de dos formas: fractura única (cuando se rompe solo el radio o el cúbito) o fractura combinada (cuando se rompen ambos huesos).
Si la fractura es combinada y hay una lesión articular en la muñeca o en el codo, pueden clasificarse como fracturas de Galeazzi o Monteggia.
Tipos de fracturas combinadas en el antebrazo
Fractura de Galeazzi: es una fractura del tercio medio distal del radio. Con ella ocurre una dislocación del cúbito en la muñeca.
Fractura de Monteggia: es una fractura del tercio proximal del cúbito, lo que conlleva a la dislocación del radio en la articulación del codo.
¿Sabías qué?
Por lo general, los huesos del antebrazo se fracturan después de caerse fuertemente, por una lesión deportiva o luego de un accidente automovilístico.
Tratamiento
Tratamientos no quirúrgicos
Consiste en el uso de un yeso durante un tiempo determinado.
Se emplea en fracturas estables y simples.
El médico seguirá el progreso con las radiografías.
No se puede levantar ni soportar pesos mientras se use el yeso.
Tras retirar el yeso, se inicia fisioterapia.
Tratamientos quirúrgicos
Se trata de una intervención de una o más incisiones en el antebrazo.
Los huesos rotos se mantienen unidos a través de placas o tornillos.
Tras la cirugía se coloca una férula.
No se puede levantar ni soportar pesos tras la intervención, hasta que el médico lo indique.
El médico seguirá el progreso con las radiografías.
Las bacterias pueden sobrevivir en condiciones extremas y están en todas partes: en nuestro entorno, en la piel, en la boca y en el intestino. Millones de de bacterias buenas viven en nuestro cuerpo, pero también existe un porcentaje menor que causa enfermedades y, en algunas ocasiones, hasta la muerte.
Bacterias beneficiosas
Bacterias perjudiciales
¿Qué causan?
Beneficios al cuerpo humano, también pueden ser inocuas.
Enfermedades.
¿Cuáles son sus funciones?
Proporcionar nutrientes esenciales y ayudar a proteger el cuerpo de las infecciones.
Causar infecciones o envenenamiento al organismo.
¿Cuál es su abundancia en el cuerpo humano?
Muy abundantes. Casi el 85 %.
Poco abundantes. Casi el 15 %.
¿Dónde se pueden encontrar?
En alimentos fermentados, algunos productos lácteos, medicamentos, entre otros.
En alimentos, el aire, el agua y otros seres vivos.
Los huesos de nuestro cuerpo cumplen muchas funciones importantes, desde brindar soporte hasta permitir su movimiento. También juegan un papel importante en la producción de células sanguíneas y el almacenamiento de grasa. La médula ósea es el tejido esponjoso o viscoso que llena las cavidades de los huesos.
¿Qué es la médula ósea?
La médula ósea, también llamada tejido mieloide, es un tejido blando y gelatinoso que se encuentra dentro de algunos huesos. La médula ósea es roja o amarilla, según la preponderancia de tejido hematopoyético o graso.
funciones generales
La médula ósea da lugar a todas las células linfoides que migran al timo y maduran en células T, así como a la población principal de células B convencionales.
Las células B maduran en la médula ósea y se someten a una selección antes de llegar a los tejidos linfoides periféricos.
Las plaquetas, que son cruciales para el proceso de coagulación de la sangre, se forman a partir de la médula ósea al igual que otras células sanguíneas.
La médula amarilla participa activamente en el almacenamiento de lípidos.
Tipos
Médula ósea roja
La médula roja forma todas las células sanguíneas con la excepción de los linfocitos. También contribuye, junto con el hígado y el bazo, a la destrucción de glóbulos rojos viejos.
Este tipo de médula consiste en un tejido fibroso delicado y muy vascularizado que contiene células madre, que se diferencian en varias células sanguíneas. Las células madre se convierten primero en precursores, o células blásticas, de varios tipos:
Los normoblastos dan lugar a los glóbulos rojos o eritrocitos.
Los mieloblastos se convierten en granulocitos, un tipo de glóbulos blancos o leucocitos.
Las plaquetas, pequeños fragmentos de células sanguíneas que se forman a partir de células gigantes de la médula llamadas megacariocitos.
En los mamíferos, la formación de sangre en los adultos tiene lugar predominantemente en la médula. En los vertebrados inferiores, otros tejidos también pueden producir células sanguíneas, incluidos el hígado y el bazo.
A medida que envejecemos, la médula ósea roja se reemplaza gradualmente por médula ósea amarilla. En la edad adulta, la médula ósea roja se puede encontrar en algunos huesos, incluidos:
Cráneo
Vértebras
Esternón
Costillas
Extremos del húmero
Pelvis
Extremos del fémur
Extremos de la tibia
Médula ósea amarilla
Este tipo de médula participa en el almacenamiento de grasas. Las grasas de la médula ósea amarilla se almacenan en células llamadas adipocitos y se pueden utilizar como fuente de energía según sea necesario.
Contiene células madre mesenquimales, que pueden convertirse en células de hueso, grasa, cartílago o músculos.
La médula amarilla que se encuentra en los huesos esponjosos y en el eje de los huesos largos, no es vascular y consiste principalmente en células grasas. Está compuesto por tejido hematopoyético que se ha vuelto inactivo.
estructura
La médula ósea está formada por componentes celulares y no celulares, y estructuralmente se divide en regiones vasculares y no vasculares.
La sección no vascular de la médula ósea está compuesta por células hematopoyéticas empaquetadas entre células grasas, bandas delgadas de tejido óseo o trabéculas, fibras de colágeno, fibroblastos y células dendríticas.
La sección vascular contiene vasos sanguíneos que suministran nutrientes al hueso y transportan las células madre sanguíneas y las células sanguíneas maduras formadas hacia la circulación.
afecciones involucradas
Para diagnosticar alguna enfermedad relacionada con la médula ósea, especialmente aquellas que tienen que ver con la sangre y sus componentes se debe realizar la aspiración de médula ósea, que consiste en la extracción directa mediante succión de una pequeña cantidad de médula ósea, a través de una aguja hueca.
La necesidad de una aspiración de médula ósea se basa normalmente en estudios de sangre previos y es particularmente útil para proporcionar información sobre las diversas etapas de las células sanguíneas inmaduras.
La médula ósea es fundamental para la producción de células sanguíneas. Por lo tanto, una variedad de afecciones relacionadas con la sangre implican problemas con la médula ósea y afectan la cantidad de células sanguíneas producidas. Esto hace que compartan muchos síntomas comunes, que incluyen:
Fiebre: puede ser el resultado de no tener suficientes glóbulos blancos sanos.
Fatiga o debilidad: se debe a la falta de hemoglobina, la proteína de los glóbulos rojos que transporta el oxígeno.
Aumento de infecciones: debido a que hay menos glóbulos blancos sanos que ayudan a combatir las infecciones.
Dificultad para respirar: un recuento de glóbulos rojos más bajo puede resultar en que los tejidos de su cuerpo reciban menos oxígeno.
Sangrado y moretones: debido a que la persona tiene menos plaquetas sanas, por lo tanto la sangre tiene menos coagulación.
¿Sabías qué?
Muchas personas con leucemia, linfoma, anemia de células falciformes y otras enfermedades potencialmente mortales, dependen de los trasplantes de médula ósea o sangre del cordón umbilical para sobrevivir.
Leucemia
Es un tipo de cáncer que puede afectar tanto la médula ósea como el sistema linfático. Ocurre cuando las células sanguíneas sufren mutaciones en su ADN. Esto hace que crezcan y se dividan más rápidamente que las células sanguíneas sanas. Con el tiempo, las células que mutaron comienzan a desplazar a las células sanas de la médula ósea.
Algunos de los principales tipos de leucemia incluyen:
Leucemia mielógena aguda
Leucemia mielógena crónica
Leucemia linfocítica aguda
Leucemia linfocítica crónica
No existe una causa clara de la leucemia, pero ciertas cosas pueden aumentar su riesgo, que incluyen:
Exposición a ciertos químicos.
Exposición a la radiación.
Algunas afecciones genéticas, como el síndrome de Down.
Anemia aplásica
Ocurre cuando la médula ósea no produce suficientes células sanguíneas nuevas. Esto sucede por daño a las células madre de la médula ósea, lo que les dificulta su conversión en nuevas células sanguíneas.
Este daño puede ser:
Adquirido: por la exposición a toxinas, radiación o enfermedades infecciosas, como Epstein-Barr o citomegalovirus. Los trastornos autoinmunitarios, como la artritis reumatoide y el lupus, también pueden causar anemia aplásica.
Heredado: por una condición genética. Un ejemplo de anemia aplásica hereditaria es la anemia de Fanconi.
Trastornos mieloproliferativos
Los trastornos mieloproliferativos ocurren cuando las células madre de la médula ósea crecen de manera anormal. Esto puede conducir a un aumento en el número de un tipo específico de glóbulo.
La aparición y reaparición de enfermedades virales transmitidas por vectores, como el dengue, el zika y la chikungunya, plantea preocupaciones globales sobre las causas de la aparición, las amenazas a la salud, la carga y la viabilidad de la prevención y el control.
Dengue
Zika
Chikungunya
Modo de transmisión
Vector (mosquito).
Vector (mosquito).
También se puede transmitir, de persona a persona, por transmisión sexual.
Vector (mosquito).
Vector
Aedes aegypti y Aedes albopictus.
Aedes aegypti y Aedes albopictus.
Aedes aegypti y Aedes albopictus.
Siglas
DENV
ZIKV
CHIKV
Tipo de virus
Flavivirus
Flavivirus
Alphavirus
Período de incubación
4 a 14 días.
3 a 12 días.
1 a 12 días.
Síntomas generales
Dolor de cabeza.
Dolores musculares y de las articulaciones.
Enrojecimiento de ciertas partes de la piel.
Inflamación o hinchazón de los ganglios linfáticos.
Dolor de cabeza.
Dolores musculares y de las articulaciones.
Enrojecimiento de ciertas partes de la piel.
Inflamación o hinchazón de los ganglios linfáticos.
Dolor de cabeza.
Dolores musculares y de las articulaciones.
Enrojecimiento de ciertas partes de la piel.
Inflamación o hinchazón de los ganglios linfáticos.
Síntomas específicos
Fiebre alta, náuseas, cansancio intenso, picazón y sangrado de nariz y encías. Se pueden presentar fases hemorrágicas.
Fiebre baja, sarpullido descendente, dolores musculares, conjuntivitis, dolor de cabeza, edema y vómitos.
Fiebre alta, dolor de cabeza fuerte, dolor muscular y de articulaciones moderado o grave, que afecta especialmente a las extremidades.
A continuación se detalla un listado de los números de emergencia habilitados por los gobiernos de cada país para el público en general, con la finalidad de que se puedan disipar dudas sobre cómo actuar y a la vez informar sobre posibles casos de infectados con el virus Covid-19 que existan en cada comunidad.
Argentina: 107 / 0800-222-1002
Bolivia: 800-10-1104
Brasil: 136
Chile: 600-360-77-77
Colombia: 123 / 192 celular
Costa Rica: 1322
Cuba: 7-838-33-50
Ecuador: 171
El Salvador: 132
España: 900-102112
Guatemala: 1517
Honduras: 911
México: 800-0044-800
Nicaragua: 8418-9953
Panamá: 169
Paraguay: 911 / 0983-87-92-75
Perú: 113
Puerto Rico: 311
República Dominicana: 809-686-9140 / 1-809-200-4091
Las medidas de prevención y aislamiento sanitario son necesarias para el control de las infecciones generales y en particular del nuevo coronavirus (COVIT-19). Es por ello que se deben llevar a cabo de manera estricta para evitar la masiva propagación y las complicaciones que acarrea este virus.
Casos confirmados y casos sospechosos:
Las personas que están en su domicilio porque poseen confirmación médica de haber contraído COVID-19 o porque están esperando diagnóstico definitivo, es decir que entran en la definición de caso sospechoso, deben mantener aislamiento estricto hasta el alta médica.
Esto implica que:
No deben salir del domicilio.
No deben recibir visitas.
No debe haber presencia de personas mayores de 60 años en la misma vivienda.
Siempre que sea posible, deben permanecer en una misma habitación individual, evitando transitar por zonas comunes de la casa.
No deben tener contacto estrecho con otras personas (distancia mínima de 1 metro).
Deben lavarse las manos con agua y jabón o alcohol en gel periódicamente.
Al toser o estornudar, deben cubrirse la nariz y la boca con el pliegue interno del codo, o usar pañuelo y desecharlo inmediatamente.
No debe compartir utensilios de cocina (plato, vaso, cubiertos, etc.). Todo esto deberá limpiarse con agua y detergente luego del uso.
Los elementos de aseo deben ser de uso exclusivo (jabón, toalla). Se deberán lavar luego de su uso.
Deben ventilar adecuadamente los ambientes.
Debe limpiar y desinfectar las superficies y objetos de uso frecuente (especialmente mesas, mesadas, sillas, escritorios y otros utilizados diariamente).
Esto se hará de la siguiente manera:
Lavar con una solución de agua y detergente.
Enjuagar con agua limpia.
Desinfectar con una solución de 10 ml de cloro, lejía o lavandina de uso comercial en 1 litro de agua.
No debe viajar.
Sólo para casos sospechosos:
Para las personas que entran en la definición de caso sospechoso, es decir, que están esperando diagnóstico definitivo por COVID-19:
Deben seguir todo lo explicado en el punto anterior, mantener aislamiento estricto hasta diagnóstico definitivo y si es descartado, no requiere continuar con el aislamiento estricto.
Si se confirma el diagnóstico, deben mantener aislamiento estricto hasta el alta médica tal como está indicado en el punto anterior.
Contactos estrechos de casos confirmados:
Un contacto estrecho es cualquier persona que haya permanecido a una distancia menor a 1 metro (ej. convivientes, visitas) con una persona que presentaba síntomas y luego fue confirmada por coronavirus.
Estas personas deben mantener aislamiento domiciliario durante 14 días desde el último contacto con el caso confirmado o bien, en caso de ser convivientes, 14 días desde el último día en que el caso confirmado presentó síntomas.
En todas estas situaciones cada persona deberá cumplir con las siguientes medidas:
No deben tener contacto estrecho con otras personas (distancia mínima de 1 metro).
No deben salir del domicilio.
No deben recibir visitas.
No deben haber presencia de personas mayores de 60 años en la misma vivienda.
Deben lavarse las manos con agua y jabón o alcohol en gel periódicamente.
Al toser o estornudar, deben cubrirse la nariz y la boca con el pliegue interno del codo, o usar pañuelo descartable (y desecharlo inmediatamente).
No deben compartir utensilios de cocina (plato, vaso, cubiertos, mate, etc.). Todo esto deberá limpiarse con agua y detergente luego del uso.
Los elementos de aseo deben ser de uso exclusivo (jabón, toalla). Se deberán lavar luego de su uso.
Deben ventilar adecuadamente los ambientes.
Deben limpiar y desinfectar las superficies y objetos de uso frecuente (especialmente mesas, mesadas, sillas, escritorios y otros utilizados diariamente). Esto se hará de la siguiente manera:
Lavar con una solución de agua y detergente.
Enjuagar con agua limpia.
Desinfectar con una solución de 10 ml (2 cucharadas soperas) de lavandina de uso comercial en 1 litros de agua.
Ante la presencia de síntomas (tos o fiebre o dolor de garganta o falta de aire), comunicarse (idealmente de manera telefónica) inmediatamente con el servicio de salud.