Censos demográficos

Los censos proporcionan una estadística descriptiva del número de individuos, tamaño de la población y composición del hogar o de la familia, e información sobre la distribución por sexo y edad. A menudo incluyen otros temas demográficos, económicos y relacionados también con la salud.

Ecuador

La República del Ecuador limita con Colombia, Perú y el océano Pacífico. El país también incluye las Islas Galápagos en el Pacífico.

El último censo oficial que registró la población de Ecuador ocurrió en el 2010 y mostró que había 14.483.499 personas; luego se realizó un estimado de 16,62 millones para el 2017.

El país tiene una densidad de población de 59 personas por kilómetro cuadrado.

La mayor concentración de ecuatorianos habita en las dos ciudades más grandes: Guayaquil con una población de 2.350.915 y la ciudad capital de Quito con 2.239.191 según los datos del censo de 2010.

Ecuador tiene una población muy diversa étnicamente. La mayoría de los grupos étnicos descienden de los colonos españoles y de los pueblos originarios de América, ya que la mezcla de estos dos grupos creó la categoría mestiza. Hasta el 2014, el grupo étnico más grande seguía ocupado por los mestizos, descendientes de colonos españoles e indígenas, que constituyen el 71,9 % de la población.

Los amerindios representan casi el 7 % de la población, mientras que los afroecuatorianos, descendientes de esclavos negros representan el 7 % de la población; por su parte, los blancos de ascendencia europea constituyen el 12 % de la población.

Los mestizos son el grupo más grande que ocupa el territorio ecuatoriano.

Se estima que de 2 a 3 millones de ecuatorianos viven en el extranjero, pero el aumento del desempleo en los principales países receptores como España, Estados Unidos e Italia, ha frenado la emigración y aumenta la probabilidad de que regresen a su país de origen. Ecuador tiene una población inmigrante pequeña pero creciente y es el principal receptor de refugiados de América Latina.

Argentina

Este país se encuentra en el sureste de América del Sur, limita con Chile, Uruguay, Brasil, Paraguay, Bolivia, el océano Atlántico Sur y el Pasaje de Drake.

¿Sabías qué...?
Las ciudades más grandes de Latinoamérica son Sao Paulo, Brasil con 21 millones de habitantes, Buenos Aires, Argentina con 13,6 millones y Río de Janeiro, Brasil con 12,2 millones.

El último censo realizado fue en el 2010 donde se publicó que contaba con 40,1 millones de habitantes. A pesar de ser un país grande, tiene una densidad de población bastante baja de sólo 14 personas por kilómetro cuadrado.

Para el 2017 se estimó una población de 44,27 millones de personas en Argentina.

La capital y la ciudad más grande del país es Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la segunda área metropolitana más grande de América del Sur.

Argentina es un país muy diverso de inmigrantes, por lo que los argentinos a menudo lo llaman “el crisol de razas”. Entre los siglos 18 y 19, este país recibió más de 6,6 millones de inmigrantes.

La mayoría de los argentinos descienden de varios grupos étnicos europeos, con más del 55 % de origen italiano. El segundo origen étnico más común es el español; alrededor del 17 % tiene orígenes franceses y aproximadamente el 8 % desciende de inmigrantes alemanes. Argentina tiene hoy una gran población árabe, la mayoría de los cuales son de Siria y el Líbano. También hay alrededor de 180.000 asiáticos, principalmente de origen chino y coreano.

El gobierno argentino estima que hay 750.000 residentes sin documentos oficiales, muchos de los cuales inmigraron de Paraguay, Perú y Bolivia.

Argentina tiene una proporción bastante alta de personas mayores de 65 años, que representan casi el 11 % de la población. Alrededor del 26 % de la población tiene menos de 15 años, que es ligeramente inferior al promedio mundial.

Venezuela

Situado en la costa norte de América del Sur, la República Bolivariana de Venezuela es uno de los países más grandes del continente. Posee una trayectoria censal de gran relevancia desde el año 1873, cuando se celebró el primer censo poblacional con la cifra de 1.732.411 habitantes.

El último censo oficial fue en el 2011 donde se determinó que la población de Venezuela era de 23.054.985; sin embargo, un cálculo de la CIA del mismo año colocó los números en 27.150.095. Al darle confiabiabilidad a estos datos se pudo estimar que la población de Venezuela en el 2017 sería de 31,98 millones de habitantes.

Venezuela cuenta con una superficie total de 916.445 kilómetros cuadrados, pero está relativamente poco poblada, lo que se debe en parte a un paisaje montañoso en algunas áreas. En general, hay un promedio de 33,8 personas por cada kilómetro cuadrado de tierra.

El World Factbook de la CIA produjo un conjunto de estadísticas basadas en su propia estimación de julio de 2011 que sitúa a la población de Venezuela en 27.635.743.

La población de Venezuela representa el 0,42 % de la población total del mundo, es decir que una de cada 238 personas en el planeta es residente de Venezuela.

México

La Ciudad de México es la capital de México y la sede de los poderes federales de la Unión Mexicana; también es el Distrito Federal, que es una entidad federal dentro del país que no es en realidad ninguno de los 31 estados, sino que pertenece a la federación en su conjunto.

El censo de 2010 utilizó tanto una forma corta como una larga de encuesta. La forma larga se usó para 2,9 millones de hogares lo que representa el 10 % de la población total. Se recopilaron datos como bienes del hogar, empleo, seguridad alimentaria, educación, migración, uso de la atención médica e historias de nacimiento. En este censo la población total era de 8,851 millones de habitantes y se llegó a estimar la cifra de 8.918.653 para el 2016.

La Ciudad de México tiene una larga y rica historia, es conocida como uno de los centros financieros más grandes del continente y la ciudad de habla hispana más grande del mundo.

En 1921, el censo mostraba que más del 54 % de la población de la ciudad era mestiza, el 23 % era europea y casi el 19 % era indígena. La Ciudad de México es hoy el hogar de un gran número de inmigrantes y expatriados de Canadá, Estados Unidos, América del Sur, América Central, Islas del Caribe, Europa y Oriente Medio.

Datos del censo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) han demostrado que el número de extranjeros en el país ha crecido un 95 % en la última década, la mayoría de los cuales provienen de Estados Unidos.

La población actual de México es de 129.810.731 según las últimas estimaciones de las Naciones Unidas.

Perú

La República del Perú se encuentra en el oeste de América del Sur; tiene una larga historia de culturas, incluidas algunas de las más antiguas del mundo. La ley en Perú requiere que el Gobierno realice un censo cada diez años. En total, se han realizado 11 censos en Perú desde el primero en 1836.

Polémica en Perú

El último censo de Perú en el 2007 se llevó a cabo debido a las polémicas imprecisiones en el censo del 2005. El hacer que todos los habitantes se quedaran en casa el día del censo y que la mayoría de las empresas cerraran le costó al país hasta 250 millones de dólares.

El último censo oficial en Perú se llevó a cabo en el 2007 debido a imprecisiones en el censo de 2005; en este se determinó que la población aumentó de 22.639.443 en el año 1993 a 28.220.764 habitantes.

En 2006, en una encuesta del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), los peruanos se autoidentificaron como mestizos 59,5 %, quechuas 22,7 %, aymará 2,7 %, amazónicos 1,8 %, negros o mulatos 1,6 %, blancos 4,9 % y otros 6,7 %.

Hoy en día, la población de este país es multiétnica y para el 2017 se estimó una cifra de 32,17 millones de personas. Del total de la población peruana, el 50,1 % son hombres y el 49,9 % son mujeres.

El censo que se realizó en Perú para intentar clasificar su población por etnia ocurrió en 1940.

La ciudad más grande de Perú es su capital, Lima. Es el hogar de más de 8 millones de habitantes, que representa una cuarta parte de la población.

Chile

La República de Chile es un país de América del Sur con una franja de tierra larga pero estrecha que se encuentra entre el Océano Pacífico y la Cordillera de los Andes y cuenta con una superficie total de 756.096 kilómetros cuadrados.

El último censo oficial se realizó en el 2002, que situó a la población en 15,1 millones. Se estima que la población de Chile creció en el 2017 a 18,05 millones de habitantes; la sociedad chilena ha crecido constantemente en los últimos 60 años y ahora representa el 0,25 % de la población mundial.

Una de cada 404 personas en la Tierra es residente de Chile.

Chile es ahora el sexto país más poblado de Sudamérica; también es uno de los más prósperos y estables de la región, líder en América Latina en ingresos per cápita, desarrollo humano, globalización y baja percepción de corrupción.

Este país sudamericano cuenta con una sociedad multiétnica. Un estudio genético realizado por la Universidad de Chile encontró que el promedio de la población chilena es de 35 % pueblos originarios y 64 % caucásicos.

Debido a las mejoras en las condiciones de vida de la población, la esperanza de vida para los chilenos fue la más alta en América del Sur en 2013.

Problemas fronterizos entre Venezuela y Guyana

Venezuela ha reclamado durante mucho tiempo una enorme extensión de tierra conocida como el Esequibo o Guayana Esequiba, que comprende el 40 % del territorio actual de Guyana. La región es rica en minerales y recursos naturales, y es una de las razones por las que representa un gran interés para las dos naciones.

En la actualidad, los funcionarios de la ONU esperan alivianar el altercado mediante un acuerdo entre el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y el presidente de Guyana, David Granger.

¿Sabías qué...?
Guyana es una nación caribeña que limita con Venezuela, tiene una población de menos de 1 millón de personas y es el tercer país más pobre de América Latina.
El Esequibo es una región poco desarrollada, escasamente poblada pero rica en recursos naturales, casi el 60 % de la moderna Guyana.

Comienzo de la disputa entre Guyana y Venezuela

Hacia mediados del siglo XIX, el Gobierno británico consideró necesario demarcar las fronteras de Guyana. En 1840, el gobierno británico envió a Robert Schomburgk a una misión para examinar y marcar los límites de la Guayana británica. La intención de ese gobierno, una vez terminada la labor, era comunicar a los gobiernos de Venezuela y Brasil las opiniones del gobierno británico sobre la verdadera frontera de la colonia y luego resolver por negociación cualquier detalle.

En la realización de esta comisión, Schomburgk investigó personalmente casi todo el país al oeste del Esequibo y no descubrió ni pautó nuevos límites. Procuró basar sus informes en la exploración real y la información obtenida de los pueblos originarios, así como de la evidencia de los restos holandeses en Barima y en el Cuyuní; con lo que pudo determinar los límites de la posesión holandesa y la zona de la cual todo el rastro de la influencia española estaba ausente.

Con el fin de facilitar las negociaciones para el ajuste de la frontera, trazó la línea divisoria que se hizo famosa desde entonces como la Línea Schomburgk, que incluía mucho menos territorio que el reclamado por Gran Bretaña.

La posición de Guyana está basada en la defensa de la tierra que ha sido parte de su país durante casi 200 años.

Fue en este período que comenzaron las discusiones con Venezuela sobre el límite. El primer planteamiento del gobierno venezolano fue en enero de 1841 que, en respuesta al anuncio británico de la frontera, propuso la negociación de un tratado de límites y expresó el deseo de que éste precediera al levantamiento y la demarcación de la frontera.

Más tarde, el gobierno venezolano renovó la propuesta de negociación de un acuerdo y, al mismo tiempo, protestó contra los procedimientos de Schomburgk para colocar puestos fronterizos en ciertos puntos.

El embajador venezolano en Londres, Alejo Fortique, renovó sus protestas, por lo que el secretario de Estado de Asuntos Exteriores en enero de 1842 envió instrucciones para la remoción de los puestos fronterizos que habían sido colocados por Schomburgk cerca del Orinoco. Sin embargo, al mismo tiempo, se declaró claramente que el gobierno británico no abandonaba ninguna parte de sus derechos sobre el territorio que antes era propiedad de los holandeses.

En 1843, Fortique, solicitó la pronta conclusión de un convenio para definir la frontera entre Venezuela y la Guayana Británica. Luego, en una nota del 31 de enero de 1844, presentó la primera declaración formal de la afirmación venezolana de que el territorio de la República se extendía al río Esequibo.

Motivos en los que se basó esta alegación

  1. España fue el primer ocupante del Nuevo Mundo.
  2. Los españoles habían explorado y ocupado muy pronto el Orinoco y los ríos Barima, Moruca y Pomeroon.
  3. En el momento del Tratado de Münster, los holandeses no tenían posesiones en Guayana, al menos en el lado norte y oeste del Esequibo.
  4. El dominio español se extendió hasta el Esequibo y toda posesión de los holandeses al oeste de ese río era una usurpación, que no había sido aprobada por España.

Conclusión de la declaración

La declaración concluyó con la insistencia de que el Esequibo era la frontera natural entre Venezuela y la Guayana Británica, y que los colonos británicos poseían poco o nada más allá de ese río.

Este reclamo recibió una pronta respuesta por Lord Aberdeen, en la cual, si bien se admitió que los españoles fueron los primeros europeos en ocupar el sur del continente americano, se observó que tal hecho no podía tener relación con el asunto en discusión. La respuesta señalaba además que si Venezuela no disponía de ningún tipo de arreglo en el territorio en cuestión, la concesión del Esequibo como frontera supondría la entrega inmediata por Gran Bretaña de la mitad de la Guayana Británica.

Lord Aberdeen también declaró que Gran Bretaña estaba dispuesta a conceder por amistosa consideración a Venezuela, una parte de la reivindicación británica extrema en el área superior del Cuyuní, con la condición de que las tribus amerindias que viven allí estuvieran debidamente protegidas.

La propuesta de Lord Aberdeen, comunicada un tiempo después al Gobierno de la Guayana Británica, resultó ser extremadamente desfavorable para la colonia.

Por su parte, el gobierno venezolano no apreció la gran concesión de los derechos británicos y no se envió ninguna respuesta a la nota de Lord Aberdeen y, en consecuencia, el gobierno británico decidió en 1850 que, como la propuesta había permanecido durante seis años y aún no se había aceptado, podía considerarse que había caducado.

Posición actual

Hasta principios de 2015, el gobierno de Guyana no había formulado ninguna propuesta de solución a la controversia desde 1982, cuando ambos países solicitaron al Secretario General de la ONU que decidiera un método de solución. Sin embargo, el Acuerdo de Ginebra de 1966 ha ayudado, al menos a los ojos de los venezolanos, a elevar la reclamación renovada de Venezuela. Las sucesivas administraciones venezolanas han interpretado desde entonces que el acuerdo significaba que debían seguirse discusiones para revisar la frontera basándose en la reclamación de su país sobre toda la parte occidental del Esequibo.

El 7 de agosto del año 2000, Oliver Jackman, representante personal del Secretario General de la ONU, en una reunión con el ministro de Relaciones Exteriores de Guyana en Georgetown declaró que durante una visita a Caracas unos días antes de preguntarle al presidente Chávez, éste dijo que Guyana no tenía que ceder todo el territorio y que una solución a la disputa implicaría la cesión de Guyana de una parte de la región de Esequibo.

Sin embargo, en los últimos tiempos, las señales conflictivas que salen de Venezuela dan la impresión de que el gobierno venezolano no está demasiado confiado con la demanda.

Economía de Guayana

La principal actividad económica es la agricultura, específicamente el arroz y el azúcar, que representa más del 30 % de los ingresos de exportación. A pesar de estar rodeada de vastas reservas de petróleo y gas en la vecina Venezuela, hasta hace poco Guyana no tenía reservas de petróleo dentro de sus límites territoriales.

 

Problemas fronterizos entre Venezuela y el Mar Caribe

Las continuas disputas territoriales de Venezuela y las preocupaciones en seguridad fronteriza con varios de sus vecinos caribeños crean una incómoda historia. Los esfuerzos de esta nación por extender su alcance en el Mar Caribe involucran en gran medida el mantenimiento de un pequeño islote a 547 km de la costa de Venezuela.

Disputa por fronteras

Desde 1978, los gobiernos de Antigua y Barbuda, San Cristóbal y Nieves, Dominica, Santa Lucía y Montserrat han tenido quejas en curso en las Naciones Unidas con respecto a una reclamación venezolana a una Zona Económica Exclusiva (ZEE) de 370 kilómetros que rodea Isla de Aves.

La Isla de Aves es un banco de arena que descansa sobre un sub-cimiento coralino.

Establecido por una fuerza naval venezolana en 1950 y con una misión científica permanente en 1978, esta isla ha sido cubierta de tierra transportada desde el continente y arrecifes artificiales que se han construido para mantenerla y evitar que pueda ser completamente sumergida durante huracanes o marea alta.

Bajo la administración del presidente Hugo Chávez, en el 2004 el ejército venezolano estableció un pequeño puesto avanzado en el territorio, en el que construyeron el edificio sobre pilotes debido a la falta de terreno firme disponible.

¿Sabías qué...?
En 1980, Isla de Aves fue sumergida y dividida en dos por el huracán Allen, pero más adelante se recuperó. Hoy en día es lugar de paso y anidación de algunas aves marinas y tortugas verdes.

Las aguas en el Caribe oriental son excelentes para la pesca y se cree que contienen grandes reservas de petróleo submarino. Sin embargo, algunos países del Caribe cuestionan la afirmación de la ZEE de Venezuela bajo el argumento de que Aves no satisface la definición de isla de la ONU, son simplemente islotes rocosos aislados y no islas verdaderas, que la lleva a ser catalogada en un estatus que permite un número considerablemente menor de derechos. Además, la posición de Caracas sobre el tema ha dejado a muchas naciones insulares del Caribe con ZEE reducidas, que limita el área de sus pescadores y expande la influencia de Venezuela en la cuenca.

Los estados del Caribe cuestionan la soberanía de Venezuela sobre los islotes.

En 2005, Venezuela lanzó su iniciativa Petrocaribe, que permitía a los países del Caribe oriental comprar petróleo bajo condiciones de préstamos preferenciales. Después de esta oferta, la mayoría de las disputas sobre la legitimidad de la demanda de Venezuela a Aves se cayeron, no obstante, las objeciones permanecen sobre la ZEE asociada con la demanda.

Pequeña causa, gran efecto

El pequeño islote de Aves se ha utilizado para justificar una extensión enormemente desproporcionada de la ZEE de Venezuela hasta el mar abierto adyacente a Guadalupe. Este crédito se ha efectuado con el aval de Francia, Países Bajos y Estados Unidos, en nombre de sus dependencias insulares dentro de la zona.

Venezuela y Barbados

Venezuela también tiene una disputa marítima con Barbados, originada en 2008 cuando la nación insular comenzó a perforar en alta mar en una zona del Océano Atlántico también reclamada por Caracas. El reclamo no es reconocido por las Naciones Unidas.

 

La Comisión de Límites de la ONU fijó en abril de 2010 algunas sugerencias para el límite exterior de su plataforma continental.

Venezuela y Antillas Neerlandesas

El presidente Chávez creó preocupación entre las autoridades holandesas a principios del 2010 al acusar a los aviones militares holandeses estacionados en la cercana cadena de islas Antillas Neerlandesas de violar el espacio aéreo venezolano. El presidente venezolano ha acusado repetidamente a los holandeses, que controlan la política exterior y defensa de la isla, de facilitar la invasión estadounidense de su país.

Venezuela ha reclamado los territorios insulares holandeses situados a pocos kilómetros de su costa, desde la década de 1940.

Zonas económicas exclusivas

Los problemas relacionados con las ZEE son de fecha más reciente y preocupan a la mayoría de los estados y territorios de la región, como las islas, que no están en la lista de conflictos históricos. A su vez, tienden a ser menos agudos, ya que cubren tramos de mar donde las reclamaciones de derechos no están tan arraigadas y donde los recursos son generalmente limitados.

Con algunas excepciones locales, el espacio marítimo caribeño no es rico en poblaciones de peces. Casi todos los países son importadores netos de productos del mar, y sólo unos pocos mantienen flotas pesqueras de alta mar; así como también, los recursos explotados que normalmente se encuentran en el fondo marino están lejos de ser significativos.

Por consiguiente, el potencial conocido de las ZEE no es lo suficientemente grande como para justificar su desarrollo en un futuro previsible, por lo que para la mayoría de los países en cuestión no deberían comprometer los medios y los esfuerzos. Además, en cualquier caso, difícilmente tienen los medios, ya sean técnicos, militares, financieros o simplemente humanos, para ejercer una verdadera soberanía, controlar y eventualmente explotar estas enormes extensiones de mar.

Las dos disputas más significativas, que abarcan cientos de miles de kilómetros cuadrados entre numerosos estados, son por su naturaleza fácilmente comparables y se refieren a las ZEE de Colombia y Venezuela, donde ninguno de los dos estados ha ratificado la Convención de Bahía Montego y que aparecen claramente en el mapa como “anomalías”.

 

Con la República nació la tiranía

La República de la Gran Colombia fue un hermoso proyecto bolivariano que para su consolidación necesitaba de la unidad de todos los factores influyentes de la época, pero eso era casi una utopía en las condiciones de las primeras décadas del siglo XIX. Bolívar intentó todo para salvarla, pero la tiranía fue la solución deseada por muchos.

La tiranía surgió en el Imperio Romano. Augusto fue uno de los primeros tiranos de la historia.

¿Tiranía o democracia?

La tiranía es un régimen que a diferencia de las democracias no garantiza los derechos humanos de los ciudadanos y el poder se concentra en grupos pequeños que mantienen métodos autoritarios de gobierno. Por su parte un régimen político lo constituye el conjunto de las instituciones que participan de la forma de llegar al poder y su ejercicio como tal, como es el caso del Consejo Electoral, los ministerios, tribunales y otras instituciones. Los gobernantes, ciudadanos, líderes de grupos sociales y partidos políticos, son actores que participan en el juego político, en base a reglas preestablecidas que pueden ser escritas, como es el caso de las constituciones y otras leyes, o tácitas, provenientes de la costumbre y la práctica política.

¿Sabías qué...?
El federalismo es la organización de un país en distintos estados que tienen amplias competencias propias y se deben a un gobierno central.
Julio César fue una de los mayores dictadores de la antigüedad.

En los regímenes democráticos existe la igualdad de derechos y la libertad participativa en los asuntos político-sociales, considerados estos valores insustituibles. En cambio, en una tiranía, las garantías constitucionales y la fuerza ejercida por los grupos de poder sobre otros grupos se manifiesta en forma autoritaria. El autoritarismo es una ideología basada en la desigualdad entre los ciudadanos, la jerarquización de las sociedades y la obediencia incondicional de los sometidos al orden de poder conformado como un bien superior.

Dictadura, democracia oligárquica y totalitarismo

En una dictadura la característica esencial es la concentración del poder político y las funciones de gobierno en una persona o un pequeño grupo. Ese grupo de poder, generalmente son militares, que ejercen el gobierno por tiempo indefinido, rompiendo las reglas preestablecidas y haciendo caso omiso de las leyes. Se consolidan en el poder utilizando métodos represivos, como la persecución, el encarcelamiento y hasta la muerte de los opositores. De esta forma logran mantener las grandes masas alejadas de la práctica de la política.

La democracia oligárquica, por su parte, se caracteriza por la conformación de una alianza entre el grupo en el poder y la minoría oligárquica, que tiene las posibilidades de alcanzar los votos, ya que los puestos principales son elegibles. De esta forma se manipulan los resultados o se logra la participación de menos votantes. Este sistema no respeta el consenso y la voluntad popular. Generalmente aparece en sistemas agrícolas y mineros que mantienen tradiciones y ritos religiosos muy marcados.

Cuando una sociedad es regida por un partido político que ejerce su poder y, mediante una ideología oficial, impone su programa y fusiona estado y sociedad, llevando la política al ámbito privado, estamos en presencia del totalitarismo. Lo esencial para mantener el poder en este sistema es la unidad de todos los miembros de la sociedad, a los que se adoctrina y se aterroriza, mediante el uso de la fuerza policíaca y la propaganda en los medios de comunicación masiva y las escuelas.

Gobernar mediante decretos

Desde el 24 de junio de 1828 hasta marzo de 1830, Simón Bolívar gobernó la Gran Colombia mediante decretos presidenciales, obviando la Constitución. Esta forma de ejercer el poder es una característica de las dictaduras.

Simón Bolívar.

Bolívar: ¿Demócrata o dictador?

Luego de su actividad de gobierno en Ecuador y Perú, Bolívar regresa, en 1826, a Colombia, donde asume la presidencia. Pero, ¿qué encuentra el Libertador? Las fuerzas estaban divididas, la dispersión y las conspiraciones se sucedían. El propio vicepresidente fue uno de los sublevados. Existían dos posiciones bien diferenciadas: de una parte los conservadores, empeñados en que Bolívar mantuviera un régimen unitario, mediante medidas fuertes para el mantenimiento del orden. Por otra parte, Santander y sus partidarios apoyaron la política liberal. Estos lucharon por más derechos cívicos y una forma de gobierno federal. Bolívar convocó a una Asamblea en Ocaña con el fin de modificar la Constitución, de forma tal que le diera mayores poderes al presidente, pero no logró sus objetivos, la Asamblea se disolvió sin llegar a ningún acuerdo, con el argumento de que el objetivo de Bolívar era crear una monarquía con visos de república.

¿Sabías qué...?
En junio de 1828 la Asamblea, controlada por los bolivarianos, concedió poderes dictatoriales a Bolívar.

El centralismo como antesala de la dictadura

Bolívar llegó a Colombia con la experiencia de los acontecimientos de Perú y en poco tiempo conoció un proceso similar en este territorio. Por ello se convenció de la necesidad de mantener y fortalecer el centralismo. Dejó atrás las medidas populistas, la liberación de esclavos y las movilizaciones del pueblo. Con el apoyo de los conservadores, tomó medidas de corte autoritario. Estas medidas fueron el resultado de las acciones para evitar movilizaciones populares liberales. Primó entonces el centralismo y conservadurismo.

Simón Bolívar expresó en uno de sus mensajes:

“No aspiremos a lo imposible no sea que por elevarnos sobre la región de la libertad, descendamos a la región de la tiranía. De la libertad absoluta se desciende siempre al poder absoluto”.

Al constituirse la República Bolivia, Bolívar quiso poner en práctica sus ideas elaborando y proponiendo una Constitución con instituciones cercanas a la monarquía. Entre otras cosas planteó el cargo vitalicio de presidente y que el de los senadores fuera hereditario, así como también propuso otras instituciones propias de los sistemas monárquicos. Aunque Bolívar no desistió de sus ideas y planes, en esta ocasión no logró convencer a los bolivianos y su proyecto fue rechazado también por otros países.

Un objetivo no logrado.

La dictadura

La salvación de la República, para muchos, estaba en aplicar la dictadura. Por ello le pedían a Bolívar que gobernara con mano dura y con plenos poderes. Una de las primeras acciones que realizó fue la de suprimir el cargo de vicepresidente. Además permitió la reapertura de los antiguos monasterios, reinició el cobro de impuestos a los indígenas y aumentó las tasas de los impuestos a las importaciones.

Después del atentado…

La dictadura se tornó más recia luego del atentado. Fueron ejecutados 14 supuestos conspiradores y Santander y sus amigos allegados fueron deportados como medida preventiva para evitar nuevos hechos.

En todo el territorio se reabrieron los antiguos monasterios.

Santander, que desde sus inicios se había opuesto a esa política, se enfrentó violentamente a Bolívar, tratando incluso de asesinarlo. Varios uniformados penetraron armados al Palacio de Gobierno y, si no lograron sus fines fue gracias al valor de Manuelita Sáenz, que enfrentó a los atacantes y permitió que Bolívar escapara por una puerta trasera de la habitación donde se hallaba.

Problemas que tuvo que enfrentar Bolívar:

– Movimiento separatista en Venezuela liderado por el general José Antonio Páez.

– Insurrección al sur de Nueva Granada.

– Invasión de Perú.

Simón Bolívar luchó por la unidad
Causas de la desintegración de la Gran Colombia:

-Intereses oligárquicos regionales.

-Gran extensión del territorio que conformaba la Gran Colombia.

-Intereses de Gran Bretaña y Estados Unidos.

El Congreso Admirable

En un último intento por evitar la separación de Venezuela y Colombia, Bolívar organizó un Congreso, con el fin de modificar la Constitución para poder gobernar. La Constitución se aprobó, pero Bolívar comprendió que sólo lograría la unidad de Colombia con su renuncia al mando y así lo hace. Sin embargo los venezolanos se negaron a recibirlo y hablar con él, mientras permaneciera en territorio colombiano. Finalmente Venezuela se separa de la Gran Colombia.

 

Jaguar o yaguareté

El jaguar es el más grande de los felinos americanos, su característico pelaje lo ha convertido en uno de los animales más codiciados en el mercado ilegal de las pieles, lo que llevó a la disminución considerable de la población, hasta ubicarse en la lista de especies en peligro de extinción.

El jaguar, también conocido como yaguaraté o pantera, es un felino de cuerpo robusto y musculoso, cabeza grande, hocico corto y amplio, ojos color marrón claro y orejas pequeñas. Su característica más resaltante es su piel, la cual está cubierta de pelo corto de color amarillo y marrón cobrizo en el dorso, mientras que en la parte interna del pecho y extremidades es de color blanco, además tiene manchas negras que cubren su cuerpo con un patrón único.

En el mundo, el jaguar ocupa el tercer lugar en tamaño dentro de los felinos.
Ficha taxonómica
Clase: Mammalia
Orden: Carnivora
Familia: Felidae
Género: Panthera
Especie: Phantera onca
Nombre común: Jaguar
El jaguar mide entre 1,12 y 1,85 m y tiene un peso de 45 a 160 kg. A pesar de su apariencia robusta, este felino es bastante ágil puede saltar entre árboles e incluso es un buen nadador.

Distribución y hábitat

El jaguar habita diferentes tipos de bosques: tropicales, lluviosos y de montaña, entre otros; también viven en pantanos y manglares.

La distribución histórica del jaguar abarca gran parte del continente americano, desde Estados Unidos hasta la Argentina. Lamentablemente, el hábitat natural del jaguar se ha visto afectado por la acción humana, lo cual, sumado a la caza indiscriminada, ha provocado que en la actualidad los jaguares ocupen sólo el 30 % de su distribución histórica.

Distribución del jaguar en América.

¿Sabías qué...?
El billete de 500 pesos en Argentina tiene una imagen del yaguareté.

 

Alimentación

El jaguar es un animal carnívoro y depredador que se alimenta de una gran variedad de animales. Dentro de su dieta hay mamíferos, aves, reptiles, anfibios y peces, entre otros.

Los jaguares son solitarios y territoriales, por tanto no cazan en grupo. Normalmente asechan a su presa hasta encontrar la oportunidad idónea para atacarlos. Este felino cuenta con una de las mandíbulas más potentes del mundo de los animales carnívoros.

El yaguareté marca su territorio mediante arañazos en la corteza de los árboles, los cuales realiza con sus patas delanteras.

¿Sabías qué...?
El jaguar o yaguareté es un animal nocturno

Reproducción

El apareamiento puede ocurrir en diferentes épocas del año, aunque el número de nacimientos es mayor en época de lluvias.

El jaguar es un animal polígamo.

La hembra alcanza la madurez sexual a los dos años de edad, mientras que en los machos ocurre a los tres o cuatro años. Una vez que la hembra está en la época de celo empieza a atraer a los machos mediante marcas de orina y rugidos, es común que varios jaguares respondan a la señales enviadas por la hembra, lo que conlleva una competencia en la que el macho dominante gana.

Una vez que ocurre la fecundación, la hembra se aleja del macho. La gestación dura 110 días aproximadamente, pueden tener hasta cuatro cachorros, aunque lo más común son dos. El parto generalmente ocurre en refugios como huecos, cuevas o madrigueras ubicadas cerca de afluentes de agua dulce. Al momento del nacimiento los cachorros pesan de 600 a 900 g y dependen enteramente de la madre ya que son ciegos. Ésta los protege y amanta hasta los seis meses, posteriormente los cachorros cazan con su madre hasta cumplir los dos años de edad, momento en el cual se vuelven independientes.

Jaguar con sus crías.

El misterio de las panteras

La denominada pantera negra no es más que un jaguar con una condición genética denominada melanismo, en la cual se produce un exceso de pigmentación que les da a estos jaguares una apariencia atípica. A simple vista parecen ser completamente negros, aunque de cerca se puede observar que en realidad tienen el pelaje más oscuro pero conservan sus manchas características. 

Pantera negra.

El sueño de Bolívar

Bandera de la Gran Colombia.

El sueño de Bolívar de hacer de América una sola nación tuvo su expresión en el proyecto de la Gran Colombia. En medio de las luchas por la independencia se logró la unidad, en un solo gobierno, de lo que hoy son las repúblicas de Colombia, Venezuela, Ecuador y Panamá. Inicialmente recibió el nombre de Colombia, pero los historiadores, para distinguirla de lo que en la actualidad es ese país, le llamaron la Gran Colombia.

Simón Bolívar, El Libertador

Bolívar, el principal promotor

La idea de unir en una sola nación los pueblos que iban adquiriendo su independencia de España fue de El Libertador. Lo que es actualmente Colombia constituyó el llamado Distrito del Centro, hasta que en 1830 pasó a llamarse República de Nueva Granada. En 1861 retoma su nombre original, Colombia, que se empleó en honor a Cristóbal Colón, considerado el descubridor de América.

Monumento a Cristóbal Colón

La fundación

En 1819, en la localidad de Angostura, se reunió el Congreso que recibió ese nombre, en el que ocurren dos hechos importantes: la designación de Simón Bolívar como Presidente de la República y la unión de Venezuela y Nueva Granada. Luego fueron anexados los territorios de lo que hoy es Ecuador, de este modo, se constituyó lo que se conoció como la Gran Colombia.

El territorio

La Gran Colombia abarcó los territorios de Colombia, Venezuela y Panamá al norte, y Guayaquil y la cuenca del río Amazonas por el sur.

Administrativamente se dividió en tres regiones: la antigua Capitanía General de Venezuela, la Audiencia de Santa Fe de Bogotá y la Audiencia de Quito, al norte, centro y sur, respectivamente.

La Gran Colombia adopta las ideas de la Revolución Francesa en su estructura de gobierno, con la división de los poderes legislativo, ejecutivo y judicial. La forma republicana de gobierno, que fue representado por el Presidente de la República, los ministros y representantes de los diferentes territorios; el Congreso, como órgano legislativo y la Corte Suprema y los tribunales y jueces de toda la República.

Las decisiones se tomaban de manera unitaria y no federada, con el fin de mantener la integridad. Esta fue una decisión importante, ya que el ejemplo de otros países demostró que, con la existencia de caudillos e intereses contrapuestos, no se podía mantener y consolidar la unidad deseada.

A estos representantes se les denominó gobernadores e intendentes, según fuera de provincias o de municipios.

Francisco de Paula Santander

Bolívar, por sus extraordinarios méritos y su desprendimiento, fue nombrado Presidente, pero al marcharse a Perú para continuar la campaña independentista en el sur y conducir el gobierno, no pudo atender los asuntos colombianos, por lo que delegó en su Vicepresidente Santander para que quedara en su lugar.

Las ideas liberales con las que éste condujo el ejecutivo, traducidas en la práctica con la adopción de juntas proteccionistas a la agricultura, el libre comercio, la declaración de la ilegalidad del trabajo gratuito de los indígenas, el salario mínimo y los impuestos directos, así como la eliminación del tributo a los indígenas, preocupó a Bolívar, al considerar que estas medidas radicales provocarían malestar en las clases terratenientes que apoyaban al movimiento independentista.

El Congreso Anfictiónico

El principal enemigo de la independencia no lo constituyó la metrópoli, sino la falta de unidad de los líderes y caudillos criollos. A pocos años de fundada la Gran Colombia y liberados otros territorios, se hizo necesario tomar medidas para evitar el peligro que se cernía sobre los pueblos libres.

Bolívar, con una visión panamericanista, convocó a los gobiernos de los países constituidos al Congreso Anfictiónico de Panamá, en 1826. A pesar de los esfuerzos integracionistas de Bolívar no se lograron los objetivos de la convocatoria.

Ecuador: sacrificio y lucha

En la segunda década del siglo XIX, a Ecuador lo integraban Quito, Cuenca y Guayaquil. En 1822 se logró la independencia de Ecuador, pero se mantuvo la guerra al sublevarse la región de Pasto. Un año después se produce un levantamiento al mando del indígena Agustín Agualongo, un caudillo que combatió a favor del Rey de España. Bolívar lo derrota a mediados de julio, en Ibarra, donde fue fusilado.

Ecuador aportó grandes recursos y hombres para la independencia y liberación de Perú y Bolivia, así como para la paz de Pasto. Se estimó en tres veces mayor la contribución del Departamento Sur que la del resto de Colombia. Finalmente, el país quedó arruinado y la población disminuida a medio millón de habitantes.

¿Sabías qué...?
Perú y Bolivia nunca formaron parte de la Gran Colombia, aunque fueron independizadas por Simón Bolívar.

Conflictos internos

El resultado de la política de Santander, que fue anticipado por Bolívar, produjo en los latifundistas quiteños una afectación considerable en sus producciones, disturbios internos y limitaciones para el comercio. La presión sobre El Libertador para cambiar el rumbo de los acontecimientos no se hizo esperar.

A diferencia de Quito, donde se produjeron hechos de rechazo, Guayaquil se beneficiaba con las medidas de Santander y por ello mantuvieron su anexión a Colombia.

El auge de comercio con Perú por parte de Quito y Cuenca favoreció el resurgir de ideas autonomistas. Otro factor fue la desatención del gobierno central a los problemas y necesidades del sur, unido a la ausencia de la participación de líderes de esta región en el poder, ya que sólo ocupaban la presidencia y vicepresidencia granadinos y venezolanos.

Las banderas de la Gran Colombia

Gran Colombia poseyó tres banderas diferentes: La primera compuesta por tres franjas: amarilla, azul y roja, sobre la franja amarilla aparecían siete estrellas; la segunda mantuvo tres franjas, pero esta vez una más ancha en el centro, de color amarillo y en la parte superior e inferior sendas franjas de color rojo. La última y actual bandera de Colombia, retomó las franjas de la primera, pero sin las estrellas y con el escudo al centro.

La existencia de la Gran Colombia coincide con el período histórico en que se desarrollaron las Guerras por la Independencia Hispanoamericana. Surgió el 17 de diciembre de 1819, en el Congreso de Angostura. Tomó carácter constitucional el 6 de octubre de 1821, mediante la aprobación de una Carta Magna que rigió los destinos y definió la forma en que se estructuraría la nación. Entre los años 1828 y 1829 se desarrolló la Guerra con Perú. 1830 fue un año funesto para la existencia de la Gran Colombia, ya que el 6 y el 13 de mayo se le separaron Venezuela y Ecuador, respectivamente. Cronología de una República

La muerte de Bolívar, once años exactamente después de la fundación de su sueño, contribuyó a la disolución de la Gran Colombia, que ocurrió el 19 de noviembre de 1831.

El gobierno de la Gran Colombia

El primer presidente de la Gran Colombia, por elección y derecho propio, fue Simón Bolívar, desde 1819 hasta 1830, aunque en su estancia en Perú lo secundó Santander, desde el 1819 hasta el 20 de febrero de 1827. En 1830 sustituyeron a Bolívar, primero Domingo Caycedo, luego Joaquín Mosquera y, por último Rafael Urdaneta. Todos estos presidentes fueron militares y políticos.

La Gran Colombia

En la Gran Colombia se estableció un gobierno presidencialista y una república unitaria.

El ejército de la Gran Colombia

En los inicios de la Gran Colombia el ejército lo componían alrededor de 30 mil hombres, de ellos la mitad eran milicianos.

¿Sabías qué...?
La Gran Colombia estaba habitada por 2.533.799 personas, de ellos 102.902 esclavos, 203.831 indígenas y 2.227.066 hombres libres.

La Marina contó con navíos y fragatas provistos de decenas de cañones. Radicó en Cartagena, ya que su fin era invadir Cuba y Puerto Rico para obtener su independencia, pero el estallar de la Guerra con Perú, fue una dificultad, ya que la mayor parte de las unidades se encontraban en el Caribe y su desplazamiento a las costas del Pacífico llevó tiempo.

Para Bolívar contar con un ejército fuerte era garantía política para mantener lo unidad ante los partidarios del liberalismo de Santander y de la dictadura que declaró frente al secesionismo de Venezuela y Ecuador.

Este fue un punto de discrepancia entre Bolívar y Santander. Para Bolívar era necesario mantener un ejército que garantizara la supervivencia de la Gran Colombia, mientras que Santander consideró la necesidad de reducir los gastos militares en función de beneficios económicos.

 

El Libertador

Nació en Caracas, Venezuela, el 24 de julio de 1783, en el seno de una familia acaudalada, por lo que pudo estudiar en Europa, más precisamente en España. Su primer matrimonio fue con María Teresa del Toro con la que tuvo una hija., pero la desgracia lo visitó pronto y perdió tanto a la niña como a su mujer.. A su regreso al país natal participó activamente en la Junta de 1810. Como político y militar llegó a ser el mayor líder de América al comandar un ejército que logró la independencia de grandes territorios. Su objetivo fue la unidad de los pueblos del continente. Murió en la ciudad de Santa Marta, Colombia, el 17 de diciembre de 1830.

Nació la República sin un instrumento jurídico que la normara. No es hasta que se celebró el Congreso de Cúcuta, en el año 1821, que se establecieron las pautas para el futuro de la Gran Colombia.Organización del estado

La primer decisión de los allí reunidos fue denominar a Bogotá como Capital de la República y a Caracas y Quito como sedes del poder judicial distrital en que éste se dividió. La Carta Magna reguló la forma de gobierno, la elección y la sustitución del poder ejecutivo.

El poder legislativo residió en el Congreso Nacional, integrado por el Senado y la Cámara de Representantes, que sesionaban una vez al año. Cada departamento era representado por 4 senadores, cada uno representando a 30 000 habitantes.

Cuatro secciones componían el poder ejecutivo: Interior, Finanzas y Aduana, Asuntos Extranjeros y Guerra y Marina.

Una república moderna

Entre los aspectos innovadores de la Gran Colombia se contaron el haber declarado el suelo y subsuelo como patrimonio del Estado; la nacionalización de las minas, como antecedente de las actuales nacionalizaciones y expropiaciones; la educación gratuita y la utilización de las iglesias como escuelas; la reforma agraria, el salarios en efectivo, las licencias de importación; regulación de las tasas de interés; prohibición de las deudas bancarias y la política cambiaria y de precios; la entrega de tierras a los militares, entre otros logros del gobierno que encabezó durante once años.

La Constitución de Colombia

La Constitución de Colombia se conoció como la Constitución de Cúcuta. Se decretó el 30 de agosto de 1821 y se publicó 13 días después, integrada por diez capítulos y 191 artículos.

Se aprueba la Constitución

Los ideales de Bolívar quedaron expresados en la Ley de Leyes que rigió en Colombia durante más de una década.

El pensamiento bolivariano en la Constitución

  • Abolición progresiva de la esclavitud.
  • Libertad de expresión.
  • Gobierno popular y representativo.
  • Tenían derecho al voto los mayores de 21 años, alfabetizados y con fortuna superior a 100 piastras.
  • Para ser senador se debía tener 30 años cumplidos, ser nacido en el territorio, tener propiedades por más de 4 mil piastras, una profesión liberal y 12 años residiendo en el país.
  • Para diputado se debía contar con 25 años de edad, poseer propiedades por 2 000 piastras o ejercer el magisterio y tener bienes raíces.
Ecuador

 

Estatua de Simón Bolívar en Cartagena, Colombia

 

La religión oficial

El Estado y la Constitución reconocían como religión oficial la católica. El clero mantuvo sus privilegios, pero redujo sus ganancias para difundir la enseñanza y la educación.

La iglesia católica mantuvo sus privilegios a pesar de haber sido partícipe en los cambios educativos.

Antonio José de Sucre

La crónica que relata el atentado de Berruecos, en el cual muere Antonio José de Sucre, describe sin proponérselo todo cuanto representaba el Mariscal para la política de la América independentista. Las hipótesis en torno al esclarecimiento del asesinato arrojan tantos nombres como títulos de diversa naturaleza pudo cosechar este hombre. El 4 de junio de 1830 no sólo cae abatido El Héroe de Ayacucho y El Redentor de los Hijos del Sol, también muere el “hombre más importante de Colombia” después del Libertador. Su captor principal pudo haber sido cualquiera: José María Obando, Juan José Flores o el propio Francisco de Paula Santander, pues para los intereses políticos que cada uno de ellos defendía, por su cuenta o en alianza con los otros, Sucre era su principal amenaza. Los acontecimientos decretarían así la desaparición de un gran político y estadista, el cual, en medio de las luchas caudillistas y nacionalistas, siempre se mantuvo aliado al Proyecto de la Gran Nación Colombiana.

La tesis que más anima para comprender la vida de Antonio José de Sucre es la que sostiene que el personaje “vivió y murió por la política, o lo que es lo mismo, por el poder”, dice Inés Quintero. Su biografía transcurre casi en su totalidad en el ámbito de la esfera pública y los acontecimientos que la construyen serán, por lo tanto, inseparables de aquellos que marcaron la independencia de Hispanoamérica y el derrumbamiento de la Gran Colombia. Claro está que los sucesos en cuestión deben comprenderse tanto más como una lucha por el poder económico y político, cuanto menos como un episodio de guerras justicieras. La guerra era, en este sentido, uno de los instrumentos políticos de la emancipación y Sucre estuvo en las más importantes, como, por ejemplo, en la de Ayacucho.

 

Sucre nació el 3 de febrero de 1795 en Cumaná, Venezuela.

Pero no es menos cierto afirmar que Sucre era mucho más que un soldado entrenado para la guerra. Su ascenso a general no sólo ocurriría por sus virtudes militares, sino por su visión política. Comulgaba con las ideas de Bolívar, defendía la idea de la gran potencia colombiana y apostaba por la modernización de las sociedades americanas.

La carrera militar del también llamado Libertador del Sur, la inicia Antonio José de Sucre desde muy joven y quizá sin saber que estaba formándose exactamente para ello. Después de haber realizado sus primeros estudios en la escuela fundada por su tía, María de Alcalá, en la ciudad natal de Cumaná, se trasladó a Caracas, donde ingresó en la Escuela de Ingenieros del coronel español Tomás Mires. Como joven perteneciente al sistema militar de la monarquía española, se formó en los valores de orden, disciplina y autoridad, al ritmo de sus estudios de matemáticas, agrimensura, fortificación y artillería. Estos conocimientos y principios serán vitales para el desempeño de Sucre en una carrera que estaba a punto de comenzar. Estalla la revolución de 1810 en Caracas.

Las clases dirigentes de Cumaná, entre las que se encontraba la familia Sucre y Alcalá, se hallaban en la tarea de organizar el gobierno local, toda vez que se pronunciaran a favor de Caracas. Su madre, Manuela de Alcalá, había muerto cuando él tenía siete años, pero su padre, Vicente Sucre, era uno de los organizadores de la Junta Suprema y de la milicia en esa ciudad; junto a él, su vasta familia. Es fundamentalmente por esta razón que Sucre marcha hacia Cumaná para formar parte de la Comandancia de armas del gobierno recién constituido, en calidad de subteniente del Cuerpo de Milicias Regladas del Ejército de Oriente. “Empezada la revolución diría Bolívar de Sucre, se dedicó a esta arma y mostró desde los primeros días una aplicación y una inteligencia que lo hacían sobresalir entre sus compañeros. Por esta razón, una vez empezada la guerra en 1811, es convocado al Estado Mayor del Ejército de Miranda, sirviendo a su mando hasta 1812. Entre tanto, se pierde la Primera República.

La lealtad hacia Bolívar

La participación de Sucre en la empresa de reconquista de los territorios orientales, adelantada por los generales Mariño, Piar, Bermúdez y Valdés, y su posterior servicio al Estado Mayor General de Oriente, entre 1814 y 1817, le significaron al joven oficial, no sólo el desarrollo de sus habilidades y destrezas militares (“En los célebres campos de Maturín y Cumaná diría Bolívar de Sucre, se encontraba de ordinario al lado de los más audaces, rompiendo las filas enemigas, destrozando ejércitos contrarios, con tres o cuatro compañías de voluntarios que componían todas nuestras fuerzas. La Grecia no ofrece prodigios mayores”), sino además una toma de postura política frente a las diferencias que existían entre los generales orientales y Bolívar. Más tarde, todo ello se traduciría en el compromiso de Sucre con el futuro político de la Gran Nación Colombiana.

La Guerra de Independencia continuaba y en 1815, tras la derrota de Cumaná y Maturín, Sucre pasó a la isla de Margarita, desde donde, a raíz del desembarco de las fuerzas expedicionarias de Pablo Morillo, se trasladó a Cartagena. Bajo las órdenes de Lino Pombo, participó en la defensa de esta ciudad como ingeniero auxiliar. En diciembre se dirigió a Haití, en compañía de los generales José Francisco Bermúdez y Carlos Soublette, y luego a Trinidad, donde permaneció durante varios meses.

Se extendía la Guerra de Independencia y Venezuela debía decidir en relación con la unidad de sus ejércitos. El general realista, el Pacificador Pablo Morillo, avanzó por los territorios, y las contradicciones entre los generales venezolanos no permitían dar con una estrategia para propugnar la reconquista. En este marco de circunstancias regresó Sucre, en 1816, dispuesto a unirse definitivamente al Ejército Libertador, y a declarar su alianza y lealtad, únicas e irrevocables, hacia Bolívar. En octubre de 1817, a propósito de los acontecimientos de Cariaco, marchó junto al general Rafael Urdaneta para pelear en Guayana al lado de Bolívar. Los argumentos de su adhesión al Libertador se encontraban asociados al principio del orden y las jerarquías que debían guardarse en el interior de los ejércitos; “Yo no dudo que el general Mariño se convertirá al orden, no encuentro otro árbitro sino éste o el de ser un guerrillero en los montes de Güiria”. Bolívar le confiere el grado de coronel. Posteriormente, con motivo del triunfo en Boyacá, asciende a general de brigada. Una vez nombrado jefe del Estado Mayor General y ministro interino de Guerra y Marina, fue designado para participar en las negociaciones de armisticio y regularización de la guerra, que se debían adelantar con El Pacificador: “Este tratado es digno del alma del general Sucre; la benignidad, la clemencia, el genio de la beneficencia lo dictaron” diría Bolívar, a propósito del resultado favorable de las conversaciones. Mientras tanto, la Gran Colombia es decretada en Angostura, y nuevas exigencias, políticas y militares, se le imponen a Sucre como jefe del ejército en la famosa Campaña del Sur.

La campaña tenía como objetivo liberar los territorios correspondientes a la Real Audiencia de Quito y promover su adhesión a Colombia. Esta conquista era de vital importancia para la nueva nación, pues debía consolidar su hegemonía. La misión de Sucre no fue fácil, en vista de la diversidad de intereses implicados en aquella guerra. Las provincias de Quito y Guayaquil se habían alzado en armas en contra del gobierno español; y si bien todos estaban de acuerdo con la Independencia, no todos estaban a favor de la adhesión a Colombia; algunos pugnaban por la unión con Perú, en vista de las relaciones comerciales, y otros preferían la Independencia llamada “absoluta”, es decir, la autonomía. Guayaquil era una de las principales adversarias de la adhesión, pero sin embargo necesitaba el apoyo del Ejército Libertador. Sucre llegó con las tropas en su ayuda, y firmó un armisticio con los españoles que le permitiría formar un ejército digno para la contienda; simultáneamente, pactó con los guayaquileños acerca de cómo debía ser llevada a cabo la conformación y manutención del llamado Ejército del Sur. Mientras durara el armisticio, el ejército se nutriría por recursos, tanto humanos como económicos, procedentes de Colombia, pero estaría claro que conforme se fueran reclutando hombres de la región, el ejército comenzaría a depender de los recursos locales. El 24 de mayo de 1822 se llevó a cabo la batalla de Pichincha, al occidente de Quito, en la cual cayó abatido el ejército realista. Pocas horas después, Melchor de Aymerich, presidente de la Real Audiencia de Quito, firmó la capitulación. Sucre se convirtió en el Libertador de las provincias del sur de Colombia, y junto a Bolívar fue recibido con todos los honores en Quito. Se creó entonces el Departamento de Quito como una extensión del territorio de la Gran Colombia.

En 1822, junto con Simón Bolívar se convirtió en uno de los Libertadores de la Real Audiencia de Quito, que incluía los territorios de la actual Colombia y Ecuador.

La liberación del Perú

El siguiente movimiento politicomilitar en la campaña del sur consistía en la liberación del Perú. El gobierno de la Gran Colombia tenía muy claro que debía neutralizar este territorio en pro de su hegemonía; esta provincia se encontraba aún en poder de los realistas, aunque su independencia hubiera sido decretada por San Martín en 1820. Se sabía además de las pretensiones que tenía el gobierno peruano respecto a los territorios del Departamento de Quito. Sucre fue enviado a Lima y el general Santa Cruz, al alto Perú; el objetivo era estrictamente militar, y por eso Sucre aceptaría no intervenir en sus asuntos internos. La empresa no era fácil, pues la disposición hacia la libertad no era ampliamente compartida, y además existía desconfianza entre los ejércitos colombianos y del sur, por causa del poder sobre el territorio que se estarían jugando.

La batalla de Junín, el 6 de agosto de 1824, sería el último triunfo de Bolívar en América. A Sucre le quedaba aún trecho por recorrer. Liberada Lima, fue enviado en auxilio al Alto Perú. Después de la travesía, las tropas se hallaban desmejoradas físicamente; se trataba de la campaña de invierno en la sabana del Alto Ande. Sucre dispuso de todos los recursos para la dotación de hospitales y se encargó personalmente de la supervisión de los pacientes. Mientras tanto, diseñaba la estrategia junto al general Santa Cruz; la penetración de la selva del Jauja resultaba la alternativa más loable, porque pese a su elevado riesgo, su consecución sería definitoria. Bolívar se hallaba enfermo en Pativilca y Sucre era el general en jefe de la misión; se encontraba en desventaja numérica respecto al ejército realista comandado por el teniente coronel José de Canterac. La contienda duraría sólo una hora, tiempo suficiente para que la brillante estrategia de Antonio José de Sucre terminara con el último bastión de los españoles en tierra americana. Ahora le quedaba a Sucre decidir sobre los destinos del Alto Perú; la República de Bolivia estaba a punto de crearse.

Sucre, junto con Simón Bolivar(foto) fueron los fundadores de la Gran Colombia.

Teniendo en cuenta la experiencia de las intervenciones realizadas en el Departamento de Quito y en el Bajo Perú, Sucre tomó la decisión de convocar en mayo de 1825, en el alto Perú, una asamblea constituyente para que fuera a través de la consulta pública que se decidieran los destinos de las provincias. En ellas se presentaron tres tendencias claramente delimitadas: una a favor de la anexión al Río de La Plata, otra a favor de la anexión a Perú, y la tercera a favor de la Independencia absoluta. La propuesta triunfadora resultó ser la tercera, y se solicitó al Libertador que redactase una Constitución para la nueva nación. Se creó de esta manera la llamada República de Bolivia, como un régimen de carácter mixto, entre democracia y monarquía, con un presidente vitalicio, cuatro poderes y tres cámaras. Sucre fue decretado presidente de la nueva nación.

Por una América Moderna

Un ensayo de sociedad moderna estaba en la mente de Sucre, quien no tardó en redactar un proyecto de acción que en la práctica tendría poca viabilidad en tanto que su “finalidad dice Inés Quintero era adecuar la compleja y tradicional realidad altoperuana cuya composición social, estructura económica e instituciones obedecían a los rígidos intereses y jerarquías de la dinámica heredada del orden, para convertirla en una sociedad moderna ajustada a los principios del modelo liberal europeo”. Esta era la filosofía que sostuvo la lucha emancipadora de América, cuyos efectos en el ejercicio práctico de la misma se sienten incluso hoy en día, y han sido, paradójicamente, los de haber conformado sociedades híbridas en las cuales coexisten estructuras modernas y tradicionales. Dicho efecto lo vería, en su momento, el gran pensador americano Simón Rodríguez, quien, aparte de haberse desempeñado como superintendente de Educación en Bolivia durante esa época, era un gran crítico con el hábito de “imitar” los esquemas de organización social europeos; decía Rodríguez que si algo debía imitarse de Europa, era la forma como los europeos se dedicaron a “inventar” sus propias sociedades; “o inventamos o erramos” escribió el pensador. Sucre no lo entendía así y el programa de gobierno intentaría reformas profundas y radicales en el orden político, económico, social, cultural, administrativo, burocrático, educativo, en la salud, en la organización del espacio y en las instituciones.

La implantación del programa no tardaría en despertar resquemores, los cuales, al agudizarse, se transformarían en una revuelta que expulsaría a Sucre del poder. Aparte del debilitamiento del Ejército Libertador, estuvo claro que las causas más eficientes estuvieron asociadas a los dos grandes planes adelantados por el programa de Sucre. El 18 de abril de 1828 estalló una revuelta en Chuquisaca, promovida por el batallón de Granaderos del cuartel de San Francisco. Sucre fue herido en su brazo derecho, lo cual le impidirá ejercer las funciones de gobierno, encargándole al general José María Pérez de Urdinenea que le sustituya.

Penúltimo balance en la vida política

La evaluación que haría Sucre respecto a sus dos años de presidencia sitúa las causas de su defenestración política en factores asociados a la pugna por el poder, la ignorancia y la descomposición del propio sistema societario. Explicaría a Bolívar en fecha previa a su renuncia: “Nuestros edificios políticos están construidos sobre arena, por más solidez que pongamos en sus paredes, por más adornos que se le hagan, no salvaremos el mal de sus bases”. La sensación de frustración y de asqueamiento hacia la vida pública lo llevaría a manifestar su deseo de retirarse; sin embargo, lo esperaban nuevas batallas, nuevas misiones de negociación, y la propia muerte.

La noticia del atentado contra Bolívar en Colombia, en septiembre de 1828, irrumpió en la naciente vida conyugal del mariscal en Quito quien había contraído matrimonio con Mariana Carcelén, marquesa de Solanda, y le condujo a desdecirse en su decisión de retirarse a la vida privada. La vivencia de Sucre de la noticia no fue sino un indicador más de la fatalidad que, para él, estaría a punto de cernirse sobre la República Colombiana. La Gran Colombia estaba a punto de morir; Sucre lo sabía pero se animó a luchar hasta el final. Por eso, al pronunciarse en torno al atentado, apoyó a Bolívar en su decisión de haberse declarado Dictador de Colombia: el orden debía prevalecer ante todo. Casi simultáneamente, Perú le declaró la guerra a Colombia y Sucre fue designado para dirigir el batallón que haría frente a esta situación. Esta vez tendría que luchar en contra de sus antiguos aliados de la guerra emancipadora. Sin mayores dificultades, sin embargo, venció a los peruanos en la batalla de Tarquí, el 27 de febrero de 1829. Decidió emprender entonces una nueva retirada y regresó al lado de su esposa; juntos se residencian en la hacienda de Chishince, en Quito.

La frustración de la Gran Colombia

El último respiro de Colombia, sin embargo, demandaría del Mariscal su presencia en el Congreso Admirable, el cual se celebraría a comienzos de 1830. Colombia debía decidir su destino, y Sucre, como representante de la provincia de Cumaná, fue nombrado presidente del evento. Sus propuestas se encontraban orientadas al diálogo y la concertación con los departamentos que todavía conformaban la República. Como parte de la estrategia, Sucre encabezaba la comisión que iría a Venezuela, que para la fecha había decidido desconocer la Constitución de Colombia y la autoridad de Bolívar, para negociar la reversión de la decisión. Sucre emprendió viaje hacia Venezuela, pero fue detenido en Cúcuta por las autoridades venezolanas; debía permanecer en esa ciudad hasta que llegaran los emisarios del gobierno con quienes debía dialogar.

El diagnóstico que hizo Sucre de la situación colombiana le sugirió dos puntos clave para la negociación en favor del mantenimiento de la unidad; en función de ellos, propuso a Venezuela, además de acogerse a la Constitución colombiana, que ningún general o ex general del Ejército Libertador pudiera ejercer cargos de presidente en los departamentos; en el trasfondo, su intención era contradecir el rumor de que él o Bolívar estuvieran aspirando al cargo. Todo fracasó, y Sucre abandonó Colombia invadido por una profunda frustración: “Colombia sentenció Sucre dirigiéndose a un amigo está condenada a ser un caos y un barullo. Cae uno del porrazo de un militar y si tiene fuerzas para levantarse, lo espera un fraile con su excomunión; y si por casualidad guarda uno alguna bendición apostólica de reserva para escaparse, lo espera un demagogo con su cuchilla popular; y si es tan afortunado que evade los peligros, lo aguarda en el término un rentista que lo lleva a vender en un estanco. Entre tanto se hace todo en nombre de la libertad y de las leyes. Si no me equivoco, es ésta una ligera, pero exacta pintura de nuestro estado; y tan exacta, que puede Vd. imprimirla en alguna gaceta de Gobierno”.

Sucre fue abatido el 4 de Julio de 1830, luego de ser emboscado por cuatro asesinos, contactados por José María Obando.

Ya tan sólo animado por el reencuentro con su esposa y con su primogénita, emprendió el regreso a Quito. En el camino se produjo el atentado de Berruecos. Como autores materiales fueron señalados José Erazo y Apolinar Morillo, quien diez años más tarde fue apresado y fusilado por esta causa. Los autores intelectuales quedarán en la incógnita del olvido, regocijándose en la confusión de una América ya emancipada pero sometida a la pugna entre las fuerzas nacionalistas, regionalistas y las de la Gran República; de cualquiera de las primeras pudo haber procedido su verdugo, pues para cada una de ellas, Sucre era su principal enemigo. “¡Ha muerto el Abel de Colombia!”, diría el Libertador desde su exilio; con lo cual, la muerte de la Gran Colombia no tenía sino que ser decretada.